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Local - Artístico - Independiente Enero 2021 - El Chaltén Santa Cruz - Número 59 EDITORIAL

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sta obra es una de las últimas de la artista Belkis Ayón, una pintora cubana que terminó con su vida en septiembre de 1999. Quisiera creer que en este especie de enredo, en donde predomina el negro, intentaba decirnos algo. O tal vez expresar un sentir personal, como a través del uso del gris se llega a un blanco que de alguna manera lo ilumina todo. Los únicos ojos nítidos son los que se encuentran en la figura situada a la derecha arriba. El resto de las miradas parecen infinitas o fueron interrumpidas por un velo negro. Quizás a través de la luz es imposible ver realmente y solo desde la mismísima oscuridad podríamos haber visto lo que estaba pasando en la su vida. En la mitología encontramos varios ejemplos de héroes que, para poder ascender a lo más alto, tuvieron que bajar “hasta los mismos infiernos” para poder evolucionar y trascender. Hasta las películas más pochocleras repiten este modelo del personaje principal que traspasa momentos y situaciones pésimas para poder, al final, conseguir el objetivo de su vida, o en este caso, de la historia. Será tal vez que Belkis se quedó en ese camino. No logró esquivar los obstáculos y abrazó la muerte como única salida. Los adornos que aparecen en la obra parecieran de una corona lúgubre desarmada que intenta de alguna manera volver a juntarse. Las manos oscuras que aparecen parecen pedir ayuda y las blancas van perdiendo su color con la aparición del tinte oscuro desde las muñecas. La mente de la figura central se encuentra atrapada por una red que pareciera contener quién sabe qué. Tal vez ideas que podrían oscurecerlo todo y así obtener un solo cuadro todo oscuro sin nada de luz. Ahora, también podríamos estar viendo todo al revés y lo perturbador en la pintura sea el blanco que intenta interrumpir (y lo hace) la serenidad que brinda la oscuridad. En los grises, aún en los más oscuros, encontramos detalles, ornamentos que acompañan. En cambio esa costumbre que tiene el blanco de emparejar, de querer quitar toda particularidad para ser solo una cosa insípida, incolora y hasta inodora. Creo que esta obra nos quiere advertir esto, ojo con la intención de quitar nuestro ornamento, nuestra decoración y la de otros. Porque, tal vez, sea lo que nos lleva a la verdadera muerte.


LIVRE - Diciembre 2020 - El Chaltén Santa Cruz - Número 58

De mo cr a ci a

H

ablam os de dem ocraci a coti di anam ente y nos r odeam os de espaci os dem ocr át icos , per o r eal ment e no nos pregunt amos qué es ni cómo funciona. Dam os por s entado un s is t ema ent er o, un modo de gobi er no mi cr o y macr o s i n cuest i onarnos de qué s e t r ata. Hace poco me encontr é con un video ll amado “Why Democr acy” que me hi zo r efl exionar. El autor pl antea que, as í como los gobi ernos en la “1984” de O rw ell el im i nan palabr as par a engañar a l os ciudadanos , nos ot ros nos engañamos us ando l a pal abra democr acia par a l l am ar a algo que di s ta de ser l o: para nombr ar a los gobi er nos repr es ent at i vos . ¿Qué los dif erenci a? Pr inci palm ente que en la democr acia el poder real mente es t á en el puebl o. És t e es el que eli ge y apr ueba el s is t ema legi s lat ivo, l os cargos s on ocupados por per s onas pr eparadas , el egi das por s or teo y las deci si ones s e t oman en as ambl eas donde todas , todos y t odes pueden par ti cipar. Si l os cargos no ej ercen s u rol hones tament e, son des ti t uidos . Es t e t ipo de gobier no sól o s e dio en la Ant i gua G reci a y de es o, poco nos quedó.

Tan poderos o es es t e s is t ema que s e pr es ent a en cas i t odas l as ins t it uciones m al l lam adas democr át i cas . Cual quier cl ub, s ocial o depor ti vo, u organizaci ón si n f ines de l ucr o que s e me cr uza por l a cabeza, r epit e es te pat rón, quizá no de f or ma cor rupt a, per o sí en l as m aner as . U na vez cada t ant o, s e el igen repr es ent ant es que s on qui enes t omar án t odas las deci s i ones , el res t o de l os us uar ios des pués s erá m er ament e inf or mado. Ent onces el club, la organi zaci ón o el m unici pio fl amea en l a di recci ón que el r epr esent ante de t urno qui er e, hacia donde a es a per s ona ( o grupo de per s onas) t ir a. Los int eres es , así , no s on l os del puebl o ni l os de la m ayor í a y, l os que es tam os por debaj o, no t enem os for ma de f renar o cam biar es a di r ección. Pi enso, ent onces , qué tan di fí cil s erá cambi ar esas pr áct i cas que repet im os de modo i ncons ci ent e en t odos l os espaci os de l os que par t ici pamos , porque puede que no podamos cambi ar l a for ma en que s e manej a un muni ci pio, per o t al vez s í en l a que funci ona un club, una ONG o qui zá al gún empr endim i ent o. Per o para ell o, t enem os que enf rent arnos con el enem igo m ás tem ido: el ego de aquell os que cr een que por s er repr es ent antes , s on dueños y detent an el poder.

En l os gobi ernos r epres entat i vos , en cambi o, el pueblo eli ge medi ante vot ación a algui en que no necesar i am ente es t á pr eparado, que es elegi do por un par t ido y puede pr omet er cuant o s e l e ant oje con t al de ganar las el ecciones . A l s er elegi do, s e l e ot orga conf i anza absol ut a y por ende, poder abs olut o, por que por más que votem os a nues t ros r epres entant es , el l os no nos pr eguntan ant es de t omar ninguna deci s ión ni t enemos al alcance mecanis m os l egales s enci l los para qui tar l es el poder. El otr o día es cuché a algui en que decí a: “lo que l os pol ít i cos no ent ienden es que el gobi erno no es de ell os , a ell os les pres t an el cargo por un per íodo de t iem po”. Lo que más me r es onó es que es to no s ucede s ólo en los gobier nos . Porque clar amente l o vem os en cóm o f uncionan l os entes guber nam ental es a ni vel naci onal, provi ncial y muni ci pal , donde l o que l lam amos democr acia s e r etuer ce cada dí a, donde cada r epr es entant e t ergiver sa l o que t iene a s u al cance par a su benef i ci o pr opio. Nos es inconcebibl e un polí t ico hones t o, l a cor rupci ón par ece apoder ars e de t odos aquel los que pis an un es t ableci mi ento del gobi erno; has ta de aquel l os adm ini s tr at ivos , que s in s er repr es ent ant es , m uchas veces est án pues t os a dedo y que algunos l l am an “ñoquis ”.

IMAGEN: Democracyspeaks.org Página 2


LIVRE - Diciembre 2020 - El Chaltén Santa Cruz - Número 58

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Ma e s tri

E

l 19 de ener o de 2020, a los 91 años de vi da, Ces are M aest r i dej a el plano t err enal par a f ir mar “el l ibr o de la cumbr e… la es cal ada de s u vi da” en l as propi as palabr as de s u hi j o, Gi an. M aes t r i fue uno de los escal adores m ás f uert es en l a his t or ia del m ontañi s mo y t am bi én uno de l o más pol émi cos. Or i undo de l a pr ovi nci a i t al i ana de Tr enti no, los Dol omi t as er an su pat io t r as er o, donde hi zo incr eí bl es as cens iones , pr inci palm ente en s ol it ari o. Acl amado y res pet ado por l a comuni dad alpi ni s ta i tal iana, le ll oví an of ert as de nuevas cumbr es y expedici ones, per o fue en nues tr o pati o donde s e vol vió f amos o i nter nacional ment e. Ces ar ino F ava se obses i onó con el Cer ro Tor re ni bi en l o vio, f ue algo as í com o un am or a pr im er a vi st a. Todos conocemos a C es ar ino y la i m port ant e r el ación que t iene con El Chalt én y con el des arr ol lo de l a es cal ada y l a Com is i ón de Auxi li o a ni vel l ocal . Ani mado por s u i mpl acable mot ivaci ón y la admi r aci ón que le gener aba Maes t ri , acudi ó a él y a Toni Egger con l a pr opuest a de es cal ar tan f as cinante m ontaña. La expedi ción pr obabl ement e sea una de l as más pol ém i cas de l a hi st or ia. Si bien Ces ar ino l os acom pañó has t a donde pudo, en un mom ento det er m inado, dejó a sus compañer os de cor dada par a no f renar los ni ret ras ar los . Lo que s igue s e pres t ó a debates , dudas , i nqui si ci ones y un s i nfí n de hipót es is . M aes tr i af ir ma haber l legado a l a ci ma de l a pared de r oca. En l a bajada, Egger muer e y s e pi er de la cám ar a con l as f otogr afí as que lo pr ueban.

La comuni dad escal adora pone en tel a de j ui ci o l a ll egada a l a cumbr e y cues t iona a M aes t r i. P er o t odo es t o no nos im port a, s i C esar e ll egó a la cumbr e o no, si l a cumbr e i ncluye el hongo de hiel o o no, t odo es o car ece de r elevancia cuando es t amos r ecor dando a un mont añis t a excepcional con mi les de cumbr es y escal adas en s u haber. La real idad es que nues t ra comuni dad no s er ía l o mi s mo s i M aes tr i no hubi er a veni do en el año 59, s i no hubi era vuelt o en el 70 con un com pres or de 180 ki los , s i en 2011 Jas on Kr uk y Hayden Kennedy (Q EPD) no hubi er an decidi do s acar los clavos pues t os en 1970. Cada expedici ón es una mar ca, una cicat ri z más en el i mponent e cent i nela de grani t o y el l as nos mol dean com o pueblo, por más cer canos o al ejados es t emos del m undo de la es cal ada. Maes tr i es part e de nues t ra hi st or ia y s i bi en en una ent revi s ta hace unas dos décadas af ir mó que s i pudier a borr ar al go en s u vida, s er ía t odo l o r elaci onado al Cer ro Torr e y a Pat agoni a, nos otr os lo r ecordam os con admi r aci ón por el escalador que f ue y con un gran r es peto de des pedirl o a sus 91 años . Su hi s tor i a nos i nt er pel a, los t uri s tas nos obl igan a conocerl a con s us pr egunt as y nosot r os nos vemos obl igados a cues ti onar nues tr as pr opias acciones , nues tr os modos y t am bi én, a ot r os es calador es . No i mpor ta cuál es sean nues t ras opi niones , nues t ras acti t udes ni nues tr os j ui cios , al fi n y al cabo, la úl ti ma cum bre es l a m i sm a para t odos .

FOTO: Romina Lojo Página 4


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Re la t o Li v re Lo que uno es pera A veces , l o es per able es aquel s ol que geomét ri cament e s e cuel a por l as hendi j as de l a pers i ana y t er m ina de der ret ir l a mant eca del pan. A veces , uno qui er e que s e mani fi es te un pedazo de 1995, que todo sea s epia, que aún es t én l as bici s aur ori tas de m i m adre y m i t í o. Por mom entos , r eempl azaba l as canchas del pol i deport i vo por es os eter nos zanjones l lenos de renacuajos , nues tr as pi er nas picadas por los m osqui t os , nuest r os ros t ros em bar r ados de at empor ali dad. M e encuent ro cada vez con más r est r icci ones de am or, de li bert ades , de contacto. La m agi a s e descarga de un di spos i t ivo, ya no m e encuent r o mi radas por la cal le y, opor t unam ente, cada quien m ir a con el f i lt r o que más le convi ene. Leí a Fahrenhei t 451, pens ando que en medi o de una real idad como es a, qui s ier a s er como Clar i ss e, cr eer que s i el pol en de un dient e de l eón s e pega en l a bar bil la de al guien m ás, es por que es te es tá enamor ado. Qui s i er a pens ar que podemos us ar la cl andest i nidad par a hacer es as cos as que en un cont ext o “normal ” no hacem os y, ante es t a excus a f atal is t a de que no sabem os qué vendr á ( nunca l o s upim os ), hacer cos as que nos propi cien al go extr a-cot i diano, es a magi a que ant es nos la br i ndaba el arom a a l ibr o nuevo, por ejem plo. Ef ecti vament e es t amos en pandemi a: hace décadas y cada vez más est át icos .

FOTO: Barrio Inglés, Remedios de Escalada. Romina Lojo

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Cu l tur a L iv re La s er ie “Lit t le F ir es Ever ywher e” (P equeños f uegos en t odos l ados ) cuenta con ocho capí tul os de apr oxim adam ente una hor a. C ada uno de ell os nos atr apa en una t ens ión const ante que s e evidenci a desde el pr im er moment o ent re l as prot agoni s t as pri nci pal es : El ena Ri chards on (R ees e Wi ther s poon) y M ia Warr en (K er r y Was hi ngton) . La r el ación ent re es tas madr es s e centr a en s us per sonal idades dis par es , per soni f icadas des de el concepto de fam il i a que cada una de el las per s igue, l a s i t uaci ón s oci oeconóm ica que vi ven y hast a s u r aza. U na s upuest a am is t ad que com part en, t rans f orm a s us vi das de f or ma r adi cal y pone en evidenci a m enti r as y secr etos del pas ado que quer ían ocul tar.

Aunque uno podr ía par ar se en el r ol de elegi r un bando, am bas m uest r an encuentr os y des encuent ros con la vi da que l as l levo adonde es t án. Es i nter esant e com o s e cuenta est a i nt ri gante his t or ia bas ada en una novela de Cel es t e Ng. Se pone en t el a de jui ci o el r ol de l a m ujer y la mat erni dad en l a s oci edad actual en donde, más al lá de ci er tos avances al canzados en rel aci ón con l a conci encia de cl as e y de raza, todaví a es t os t emas hacen eco en la vida diar i a. La reput aci ón, el diner o, el art e y la i nm igr ación tom an la pantal la en las excelent es actuaci ones de sus pr otagoni s tas . En la Argent ina s e puede ver en la pl ataf orm a Amazon Pr im e Video, per o no dude en bus carl a a tr avés de s u hacker am igo.

Staff D irecc ió n d e red a cc ió n : R o mi na Lo j o R eda c ci ó n: Cec il ia Fa c a l - Ro m i na S a n ch ez C ol a b o ra ci ó n: A nt o n el la M a r a ng e ll i li v r ed i to r i al @ g m ai l.c o m

f ac eb o o k /l iv r e

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