L'Officiel Argentina N°24 - August 2020 by L'Officiel Inc.

Nº 24 AGOSTO 2020

CREER Y Vera Spinetta Juan Ingaramo Rosario Bléfari Sofía Malamute

Juan Ingaramo Vera Spinetta Rosario Bléfari Sofía Malamute

CREER Y CREAR

Nº 24 • AGOSTO 2020

8 EDITORIAL 10 LIBRO PETER BEARD 12 LA DE LOS LABIALES 13 ON TOUR 14 COLECCION CON ARTE 16 JOYAS Y ACCESORIOS 18 DELICIAS TEMPORALES 20 EPIGENETICA EN LA PIEL 22 LO NUEVO DE CAROLINA HERRERA 24 ANATOMIA DE UNA EDITORIAL 26 MADE IN ITALY

MODA Y ESTILO 50 JUAN INGARAMO 58 VERA SPINETTA 66 BAJAMAR 74 BELLEZA ENCONTRADA 80 BELLA IMAN 88 TIEMPO DE REIVINDICACIONES BE WELL 94 PELO EN LINEA 96 EL PODER DE LOS ACEITES 98 VITAMINA D

INTERMEDIO 28 EMMA FRYER, LA VESTUARISTA 30 DISEÑADORES EMERGENTES 34 CONSUMO: TODO CAMBIA 38 SEMANAS DE LA MODA 40 ¿HACIA DONDE VA EL DISEÑO? 42 HOMENAJE A ROSARIO BLEFARI 46 MALAMUTE Y SU UNIVERSO

FINAL 100 POLITICA DE AUSTERIDAD 104 BLESS HOTEL 108 DERNIERES VOLONTES

Nº 24 • AGOSTO 2020

DIRECTORA EDITORIAL

ANA TORREJON

JALOU MEDIA GROUP MANAGEMENT 128, quai de Jemmapes 75010 Paris

PUBLICIDAD GERENTA DE INGRESOS GLOBALES

ERICA BARTMAN

DIRECCION DIRECTOR DE ARTE

EDITORA GENERAL

GERMAN ROMANI

DORA BECHER

REDACTORA Y EDITORA WEB

CELESTE NASIMBERA GERENTE COMERCIAL

FEDERICO GABRIELO

GERENTES COPRESIDENTES DE CONSEJO EJECUTIVO Y ADMINISTRATIVO

MARIE-JOSE SUSSKIND-JALOU MAXIME JALOU DIRECTOR GENERAL DIRECTOR DE CONSEJO EJECUTIVO Y ADMINISTRATIVO

Coronel Díaz 1617 (1425) CABA DIRECTOR Y PUBLISHER

ALEX MILBERG ADMINISTRACION

CLAUDIO CASTELLANI REPRESENTANTE DE VENTAS USA

JB MEDIA CONSULTING CORP.

JEAN-PHILIPPE AMOS DIRECTORA DE MEDIOS ITALIANOS

CARLOTTA TOMASONI GLOBAL DIGITAL Y MEDIA PLANNING

ILARIA PREVITALI

BENJAMIN EYMERE DIRECTORA GENERAL ADJUNTA MIEMBRO DE CONSEJO EJECUTIVO Y ADMINISTRATIVO

MARIA CECILIA ANDRETTA GLOBAL BRANDS MEDIA

GERENTE DE INGRESOS FRANCIA Y SUIZA

DIRECTOR CREATIVO INTERNACIONAL

STEFANO TONCHI DIRECTORA ARTISTICA Y CASTING

JENNIFER EYMÈRE ASISTENTES EJECUTIVOS

CELINE DONKER VAN HEEL GIULIA BETTINELLI

jill@jb-mediaconsulting.com michael@jb-mediaconsulting.com 2300 NW 94th Ave. Ste 205 - Doral, FL

INTERNACIONAL Y MARKETING DIRECTOR INTERNATIONAL DE LICENCIAS, DESARROLLO DE NEGOCIOS Y BRAND MARKETING

FLAVIA BENDA DIRECTOR DE PRODUCTOS DIGITALES

GIUSEPPE DE MARTINO MANAGER DE PROYECTOS DIGITALES

BABILA CREMASCOLI ESTRATEGA DE MARKETING Y MEDIOS

LOUIS DU SARTEL DIRECTOR DE CONTENIDOS Y EVENTOS INTERNACIONALES

ALLEGRA BENINI CONTENIDOS EDITORIALES Y ARCHIVOS INTERNACIONALES

IMPRENTA

MUNDIAL

GIULIA BETTINELLI

José A. Cortejarena 1862, CABA

FUNDADORES

DISTRIBUCION CABA

GEORGES, LAURENT AND ULLY JALOU (†)

DISTRIBUIDORA SANABRIA Dr. Enrique Finochietto 1602 DISTRIBUCION INTERIOR

AUSTRAL Isabel La Católica 1371 CABA

Nuestras tapas Vera Spinetta con Redingote, Saint Laurent. Gargantilla y aro, Swarovski. Fotos: Sofía Malamute. Estilismo: Silvana Grosso y Matías Carbone. Juan Ingaramo con campera, Louis Vuitton. Musculosa, Bowen. Gargantilla, Swarovski. Jean, Levi´s. Fotos: Sofía Malamute. Estilismo: Silvana Grosso y Matías Carbone.

L ’Officiel Argentina es una marca comercial publicada por Global Brands Media bajo la licencia de HTMedia SA, Coronel Díaz 1617, 2º piso, ante L’Officiel. Opiniones y comentarios expresados no representan necesariamente la opinión de HTMedia SA. HTMedia SA no acepta ninguna responsabilidad por inversiones o cualquier decisión tomada por lectores en base a lo publicado. www.lofficiel.com.ar INSTAGRAM: @lofficielarg FACEBOOK: @LOfficielArgok TWITTER: @lofficielarg

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EDITORI A L

ELIGE TU PROPIA BURBUJA En marzo pensaste que la burbuja era pasajera y que iba a funcionar como contenedora de los acontecimientos. Abril hizo que a una esfera sumemos otras: la casa, el trabajo, el estudio. En mayo, con el frío, tapizamos las paredes de cristal (algo así como el Zoom muteado y sin cámara de video). Junio y julio proyectaron nuevas redondeces subjetivas. Y el cotidiano terminó como una estructura de bubblepack, ducha en preservar fragilidades. Mil y una noches de cuarentena almacenadas. Sí, sé que son menos pero multiplicamos los minutos, sumamos instantes, contabilizamos desvelos. Nos acostumbramos a viajar en vehículos imaginarios. De las redes a la vida y viceversa. En cada esfera con matices, maneras de abordar lo propio y lo ajeno. A los encierros pandémicos los rotulan como efecto cabaña. Elijo fantasear con algo que no son troncos ni densidad de bosques. Nuestras burbujas se parecen a las gotas del artista Gyula Kosice, se proyectan en el perfil esperanzado de Vera Spinetta, bailan al son de Juan Ingaramo y rinden homenaje a Rosario, la eterna Bléfari. L’Officiel Agosto CREE y CREA.

Ana Torrejón

LIBRO

En el lado salvaje 770 páginas en color, blanco y negro, pródigas en contrastes y que van desde la sabana a la jungla. Los animales salvajes dialogan con los guerreros Masái y se mezclan con notas de moda, reseñas de prensa y con naturalidad, de un mundo al otro. Este libro de fotografía es también una bitácora de viajes y un ejercicio monográfico. Su primera tirada data de 2016 y se agotó rápidamente. La reedición, concebida como un gran formato, llega para saciar esos apetitos de bibliófilos globales. La vida cotidiana de Peter Beard se descubre página a página, sin secretos, entre Kenia y Estados Unidos. En los años 60, el fotógrafo compró una granja frente a los montes Ngong bajo consejo de Karen Blixen, la célebre autora de Lejos de Africa.

Desde Hog Ranch, Beard fue testigo privilegiado de los cambios en el país: la vida política, la social y el crecimiento demográfico, que pasó de 5.5 a 30 millones de habitantes. “El mercantilismo engulló al canibalismo. Las lanzas y las flechas cedieron su lugar a las ametralladoras Ak-47”, sus palabras como autor figuran en el prólogo de la edición e introducen a la aventura estético-literaria. Pero esos cimbronazos no opacaron el esplendor de la naturaleza, la misión de la obra. En las páginas se admiran las bellezas locales, las modelos top que viajaban para pasar por su lente, las jirafas, los monos, los leones y sus amados elefantes. El estadounidense cultivó su sentido estético desde siempre. En sus diarios íntimos de infancia se testimonian

mariposas, plumas de pájaros y crines de caballos. Durante sus estudios de Historia del Arte en la Universidad de Yale hizo su debut en la fotografía de moda y se codeó con la burguesía local. Andy Warhol lo definió como un “Tarzán moderno”. Entre su grupo de selectos figuraron Salvador Dalí, Truman Capote y los Rolling Stones, a quienes acompañó en una gira. Se casó tres veces, tuvo una relación con Lee Radzwill, la hermana de Jackie, pero su gran pasión fue el continente africano. Su equilibrio oscilaba entre la agitada vida social de los 60 y los días bucólicos en Montauk. Kenia brilla en su obra por una visión vanguardista, ecologista y poética. Este libro objeto es el racconto de una belleza sin fisuras, natural y poderosa. n

TEXTO: SOPHIE ROSEMONT. FOTO: TASCHEN

Entre Africa y occidente, escritos, fotos y collages, fruto del trabajo del artista estadounidense Peter Beard. Un dandy nómade.

MUSICA

“Soy una mina que hace canciones, no creo que eso me convierta en una gran luchadora de nada. Sí creo en visibilizar desde mi lugar determinadas cuestiones de agenda que me preocupan, relacionadas con el feminismo y los derechos humanos”.

Así la conocen en las redes sociales. También como @femigangsta. Defiende sus ideas a través de sus canciones.

increíble cuando finalmente pude armar mis propios compilados en la computadora”. Publicó cuatro singles: Pajaritos, el más popular, ya tiene más de un millón de reproducciones en Spotify; Yasé, producido por Miss Bolivia; Matar, y Voy, que presentó frente al Congreso en el Festival por el Aborto Legal y en el que participa la joven legisladora porteña Ofelia Fernández. “Por supuesto que el acercamiento al feminismo está atravesado por mi postura política y que aprovecho mis plataformas para iniciar diálogos sobre ciertos asuntos, pero a veces veo con incomodidad que me traten como si fuese una líder del movimiento. Soy una mina que hace canciones, no creo que eso me convierta en una gran luchadora de nada. Sí creo en visibilizar desde mi lugar determinadas cuestiones

Por CECI LIA CO N D E Tiene más de doscientos mil seguidores en Instagram y ochenta mil en Twitter. Con look de modelo y alma combativa, arrancó publicando historias con mucho humor sobre su vida de estudiante, el feminismo, la política y otros intereses de “millennial polirrubro”, como alguna vez se definió. Así, mientras cursaba las últimas materias de abogacía, Agnes Simon le rapeaba al misógino, componía canciones para acompañar la lucha por el aborto legal e improvisaba algún tema hilarante sobre su cotidianeidad. Ya había realizado algunas presentaciones musicales en vivo, cuando Miss Bolivia la convocó para abrir su show por los diez

años. La anécdota la contó mil veces: no tenía un repertorio de canciones propias pero mintió y dijo que sí. A contratiempo compuso aquello que presentó en su debut oficial. En la misma época se recibió de abogada en la UBA, carrera por la que había venido desde su ciudad, Zapala, en Neuquén, a Buenos Aires. Sin embargo, dejó el título de lado para vivir de sus recitales y reconoce que no tuvo una formación que haya trascendido las clases de música en la escuela. “Recién ahora en cuarentena me decidí a estudiar teoría musical con Juan, un artista que sigo en Twitter. Pero siempre me interesó y fue

de agenda que me preocupan, relacionadas con el feminismo y los derechos humanos”. Quienes la siguen encuentran en Agnes un personaje espontáneo y con convicciones. Aunque su base de fans continúa en expansión, intuye que sus posturas probablemente resten a la hora de pensar en números. “De todas formas, cuando la gente se acerca por lo que pensás, lo hace con más entusiasmo. El tema está cuando decidís hacer cambios drásticos –explica–. Muchos me conocieron por hacer humor político y ahora no les interesa mi carrera musical y viceversa. Es natural que eso suceda y la verdad es que no estoy con muchas ganas de hacer un esfuerzo para sumar seguidores en redes. Estoy sí con paciencia para lanzar mi música y espero que quienes la disfrutan me acompañen”. n

FOTO: GENTILEZA CECILIA CORDOBA.

La de los labiales

ESPECIALES

L’Officiel On Tour

De pantalla en pantalla, una propuesta creativa lanzada en plena temporada de aislamiento.

TEXTO: BIANCA SIFREDI. FOTO: IVAN RESNIK.

os principales festivales y planes culturales programados para el primer semestre del 2020 se vieron afectados, reprogramados e incluso cancelados debido a la pandemia. L’Officiel On Tour nació en ese contexto, como una compañía durante el aislamiento obligatorio: es un festival digital para todas las ediciones en el mundo, desde la francesa hasta la italiana, la estadounidense, la brasilera y nuestra revista en Argentina, entre otras. La propuesta reunió a diversos músicos, cocineros, bailarines y múltiples personalidades de la cultura y el entretenimiento desde mayo para brindar a los lectores un momento de diversión y creatividad. Al DJ y productor Diplo se lo vio lejos de las bandejas pero cerca de la

guitarra, tocando desde su cama; el ícono pop Charli XCX transformó su living en un estudio; y Liam Payne (ex One Direction) cantó a cámara para sus fans. Desde L’Officiel Argentina armamos nuestro propio line up junto a Budweiser. Invitamos a artistas locales a ser parte de nuestra plataforma: Panda Elliot tocó una versión acústica de su último sencillo, lanzado en diciembre de 2019, mientras que la actriz Belén Chavanne se tomó la tarde para contarnos sobre el Festival Aurora, proyecto en el cual fue directora creativa. Como bien invitan los Arctic Monkeys, “calzate tus zapatos de baile” y sintonizá el canal de IGTV de L’Officiel para disfrutar y enterarte de más novedades. n

A su aire

Acne Studios se inspiró en las pinturas del artista y dramaturgo sueco August Strindberg, uno de los pioneros del expresionismo europeo moderno. Una bella manera de llevar la naturaleza a la prenda de vestir. “Amo los paisajes pintados por Strindberg durante los períodos de sequía de ideas en su producción literaria. Es como si la naturaleza hubiese tenido una respuesta para él (…). Las obras forman parte de nuestra colección Primavera/Verano bajo la modalidad de impresos”, relata Jonny Johansson, a cargo de la dirección creativa de la firma. Son cuatro los cuadros a los que se referencia: “Underlandet” (El país de las maravillas), “Svartsjukans Natt” (La noche de los celos), “Den ensamma Giftsvampen” (El champiñón solitario) y “Staden” (La ciudad). Su presencia está en la dinámica de las estampas. La naturaleza se apropia de la vida urbana y lo hace con blazers, camisas, midis y abrigos livianos. Las piezas faro de la colección fueron fotografiadas por Johnny Dufort. n

TEXTO: LAURE AMBROISE. FOTO: ACNE STUDIOS.

ESTILO

COLECCION

Bling bling Joyas y accesorios en un ejercicio lúdico.

TEXTO: CELESTE NASIMBERA.

La joyería Odraz propone una serie de piezas únicas con guiños contemporáneos. La artista Cazzu lució varias en el video de su canción “Bounce”. A través de la orfebrería da forma a sus creaciones en plata, con baños de oro, piedras naturales, zafiros reconstruidos y diseños de la década del 50. Colgantes de corazón, pendientes largos con forma de estrellas, esclavas con dijes, anillos con perlas en distintas variedades y un conjunto de clutches forman la colección. La casa, ubicada en la galería Promenade, invita con frecuencia a diferentes celebridades amigas para generar nuevas líneas. instagram.com/soyodraz

GOURMET

Delicias temporales Es época de cosecha del “diamante negro” de la gastronomía. Otra experiencia para disfrutar: hacer vida de hotel en casa. SABOR BAJO TIERRA La trufa negra crece entre las raíces de robles, encinas y avellanos. Es reconocida como el hongo comestible más fino y aromático. El mayor emprendimiento de este fruto de lujo en América del Sur es Trufas del Nuevo Mundo, una plantación de más de 20.000 árboles ubicada en un campo en Espartillar, provincia de Buenos Aires. La cosecha se realiza de junio a septiembre mediante perros adiestrados que encuentran con su olfato al tuber melanosporum bajo tierra. La empresa realiza las entregas a todo el país y, desde este año, exporta a Europa y Estados Unidos. Además, brinda cursos y charlas virtuales; y preparación de menús con la colaboración del chef Olivier Falchi, que muestra cómo utilizar la trufa en conservas o para saborizar platos variados y aceites. trufasdelnuevomundo.com

Para quienes extrañan viajar, Hotel Madero creó una experiencia de Room Service en el hogar, que bautizó Home Suite Home. ¿De qué se trata? De la posibilidad de recibir en la puerta de la casa una auténtica bandeja de alojamiento cinco estrellas, con vajilla superexclusiva, mantelería y ¡hasta bata y pantuflas! Incluye desayuno o té, almuerzo o cena a cargo del chef ejecutivo, Alejandro Bontempo, además de una botella de vino Rutini y acceso virtual a clases de yoga o catas guiadas por un sommelier. La reserva se debe hacer al menos con dos días de anticipación. Eso sí, 24 horas después de la aventura, la ilusión se acaba: personal del hotel pasa a retirar la vajilla y la bata. hotelmadero.com

TODO ES PASAJERO

DESAY UNO

Epigenética, últimas noticias Nadine Pernodet, científica de The Estée Lauder Companies, encabeza las investigaciones sobre una molécula determinante en el envejecimiento de la piel.

¿Por qué la epigenética tiene un rol importante en el cuidado de la piel?

Porque hoy sabemos que solo alrededor del 25% del proceso de envejecimiento es genético y que casi el 75% está determinado por el medio ambiente, como la exposición a los rayos UV, la contaminación y el clima, y también por nuestras elecciones de vida, como la

dieta y los patrones de sueño. Esto significa que el aspecto de nuestra piel en el futuro estará en gran medida bajo nuestro control.

Paolo Sassone-Corsi es un reconocido experto en epigenética y ritmo cardíaco que colaboró con el proyecto. ¿Cuál fue su aporte?

¿En que está centrada la investigación de Estée Lauder?

Contribuyó en la investigación de mecanismos moleculares adicionales relacionados con la molécula de microseñalización identificada recientemente. Con nuestro trabajo logramos comprender mejor cómo influir en la “memoria” de la piel para ayudarla a actuar y que se vea más joven. n

En las moléculas de microseñalización: están en las células de todo el cuerpo y actúan sobre ellas en cuanto a la información que reciben. Nuestra investigación se enfoca en descubrir las que están relacionadas con la piel para entender mejor cómo reaccionan a los cambios externos. A lo largo de siete años analizamos cerca de 80 diferentes y descubrimos que no todas son iguales.

“Esta molécula de microseñalización ayuda a aumentar la renovación natural de las células y la producción de colágeno”. Nadine Pernodet.

¿Existe una molécula de microseñalización que sea crítica para la piel?

En Estée Lauder pudimos demostrar que existe una molécula que es esencial para la reparación natural de la piel. Ayuda a aumentar la renovación de las células y

La epigenética es la ciencia del siglo. Fue a principios de la década del 2000 cuando se determinó que el ADN no era nuestro único destino y que muchos factores, como el medio ambiente y el estilo de vida, podían cambiar la expresión de los genes. The Estée Lauder Companies conduce un proyecto pionero que involucra la epigenética y la piel. La doctora Nadine Pernodet, vicepresidenta de Investigación y Desarrollo Global en Biología de la Piel y Bioactivos de la firma, explica de qué se trata.

la producción de colágeno, tengas 20 o 65 años. Hay estudios que prueban que su nivel puede verse afectado por los agresores ambientales. Gracias a todo lo que sabemos estamos desarrollando productos y tratamientos para ayudar a reparar o retrasar la aparición de signos visibles de envejecimiento.

ENCUENTRO

Desde el corazón

Carolina A. Herrera cuenta por qué Heart for Hope es una cruzada optimista. P o r C EC I L I L A CO N D E

omprar una pieza artesanal única, de esas que se atesoran para siempre y se heredan de generación en generación, pero esta vez, hacerlo con un propósito solidario. La propuesta de la firma Carolina Herrera es atractiva. Pertenece a su iniciativa Heart for Hope, que consiste en donar a la Cruz Roja y a Media Luna Roja el 10 por ciento de todas las ventas de carteras y accesorios que se produzcan hasta el último día de este agitado 2020. No es la primera reacción de la marca para hacer frente a la COVID-19. Antes ya había colaborado con el personal sanitario de España y Estados Unidos al donar tapabocas y batas. Ahora este proyecto se presenta como un gesto sencillo pero rotundo. A través de un trabajo en equipo entre Wes Gordon, director creativo de la firma, y Carolina A. Herrera, hija de la mítica diseñadora y máxima responsable del área de belleza, la empresa busca que el dinero recaudado reduzca el impacto entre los más castigados por la pandemia. ¿Cómo surgió Heart for Hope?

Siempre buscamos la oportunidad de dar las gracias. Hace más de una década que colaboramos con ONGs y fundaciones que se involucran en causas como la lucha contra el cáncer de mama o la salud de los niños. Cuando vimos la devastación a nivel mun-

ble que atraviesa. Al mes de la cuarentena, yo empecé a usar labiales hasta para hacer ejercicio, por ejemplo. Acabábamos de sacar la colección de maquillaje y tenía todos los productos en casa para probarme. ¿Te llevás bien con el trabajo a distancia?

Sí. Este es el primer proyecto que se gesta de esta manera, vía pantalla, computadora, teléfono, correo o WhatsApp... No es lo mismo que ver a la gente, tocar los materiales, compartir y reír, pero se puede hacer. Acá, en España, donde vivo, ya tuve algunas sesiones de fotos, con mascarillas, distancia y mucho cuidado. Trato de hacerlo ameno y con buena onda.

dial que provocó parar más de tres meses, nos preguntamos cómo podíamos ayudar a la mayor cantidad de gente posible. Por eso nos acercamos a la Cruz Roja. Elegimos hacer bolsos y accesorios porque consideramos que son más sencillos de comprar, no se trata de un vestido, por ejemplo, que hay que probarlo.

legios y desde ahí ayudar. No siempre tiene que ver con lo económico. Se puede ayudar a alguien con las compras, cocinando o haciendo mascarillas para donar, como hizo mi hija más pequeña. Hay mucho por hacer a nivel personal. ¿Por qué creés que la belleza fue una compañera para la mayoría de las mujeres durante el confinamiento?

La situación por la que atraviesa el mundo puso en evidencia los privilegios de unos sobre otros, ¿cuáles se te hicieron más evidentes?

Aunque la gente crea que la moda o la belleza no interesan, participamos de ellas todos los días. Son toques de felicidad, esperanza y alegría. Sucede con el perfume: hay algo intangi-

Los más básicos: tener casa, comida y salud. Todos debemos pensar en nuestros privi-

Carolina Herrera amadrina esta iniciativa, ¿cómo es tu relación con tu madre durante este periodo?

¡Siento que hace años que no la veo! Ella igual se entera de todo: le cuento, le mandamos fotos… Pero me muero por verla y también a mi padre. ¿Qué aprendiste en este año tan particular?

La importancia de la salud, de la familia, de los detalles... Tuve la suerte de no tener casos graves de coronavirus alrededor. Aprendí a desconectar de verdad. Disfruté mucho de estar en mi casa, en familia. Y descubrí que a mi hija pequeña le encanta cocinar y que lo hace muy bien. n

“Todos debemos pensar en nuestros privilegios y desde ahí ayudar. No siempre tiene que ver con lo económico. Se puede ayudar a alguien con las compras, cocinando o haciendo mascarillas para donar, como hizo mi hija más pequeña”.

Modelo “Matryoshka”. La historia de cada bolso de Carolina Herrera comienza en el Leather Atelier que la casa tiene en España.

A NATOMI A DE UNA EDITORI A L

Más allá de las jirafas

La editorial Empatía desarma los estereotipos que hacen aparecer a Africa como algo lejano y exótico con un catálogo exquisito de autores nativos y textos de ficción. P o r FAC U N D O A BA L y poemas que encienden al personaje y a la vez lo recortan del territorio marginal y oscuro que los adultos le ofrecen para desarrollar su vida. Le siguen La Montaña, de Jean-Noël Pancrazi (Argelia); La mujer descalza, de Scholastique Mukasonga (Ruanda); Minutos de gloria, de Ngugi Wa Thiong’o Ngũgĩ (Kenia); Cántico de la acacia, de Kossi Efoui (Togo); y Esperando un ángel, de Helon Habila (Nigeria). Pronto se sumará Mapas, del somalí Nuruddin Farah.

PROYECTO Algunos clásicos circularon a partir de la legitimación de la crítica blanca, pero una inmensa mayoría de autoras y autores africanos permanecieron en las sombras para los lectores de América Latina. Bajo la consigna de desmentir la historia única, siempre contada desde afuera, Empatía busca construir un “conocimiento afectivo” para acortar las distancias geográficas y culturales. De esta forma, acerca la idiosincrasia y la realidad de los 54 países que componen el continente a través de su literatura que habla de las marcas de la colonialidad, el exilio y la vida de los que no logran pertenecer a ningún lugar. Y muestra que, en la dimensión humana, estamos más cerca de lo que creemos. CATALOGO El primero de los seis títulos publicados hasta el momento fue una antología con relatos de escritores. Después llegó la multipremiada novela Abigail, de Chris Abani, donde una niña nigeriana de 14 años despliega ante el lector un repertorio de juegos

FRAGMENTOS “Justo en ese momento abren la puerta de una patada. Nos damos vuelta y vemos entrar a los dos soldados, goteando lluvia, las armas colgando de los hombros. El barman me deja y se apresura a ir hacia ellos, inclinándose con obsecuencia. Siento un hormigueo extraño en el cuerpo, como si un shock eléctrico me hubiese atravesado. Miro a los soldados, tratando de determinar cuál de ellos está aquí por mí. Uno es petiso y claro; el otro es alto y oscuro; pero los ángeles pueden asumir cualquier forma que deseen”. (Helon Habila, Esperando un ángel). “Todo suceso viene al mundo por dos caminos: el camino de ida, que es el de los hechos, y el camino de vuelta, en el que los hechos se transforman en relatos, canciones, parábolas, farsas, fábulas, adivinanzas, proverbios, mitos, profecías. Privados de ese camino de regreso, los hechos erran en un mundo suspendido entre las cosas manifiestas y las cosas posibles”. (Kossi Efoui, Cántico de la acacia). n

SERIES

Made in Italy

La moda de los 70 no es sin ellos: Armani, Ferré, Krizia, Missoni, Miuccia Prada, Fiorucci, Versace. Reconstrucción de época y una revolución dentro de otra. P o r T E R E SA D O N ATO Milán, 1974. La sociedad pedía cambios. Las mujeres buscaban su emancipación y reclamaban derechos (como la interrupción voluntaria del embarazo, que lograron por ley en 1978 y confirmaron con un referéndum en 1981). En un clima políticamente convulsionado, la moda italiana aspiraba a su lugar entre Londres y París. De todo esto trata la serie Made in Italy: de una revolución dentro de otras revoluciones –sociales y personales–. Irene Mastrangelo (protagonizada por la actriz Greta Ferro, imagen de Armani Beauty) es una alumna universitaria que se rebela ante los métodos de enseñanza en uno de sus últimos exámenes y por eso es aplazada. Su padre obrero –oriundo

del sur– se enfurece porque para él tener una hija estudiante es un sacrificio. Echada de su casa, Irene inicia su revolución personal cuando entra a trabajar en la revista de moda Appeal. Allí conoce a Rita Pasini (Margherita Buy), una editora que libra su propia batalla: reivindicar a diseñadores italianos como Walter Albini, conocido como el padre del Prêt-à-porter de su país. Rita defiende el rol social de la moda con reflexiones como: “¿Quién dice que la revolución no la hicieron más las minifaldas de Mary Quant que las manifestaciones de los estudiantes del 68?”. Emociona ver cómo en ese tiempo Filippo, editor de arte gay que esconde su sexualidad por temor a ser juzgado, armaba cada página como un collage. 26

Mientras se organizan desfiles y shootings en una burbuja creativa, afuera la calle arde y la radio cuenta el contexto sociopolítico que Camilla Nesbitt, creadora de la serie, decidió inteligentemente no dejar afuera. La reconstrucción de época es impecable. Ferré, Armani, Krizia, Missoni, Miuccia Prada, Fiorucci y Versace aparecen en el relato y con una sucesión de vestidos y accesorios originales. La música acompaña con éxitos de ese gran momento de la canción italiana. Por ahora, solo podemos ver los ocho capítulos por plataformas alternativas mientras esperamos que Amazon la incluya en su catálogo para esta parte del mundo. Quien busca sabrá dónde encontrarla. n

ENCUENTRO

Vestuario soberano Emma Fryer fue la encargada de recrear la fastuosidad de los trajes de la corte rusa en The Great, la nueva serie inspirada en Catalina la Grande. Información histórica y guiños contemporáneos.

diante la música contemporánea –cada uno de los diez episodios cierra con canciones punk e himnos de mujeres empoderadas como Patti Smith, Cat Power, Sharon Van Etten, Courtney Barnett y Suzi Quatro– y la paleta. “Cuando Catalina llega al palacio su personalidad se muestra en los colores. Hay una primera versión muy romántica y despojada, que cambia hacia la gama de los verdes cuando conoce a su nuevo amante, Leo, y sus tonalidades se emparentan. Luego sube el volumen de los cálidos en el camino hacia el trono, siempre desde un mismo modelo de vestido, pero cada vez con más carácter”, agrega Flyer sobre el traje de la protagonista, que pasó de los pasteles y desaturados hasta el fucsia en el icónico shantung de seda al momento de su coronación. Sin mucho ornamento, joyería o maquillaje, la figura de la emperatriz consorte y el valor de sus ideas contrastan con las otras damas de la corte, a quienes se muestra excesivas, en tonos cálidos pero oscuros, con estampados florales ampulosos y siempre con las últimas tendencias de la época, ya sean tocados, plumas, corsages de flores o prótesis de pelo. Fryer agrega: “Fue muy importante respetar la ropa interior del siglo XVIII y sus varias capas para lograr la silueta adecuada. También jugar con diversos recursos de indumentaria de las cortes europeas, que fueron la principal influencia en la nobleza rusa a la hora de vestirse”. Otro de los platos fuertes de la serie es el personaje de

P o r C ATA G R E LO N I P I E R R I

ándida y joven, pero ácida e inteligente. Idealista, harta. Harta de la frivolidad de su consorte Pedro III para gobernar, de la anticuada vida en la corte rusa del siglo XVIII y del lugar de las mujeres: floreros bonitos y extremadamente decorados. Así plasma el guionista Tony McNamara (responsable del libreto de La favorita) a Catalina la Grande. Esa emperatriz rusa, ahora en la piel de Elle Fanning, gobernó durante 34 años y modernizó la nación mucho más allá del ancho de sus vestidos… Aunque sus vestidos también son clave en la propuesta, como explica la diseñadora de vestuario. “Solo tuve tres meses para realizarlos. Ese fue el mayor desafío. Desde el primer momento estuvimos corriendo para preparar los trajes que, en algunos casos, nos llevaron hasta una semana de confección. Además, debíamos crear tres versiones para sus dobles de riesgo”, comenta Emma Fryer desde Londres, a través de una videollamada. El dramedy (combinación entre drama y comedia) The Great es una adaptación “más o menos histórica”, como dice la serie creada por Hulu, que llegó a Argentina a través de la plataforma de streaming Starzplay (disponible desde AppleTV). Sin noticias aún de una segunda temporada, esta primera retrata la llegada idílica de Catalina al trono, su infelicidad e impotencia al poco tiempo de consumado el matrimonio y la posterior conspiración para lograr el golpe de estado de 1762 que la llevaría al poder. El recorrido de la emperatriz en la trama se marca me-

“La personalidad de Catalina se muestra en la paleta de colores, con una primera versión más romántica e ingenua, que evoluciona en el camino hacia el trono”. 28

Nicholas Hoult: Pedro III. La diseñadora británica dice haberse dado el gusto con la personalidad inestable y de “niño de mamá, que todavía juega con sus perlas” del zar de Rusia. “Primero buscamos inspiración en base a pinturas clásicas del emperador y las cortes europeas, pero también en desfiles de Versace, porque la esencia de su estilo era la misma de la marca italiana: un mix and match de textiles, texturas y accesorios como estampados de serpientes y leopardos, brocatos, y brillos dorados y bronce, sumados a alamares y galones enormes, prendas de cuero y pieles. Nunca voy a olvidar el día que vino Nicholas al set a probarse la falda larga con tajo que usa en una escena de una fiesta y que combinamos con botas larguísimas. Estaba encantado”. Si la trama de McNamara nunca buscó ser una copia fiel de la historia de los monarcas, la que Fryer describe desde sus trajes, siluetas y textiles tampoco. “La morfología de época fue lo más importante, así como los uniformes de guerra y la indumentaria eclesiástica de personajes secundarios, pero luego empezó el proceso creativo

al mezclar textiles y recursos modernos en prendas clásicas del siglo. Hubo rediseños de mangas, capuchas más actuales e inspiraciones en las pasarelas de Christian Dior y de Alexander McQueen”, comenta la diseñadora, quien añade entre los anacronismos el uso de piezas sintéticas, como un tapado largo de Pedro III. Y aclara: “Algunas pieles originales las alquilamos, pero no se mató a ningún animal para armar el vestuario”. Sin saberlo, la producción de The Great fue, hasta el momento, la primera y última del 2020 para Fryer, ya que comenzaron a rodar a fines del año pasado y terminaron en febrero, justo antes de que la COVID-19 se extendiera en el mundo. “Lentamente, la industria audiovisual empezó a girar de nuevo, pero muchas cuestiones van a cambiar para siempre… Por suerte”, reflexiona sobre el tiempo por venir. Y justifica sus palabras: “No creo que se vuelva a producir al ritmo de antes. Todos vamos a necesitar más tiempo para hacer nuestros trabajos porque la seguridad sanitaria será un factor clave al que tendremos que estar atentos en cada proceso”. n

DISEÑA DORES EMERGENTES

Cartas de intención

TATIANA COSTANTINI

La funcionalidad de las prendas, los nuevos materiales, la silueta del futuro. Cómo piensan hoy quienes nos vestirán mañana.

EGRESADA DE LA UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES CREADORA DE DIS/ORDER “Cuando pienso en el rol de la indumentaria siempre distingo dos aspectos. Por un lado, las prendas deben acompañar un estilo de vida contemporáneo caracterizado por la velocidad y las múltiples actividades, y por otro, hacer hincapié en la comunicación. La ropa habla de quien la porta, por afirmación o por negación, presencia o ausencia. Me interesa desnaturalizar lo impuesto y plantear otras miradas que pongan un freno a lo efímero de la vida vertiginosa. Revalorizar las relaciones, los objetos, las piezas y los momentos. Creo además que, aunque la moda nos uniforme de alguna manera, ya no se sostiene proyectar una única silueta. Me alegra que estén apareciendo nichos que eligen mostrar una identidad propia y es ahí donde entramos los diseñadores independientes, para dar lugar a la variedad”. @disorder.ba @tatianamcostantini

Por ANDREA L AZARO

“La ropa habla de quien la porta, por afirmación o negación, presencia o ausencia”.

JACQUELINE GAYON ESTUDIANTE DE LA UNIVERSIDAD DE PALERMO “Siempre estoy atenta a la búsqueda de usos innovadores en los materiales convencionales. En los últimos dos proyectos que hice para la universidad trabajé con neopreno, un textil durable y resistente. Lo utilicé en prendas sastre, geométricas y orgánicas. El ensamblado y la moldería fueron un desafío, pero dadas algunas propiedades de la tela logré disminuir los descartes y optimizar recursos. No dejo de pensar en posibles escenarios. Si el planeta se complica, nos veo totalmente cubiertos, más que nunca las prendas como segunda piel. La contaminación, el deterioro de la capa de ozono y la pandemia, entre otras cosas, ya modificaron nuestra forma de vestir y de pensar. Por mi parte, comencé a considerar el consumo consciente, la durabilidad de las piezas y la importancia de los materiales. Para que el resultado sea más significativo, es vital que las grandes marcas se unan al cambio”. @jacqui____e

“Comencé a considerar el consumo consciente, la durabilidad de las piezas y la importancia de los materiales”.

ALDANA GRAMAJO Y JUAN IGNACIO VICENTE PONCE EGRESADOS DE LA UNIVERSIDAD ARGENTINA DE LA EMPRESA CREADORES DE FARSA “Imaginamos usuarios de género fluido que vistan prendas que, en lugar de etiquetar, ayuden a comunicar. Creemos que las tendencias nos encasillan. Salimos al mundo con personajes ficticios, de ahí Farsa, el nombre de nuestra etiqueta. Muchas veces se habla de inclusión, pero en discursos de marketing vacíos. Existen problemas de talles y el plus size se publicita solo dentro de modelos hegemónicos de mujeres y varones. Las marcas independientes tenemos mucho para dar. Somos el segmento que está en condiciones de democratizar el diseño, a diferencia tanto de las firmas comerciales que siguen las tendencias como de las más exclusivas. Sería muy bueno que nuestro trabajo se apoye y se difunda. La moda argentina no es solo ropa de gaucho, tejidos del norte o el color de los glaciares”. @farsa.bsas

“El plus size se publicita solo dentro de modelos hegemónicos de mujeres y varones”. 31

DISEÑA DORES EMERGENTES

“La tecnología será una aliada crucial en un planeta al borde del colapso”.

LUCIANA ROMANO Y JULIETA SCATENA EGRESADAS DE LA UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES CREADORAS DE HYPSIBIUS “Queremos que nuestra ropa sea una herramienta autosuficiente que nos proteja y nos permita interactuar con un ambiente cada vez más hostil. Sospechamos que la tecnología será una aliada crucial en un planeta al borde del colapso ambiental, donde los recursos como los conocemos ya no estarán. Los dispositivos y accesorios para la colección que presentamos en enero en Roma, en el concurso Fashion Digital Night donde obtuvimos una mención en la categoría Wearable technology, fueron armados con partes de objetos desechados, tales como microchips de impresoras. Sabemos que el país tiene diseñadores con muy buenas ideas, pero la barrera económica es importante. No llegan insumos necesarios y los costos de producción son muy elevados. De todas maneras, a nosotras nos gustaría desarrollar tecnología vestible en Argentina”. @hypsibius_

“Con la premisa de minimizar los desperdicios textiles, en mis diseños prevalecen las formas cuadradas”.

MAIA HARIMA EGRESADA DE LA UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES CREADORA DE NIKKEI “A pesar de que nací y me crié en Argentina, la cultura japonesa estuvo muy presente en mi vida a través de mis abuelos, quienes mantuvieron vivos los valores y las tradiciones. Para fusionar ambas diseñé un nuevo material de manera analógica. Compré telas japonesas en desuso, como un jacquard con un patrón tradicional, y las usé del reverso. Les apliqué una estampa vinílica con calor y les fui entretejiendo hilados nobles argentinos al estilo del mohair y el merino. En mis diseños me inclino por una silueta oversize y trabajo con la premisa de minimizar los desperdicios textiles, así prevalecen las formas cuadradas que se vinculan con mis kimonos. Además, busco que las prendas sean cómodas, accesibles para una amplia variedad de tamaños corporales y sin distinción de género. Esas son mis prioridades”. @nikkei.ba @maiaharima

CONSUMO

Te estoy mirando

En tiempos de cambios sociales, dónde gastamos nuestro dinero también se convertirá en un manifiesto. Marcas de moda con más chances. P o r C EC I L I A CO N D E I l u s tr a cio n e s A R I E L E S C A L A N T E

os cuadrados negros que varias empresas replicaron en Instagram como una forma de solidarizarse con las protestas del movimiento antirracista Black Lives Matter generaron reacciones encontradas entre los consumidores. Hubo acusaciones de hipocresía y superficialidad, la exigencia de un apoyo real a la causa que no fuera solo el posteo de un mensaje marketinero. Y la gran pregunta que aparece cada vez que una firma es señalada por sus acciones negativas es si esto impacta en las ventas o no. Los especialistas coinciden en que vivimos un periodo de transición en que la preocupación existe, pero aún no se premia o castiga a las etiquetas por sus principios. Aseguran que la situación va a cambiar de la mano de las nuevas generaciones, que no están dispuestas a perdonar tan fácilmente a las marcas por las metidas de pata o la falta de compromiso. “Los consumidores más atentos son los que hoy tienen hasta 40 años. Pero los segmentos etarios que le siguen piden mayor responsabilidad”, detalla Cintia González Oviedo, directora de la consultora Bridge The Gap y magíster en Género y Políticas. En el mundo de los negocios todos hablan de los CEO activistas. Muchos número uno de las empresas más modernas decidieron dejar la neutralidad para involucrarse y definir posturas

públicas respecto de temas que van desde la diversidad hasta otros más controversiales como la venta de armas. ¿Estrategia? ¿Cambio de paradigma en los negocios? “Hay estudios que indican que alrededor del 70% de los millennials y del 80% de los centennials van a relacionarse solamente con firmas que tomen posición sobre determinados temas sociales”, afirma González Oviedo para aclarar las dudas.

NO VA MAS Entre las principales preocupaciones de los nuevos compradores aparece la sustentabilidad. No es para menos. La industria de la moda es la segunda más contaminante del planeta y la responsable del 10% de las emisiones de carbono. Es así que las empresas del sector enfrentan una gran presión por reducir el impacto ambiental. Por otra parte, los informes indican que esta es la última generación que tiene la posibilidad de reinventar la forma de consumir y de asegurar un futuro a las que vienen. Reducir, reusar, reciclar son las palabras claves de la moda circular, que propone maximizar los materiales y minimizar el desperdicio. Pero sustentabilidad es mucho más que eso; también incluye ser transparentes en el negocio, así como respetar los fundamentos del comercio justo y los derechos humanos de las personas que participan en el proceso productivo. Aunque la brecha entre el interés

declarado en estos principios y los patrones de compra reales todavía es grande, aparecen algunos gestos alentadores. Un buen ejemplo es el mensaje de las actrices y los actores de Hollywood que deciden repetir vestidos o elegir etiquetas “verdes” en las alfombras rojas, la proliferación de los emprendimientos textiles eco, las tiendas de segunda mano y el interés por un nuevo modelo de negocios que alquila indumentaria en vez de venderla.¿En qué otras cuestiones debe poner la lupa una marca si no quiere perder clientes? La pandemia aceleró los procesos orgánicos dentro de la industria. Los pronósticos indican que la “nueva normalidad” de la que todos hablan traerá cambios a favor de un consumo más responsable y selectivo. El informe anual The State of Fashion 2020 realizado por la consultora McKinsey & Company y el sitio especializado The Business of Fashion revela cuáles son las medidas que las empresas deberían tomar para estar en sintonía con los cambios de época. Una de las principales es trabajar con perspectiva de género y ser garantes de la cultura de la diversidad. No es suficiente hacer una publicidad con cuerpos diversos; la transformación cultural también debe darse puertas adentro. “Así como hace 30 años tenías que saber computación o inglés, hoy estar entrenado en temas de diversidad y ponerlos en práctica en una empresa

CONSUMO

es garantía de competitividad”, dice González Oviedo, que apunta directo a los números y asegura que no se trata de una cuestión ética o políticamente correcta. “A contramarcha de quienes lo asocian con un tema de moda, hay sobradas pruebas de que incrementa de un 5 a un 20% la rentabilidad. Además, aumenta la motivación entre los millennials y los centennials, retiene talentos, acelera la innovación y genera más productividad y creatividad dentro de los equipos”, enumera para los escépticos.

CARRERA ONLINE Pero qué compramos y cómo compramos no solo tiene que ver con los valores. El informe de McKinsey también indica de qué forma deberían actuar las empresas ante la revolución digital. Si algo quedó claro es que las marcas necesitan una presencia digital fuerte y un proceso de venta online muy aceitado. Sin embargo, la tendencia muestra que el espacio físico y el virtual todavía se complementan. Si queda alguna duda, basta recordar lo que pasó en el primer día sin confinamiento en Francia con la apertura de Zara, donde la gente hacía largas filas para entrar a los locales. Según datos del 12º Estudio Global del Consumidor 2020 de Zebra Technologies Corporation, el 76%

de los millennials asegura que fue a un local solo para ver los productos y luego comprarlos online. Entender este comportamiento fue vital por ejemplo para Mercado Libre, que tras algunos ensayos fallidos logró meterse de lleno en el negocio fashion cuando se alineó con etiquetas líderes y lanzó, dentro de su plataforma, tiendas oficiales de Nike, adidas, 47 Street, Volcom y Complot, entre otras. La compañía busca innovar para seguir las tendencias sociales más relevantes. El año pasado desarrolló la sección genderless dentro de la oferta de moda, para dar respuesta a aquellos consumidores que no se identifican con la tradicional división binaria. Y en materia de sustentabilidad, se planteó como objetivo abastecer sus operaciones con 100% de energía renovable en el corto plazo. “Las etiquetas que transmiten estos valores intangibles se transforman en marcas con poder porque son más inf luyentes, generan compromiso y empatía. En momentos de crisis hay mucho cuestionamiento de cómo funcionó el mundo hasta ahora. Estoy convencida de que las nuevas generaciones de compradores van a impulsar cambios y valorar las empresas que tengan un impacto positivo en la sociedad”, concluye González Oviedo. n

“La cultura de la diversidad en las empresas incrementa de un 5 a un 20 % la rentabilidad. Además, aumenta la motivación entre los millennials y los centennials, retiene talentos, acelera la innovación y genera más productividad y creatividad dentro de los equipos”, Cintia González Oviedo.

PA SA R EL A S

Semanas de la moda en el escáner

Un repaso por los últimos lanzamientos y un registro de los formatos elegidos, mientras la crisis sanitaria y económica genera transformaciones a escala mundial. Por CELESTE NASIMBERA

n los últimos meses, asistir a las presentaciones de las principales casas de moda internacionales consistió en activar recordatorios y abrir Instagram (o YouTube o sitio web oficial). Quienes concurren con asiduidad y quienes se mantienen informados vía digital se encontraron frente a las pantallas, observando la seguidilla de colecciones crucero, Alta Costura y masculinas. ¿Es el fin de las semanas de la moda? ¿Los eventos se transformarán en instancias digitales? Los interrogantes comenzaron a surgir en la industria cuando en febrero en Milán, entre desfiles, se inició una fuerte escalada de contagios y así una progresiva suspensión de actividades. Pocos días después, la de París transcurrió con cierta normalidad, pero a partir de marzo ya no fue posible pensar en situaciones presenciales. Las principales capitales ingresaron en estricto aislamiento y las maisons decidieron seguir a través del trabajo remoto. “El desfile es el comienzo –aseguró Bruno Pavlovsky, presidente de moda de Chanel, al periodista Tim Blanks en el sitio especializado The Business of Fashion–. El ritmo es poder ofrecer novedades cada dos meses en las boutiques. Nos sentimos muy cómodos con esa frecuencia. Cada colección está centrada en un tema y tenemos esa narración seis veces al año”. Además remarcó la estrategia de la maison de volver y sostener el formato tradicional. Así que, con un reajuste del calendario, la colección crucero Un paseo por el Mediterráneo se hizo pública a través de una serie de fotografías y breves videos. Durante junio y julio la agenda fue digital y las redes sociales, la principal vidriera. Ecuación que resulta lógica si seguimos las estadísticas de uso en dichas plataformas. Desde Facebook Argentina, por ejemplo, indicaron

que en el primer mes del aislamiento (marzo-abril), su audiencia y la de Instagram se duplicaron en el país, en relación con el consumo de contenido en vivo. Y se registraron más de 8.500 millones de transmisiones en Facebook Live con un crecimiento exponencial. Siguiendo con la grilla y las acciones en pandemia, el British Fashion Council transformó su sitio en una plataforma que alojó diversos formatos (videos en vivo, podcasts, conferencias, showrooms virtuales, entre otros) y la Fédération de la Haute Couture et de la Mode adoptó una metodología similar para mostrar las colecciones más artesanales y refinadas de la industria. En Alta Costura las estrategias se concentraron en videos cortos (entre uno y diez

“Lo digital no puede sustituir a los shows en vivo”. Carlo Capasa, presidente de la Camera Nazionale della Moda Italiana.

minutos). También hubo enfoques ficcionales, como el elegido por Maria Grazia Chiuri en Dior, dirigido por Matteo Garrone y con música de Paolo Buonvino. John Galliano, en cambio, mostró los procesos de realización en Maison Margiela a través de un documental dirigido por Nick Knight. Las aperturas graduales en las capitales europeas permitieron que las novedades masculinas desde mediados

de julio mostraran más variedad en las presentaciones y hasta incluyeran formatos presenciales. Hermès transmitió desde Pantin, sede de la casa, siguiendo sus lineamientos más creativos a través del trabajo colaborativo entre la diseñadora Véronique Nichanian y el director Cyril Teste. Homme Plissé de Issey Miyake también mantuvo sus modos en un video con tres hombres danzando. Virgil Abloh, en cambio, innovó con el dónde y el cuándo. Solo realizó un video animado como adelanto, ya que la colección de Louis Vuitton se presentará fuera de calendario en Shanghái. “Lo digital no puede sustituir a los shows en vivo”, señaló Carlo Capasa, presidente de la Camera Nazionale della Moda Italiana, en referencia al desfile presencial de Dolce & Gabbana. Un evento reducido, bajo un estricto protocolo, que se llevó cabo en la Universidad Humanitas, institución que la marca apoya en sus investigaciones vinculadas a la COVID-19. Durante septiembre y octubre las cuatro ciudades principales cumplirán con la agenda estipulada. En formatos mixtos, las temporadas se presentarán en Nueva York, Londres, Milán y París. El British Council, luego de confirmar la celebración de la Semana de la Moda en Londres del 16 al 22 de septiembre, emitió un comunicado sobre el efecto de la crisis en el sector. Apenas unos números: en una industria que emplea a 890.000 personas (2019), Oxford Economics pronostica la pérdida de 240.000 puestos de trabajo directos y un descenso del aporte al PBI de 35 billones de libras (2019) a 26.2 billones de libras. La comunicación oficial incluye además un listado de medidas solicitadas al gobierno para salvaguardar la industria. ¿Cómo impactará la crisis en las estructuras, el formato de producción y el ritmo de las colecciones? No se trata entonces de contar likes. n

Gloria Escribano, especialista argentina residente en Madrid, da su punto de vista.

La firma española Zap & Buj y una colección que crea el efecto de una segunda piel con tejidos y materiales como silicona, láminas de aislamiento térmico y plásticos como el acetato y el metacrilato. Presentado en BID18.

erminaba un ciclo profesional en Buenos Aires, en una revista en donde había trabajado cinco años. Le surgió un proyecto como productora en un programa de televisión, pero era el verano de 1989 y justo empezaban los cortes de luz que duraban seis horas y afectaban el horario en que se iba emitir. Tenía una relación amorosa de la que quería tomar distancia. Así que consideró que era el momento de viajar. Gloria Escribano armó su valija, sumó el diploma de licenciada en Filología, partió hacia Madrid y “me fui quedando, quedando…”, dice. En su nuevo destino hizo un máster en Estudios Avanzados de Edición y cursos de Gestión Cultural. Se dedicó a desarrollar y gestionar proyectos socio-culturales y artísticos. Desde 2007 dirige la Bienal Iberoamericana de Diseño (BID), la cita más importante del diseño contemporáneo en los países de lengua española y portuguesa de América y Europa.

¿Hacia dónde va el diseño?

ENCUENTRO

¿Cómo ubicarías el diseño iberoamericano respecto del de otros países?

los Lego para que niños discapacitados participaran, como en un juego, en la creación de sus prótesis. A la empresa Ecoalf por sus proyectos textiles realizados con material reciclado (PET o café) y un diseño impecable. Y por hablar de Argentina, considero relevante el sistema “Vot.ar”, de boleta única electrónica. Diseñado por el estudio xCruza, permite que el ejercicio de sufragio y conteo de votos se realice de forma ágil y se use en situación de traslado –es una pequeña valija portátil–. Otros argentinos premiados fueron los integrantes del colectivo Iconoclasistas, que elaboran proyectos al combinar el arte gráfico, los mapeos creativos y la investigación colectiva.

Con todas sus dificultades y diferencias territoriales, Iberoamérica tiene una energía vigorosa y una fuerza innovadora que muchos envidian. Existe una conciencia real de crear propuestas para solucionar problemas, capacidad de resolver con poco, afán por el cambio y un importante bagaje intelectual que permite acercarse con una mirada 360 grados. Está claro que el diseño se hace presente cuando otros aspectos de la vida social y económica están resueltos, con lo cual es más fácil que en regiones consolidadas se entienda como un vertebrador de la realidad que va más allá de la simple ecuación estética-función.

¿La pandemia aceleró algún cambio en el diseño?

¿Hay denominadores comunes en los trabajos de las últimas bienales?

Lo que se ve es que la experimentación se mueve en una doble dirección. Por un lado, con un diseño que busca una funcionalidad evidente. Y por otro, con uno en el que la funcionalidad está más diluida porque la experiencia emocional es la referencia. Este es un tiempo en que se tomó conciencia de que incluso el diseño más sencillo o “humilde” –como lo llama Deyan Sudjic, director del Design Museum en Londres– tiene que tener un componente emotivo para el usuario. Y eso supone un cambio de pensamiento. Además, las nuevas tecnologías son una herramienta poderosa que abre grandes posibilidades; la coparticipación y el movimiento maker siguen en aumento y proponen soluciones colectivas; el el uso y la reutilización de materiales y procesos sostenibles están en todas las agendas. Y es verdad que las marcas, las instituciones y las empresas van entendiendo que si aplican diseño les puede ir mejor. ¿Cuáles son los proyectos que más atrajeron tu atención?

Voy a mencionar los que formaron parte de las últimas ediciones de la BID, ya que en estos días estamos recordándolos, de cara a la BID20 que tendrá lugar en noviembre. Por un lado, “Mars”, una moto eléctrica realizada en Paraguay por Priscilla Gacher, una diseñadora muy joven. Incluye un compartimento para material de primeros auxilios, que tiene desde un aparato desfibrilador hasta un pequeño balón de oxígeno, y recorre costaneras de Asunción y Encarnación. También destaco “IKO de Creative Prosthetic System”, un proyecto de Carlos Alberto Fuentes, colombiano afincado en Chicago que vio las posibilidades que ofrecían

“Este es un tiempo en que se tomó conciencia de que incluso el diseño más sencillo o ‘humilde’ – como lo llama Deyan Sudjic, director del Design Museum en Londres– tiene que tener un componente emotivo. Y eso supone un cambio de pensamiento”. 41

Lo puso en un rol primordial. Porque no es solo producir objetos y no es solo la escala industrial. Es dibujar un mapa de cambio y de vida. El ser humano salió de las cavernas o debajo del árbol porque pensó en términos de diseño que es, en sí mismo, innovación. Es herramienta de adaptación y adaptarse es básicamente cambiar. El diseño siempre fue la ejecución de un pensamiento utópico en el sentido de querer crear o soñar para dar vida a algo nuevo. Claro que para lograrlo, además de individualidades, se necesitan diálogos de cooperación científica y el apoyo de instituciones, de la industria, de clusters económicos y de gestión, y de otros sectores que apuntalen eso que llamamos creatividad. n

CRONICA

Rosario central

Nuestro pequeño homenaje a una artista total y a la vigencia de su obra. Por FERNANDO GARCIA Fotos E U G E N I A K A I S

l martes 7 de julio se murió Rosario Bléfari, tenía 54 años. Estaba enferma de un cáncer que empezó por carcomerle un pecho y se le fue a los huesos. Rosario se murió en Santa Rosa, La Pampa, donde vivía su padre, al que visitaba todos los veranos. En Buenos Aires quedaron Nina, su hija de 20 años, y Fabio, su pareja desde hace treinta, el que le dio el apellido a Nina y a la banda que formaron juntos: Suárez. Y en todo el país quedó un agujero secreto que las redes sociales y la atención de los medios amplificaron

pero que no dejaba de ser un dolor profundo e íntimo: el de aquellos que entre 1989 y 2019 habían sido atravesados por el misterio relámpago (como le puso a uno de sus discos) de una cantante-compositora-actrizescritora que amuralló sus convicciones estéticas muy pronto y para siempre. Rosario, al margen de la industria, lejos de las multitudes, fue sin embargo central. Como en la película Silvia Prieto (Martín Rejtman, 1999) donde muchas mujeres podían ser Silvia Prieto pero solo era ella o como en una banda con un nombre tan común como Suárez (¿The Smiths?) donde nada era vulgar, rutinario. Mucho menos su figura, la de una chica menuda que rompía el molde de la musa-cantante-corista

que estrenaba los hits de un rockstar y desplegaba sin fuegos artificiales una sobria plataforma feminista. Nada de eso. Rosario era central. Las fotografías de Eugenia Kais que ilustran estas páginas muestran al ícono que fue para el underground después del underground, que algunos llamaron rock alternativo y otros indie. Pero Rosario no se hizo consumiendo videos de MTV en la era Nirvana durante trasnoches de helado y cigarrillos, sino que venía en el último pelotón del under de los 80: le tocó pasar de largo todo ese nihilismo dark y ser parte de la escena del Rojas que traía la solución de un glamour povera para el tercer mundo. Ella, sin embargo, esquivó la trampa. No fue para nada una chica De

Estar en medio del ruido, canalizar la energía a través de ese cuerpo flaco y chiquito también era su arte.

CRONICA

Loof sino que revisitó la ética modernista desde un cruce peculiar: tenía el alma de diamante que pedía Spinetta y los dedos de la Pizarnik, bien metidos en el enchufe para electrificarla. Rosario era una chica educada en la alta cultura rock cuyo mandato había sido vehículo veloz de todas las otras artes: lo que hicieron Bowie, Ferry, Patti Smith, Malcolm McLaren y Vivienne Westwood. Una niña del Album Blanco de Los Beatles, del segundo y oscuro disco doble de Almendra, hechizada por la fuerza de remolino con la que apareció Celeste Carballo muy a principios de los 80, cuando ella era una quinceañera que había pasado la infancia en Bariloche. Y convirtió todo eso en un estilo de cantar, de actuar, de vestirse (puro vintage de autor). Austera, con esa voz como de campo y una carita nouvelle vague que Eric Rohmer hubiera enfocado si el plan maestro la hubiera preferido parisina. Suárez fue un grupo perfecto que duró casi diez años, dejó cuatro discos modélicos, algunas grabaciones legendarias y la posibilidad de que la canción y la experimentación de vanguardia se fundieran en un lenguaje común que no se parecía a nada de nada. Volvieron quince años después para una cantidad de público que jamás habían soñado en vida, un Konex que rebalsaba y que daba fe de la leyenda que se había construido alrededor de ellos en tantos años de silencio. Y en el centro del escenario, toda de negro, estaba Rosario. Podría haberse quedado ahí cómoda con el aplauso pero prefirió seguir su camino solista, un templo personal y modesto donde dio paso a una sonoridad menos compleja, más cristalina. Fue ella la que decidió que el grupo no volviera a la rutina de los 90 y que se reservara para apariciones esporádicas y eventuales. Fue ella la que evitó que Suárez terminase tocando a las dos de la tarde en el Lollapalooza como una banda de relleno,

“Mi cuerpo tiene un imán”, la oímos cantar dándole a la palabra ‘imán’ una elasticidad de bucle que se retroalimenta y sigue. Y es cierto, había en toda ella un magnetismo de ícono, en un sentido trascendental.

para que el recuerdo de shows que eran ceremonias iniciáticas no se arruinara. Hay quienes acuerdan que fue en el Teatro del Plata (donde debutaron Los Redondos en Buenos Aires en 1978) y otros que citan La Luna, un pub pequeño en la esquina de Cabrera y Medrano. De lo que hablan es de un show en el que Suárez salió a tocar con un telón de papel ocultándolos de la vista del público. Dicen que a medida que pasaban los temas, a veces improvisaciones de ruido blanco y gritos como en una performance de Yoko Ono, Rosario iba desgarrando el telón con una tijera. Muy de a poco, se dejaban ver los mangos de las guitarras, un platillo, su overol. Agregan que hubo que esperar al último tema para poder ver a la banda completa. Eran nuestros Velvet Underground. Lo digo yo que estuve ahí. La incertidumbre en cada show de Suárez se volvía un ingrediente sexy, erótico. No se sabía cuánto podía durar, a veces uno hubiera querido que ella cantara más temas, pero no se trataba de eso. Estar en medio del ruido, canalizar la energía a través de ese cuerpo flaco y chiquito también era su arte. Fuera de Los Redondos del principio de los tiempos, Suárez era una de esas bandas, acaso la última con Don Cornelio y la Zona, que promovía una suerte de militancia secreta. Y Rosario, central, era su pasionaria, su (Santa) Rosa Luxemburgo. “Mi cuerpo tiene un imán”, la oímos cantar dándole a la palabra “imán” una elasticidad de bucle que se retroalimenta y sigue. Y es cierto, había en toda ella un magnetismo de ícono, en un sentido trascendental. Veámosla en un díptico con el Kavanagh a sus espaldas y un tapado rojo que podría haberle comprado a Peggy Olson (Mad Men) en Mercado Libre, pero nunca como un gesto retro sino como quien usa lo que ya está hecho, economiza. Rosario sabía hacer muchísimo con muy poco y eso era muchísimo. Rosario, central: buen día ahí, arriba. n

FOTO: FAUSTO ELIZALDE.

PORTFOLIO

El mundo de Sofía

Se mueve con soltura en el universo de la moda internacional, pero no la enceguece. Su búsqueda artística escapa a la frivolidad. P o r C EC I L I A CO N D E

of ía Ma lamute no recuerda haber pasado tanto tiempo en Argentina desde que se fue a vivir a Nueva York hace siete años. Hoy su vida –como la de casi todos– es pura incertidumbre. Pero ella está tranquila. La cuarentena le funcionó como una suerte de descanso obligado. En la última década trabajó sin parar: cubrió el circuito de las Semanas de la Moda más importantes del mundo; publicó sus fotos en revistas como i-D, Interview, Vogue, CR Fashion Book, Dazed&Cofunsed y Grazia; realizó campañas para grandes marcas y hasta se animó a jugar a la modelo cuando Marc Jacobs la hizo posar para una campaña junto a una profesional, Jamie Bochert, su pareja en ese entonces, y cuando Demna Gvasalia la invitó de subirse a las pasarelas de Vetements y Balenciaga. Su acercamiento a la fotografía fue de la mano de Daniel Kilinski, quien trabajaba para los catálogos de su mamá, la artista plástica Cynthia Cohen. El le enseñó desde lo más básico, como armar una cámara estenopeica con una

caja de zapatos, hasta a revelar fotos en el baño de su casa. Las primeras tomas de Sofía ya mostraban su potencial y su madre la alentó a presentarse en el concurso Curriculum Cero, que organizaba la galería Ruth Benzacar. Eligió algunos retratos que le había tomado a su hermana Natalia y no solo fue una de las diez seleccionadas para exponer, sino que logró vender cada una de esas imágenes. Le siguieron muestras en Miau Miau, Fundación Klemm, Buenos Aires Photo y el resto es historia. Fue una conjunción de talento, ganas, ambición –“y algo de ingenuidad”, reconoce– lo que le allanó el camino para entrar al circuito top de la moda internacional. Solía decir que la construcción de su carrera se “había dado”. Pero Sofía creció y la distancia en el tiempo le permitió una relectura de ese momento. “Puse la fuerza necesaria para que sucediera”, dice. Hoy, con su profesión consolidada que le permite seguir trabajando desde Buenos Aires para el exterior –al menos hasta que decida partir a su próximo destino: París–, se dedica solo a proyectos que tengan que ver con amigos y desafíos.

No es difícil, considerando algunas figuras que aparecen en su cuenta de Instagram, como Mica Argañaraz, Suki Waterhouse, Kaia Gerber o el actor Timothée Chalamet.

daria, me encargaron entrevistar a un artista y le pedí a Veri si podía hablar con su papá. El material es todo. Lo tiene Cata Spinetta porque lo está digitalizando. Una joyita como tantas que nos dejó Luis.

Para este número de L’Officiel retrataste a Vera Spinetta y a Juan Ingaramo, ¿Qué vínculo tenías con ellos?

Hay quienes dicen que después de esta pandemia vamos a salir mejores, otros que nada va a cambiar… ¿qué te pasó a vos?

Me encanta fotografiar a gente con talento como Vera y Juan, dos grandes artistas. A Juan no lo conocía más que por su música, soy muy fan de él. Con Vera, en cambio, somos amigas desde que teníamos 13 o 14 años. Hubo una época en que pasábamos los fines de semana en La Diosa Salvaje [el estudio de Luis Alberto Spinetta]; la energía era mágica y los recuerdos hermosos, aunque éramos muy chicas para entenderlo. Una vez, cuando yo ya estaba en la secun-

Soy muy consciente de mis privilegios y de que hay personas que la están pasando mal. Pero esto me dio un respiro. Viví y trabajé sin parar muchos años en Nueva York, el epicentro de la ansiedad y la adrenalina. De repente hay una pausa para todos y no quedó otra que cambiar el ritmo. ¿Cuál fue tu último trabajo?

Estaba en Los Angeles, decidida a mudarme a esa ciudad y a punto de dirigir mi primer largometraje. Era un guión comisionado, ya habíamos

hecho varias revisiones del texto con la idea de filmar en junio o julio, pero tuve que darlo de baja. Además de hacer fotografía, incursionaste como modelo, directora audiovisual y ahora guionista, ¿cómo fue tu acercamiento a la escritura?

Lo hago desde siempre. Me gusta mucho escribir, llevo un diario y libros a todas partes; también me gusta dibujar, cada día más. Por otro lado, tengo amigos en Hollywood, me muevo entre directores y actores a los que respeto mucho. Es un mundo que siempre me llamó la atención. ¿Cuál sentís que fue el momento más relevante de tu carrera?

Creo que aún no llegó. Pero si tengo que pensar alguno, quizás fue cuando empecé a respetar mi trabajo.

PORTFOLIO

Es como el amor propio: primero necesitás quererte a vos para que te quieran. Bueno, yo sentí eso. No autoboicotearme, que era algo que hacía mucho. Creer en lo que hacía y entender que tenía talento. Hoy me siento agradecida y afortunada. Entiendo mejor mi trabajo, que se basa en la belleza.

con otra libertad. La deconstrucción se está dando también en la moda. A la vez, la pandemia nos ubicó frente a nuestra pura realidad. Hoy no hay tanto lugar para la mentira. Hay algo más auténtico y humano. Es clave la conciencia comunitaria para un futuro que nos haga mejor a todos, sin discriminar.

Hablando de belleza, en los últimos años la moda comenzó a abrirse hacia la diversidad. ¿Crees que es un cambio real o puro marketing?

Sabemos que las apariencias engañan, pero si nos dejamos llevar por tu Instagram, tu vida se ve glamorosa. ¿Quiénes son las personas que te bajan a tierra?

En Nueva York, que es donde trabajé y viví estos últimos años, es algo orgánico. La ciudad es heterogénea. No es forzado. Es habitual que en una producción haya chicas o chicos trans, por ejemplo. Está muy naturalizado. Creo que es un cambio necesario porque las audiencias son otras y las nuevas generaciones viven

Sin duda mi mamá, mi hermana y Mica (Argañaraz), que es una gran persona. Nos conocimos por amigos en común en la época en la que las dos trabajábamos en Argentina. Cuando uno vive afuera y no está cerca de su familia biológica, genera una propia. Ella es mi familia: un apoyo mutuo, sincero, humano y real. n

“Hoy no hay tanto lugar para la mentira. Hay algo más auténtico y humano. Es clave la conciencia comunitaria para un futuro que nos haga mejor a todos, sin discriminar”.

J UA N INGA R A MO

“EST OY TR ANSITANDO SENTIMIENTOS N U EVOS” El cantautor cordobés revisa lo que significan para él la música, el éxito, la paternidad, el ego. Fotos S O FI A M A L A M U T E E s tilism o S I LVA N A G R OS S O y M AT I A S C A R B O N E

Campera en denim y jeans, Leviâ&#x20AC;&#x2122;s. Musculosa, Bowen. Zapatillas, adidas.

Fotos M A R C E LO S E T TO N E s tilism o G A B R I E L A S E T TO N

P o r I R E N E A M U C H A S T EG U I

ecretos de belleza? Más bien los proclama: “Esta semana me hice un peeling”, comenta inopinadamente, en cuanto su cara aparece por videollamada. Su imagen vendió buzos, zapatillas, perfumes Dior y tratamientos cosméticos, pero no se trata de eso. Influenciador circunstancial, Juan Ingaramo es cantante, compositor, multinstrumentista y productor: titular de “una empresa” que lleva su nombre. Así define con un dejo de ironía el lugar, cada vez más visible, que ocupa en la escena musical con su cóctel de géneros urbanos de pulso latino, canciones propias, versiones cool del cuarteto cordobés y múltiples colaboraciones: con Adrián Dárgelos de Babasónicos y “la princesa del trap” Dakillah, pasando por Miranda! y Julieta Venegas. Su mirada irónica de la industria se refleja también en el título del disco Best Seller, que lanzó en 2018 y sigue escalando en Spotify. El periplo que va del popular barrio cordobés de San Vicente, donde nació hace 33 años, a la alfombra roja del MGM Grand Garden Arena en Las Vegas, se aceleró en los últimos dos años y no se detuvo hasta que su expansión continental quedó en pausa por la pandemia. “El panorama se viene abriendo: México, Colombia, Perú, Chile, Uruguay, tres veces en Estados Unidos tocando para el mercado latino… Y la nominación en los Grammy Latinos fue como oficializar el nuevo territorio a conquistar. Pero apareció este parate y estoy tratando de sacar algo positivo. Todavía no llegué a ninguna conclusión, pero sé que estoy transitando sentimientos nuevos que me alivian con respecto a ‘la carrera’. Me estoy replanteando la ambición que se juega y las cosas que uno cree que son importantes… No sé si en el fondo será comodidad, fiaca o miedo, pero lo estoy viviendo con tranquilidad”. Hace algunos meses, desbordaba Vorterix, y al pie del escenario coreaba sus canciones una multitud –con marcada presencia de público femenino, según captan los videos en redes–. La pausa obligada le parece una oportunidad para repensar el rol. “El ego: a eso hay que estar superatento. Lo hablaba con Viole (la actriz Violeta Urtizberea, su pareja desde hace cinco años): el público idolatra a artistas que en el 90 por ciento de los casos son ególatras, obsesionados por el éxito y por los números. Lo veo en los colegas más pegados y en los que no también…”. ¿El está a salvo de eso? “Yo siempre padecí más bien de lo contrario, de falta de autoestima. Esto del narcisismo lo estoy descubriendo con una especie de distancia. Qué bravos son estos porteños: llenan Niceto y ya se sienten Peter Gabriel. Los cordobeses no somos así. El año pasado se armó esto de hacer shows para dos mil personas; es medio extraño subir a un escenario y ponerse en ese lugar. Con la revolución feminista se me empezaron a despertar un par de interrogantes, por ser hombre, por ser músico... El músico fue siempre fiel estandarte de la cultura patriarcal: el hombre en el escenario deseado por las mujeres. Se trata de tomar conciencia de qué herramientas estoy usando y qué 52

“El músico fue siempre fiel estandarte de la cultura patriarcal: el hombre en el escenario deseado por las mujeres. Necesito preguntarme desde dónde se vende, qué dicen las canciones, tratar de hacer esto lo más sano posible”.

Traje de dosBowen, piezas Musculosa, en bouclé, Chanel. Jeans, Levi’s.

Morral Fiji, Prüne. Bota Fly, Jazmín Chebar. Mochila, Montblanc.

“¿El trap, el rap? No lo vivo al cien ni me embandero en ese género. El motor es intuitivo, el análisis intelectual viene después y ordena el discurso. Me siento camino a otra zona más democrática, más abierta. Odio el nicho. Es fascista”.

Página opuesta: smoking, Rochas. Camisa Mao, AY Not Dead. Jeans, Levi’s por Joaco Díaz. Esta página: blazer y camisa, Zito. Pantalones en cuero ecológico, Juan Ingaramo. Medias de algodón, Polo. Zapatillas, adidas.

sucede conmigo. Necesito preguntarme desde dónde se vende, qué dicen las canciones, tratar de hacer esto lo más sano posible”. También trajo preguntas su hija Lila, que nació hace diez meses y en este momento duerme la siesta a pocos metros. “Siento que la paternidad es una oportunidad para ser una mejor persona. Lila es el eje de mis días. Estoy a su servicio. Es una entrega total. Aprovecho la cuarentena para ser testigo de cada momento; no podría haberlo hecho en una situación ‘normal’, entre los shows y los viajes”. Ingaramo cita en el mismo párrafo a “La Mona” Jiménez, Ryuichi Sakamoto y Hermeto Pascoal. Puede teñirse el pelo de azul en homenaje a Rodrigo, cantar un hit de Valeria Lynch vestido como Sandro en bata roja, inventar el cuartefunk en camiseta y estrenar, el día de los enamorados, la bachata Romeo y Violeta. “¿Mi música? Si le saco una foto hoy en día luce muy diferente de mi primer disco, pero la materia prima, la esencia, sigue siendo muy parecida. En cierto sentido, eso me deja tranquilo: no hay problema con probar, siempre y cuando esté claro lo que uno tiene para andar. Hoy la foto es una influencia latina a nivel rítmico, exacerbada por la regionalización de la propuesta, pero también con identidad plenamente argentina. Hermeto dice que la música tiene que ser hija de su tiempo o de su tierra. Si no, hay una falla. No sé qué valor tendría que yo me pusiera a hacer rock psicodélico”. En sus canciones, las conexiones territoriales y generacionales son múltiples. “No es que me hago el cuartetero: es lo que uno es. Y no lo podría defender si no fuera así. Vengo de mi tierra y represento eso. Lo que intento es llevar el cuarteto a otras zonas musicales para ver qué sucede. ¿El trap, el rap? Tampoco lo vivo al cien ni me embandero en ese género. El motor es intuitivo, el análisis intelectual viene después y ordena el discurso. Me siento camino a otra zona más democrática, más abierta. Odio el nicho. Es fascista. En este momento estoy investigando y eso me divierte, me emociona, me hace transpirar, me pone en riesgo. No entiendo si está increíble o es una mierda. Y me gusta”. En ese camino, cuenta, lo sorprende la dinámica de una audiencia cuya fisonomía le revelan los algoritmos. “Está creciendo el público en edad, según las estadísticas, y no sé cuál es la explicación. Tenemos un equipo de marketing que trabaja en todo ese circo y me muestra las tortas. Yo trato de no darle mucha bola porque no sé qué significan. Creo que lo que tengo que hacer son canciones. Porque si entrás en esa te confunde”. Mediciones de oyentes, redes, seguidores, resopla… “Esa droga horrible. No puedo evitarla, no sé qué aplicación desinstalar”, dice. Y se disculpa, tiene que cortar: Lila ya se despertó de la siesta. n

Traje, Zito. Musculosa, Bowen. Anteojos, Miu Miu. Collar de cristal, Swarovski.

VERA SPINETTA “CONECTO CON L A CR E ACION ” Multifacética, inclasificable, es capaz de dar sentido a todas sus emociones. Amor es una de las palabras que más repite.

Fotos S O FI A M A L A M U T E E s tilism o S I LVA N A G R OS S O y M AT I A S C A R B O N E

Chaqueta de smoking con doble solapa, Alexander McQueen. Maxivestido , New Dress Rent. Relicario de oro y diamantes amarillos, Vintage.

Fotos M A R C E LO S E T TO N E s tilism o G A B R I E L A S E T TO N

Redingote de inspiraciรณn regimental, Saint Laurent. Gargantilla y aro de cristales, Swarovski.

Por MARIA MANSILL A

uguemos al unboxing con Vera Spinetta. La caja guarda todo lo que la vida le tenía preparado para estos meses. La abre y sale Eclosión, su primer libro de poesía, editado a fines del año pasado. Se pone de perfil y le asoma una panza hermosa, donde crece su primer hijo varón, Azul. Para la oreja y escucha, a lo lejos, que llegan los acordes de su laboratorio sonoro y de su otro hijo: el disco se llamará Terso. Achina sus ojos chinos cuando piensa en Eloísa (5) y en la maternidad como “amor exponencial”. De la caja saca otro libro: La divina comedia. Y la energía de un autor: Andréi Tarkovsky. Vera es tierra y aire. Está en pareja con un músico y armó una banda con amigos. Su vida personal, su obra, las melodías que compone y hasta la música de las palabras que elige para dar nombres forman una constelación. “No hago nada porque sí”, dice Vera mientras bucea en esa caja imaginaria de sorpresas cumplidas que ella misma pergeñó.

Estabas grabando El Reino, una nueva serie de Netflix sobre política y religión. ¿Sigue el proyecto?

Las grabaciones se suspendieron hasta próximo aviso, pasó lo mismo con todos los rodajes. Esperemos retomar pronto. ¡No puedo explayarme mucho hasta continuar con la serie! ¿Cómo transitás el embarazo? ¿Se aprende algo de las experiencias anteriores o todo se vive por primera vez?

El embarazo me encontró en un estado de amor completo con mi compañero, Juan. Después de dos años de relación la noticia fue una sorpresa y al mismo tiempo habíamos dejado esa puerta abierta para que, de alguna manera, llegara nuestro niño Azul. Me encuentro muy tranquila en cuanto a los aspectos físicos y químicos de mi cuerpo. Conozco este proceso y, a la vez, cada ser que viene trae una energía particular, eso hace que una también lo viva desde otro lugar. Además, está el factor ámbito, que siempre cambia todo. Estoy contenta, con ganas de recibirlo y darle mucho amor. Estamos los tres, Eloísa, Juan y yo, esperando con ansias su llegada.

Con Eloísa y ahora con Azul, ¿de qué manera se reprogramó y nutrió tu canal maternidad-creatividad?

La maternidad le da un porqué más profundo a mi existencia. Es un reflejo, un aprendizaje constante. El desafío que implica criar en este mundo tan complejo, sin dejar de lado los objetivos personales y dando lo mejor de una a los hijos, resulta una experiencia de espiritualidad, paciencia y valentía. Es el amor exponencial, es lo más absoluto que viví hasta ahora. Intransferible. Y la creatividad siempre se ve afectada, en el buen sentido. Valorar el tiempo, la acción. Ponerse algunas estructuras para crear sin ser demasiado etérea ni demasiado terrenal. Digamos que el estado ideal sería flotar en un intermedio. Crear y nutrirse de las vivencias cotidianas es de una belleza enorme, como también irse con la imaginación al lugar que se desea. Eloísa es una fuente inagotable de inspiración, para todos. Intento adaptarme y creo que ahora puedo decir que lo logré, que conecto con la creación sin excusa del momento o el lugar. Que coexistan los mundos hace que se fusione un elemento más, y después los niños tienen esa libertad de juego también. Así es como me criaron mis padres y lo valoro muchísimo. ¿Escribir es cantar para adentro? ¿Seguiste escribiendo poesía después de publicar Eclosión?

Escribir es música; todo es música. Escribo desde chica y lo sigo haciendo, casi religiosamente. Es mi diálogo constante y necesario. Quizá el año que viene saque un segundo libro. ¡Estabas también planeando un disco!

Sale en septiembre. Se titula Terso. Después de mucho trabajo, interno y externo, emocional, mental, espiritual, llegué a escuchar lo que quería transmitir. La obra, si es por el perfeccionamiento y la autoexigencia, nunca está del todo terminada. Pero hay que saber verle la espontaneidad. Parar a tiempo antes de estropear lo genuino del mensaje, de lo que vibra. Con Pablo Bursztyn y Guido Moretti empezó todo con una amistad y concordancias en búsquedas y afinidades artísticas. Un día les propuse que produjeran mi música. Fueron las primeras personas en mi vida con las que realmente me imaginé un proyecto de este tipo. Admiración y amistad en un mismo lugar. Empecé tímida. Con miedos y un amor incontrolable. Después de haber terminado la película Soledad Rosas, volví de Italia con la certeza de que quería tirarme de lleno a ese camino que veníamos trazando antes de irme. Nos metimos en un trabajo casi de laboratorio sonoro: encontrar nuestra identidad allí dentro sin importar el tiempo requerido. Indagamos en mis temas y también en los que hicimos los tres. Elegimos los que nos conmovieron más y los que sentimos que tienen una verdadera unidad. Ahora sí queremos que esto salga a la luz, compartirlo. Fue hecho con mucho amor, eso es lo que más feliz me hace. Es sincero.

“Reciclo desde hace mucho y cada vez entro más en sintonía con cambios drásticos: no generar residuos de ningún tipo, comer menos carne, cuidar el agua, elegir productos orgánicos. Espero que nos quede tiempo para transformar el destino que tristemente le dimos al planeta”.

Vestido camisero de gasa con intervenciones en lĂşrex, New Dress Rent.

¿Escuchás música por redes en el aislamiento?

Cada tanto necesito un “reseteo” de información para ser honesta. Lo que escucho, leo o veo no quiero que sea porque sí. Necesito estar permeable para algo que, en definitiva, es alimento. La influencia que tiene todo lo que vamos adquiriendo en materia creativa es incalculable, por eso cada tanto intento solo escuchar, leer o ver lo realmente necesario. Ahora volví a los primeros amores, quizá los más fuertes. Tarkovsky, música clásica y La divina comedia acompañan mis días. ¿Cómo te marca el acontecimiento que vivimos hoy?

Me imagino que ninguno de mis conflictos se puede siquiera asemejar a las problemáticas de muchísimas familias, que son de carácter trágico. Pensar en eso me hace pelota, me genera impotencia. Yo tengo salud y beneficios. De todas formas, cada tanto pienso en mi situación y oscilo entre la incertidumbre, que me lleva inevitablemente a decaer un poco por no poder compartir este momento con mis amigos y familia, haciendo todo lo que tenía por hacer, y por otros momentos tengo la fe de sentir que este es un camino que debería permitirnos crecer cualitativamente como seres humanos, para con el mundo y entre nosotros. Que la única manera de cuidarse sea cuidando al resto me parece una premisa necesaria para entender cómo nos gustaría ser y quizá en un futuro no tan lejano podamos respetarnos y cuidarnos entre todos. ¿Qué diría nuestra amada Soledad Rosas si pudiera ver el activismo global de les jóvenes por el clima?

Salvar el planeta es la única alternativa que tenemos. Estoy aprendiendo que cada acción tiene su consecuencia y, por más que sientas que es nimio al lado de todo lo que sucede a nivel global, es algo. Reciclo hace mucho y cada vez entro más en sintonía con cambios drásticos: no generar residuos de ningún tipo, comer menos carne, cuidar el agua, elegir productos orgánicos y reutilizables. Ojalá las generaciones venideras continúen este trabajo que viene gestándose y que cada vez tiene más impacto. Espero que nos quede tiempo de dar vuelta el destino que tristemente le dimos al planeta. En esta época donde se cuida tanto lo que se muestra del estilo de vida, te dejás ver vulnerable.

Las redes sociales son una trampa y una herramienta a la vez, es muy difícil para mí a veces decidir cómo y qué mostrar. No termino de entender, pero prefiero seguir así. Si nos metemos en esa de mirarnos en los demás de manera superficial, estamos cagados. Vera: sos coherentemente inclasificable.

Hago las cosas que me mueven, que a veces se contradicen. Somos eso también. La liviandad y la profundidad hacen que cada cosa, en contraposición, exista. Creo que la coherencia pasa por el propio sentimiento. A veces necesito reírme más que indagar en lo que subyace; para poder estar más suelta preciso ir al fondo de las preguntas o emociones. Probablemente seamos generaciones más lúdicas, sin tanta pantomima de las formas. n

“El desafío que implica criar en este mundo tan complejo, sin dejar de lado los objetivos personales y dando lo mejor de una a los hijos, resulta una experiencia de suma espiritualidad, paciencia y valentía. Es el amor exponencial, es lo más absoluto que viví hasta ahora”.

Chaqueta de smoking con doble solapa, Alexander McQueen. Maxivestido, New Dress Rent. Relicario de oro y diamantes amarillos, Vintage. Maquillaje: Sofi Rubinstein.

BA JA M A R

SuĂŠter de punto, Prada. Sandalia, Miu Miu.

Fotos J OS E FI N A B I E T T I E s tilism o C A R O L I N A O R R I CO

Vestido camisero, Acne Studios.

Fotos M A R C E LO S E T TO N E s tilism o G A B R I E L A S E T TO N

Vestido tipologĂa trench, Tibi. BorceguĂes, Acne Studios.

Traje de dos piezas en bouclé, Chanel.

Morral Fiji, Prüne. Bota Fly, Jazmín Chebar. Mochila, Montblanc.

Vestido lĂnea A en tres capas y botas cortas con taco, Tibi.

Top de seda, Fendi. Falda, The Row. Ballerinas, Miu Miu.

Traje de pantalón, Chanel. Maquillaje y peinado: Juliana Gonzalez @juligonzalezmua. Modelo: Maya Touré @touuraya para The Syndical @thesyndical. Postproducción: Lindo estudio @lindo_ estudio Asistente de fotografía: Bernardo Gasparini.

Cartera Petit Malle, Louis Vuitton. Collar de perlas azuladas con moño de cristales, Fahoma en colaboración con Valentina Karnoubi.

BEL L EZ A ENCON T R A DA

Florero celeste, Paul Smith.

Fotos M A R C E LO S E T TO N E s tilism o G A B R I E L A S E T TO N

Collar en capas con dijes en bronce de la colección Street, María Faure. Aro de esmeralda y oro amarillo, Simonetta Orsini. Pendiente “Shine Fish”, Swarovski.

Riñonera “Afrodita”, Prüne. Reloj con correa de cuero, Longines para Testorelli 1887. Colgante en plata con charme de corazón, Pandora. Anillo con moneda en oro rosa, Simonetta Orsini.

Morral “Fiji”, Prüne. Bota “Fly”, Jazmín Chebar. Mochila, Montblanc.

Bandolera “Sky”, Jazmín Chebar. Botineta “Ava”, Mishka. Máscara protectora reversible con filtro, Copetonas.

Baúl Petit “Malle”, Louis Vuitton. Collar de perlas azuladas con moño de cristales, Fahoma en colaboración con Valentina Karnoubi.

BELL A IM A N

Fotos S O L A BA D I E s tilism o J O R G E L EO N

Fotos M A R C E LO S E T TO N E s tilism o G A B R I E L A S E T TO N

Traje oversize y pantalones, Rapsodia. Brazalete, The Urban Concept.

Esta página: blusa de gasa y falda midi en jacquard de seda, Vevû. Sandalias, Furba. Pendientes, Julio Toledo. Página opuesta: vestido y capa, Anushka Elliot. Pendientes, Julio Toledo.

Esta página: túnica de gasa, Rapsodia. Collar, The Urban Concept. Página opuesta: tapado de gamuza, Bōken. Blusa de lino, Valentina Karnoubi. Jeans, Levi’s. Sandalias, Furba. Monopendiente, Julio Toledo.

Traje, JazmĂn Chebar. Botas, Anushka Elliot.

Túnica, Adrián Brown. Aros, Julio Toledo. Mitones, Guantes de Marinere. Maquillaje y peinado: Ignacio Mora para Estudio Olivera con productors @Schwarzkopfpro.arg. Asistente de fotografía: Edwin Velazquez Panneflek. Modelo: Iman Kaumann para LO Management. Tratamiento digital: Estudio ROJJO.

SOCIEDA D

Al color de la historia

uando Michael Jackson decidió iniciar el camino de blanqueamiento de su piel, proceso que le provocó serias complicaciones de salud hasta su muerte, los medios centraron la noticia en la excentricidad del artista. Pocos vieron en ese deslizamiento hacia la “blanquitud” la metáfora perfecta que sintetiza las múltiples mutaciones de un capitalismo dispuesto a absorber toda diferencia. En ese mismo momento, los afiches de Benetton construían un cínico relato alrededor de una supuesta inclusión de las personas negras, en una campaña que juraba que ante la ley éramos todos iguales. Fue la época del United Colors, así: en la lengua del que coloniza. Pero la ficción de la convivencia pacífica entre diferentes duró poco, más allá incluso del anuncio de Coca Cola donde niños de todas razas prometían un futuro mejor. El mundo pos-2001 fue radicalmente salvaje para todo aquel que amenazara los privilegios blancos, occidentales y heterosexuales. La viralización de las imágenes del asesinato del afroamericano George Floyd a manos de policías blancos en mayo volvió a poner en superficie lo que siempre se trató de barrer bajo la alfombra. El racismo, que nunca se había ido, estaba ahora en la tapa de todos los diarios del mundo, bajo la lógica de la espectacularización mediática. El movimiento Black Lives Matter fue trending topic, a pesar de que desde hace años denuncia los abusos a los que eran sometidos los afroamericanos. Las reivindicaciones que coparon las calles hundieron sus raíces en uno de los momentos históricos más significativos de la resistencia afro de fines de la década de los 60: lo que se conoció como el Black Power, encarnado principalmente en el colectivo Panteras Negras. Para Lautaro León, miembro del Instituto de Historia Argentina y Americana e investigador de ese movimiento: “Si bien el Partido Panteras Negras comenzó su recorrido como un grupo radical, armado y de autodefensa frente a la violencia policial, se transformó rápidamente y dirigió sus esfuerzos de organización y militancia a otros ámbitos. La variedad de consignas y reivindicaciones está presente en su praxis, donde se destaca la implementación de programas de servicios comunitarios gratuitos, que iban desde la creación de clínicas de salud hasta desayunos para niños en edad escolar y asesoría legal para presos”. En ese colectivo, el contenido y la forma iban de la mano. Tanto la vestimenta (campera de cuero, boina y el fusil al hombro) como las consignas (“Todo el poder a la gente”) no solo resuenan hasta hoy y se transformaron en un símbolo de resistencia; también marcaron a varias generaciones y ejercieron una fuerte influencia en el campo de la estética. “Por eso, hay que entender la ocupación y la acción sobre los espacios

El asesinato del afroamericano George Floyd visibilizó una herida nunca cicatrizada. Las reivindicaciones antirracistas llegaron también desde el mundo del espectáculo y la moda. Un mal del que Argentina no está exento. P o r FAC U N D O A BA L

Uno de los retratos mรกs emblemรกticos tomados por la fotรณgrafa Ruth-Marion Baruch durante las protestas de 1968.

SOCIEDA D

La modelo somalí Iman, esposa de David Bowie, se quejó de haber sido alabada en la revista Essence por parecer “una mujer blanca sumergida en chocolate”.

públicos, e incluso la remoción de estatuas, como parte del repertorio de este movimiento que, con mucho éxito, buscó llamar la atención sobre el racismo institucionalizado”, comenta León. Las Panteras Negras convocaron la atención de varios artistas que decidieron plasmar el momento de efervescencia en sus obras. Entre las reconocidas se encuentran los documentales filmados por la genial Agnès Varda que se pueden ver en YouTube, y los emblemáticos retratos de los manifestantes tomados por la dupla Ruth-Marion Baruch y Pirkle Jones. Las movilizaciones en Estados Unidos a partir de la muerte de Floyd también actualizaron una serie de productos culturales que vuelven a meter el dedo en una herida abierta. En la plataforma de arte lalulula.tv se pueden encontrar joyas como el cortometraje Las estatuas también mueren donde Chris Marker y Alain Resnais, ya en 1953, denunciaban la apropiación del arte escultórico africano por parte del colonialismo francés. Un material prohibido durante más de diez años y cortado por la censura de ese país en un tercio de su duración original. En la misma plataforma se puede ver el documental de la artista Carrie Mae Weems, una de las mejores fotógrafas de su generación. Sus imágenes, explica la propia Carrie, “cuestionan el papel dominante que ha jugado en la iconografía el hombre blanco y atienden a cuestiones como el racismo, la lucha de sexos y la identidad personal”. El espectáculo y la moda se hicieron eco de los reclamos. La actriz Lupita Nyong’o denunció a la revista Grazia UK por la tapa donde ella aparecía: habían retocado la textura de su cabello con Photoshop –sin su consentimiento– hasta hacerlo desaparecer. Algo parecido había sucedido cuando la modelo somalí Iman, esposa de David Bowie, se quejó de haber sido alabada en la revista Essence por parecer “una mujer blanca sumergida en chocolate”. Por su parte, Naomi Campbell abrió la Semana de la Moda en París, que se hizo en formato digital, con una remera que tenía la leyenda “Fenomenalmente negra” y dijo que “llegó el momento de construir una industria más equitativa”. La representación de mujeres negras en el sector siempre fue más la excepción que la norma. La exotización llegó hasta el extremo de crear una modelo digital, Shudu, presentada como “la de piel más oscura”. Términos como “blackface digital”, “apropiación cultural” y “blackfishing” se volvieron virales para señalar las prácticas en las que una persona blanca gana dinero a costa de una negra. Nuestro país no queda al margen de la opresión racista. La artista y militante argentina Louis Yupanqui sabe bien

Abajo: la polémica modelo virtual Shudu, creada por un hombre blanco. Página opuesta: las Panteras Negras en acción, denunciando la brutalidad policial a fines de los 60.

SOCIEDA D

“A Argentina le falta muchísimo para poder hablar de una cultura antirracista y no solamente con lo afro, sino también con lo indígena”. Louis Yupanqui, artista y militante.

lo que es cargar en el cuerpo con una doble estigmatización: ser afro y ser trans. Desde su cuenta de Instagram, que ya tiene más de 40 mil seguidores, da batalla a diario contra el racismo. “La opresión sistemática que reciben las personas trans racializadas no es la misma que vive una mujer trans blanca”, dice Yupanqui. “A Argentina le falta muchísimo para poder hablar de una cultura antirracista y no solamente con lo afro, sino también con lo indígena. A nivel legislativo e institucional, no podemos avanzar sin el reconocimiento de los grupos afrodescendientes que viven en el país. Es complejo, pero no imposible, aunque falte para poder tener verdaderos cambios o derechos adquiridos”, remata. El historiador Ezequiel Adamovsky explica en una charla a través de las redes oficiales del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI): “Una característica en el modo en que se construyó este país es que las elites dirigentes propusieron una visión del nosotros que afirmaba que éramos un país blanco y europeo, a diferencia de otros de América Latina. Eso generó múltiples efectos en términos sociales, políticos y culturales”. Asimismo, afirma que a nadie le gusta aceptar que hay racismo porque eso conlleva renunciar a los privilegios adquiridos. “Hay un discurso esquizofrénico en el argentino, donde al mismo tiempo que se niega que haya negros, se los insulta y se los culpa de todas las desgracias del país. Para lidiar con la diversidad racial, se tiende a reconocerlos como minoría y a afirmar sus derechos. Pero eso deja afuera a los que no son parte de una etnia: la mayoría de los argentinos, que son pobres de piel morena y que no tienen una comunidad que los nuclee. Si queremos discutir la discriminación y la violencia, eso inevitablemente implica discutir la clase. Y en ese caso no hay una particularidad étnica”, concluye. Sartre ya lo había advertido a sus compatriotas franceses en el prólogo de Los condenados de la tierra de Frantz Fanon cuando hablaba de que los que estaban en la cocina de la historia pasaron al frente para construir su propio relato. “Las bocas negras se abrieron para reprocharnos nuestra propia inhumanidad”. n

La activista afro trans Louis Yupanqui, referente de la lucha antirracista en Argentina.

FOTO: PAULA ZIEGLER . ESTILISMO: ANDY FERNANDEZ. MAQUILLAJE Y PEINADO: POLI PICO.

BE WELL 1 . PEL O

Informaciรณn en pantalla

2 . ACEI T ES Firmas argentinas

3 . V I TA M I NA La que mira al sol

1. Inspiración y data Desde estilos de autor hasta recomendaciones para rulos perfectos. Registros online sobre pelo.

CORTES Y PEINADOS TENDENCIA Maia Ludueña y Andrea Bejarano cortan, peinan y realizan la coloración de muchos de los personajes jóvenes del momento como Malena Villa, Chita, Flor Torrente, Cazzu, Nicki Nicole, Belén Chavanne, Paco Amoroso y Ca7riel, entre otros. Maia Ludueña trabaja en el equipo de Vardo y es estilista estrella en BAFWeek y Designers. Su perfil es muy interesante por sus indicaciones en cuanto a peinados en casa y coloración @maialudueña y @vardomanagement. Andrea Bejarano, es estilista especializada en rulos y trabaja como peinadora con Jazmín Calcarami y en Kabuki @hairvikinga.

EXPLOSION DE ONDAS El amor y la aceptación de los rulos se convirtieron en un movimiento que habla de mujeres emancipadas. En los últimos años nacieron colectivos que abrazan esta consigna y proponen información sorora a portadoras de pelos salvajes. Para seguir en Facebook. com/groups: Rulos Arg y Melenas Empoderadas. En cuanto a influenciadoras y especialistas: @ruloscultura, que publica imágenes de cortes y peinados con cabello ondulado, rizado y afro; y @puramelena, que milita por un mundo de #MelenasLibres y da guías de cuidados.

2. El poder de los aceites

Fรณrmulas hidratantes para la piel de tres firmas argentinas de belleza sostenible y natural. P O R LO L A M O N T EI R O

BE W ELL

THE BLENDER METHOD LINDA “Empezamos a contactarnos con la herboristería y la extracción artesanal de activos de plantas y flores para el cuidado personal. A partir de esa experiencia me interesó formarme en medicina naturopática”, explica Macarena. En 2015, con Gastón, su pareja, crearon el emprendimiento. Elaboran productos para el cuidado de la piel a partir de ingredientes naturales,

priorizando aquellos de grado alimenticio y de origen orgánico. Sus fórmulas se basan en aceites puros, prensados en frío, macerados o destilados al vapor para optimizar la preservación de las cualidades. Su famoso sérum facial es un concentrado de extractos oleosos vegetales y esenciales que proporcionan hidratación y reafirman el tejido de rostro y cuello. Está compuesto por plantas medicinales como cola de caballo, jojoba, caléndula y lavanda. (Fotografías por Malena Fradkin) somoslinda.com

Inés Chavanne es una estudiosa de la piel. Su experiencia en el mundo de la belleza y la dermocosmética le otorgaron un conocimiento que le permitió desarrollar su propio método en 2018. Junto a su equipo de ingenieras y biólogas crea ítems que resuelven necesidades del rostro a través de un elemento clave: los aceites. “The Blender Method surge de la necesidad de cambiar mi rutina y detectar aquello que

MARIA MAGDALENA

le hacía mal a mi piel. El futuro de la cosmética está en los aceites prensados en frío, sin excipientes y de alta calidad”, explica Chavanne. Uno de los puntos fuertes de la marca se encuentra en la limpieza. El uso de fases aceitosas de sus desmaquillantes de ojos y rostro, además de retirar la suciedad, protege la piel de perder propiedades fundamentales que suelen retirarse de forma agresiva en una limpieza tradicional. Su línea no utiliza conservantes y se realiza de forma manual. instagram.com/ theblendermethod

equipo fundacional de la firma. Cuentan con ocho productos veganos, aptos para celíacos, libres de crueldad animal y sustancias tóxicas para el medio ambiente. Sus fórmulas están hechas a base de aceites vegetales, esenciales y extractos de plantas de diferentes productores locales. ¿Un favorito? El sérum facial nocturno “Néctar” de rosa mosqueta, jojoba, omega 3, 6, 9 y vitamina E, que nutre la piel, la humecta y le brinda elasticidad mientras descansamos. maria-magdalena.com.ar

Se dedica a la elaboración de óleos corporales, perfumes y jabones. “Ofrecemos un alimento noble y nutritivo para el cuerpo, promovemos la generación de momentos para escucharlo y conectarnos a través de un cuidado amoroso”, sostiene Magdalena Avalos, que con Andrea Ormilugue, María Paz y Manuel Sobrado forman el

BE W ELL

3. Vitamina D Indispensable para huesos y dientes, el organismo necesita de la radiación solar para producirla. Pero, ¿cuánta? ¿Existe una exposición saludable?

uando el río suena… agua lleva, según dice el refrán. Y el río suena. La vitamina D es un tema de especial interés en los últimos años, a partir de estadísticas que alertan. Su falta es un problema en el mundo, especialmente entre los habitantes de las ciudades industrializadas. En Argentina no hay números concluyentes, pero como dice la doctora Silvana D’Angelo, dermatóloga y cirujana cosmética: “Varios estudios demuestran que del 50 al 80% de la población tiene algún déficit, y es mayor en el sur del país por estar más alejado del Ecuador y tener menos horas de luz solar”. Lo que dice cobra más significado porque es casi imposible pensar a uno sin el otro: el sol es el actor protagónico en la síntesis de este nutriente fundamental para el cuerpo. “Le debemos la mineralización del sistema óseo a todas las edades y numerosos procesos metabólicos. Es necesario en el cuerpo para absorber el calcio, pero también para el buen funcionamiento de la piel y del sistema inmune y del nervioso”, agrega D’Angelo, también directora del centro de dermatología DS y docente universitaria. La piel es la fabricante principal de vitamina D del organismo. Ella sola genera el 80%; la radiación ultravioleta es el mecanismo que pone en marcha toda la maquinaria. Es cierto que solo oír hablar de radiación alcanza para recordar una larga lista de contraindicaciones referidas a la exposición. Sin embargo, no se trata de desafiar al sol, responsable del envejecimiento precoz y de muchas enfermedades; con solo una toma breve, el requerimiento está cubierto.

“Entre 10 y 15 minutos al día aportan el 80% de vitamina D que el cuerpo necesita, el resto se puede obtener de los alimentos”, agrega la doctora. Pescados, lácteos, algunos cereales, huevo, palta, legumbres y frutos secos son los responsables de originar vitamina D de manera exógena. Eso sí, el aporte de todos ellos es bastante insignificante en relación con lo que el sol puede proveer; habría que comer kilos y kilos. Pero consumirlos siempre ayuda y los suplementos son otra variante que puede servir, aunque como advierte D’Angelo: “No hay que tomarlos sin que lo indique un especialista. El riesgo de hipervitaminosis D suele ser por megadosis de suplementos, no por exceso de sol o alimentos, y podría dañar los huesos y traer cálculos renales, náuseas, vómitos, arritmias, entre otras dolencias”. La producción también está sujeta a ciertas variables. Las recomendaciones no son las mismas para todos los tipos de piel. Las más oscuras no sintetizan tan bien porque tienen menor reacción al sol. Y con la edad decrece la capacidad de procesar esta vitamina. “Las indicaciones deberían ser personalizadas previo análisis de laboratorio para medir los niveles en cada paciente”. La época del año y la ubicación geográfica cuentan, igual que el lugar de trabajo. Otro tema que despierta dudas: ¿hay que tomar sol en todo el cuerpo o alcanza con algunas zonas? Para D’Angelo es “indistinto”, aunque sugiere que las partes que están más expuestas como cara y brazos suelen dar mejor respuesta. Y otro punto a considerar es si la exposición es con o sin protector. “Lo ideal para la mayor producción de vitamina D es no usarlo y disfrutar de los beneficios del sol en un horario prudencial”. Lo que se dice un “permitido”, que mientras genere vitamina D favorece, entre otras cosas, las defensas y el estado de ánimo. n

TEXTO: DORA BECHER.

“Entre 10 y 15 minutos de exposición solar al día aportan el 80 % de vitamina D que el cuerpo necesita, el resto se puede obtener de los alimentos”. Silvana D’Angelo.

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Marea negra, la colecciรณn Primavera/Verano 2020 de Marine Serre.

TENDENCI AS

Política de austeridad Mezclas de equipos de supervivencia, uniformes y hábitos… Mucho más allá de la fantasía ascética, la naturaleza de las últimas colecciones marca una preocupación creciente entre los diseñadores. P o r M AT H I L D E B E RT H I E R

a moda desfilaba con tapabocas, en ese martes lluvioso de febrero. Los anteojos de seguridad y los zapatos de scuba recorrían la pasarela. Cubriéndolo todo como una coraza o una armadura, la indumentaria permitía que el cuerpo se moviera en un medio hostil. Con amuletos, llaves y dijes colgando del cuello o de la cintura, el ser humano preparaba su ascenso desde el fondo del abismo, encapuchado con brocado o puntilla inglesa. Estábamos en el desfile de Otoño/Invierno 2020-21 de Marine Serre. Hacía ya un año, sus figuras posapocalípticas se habían refugiado en los sótanos de la comuna francesa Issy-les-Moulineaux. Trescientos sesenta y cinco días más tarde, la diseñadora las hizo emerger: pasada la etapa de crisis, ¿qué quedará de las personas si no es su creatividad? En las butacas, periodistas, influenciadores y compradores desearon creer en la película de

anticipación, en que la realidad alcanzó a la ficción textil. Estaban enmascarados, en ese martes de febrero en el que el coronavirus se aceleraba.

UN PARTIDO OPOSITOR Crisis sanitaria, guerra climática, conflictos sociales… En un mundo que se transformó en un caos, la austeridad en arte es política. Para algunos, sirve como medio de advertencia. Para otros, como arma de lucha. Abandonar los colores por los tonos neutros, los brillos por materiales sobrios… La historia demuestra que nadie ayuna por diversión. En la Edad Media, algunas órdenes monásticas predicaban el despojamiento en el vestir frente a los excesos de los círculos profanos. Hábitos monacales, capotes, todo monocromático… Lo único que sobresale es la gorguera, un poco más tarde, en el siglo XVI. Los líderes protestantes defendían la sobriedad estética por oposición a la pompa de la iglesia católica y los fastos reales de la corte: “En esta época, el negro, después de haber sido un color chic buscado por los príncipes hacia 1450, se convierte en el color de la austeridad”, explica Denis Bruna, autor, con Chloé

En un mundo que se transformó en un caos, la austeridad en arte es política. Para algunos, sirve como medio de advertencia. Para otros, como arma de lucha. Abandonar los colores por los tonos neutros, los brillos por materiales sobrios… 101

TENDENCI AS

Demey, de Historia de las modas y de la vestimenta. “El negro vestía a los burgueses de los países de Europa que habían adoptado las tesis de la reforma protestante. El protestantismo tenía una verdadera aversión por el lujo y preconizaba el uniforme negro”. Esta voluntad de estandarización de la figura resurgirá justo antes de la Revolución Francesa en plena crisis social: “Rousseau y otros filósofos, pero también médicos e higienistas, acusan a la vestimenta aristocrática de ser demasiado lujosa, demasiado opresora –sigue Brun–. Reclaman prendas más sensatas”.

DISTOPIA O GUIA DE SUPERVIVENCIA Entonces, ¿para redimirse hay que desenfundar el uniforme? Alessandro Michele, John Galliano, Demna Gvasalia, Marine Serre… Si ciertos creadores hoy sacrifican su legendaria excentricidad, es por la voluntad de formular una advertencia. Ponerse en guardia. Las libertades individuales en peligro inspiran desfiles de anticipación en los que lo uniforme remite a las grandes depresiones del siglo XX. Así en Maison Margiela, Galliano invoca a las militantes de las guerras mundiales, enfermeras, miembros de la resistencia, para denunciar el auge de los populismos en la Europa 2.0: “Si usted tiene una voz, es porque esas personas lucharon para que usted pudiera votar”. Veintiún modelos en chaleco de fuerza simbolizan para Gucci las nuevas –y riesgosas– formas de ejercicio del poder: “Nuestra época está modelada por una microfísica de los poderes, que opera molecularmente en el interior de la sociedad: una forma de gobierno extendida que, a través de un conjunto de instituciones, dispositivos y mecanismos de dominación,

impone reglas de comportamiento que los individuos naturalizan”, se lee en el texto de presentación del desfile, que remite al concepto de “biopolítica” teorizado por Michel Foucault: “Estos poderes operan todos los días a través de bloqueos y prohibiciones, interfieren en la libre circulación de los discursos y crean una sociedad disciplinaria: una sociedad que controla, confina y regula la vida”. Un formateo global e insidioso. Contra esto se subleva la moda según el director creativo Alessandro Michele. Por supuesto, el despojamiento vestimentario es también el acto de corrección política de los excesivos, de aquellos que abusaron de la ostentación y consumieron demasiada ropa. O todo lo contrario. Fue un éxito de Phoebe Philo en Céline, de las hermanas Olsen a la cabeza de The Row, y también en recientes colecciones de J.W. Anderson: los vestidos balloon, los tapados trapecio, el cáñamo, la lana hervida, además de esos plumajes de ave de buen augurio… Incluso durante el invierno en París, Demna Gvasalia exploró este concepto de remanente creativo para Balenciaga. Su marea negra plasmaba la crisis de una sociedad posindustrial. De hecho, las primeras filas del set de cine donde se realizó el desfile estaban empapadas –¿de agua o de petróleo?– bajo un cielo digital muy agitado. ¿Hay futuro para quien se destruye a sí mismo? Al paso de las ciento nueve siluetas inspiradas en vestimenta de funcionario, la distopía en hilera dio lugar a un arranque de locura. Los hombros de los tailleurs sonrieron. Y los vestidos de noche practicaron apnea. Ya lo decía Nietzsche: en este planeta cunde el caos, pero en el caos hay muchos cometas por descubrir. n

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TRADUCCION: IRENE AMUCHASTEGUI.

Por supuesto, el despojamiento vestimentario es también el acto de corrección política de los excesivos, de aquellos que abusaron de la ostentación y consumieron demasiada ropa. O todo lo contrario.

Primavera/Verano 2020, Maison Margiela.

DESTINOS

Placeres hedonistas

El Bless Hotel Madrid encarna el lujo contemporĂĄneo de un nuevo estilo de alojamientos que renacen y miran al futuro. En septiembre reabre sus puertas. AllĂ queremos estar. P o r C EC I L I A CO N D E

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Una de las habitaciones más encantadoras del Bless Hotel Madrid: tiene un living independiente y una terraza con vistas al exclusivo barrio de Salamanca.

l concepto de lujo se redefine todo el tiempo. Hace menos de dos años, en Madrid, el grupo Palladium inauguró la cadena Bless Collection Hotels con un alojamiento pensado para viajeros cosmopolitas, buscadores de experiencias únicas, que le escapan al tradicional cinco estrellas. Aquellos que quieren sentirse en casa a pesar de estar 105

en un lugar superexclusivo. El hotel está ubicado en el centro de la milla de oro madrileña: el barrio de Salamanca, a unas cuadras del célebre Parque del Retiro y un poco más allá de la emblemática Puerta de Alcalá. Es uno de los puntos más excepcionales de la ciudad, donde se mezclan bares de moda con espacios centenarios. Las principales tiendas de las grandes firmas españolas están allí: Loewe,

DESTINOS

Etxeko es el único restaurante en Madrid de Martín Berasategui, un chef vasco con varias estrellas Michelin.

Manolo Blahnik, Adolfo Domínguez y Agatha Ruiz de la Prada. Comparten cuadras con Valentino, Chanel, Armani o Louis Vuitton, por nombrar solo algunas de las internacionales. El ADN del barrio sintoniza con el del Bless Hotel Madrid, que cuenta con ocho pisos y 111 habitaciones, y ostenta además el sello de la colección The Leading Hotels of the World. La ambientación estuvo a cargo del arquitecto Lázaro Rosa-Violán. “Disruptivo, histórico y divertido”: así lo catalogó el interiorista, uno de los más solicitados de España. Su misión fue reinterpretar el estilo de las edificaciones de Salamanca. Desde el diseño hasta la distribución de los espacios toman como referencia los años 50. La estética se hace evidente en la fachada y en algunos rincones que se preservaron, como la cúpula o la impresionante escalera caracol del edificio. Hay otros guiños al pasado. El Bless Hotel Madrid supo ser el Gran Hotel

Velázquez. Allí solía juntarse el jet set madrileño en plenos 90. En ese lugar también funcionaba el antiguo bar La Ruleta, donde se sirvieron los primeros gin tonics de la capital hace más de 30 años y cuyo homenaje se refleja en una barra circular ubicada en la gran entrada. El universo en torno al ocio y al placer fue pensado como una impronta distintiva. Etxeko Madrid es el restaurante principal. Martín Berasategui –el único español en atesorar 12 estrellas Michelin– armó una carta de productos de estación que rinde homenaje a la cocina de sus orígenes vascos. Que este hombre esté detrás de la gastronomía del Bless Hotel Madrid no es un dato menor: este es el único espacio que el premiado cocinero tiene hoy en la capital española. También está a cargo de toda la oferta culinaria del hotel, que se completa con el Versus Lively Lounge, el Fetén Clandestine Club –un rincón privado que aloja las mejores fiestas temáticas y hasta tiene su propia pista de bowling– y

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Picos Pardos Sky Lounge, un bar en altura con una vista privilegiada, piscina y cócteles de autor. Entre las últimas novedades están las incorporaciones del espacio de la barbería de la histórica marca italiana Acqua di Parma y de la boutique Tacha, una firma cosmética con una carta de servicios y tratamientos para el rostro y el cuerpo. Además, el hotel tiene el spa Magness Soulful y el gimnasio Fitnic Power. Con el lujo hedonista como leitmotiv, la experiencia en el Bless Hotel Madrid no es completa sin alguna de las propuestas sensoriales como Bathalogy, una terapia de baño de espuma caliente que incluye la elección del aroma, los aceites esenciales, las propiedades del jabón y las sales de baño. O BlessedBed, que permite elegir entre un menú de almohadas y personalizar el momento de descanso. Todo pensado para recargar energías. Después solo quedará salir a recorrer la ciudad. n blesscollectionhotels.com

Todo el universo olfativo de la tradicional casa italiana Acqua di Parma se concentra en un rincĂłn del hotel donde ademĂĄs funciona su barberĂa.

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Dernières volontés

Por AGUSTINA FERNANDEZ SARDO 2

5. Estar cómoda y elegante con las prendas de Claudine, la nueva línea de Ramírez. pabloramirez.com.ar 6. The Ferragnez. Así llevan Chiara Ferragni y Fedez California Sky, la última colección de Fendi. @fendi @chiaraferragni @fedez 7. Edición limitada. “Boss Bottled United EdP”, una fragancia que combina notas cítricas, de menta y de maderas cálidas. hugoboss.com

1. Clásico y contemporáneo. El nuevo bolso “Viva Bow” de Salvatore Ferragamo, diseñado para complementar el icónico zapato “Viva”. ferragamo.com 2. Terminar el look con pendientes de María y Mariola Torres. @mymtorres 3. #LOfficielAccesorios: un par de anteojos de Mishka. mishka.com.ar 4. El aromatizador ultrasónico “Nordic” de The Candle Shop es ideal para generar un ambiente armónico e inspirador. thecandleshop.com.ar

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