Never Enough Mags! #00 Cimientos

historia revista impresa de la

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Para hablar de la historia de las revistas es importante enten der que éstas forman parte de un camino que empezó mucho antes que ellas y que sigue en desarrollo, en constante cambio y evolución. Las revistas, entendidas estas como publicaciones periódicas de más de un día (serían periódicos entonces), de diversa temática, periodicidad, público y materialidad, son un paso más en la historia del diseño y los productos editoriales.

La historia de la revista es la historia de la lucha por encontrar un formato distinto al de los libros y los periódicos, una síntesis del texto ligada totalmente a la imagen; primero a la ilustración y luego a la fotografía. Como todo producto de diseño, los cambios en la producción y el consumo han definido siempre su realidad y pronto se convirtió en un medio único para la exploración gráfica.

Antes de hablar de la revista, como la conocemos hoy en día, se puede considerar un antecedente de ésta la aparición de publicaciones periódicas en forma de almanaques que contenían una variedad de materiales que se entendían de interés para los lectores. Lo que se puede entender como primera revista fue una publicación mensual, Erbauliche Monaths-Unterredungen (Discusiones mensuales edificantes), editado entre el año 1663 y el 1668 por el teólogo y poeta alemán Johann Rist. Aunque pudiese parecer más un libro que una revista, su edición periódica y su contenido en forma de artículos sobre teología, tuvo una gran influencia, extendiéndose como modelo a otros países como Francia y Alemania.

En 1672 aparece en Francia Le mercure galant, de Jean Donneau de Visé, que trataba sobre todo de poesía, junto a otros temas más ligeros. Aunque al principio

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compartió diseño con su precedente alemán, poco a poco fue tomando una forma más relajada en su maqueta, gracias a la combinación de texto e imagen y a una tímida experimentación tipográfica. Con el tiempo cambió su nombre a Le mercure de France, convirtiéndose en una editorial que sigue existiendo hoy en día.

Inaugurado el siglo XVIII, la alfabetización de la población va en aumento, por lo que se comienzan a demandar formatos impresos como las revistas, que se convierten en un elemento cultural decisivo. Un ejemplo de esto fue The Tatler, fundada en Londres en 1709 por Richard Steele, con espíritu de publicación popular, alejada de la seriedad de los temas políticos de los periódicos. Hoy en día, tras ser comprada por Condé Nast en 1901, es una publicación mensual de estilo de vida.

Hasta el siglo XIX las revistas se fueron popularizando cada vez más, si bien al principio entre las clases más altas y, poco a poco, paralelamente a su popularización y bajada de precios, entre todas las capas de la sociedad.

En el año 1842, de la mano de Hebert Ingram, nace la primera revista ilustrada más o menos como hoy la conocemos, The illustrated London news, que incluye ilustraciones a todo color y se hace enormemente popular, marcando el camino de lo que serían las revistas desde entonces. En este sentido, y siempre paralelas al desarrollo de la tecnología de impresión y reproducción de imágenes, la revista se benefició con la utilización de ilustraciones xilográficas y grabados, además de la incorporación de papeles más baratos, la invención de la prensa rotativa y la inclusión de publicidad como soporte financiero. El avance tecnológico siempre ha sido un aliado poderoso que ha acompañado el desarrollo de este medio, facilitando también la experimentación en el uso de diversas técnicas de reproducción de imágenes.

En el cambio del siglo XIX al XX, y a principios de éste, se produce una verdadera eclosión de las revistas, en concreto de las revistas de moda, que marcan el camino de lo que

será la revista como se ha conocido durante todo el siglo XX; tanto de moda como de cualquier otra temática. En muchos países europeos se habían publicado revistas de moda durante el siglo XVIII y XIX, con ejemplos, en Francia sobre todo y unidas a la industria de la moda, como Journal des Femmes (1759), Le Cabinet des Modes (1785), Le Journal de la Mode et du Gout ou Amusements du Sallon ou de la Toillet (1790), Journal des Dames (1979), Messager des Dames (1799) o L’Arlequin (1799). Pero es en el año 1867, con la publicación de Harper’s Bazaar y en el 1892 con la de Vogue, cuando nacen las que serán las cabeceras más importantes del panorama de la moda durante todo el siglo XX. Es además Vogue la que introduce la fotografía en sus páginas en el 1905, inaugurando así lo que será una constante a lo largo de las siguientes décadas: la fotografía se convierte en el medio favorito para ilustrar las publicaciones periódicas. En el caso de las revistas de moda hasta tal punto, que se puede decir que la historia más reciente de la moda está “escrita” y recogida en estas publicaciones periódicas, verdadera biblioteca infinita de este arte y oficio. Los mejores fotógrafos del siglo XX han publicado en las páginas de estas revistas, haciendo llegar al público más general la obra de artistas como Irving Penn, Cecil Baeton, Richard Avedon, Henri Cartier-Bresson, Annie Leibovitz, Helmut Newton, Man Ray, Juergen Teller, David Sims, Steven Klein, Inez & Vinoodh, David Lachapelle, Paul Horst, Guy Bourdin, Peter Lindbergh, Bruce Weber, Steven Meisel…En concreto, hay un momento especialmente revolucionario para las revistas de moda (y las revistas en general), los años (1936-1958) en los que Carmel Snow como editora jefe, Diana Vreeland como editora de moda, Louise Dahl-Wolfe como fotógrafa y Alekséi Brodovitch como director de arte de Harper’s Bazaar, reinventan la revista de moda y la convierten en el tipo de publicación que hoy entendemos como tal. Experimentación en la composición y la imagen, riesgos en forma y contenido; sin este equipo de creativos el concepto de revista no hubiera llegado a ser lo que ha sido.

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Además de todo lo anterior, hay dos momentos clave para las revistas en el cambio del XIX al XX: las vanguardias de principios de siglo, y en concreto el dadaísmo, y la Bauhaus.

El movimiento dadaísta recogió sus postulados en la revista

Dadá, publicada entre 1917 y 1921, editada por Tistan Tzara durante ocho números. En ella es decisiva la importancia del diseño gráfico como medio para reflejar la virulencia antiburguesa del movimiento, curiosamente mediante unos sistemas formales que permitieron la reinserción en la misma sociedad que los había rechazado.

La revolución tipográfica, el collage absurdo presurrealista, el fotomontaje y el diseño de revistas especializadas (única red de información con que contaron las ideas programáticas Dadá) son algunos de los hallazgos que significaron aportaciones tan fundamentales para la evolución del diseño gráfico que hay quienes sostienen que esta profesión nace realmente en estas fechas (Satué, 2012, p. 154)¹.

En la Bauhaus, escuela alemana en la que el diseño toma por primera vez en la historia la importancia y relevancia que adquirirá de cara a su futuro, se impone como categoría disciplinar, se ponen de manifiesto, también en publicaciones e impresiones, unos postulados radicalmente modernos en cuanto a organización espacial, tipografía, imágenes, retículas, estructuras y nuevas formas de concebir lo formal, de los que todavía hoy en día son deudores tanto el diseño, como las publicaciones impresas. En especial, se debe resaltar la figura de Herbert Bayer (1900-1985), diseñador gráfico, tipógrafo, pintor, fotógrafo y arquitecto austriaco, que dió forma a estos postulados en tipografías, anuncios y carteles publicitarios, además de en revistas como la Bauhaus Journal o la propia Vogue. Su utilización de la fotografía en estas revistas, resultó novedosa y revolucionaria, por experimental. En la Bauhaus Journal, publicada periódicamente desde 1926 hasta 1931, se reflejaron las voces más importantes del movimiento, entre otros, Josef Albers, Walter Gropius, Wassily Kandinsky, Paul Klee, László Moholy-Nagy, Oskar Schlemmer, así como Herbert Bayer, Marcel Breuer, Ludwig Mies van der Rohe, Gerrit Rietveld... En la publicación se abordaban los proyectos, métodos y puntos focales de la propia enseñanza, así como los trabajos de estudiantes y profesorado. Dirigida en su momento principalmente a simpatizantes de la Bauhaus, la publicación, editada por Gropius y Moholy-Nagy, convierte en tangible la

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voz de este momento histórico de vanguardia y revolución. El camino iniciado por la Bauhaus se perfecciona en la Escuela Suiza con Jan Tischold y Joseph Müeller Brockman, como se ha explicado anteriormente.

Otro momento decisivo en la historia de las revistas son los dos éxodos de diseñadores que se producen de Europa a EE.UU. en el periodo de entreguerras y tras la Segunda Guerra Mundial. En estos años, nombres como Boris Artzybasheff, con más de 200 portadas diseñadas para la revista Time; Mehemed Fehmy Agha, que asume en 1929 la dirección artística de Vogue e introduce en 1919 la fotografía en esta, además de popularizar la utilización de las tipografías de palo seco; su sucesor en este cargo, Alexander Lieberman, que además fue el director artístico de la prestigiosa revista francesa Vu. Pero sin duda el más importante de todos ellos, por revolucionario e influyente, fue Alexey Brodovitch, mencionado ya anteriormente. En 1934 acepta el cargo de director artístico de Harper ‘s Bazaar, cargo que ocupó los siguientes 25 años. Como aficionado a la fotografía decide contratar a jóvenes fotógrafos como Irving Penn, Cartier Bresson, Richard Avedon, etc. Además de su labor decisiva en la contribución del diseño a las revistas, a la cabeza del diseño de Harper’s, publica Portfolio, una exquisita revista dedicada a las artes gráficas que solo dura tres números, pero que marca un momento decisivo en la historia de las publicaciones periódicas, en concreto además en las dedicadas al diseño gráfico.

Todavía en EE.UU., hay que destacar otras publicaciones periódicas como la revista Life, máximo exponente de la época, en gran parte gracias al empleo que hace de la fotografía, que convierte a la publicación en un fotoperiódico que inventó un género. Si bien, el diseño gráfico en estas publicaciones dejaba mucho que desear y no es hasta los años 50 cuando se comienza a cuidar y a ser relevante.

En las siguientes décadas (años 50, 60 y 70) se produce una explosión creativa en las revistas y publicaciones periódicas, coincidiendo con el progresivo asentamiento del diseño gráfico como actividad profesional y metodológica.

En el diseño de revistas, en cambio, de nuevo el singular olfato de los empresarios americanos ha hecho posible compaginar algo tan difícil en Europa como la fabricación de un producto de consumo de masas con un nivel de exigencia estética elevado y un planteamiento gráfico eficaz. (Satué, 2012, p. 327)2

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Además de la comentada anteriormente, la revista Life, surgen otras publicaciones como Look, que cuida mucho más el diseño gráfico, gracias a la labor de sus dos directores creativos, Allen Hurlburt (discípulo de Paul Rand) y posteriormente, Will Hopkins, que había formado parte del equipo de la increíble y ejemplar revista alemana Twen, de la que se hablará más adelante.

La revista Esquire, que todavía se publica hoy en día, fue otro de los ejemplos que más destacó en los años 50 y 60, bajo la dirección creativa de Henry Wolf, que contaba con las famosas cubiertas de George Lois.

Otra cabecera que todavía se publica hoy en día y que también forma parte de la historia contemporánea del diseño, es National Geographic Magazine, que a través de los años se ha convertido en un referente de las publicaciones periódicas y de una manera de hacer y mostrar periodismo.

En estos años y en esta localización, destaca un nombre decisivo en cuanto al diseño de revistas y al diseño gráfico en general: Milton Glaser, que funda en 1968 New York Magazine. Glazer, creador entre otros hitos del diseño, el logo de I Love New York, o la señalética del metro de la ciudad, basada en el uso de la tipografía Helvética, concibe la revista fundamentalmente como un hecho cultural, idea que plasma en cabeceras como The Village Voice, New West, Cue y The Nation, en las que el contenido es tan importante como el continente, verdadero éxito de sus publicaciones.

Además de estas publicaciones estadounidenses, Glaser trabaja en el rediseño de importantes publicaciones europeas como Paris-Match, L’Express, L’Europeo y Jardin des Modes. Glazer representa a la perfección la introducción en el diseño editorial de la época de dos conceptos decisivos: la utilización de la nueva tipografía suiza y todo el concepto de retícula geométrica que ésta conlleva, además de la maquetación con formato cinemascope de las imágenes. Además de Glazer, otro nombre se hace decisivo en el diseño de revistas de estos años: Massimo Vignelli, cuya seña más destacada es la utilización del riguroso módulo a la fantasía que había caracterizado a las publicaciones americanas. Ejemplos como las revistas de diseño Dot Zero e Industrial Design, o las de arquitectura Oppositions y Skyline, muestran a la perfección las ideas de Vignelli.

Por último en cuanto a estos años y a los EE.UU., hay que destacar la figura de Herb Luballin, diseñador gráfico que, además de multitud de carteles, tipografías y logos que

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han marcado la historia del diseño del siglo XX, es editor y director artístico de Saturday Evening Post, Eros, Avant Garde y U&lc (Upper & Lower Case, para la International Typography Corporation), publicaciones decisivas en la evolución del diseño y las publicaciones periódicas por el uso de los elementos que las conforman: tipografías, espacios en blanco, imágenes e ilustraciones, titulares y textos... Sin la figura y trabajo de Lubalin no se entendería el diseño gráfico de hoy en día.

Durante estos años, en Europa, la evolución de la revista se vive de diferentes maneras según los países. En Francia destaca la importancia de la revista de moda por dos motivos: por un lado, la internacionalización de “lo francés” con revistas como Elle, Vu, por otro lado la plataforma que significaron para el lanzamiento internacional de grandes fotógrafos, como Guy Bourdin, Sarah Moon, Jean-Loup Sieff, Helmut Newton, Roland Traeger, William Kelin…

En Inglaterra destaca una generación de jóvenes diseñadores, contraculturales, psicodélicos, liberados sexualmente y panteístas, con ejemplos como Martin Sharp y su onírica publicación OZ. En otro espectro, pero también cargadas de imaginación y ganas de ruptura, aparecen las revistas Nova, competidora de grandes cabeceras de moda como Elle o Vogue; o las ediciones del suplemento del Sunday Times.

En Alemania, destrozada y hundida tras la Segunda Guerra Mundial, destaca una publicación que ha sido ejemplo e inspiración para diseñadores, tanto por su forma, como por su contenido, la revista Twen, dedicada fundamentalmente a una nueva generación que en los años 50 y 60 se reflejan en América y sus gustos.

En las siguientes décadas, la revista se va especializando cada vez más, en lo que se refiere a diseño y a contenido, utilizando el progresivo avance de la técnica, tanto en aspectos de reproducción de imágenes, como tipográficos, de imprenta y de encuadernación. Ejemplos como la revista Interview, de Andy Wharhol, basada en el protagonismo de la imagen y el gran formato, muestran cómo cada vez más las publicaciones periódicas se orientan a un público determinado, siendo reflejo de movimientos artísticos, momentos estéticos y conceptos culturales.

En los años 80, los lenguajes gráficos propios de las publicaciones periódicas alcanzan cotas impensables en años anteriores, la experimentación se hace más patente

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que nunca. Cabeceras como The Face, de Neville Brody, basada en las posibilidades de la fotocomposición y en el diseño basado en la tipografía y sus descomposiciones, abren una nueva era en cuanto a las publicaciones periódicas que vuelven a recoger el espíritu experimental de las vanguardias de principios de siglo. En este momento, previo a la aparición de Internet y del comienzo del cambio de paradigma de transmisión y consumo de información, existen miles de revistas a nivel mundial. Las publicaciones periódicas han ido asumiendo una serie de características propias dependiendo de su temática y del público al que van dirigidas, un fenómeno de especialización que tiene su reflejo en revistas del corazón, de moda, de estilo de vida, de música, para adolescentes, para adultos, de motor, de deportes, etc., etc. Cada uno de estos “grupos” comparten una serie de características tanto de contenido, como gráficos, como de materialización, construyéndose poco a poco una estructura más o menos fija y correcta de cómo debía de ser una publicación de este tipo. También en los años 80 se debe señalar la revista Emigre, una publicación asociada a una fundición tipográfica (Emigre, Inc.) que abre el camino para las revistas de diseño a partir de ese momento, basándose en explorar y experimentar con las posibilidades de la composición visual. La revista vive tres etapas y se publica hasta el año 2005.

Otra de las publicaciones decisivas de esta década es i-D, revista de moda asociada al punk en sus inicios (1980), que se editaba en formato fanzine y que se ha convertido en una de las cabeceras inglesas e internacionales más importantes de la moda “independiente”.

En los años 90 se desarrollan una serie de publicaciones que encuentran en la experimentación formal su vía de

expresión. La más importante de ellas, Ray Gun, con David Carson como director de arte, es una revista asociada al movimiento musical grunge, del que toma la contracultura y la subversión de las reglas para su expresión gráfica. La intención de Carson es la exploración y experimentación de una composición basada en la ausencia de retícula, así como de las posibilidades formales de la tipografía, llegando incluso a la ilegibilidad, primando la forma por encima de la función en una estructura posmoderna que busca alejarse de la rigidez compositiva que se arrastraba desde la escuela suiza de los años cincuenta.

También en los 90, en nuestro país, hay una explosión de nuevas cabeceras, como la Neo2, revista de estilo hecha por y para diseñadores, que marca las pautas de una modernidad post-movida y que bebe de las publicaciones europeas de estilo y diseño. Además, los suplementos generalistas como El País Semanal, se cargan de buen diseño editorial en una evolución continua que muestra sin cesar el cambio progresivo en los estilos de diseño editorial. En este sentido, el suplemento Tentaciones, de El País, marca lo que será una tendencia que se desarrolló sobre todo en las primeras décadas del siglo XXI y que continúa vigente en nuestros días: la hibridación de formatos editoriales. Tentaciones es una revista en cuanto a contenido, diseño y tratamiento de imagen, pero su formato, su papel y su forma de impresión, son de periódico, dando a la publicación un aspecto confuso y muy atractivo que demuestra las posibilidades de la mezcla de productos editoriales. Otro ejemplo es El Magazine de El Mundo, diseñado por Rodrigo Sánchez. También de formato enorme y con uso sorprendente tanto de la imagen como de la tipografía. El espejismo del crecimiento económico de esos años, se reflejaba en este tipo de publicaciones.

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Actualidad

En el cambio de siglo y en las dos primeras décadas del siglo XXI, que se pueden entender como la actualidad, se han vivido varios fenómenos en cuanto a las revistas, de una manera precipitada y velocísima. En primer lugar se ha producido una progresiva extinción de las revistas generalistas y tradicionales. Internet primero y las redes sociales después, cambiaron por completo la forma de transmitir y consumir información. Hasta ese momento, las revistas habían sido uno de los medios de comunicación más efectivos, para conocer novedades y noticias de temas más especializados. La realidad de la información instantánea y a golpe de click ha hecho que, de una manera vertiginosa, las revistas más generalistas hayan ido desapareciendo, o bien ofreciendo una oferta transmedia, apoyándose en páginas web y en redes sociales. Aunque a día de hoy siguen existiendo revistas generalistas de moda (Vogue, Harper’s Bazaar, Elle, etc.), del corazón (Hola!, Vanity Fair, etc.), semanales (El País Semanal, Icon, etc.), de estilo (GQ, Esquire, etc.), de motor, mascotas, y de temas variados, la realidad es que cada vez se reduce su tirada, sus puntos de venta y el interés por éstas. El cambio de tendencia en la forma de consumir información hizo que poco a poco el público generalista dejase de comprar revistas, los puntos de venta (quioscos generalmente) han ido disminuyendo, lo que hace que sea un fenómeno que se puede entender desde varios puntos de vista.

Al mismo tiempo que se iba produciendo el progresivo declive de las publicaciones generalistas, un “nuevo” mundo de publicaciones impresas independientes ha surgido poco a poco hasta eclosionar en nuestros días. Se pueden llamar independientes porque están editadas por pequeñas editoriales, pequeños estudios o equipos de trabajo, o incluso por personas individuales, la variedad es enorme, pero tienen en común el no depender

de una gran empresa editorial que marca contenidos y estética. Al igual que en el caso de la llamada música independiente, las publicaciones impresas independientes, incluidos los libros, están viviendo lo que se puede denominar como una “edad de oro”, en el sentido en el que cada vez hay más revistas de este tipo, cada vez más sitios especializados en su distribución y venta, online y físicos, cada vez se tratan temas más específicos y “de nicho”, y cada vez llegan a públicos más especializados. Se pueden establecer una serie de parámetros comunes para este tipo de publicaciones, tanto desde el punto de vista de su contenido como desde el punto de vista de su forma.

En cuanto al contenido, si bien se pueden hacer grupos por temas (moda, deportes, literatura, arte, música, diseño, etc.), la característica principal es que cada cabecera es una especie de categoría en sí misma, debido a lo especial y original de la temática tratada. Las revistas independientes suelen ser monográficas, partiendo de una temática general que justifica su existencia, en cada número se despliega un pequeño ensayo sobre algún aspecto específico de este tema general. Por ejemplo, la revista La nueva carne, proyecto de Fuego Camina Conmigo, agencia creativa independiente con sede en Barcelona, es una publicación impresa o analógica (en palabras de sus creadores) cuya temática general versa sobre “los cambios que vive el ser humano en la era digital”, concepto que se ha desarrollado hasta ahora en tres números: Identidad, Belleza y Fé; bajo el claim o eslogan: “seres humanos y sus virtualidades”.

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Los tiempos cambian. El ser humano, también. La nueva carne es una revista para tomar conciencia sobre los cambios que el digital, como un dios caprichoso, nos provoca y a la vez no nos permite asimilar por tenernos demasiado inmersos en él. Por eso mismo la editamos en papel, para que la leas de un modo pausado y atento, libre de clickbait y filtro burbuja3

Se podría decir que, de alguna manera, estas publicaciones, número a número, dan lugar a investigaciones en toda regla. Alejadas de la estricta normativa de la investigación académica (normativas de citación, revisión por pares, normas de estilo, etc.), los temas fluyen y se desarrollan de una manera libre y experimental. La mayoría de estas publicaciones apuestan por lo que se conoce como periodismo lento, es decir, frente a la rapidez de consumo de información en internet y redes sociales, se escogen los beneficios de una lectura pausada e informativa a un nivel profundo. Además, se trata de investigación a la mano de cualquiera, y no sólo de los círculos universitarios o académicos.

Desde el punto de vista del diseño, estas publicaciones son verdaderas plataformas experimentales, recuperando el espíritu de la historia de las publicaciones impresas más punteras, desde el Dada, hasta los años 90 con ejemplos comentados como Raygun. Los elementos constructivos del diseño, sus herramientas, es decir, tipografía, imagen, color, espacio en blanco, retícula, composición, se ponen al servicio de los contenidos, estableciendo un paralelismo entre la experimentación del contenido y el continente. Investigación en el contenido, pero también en la manera en que este se manifiesta gráficamente. Esta experimentación no se limita a lo gráfico, sino que se extiende hasta lo material. Formatos de todo tipo, desde lo más usual a lo más novedoso, tanto por grandes como por pequeños, tipos de papeles, variedad en los acabados, una búsqueda en los tipos de tinta, de encuadernación y de postimpresión. Se trata de toda una investigación en cuanto a las posibilidades de las artes gráficas. Esta experimentación en lo material responde a la idea de que hoy por hoy, la persona que vaya a hacer un desembolso económico en una publicación impresa está buscando un producto especial, un producto de lujo; entendido este como algo que se va a conservar, a coleccionar, y que se va a disfrutar de forma sensorial, táctil, visual, incluso olfativa. El poder de lo real, de lo finito y de

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lo concreto. La felicidad de disfrutar de unos contenidos editados de forma exquisita y presentados en un envoltorio placentero.

Esta experimentación en cuanto a su forma ha hecho que este tipo de publicaciones se conviertan en productos muy demandados por diseñadores, ya que son fuente inagotable de buenas prácticas en cuanto a las herramientas del mismo, además de fuente de inspiración, de imaginación y de referentes. De hecho, muchos estudios de diseño entienden las revistas impresas como productos en los que plasmar y desarrollar su concepto del diseño.

La periodicidad de estas publicaciones también es un aspecto común en ellas. No es que todas tengan la misma, es evidente, pero sí la idea de que ésta no es algo fijo, sino más bien variable, inestable e incluso sorpresivo. Lejos de ser algo que vaya en contra de sus ventas, los usuarios de este tipo de publicaciones lo entienden como un bien añadido. De esta forma podemos encontrar revistas como Gràffica, dedicada al diseño gráfico en toda su extensión, que aparece trimestralmente; Slanted, también dedicada al diseño, de periodicidad bianual (una periodicidad muy común entre las revistas independientes); o incluso ejemplos como Candy, de Luis Venegas, dedicada a explorar el universo de lo transversal, entendido éste como transexualidad y exploración de todo lo no heteropatriarcal, pero desde el punto de vista del arte y la moda, que no tiene una periodicidad fija, en la que la aparición de cada nuevo número es celebrada por sus seguidores. Asociada a esta periodicidad variable, la tirada reducida suele ser también una característica casi general en este tipo de publicaciones.

La forma de distribución también es algo propio de las revistas independientes. Por un lado está internet, que ha sustituido a los quioscos locales con una suerte de quiosco universal en el que conseguir todo tipo de publicaciones. Al igual que ha pasado con la música, en la que nunca antes había habido una facilidad tan increíble para escuchar

todo tipo, además de para descubrir e investigar sobre ella. En este sentido, internet, que ha sido el motivo de la desaparición de este tipo de publicaciones, en su vertiente más generalista, también ha sido la forma de distribución y venta, convirtiéndose en su aliado finalmente. La otra forma de distribución son las librerías y quioscos especializados, establecimientos que han visto el tirón, aunque minoritario, de este tipo de “nuevas” publicaciones.

Atrás quedaron las tradicionales librerías en las que la prensa y las revistas generalistas inundaban cada rincón. Las cafeterías, restaurantes, museos o concept store como puntos de venta han llegado para quedarse, dando paso a nuevas emociones que nutren el acto de la lectura. Las concept store, las tiendas pop-up, la renovación de los quioscos y los nuevos formatos digitales, son los cuatro principales modelos de negocio avistados en el horizonte. El principal objetivo de todos ellos es ofrecer una experiencia de compra de principio a fin, aunando arte, diseño e innovación. Un espacio que es un espectáculo en sí mismo y que aporta al cliente una propuesta de valor creativa totalmente diferenciadora (Parras, 109) 4 .

Por último, la hibridación tanto en la forma como en el contenido es otro de los aspectos que distinguen a las revistas independientes, entendiendo hibridación como la mezcla de conceptos que, a priori, no se supone que funcionan juntos. En cuanto al contenido, se pueden encontrar publicaciones como Suspira, que explora el mundo del terror y el miedo, desde una perspectiva femenina y feminista; o la revista OFF, cuya temática principal versa sobre el arte y el fútbol, mundos aparentemente desconectados. Desde el punto de vista de la forma, las revistas independientes han tomado prestados conceptos más propios del libro y del fanzine, incluso del periódico, en cuanto a formato, tipo de impresión, papel y encuadernación. De esta manera, las revistas independientes también reflejan una característica propia de nuestro tiempo: la mezcla constante y desprejuiciada.

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Herb Lubalin

Herb Lubalin

Texto: Daniel López

En la década de los 50 y los 60 del siglo XX comenzaron a cambiar los usos tradicionales de reproducción tipográfica, basados en la antiquísima producción de matrices metálicas, y sustituyéndolos por la fotocomposición tipográfica.

Esto hizo que se recuperasen tipografías decimonónicas que habían sido denostadas por el minimalismo del movimiento moderno, utilizándose de manera expresionista y experimental; las letras se comenzaron a tratar en todo su potencial expresivo. Una vez más, el diseño evolucionaba y se actualizaba gracias a la técnica y a las nuevas tendencias que superaban a sus predecesoras.

El nombre más influyente y representativo de esta corriente fue Herb Lubalin. Como se puede leer en la Historia del diseño gráfico de Meggs: «Desconforme con las limitaciones rígidas de los tipos de metal de la década de 1950, Lubalin solía cortar sus pruebas tipográficas con una hoja de afeitar y después las volvía a montar. En sus manos, la tipografía se comprimía hasta que las letras quedaban enlazadas y se agrandaban hasta tamaños insólitos; las letras se unían, se superponían y se agrandaban; las os mayúsculas se convertían en receptáculos de imágenes. Las palabras y las letras podían transformase en imágenes y una imagen podía convertirse en una palabra o una letra. Este juego tipográfico atrapa al lector y requiere su participación. Lubalin no practicaba el diseño como una forma de arte ni como un oficio creado en el vacío, sino como un medio de dar forma visual a un concepto o a un mensaje».

Lubalin destacó también especialmente en el diseño editorial, dejando una gran huella en cuatro publicaciones independientes y experimentales que diseñó en los años 60 y 70, poniendo en prácticas sus ideas tipográficas, de imagen y de composición. Tras rediseñar el Saturday Evening Post, publica junto a Ralph Ginzburg Eros, una revista trimestral de tapa dura y lujosa edición consagrada al amor y al erotismo. En ella, Lubalin explora las capacidades de la tipografía y del ritmo dinámico en la utilización de la imagen, a base de cambios de escala continuos y de contraste en

Lubalin

Lubalin no practicaba el diseño como una forma de arte ni como un oficio creado en el vacío, sino como un medio de dar forma visual a un concepto o a un mensaje

› Título: Eros, Fact, Avant Garde y U&Lc (Upper & lower case)

› Edición: Ralph Ginzburg

› Dirección de arte/diseño: Herb Luballin

› Localización: Nueva York, EE.UU.

› Tema: erotismo y belleza (Eros), actualidad crítica(Fact), experimentación visual (Avant garde) y tipografía (U&Lc)

› Años de publicación: 1962 (Eros), 1967 (Fact), 1968 (Avant Garde) y 1974 (U&Lc)

› Idioma: inglés

› Web de consulta: lubalincenter.cooper.edu

el uso de familias tipográficas de palo seco condensadas y de gran tamaño, junto a delicadas familias con serifa. La siguiente publicación fue Fact, en la que se trataban temas y personajes de actualidad de forma crítica y abierta, entendido desde la “verdad” de los hechos. En este caso, el presupuesto dedicado a la revista era bajo, por lo que Lubalin aguzó el ingenio para poder construir desde la sobriedad, presagiando la corriente que dominaría el editorial en unos años 70 en recesión. En Fact el formato era estándar y se usaba sólo la Times roman como tipografía, ahorrando así en medios de diseño e impresión. La siguiente publicación fue Avant Garde, una publicación de formato cuadrado y grandes medios visuales dedicada a la experimentación visual. La publicación nace a finales de los años 60, en un clima de agitación política y cambios sociales, que se reflejan en forma de experimentación tipográfica, visual y de estructura, aplicando libertad y originalidad en la composición de la página. La cabecera de la revista creció hasta convertirse en una familia tipográfica mítica, la Avant Garde. Como última publicación periódica, Lubalin, ya muy centrado en el diseño tipográfico, fue U&Lc (Upper & Lowe case, Caja alta y caja baja en español, en clara referencia a las mayúsculas y minúsculas en el universo de la tipografía), nacida como elemento de promoción de la International Typeface Corporacion (ITC), una fundición que crea el diseñador junto a Aaron Burns, también tipógrafo. La revista presentaba un diseño dinámico y complejo y estaba impresa en formato tabloide. Su popularidad tuvo una gran repercusión en el diseño y uso de las tipografías de la década de los 70.

Lubalin

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Alexéi

*80 antes

Anteriormente, en el epígrafe de las publicaciones de Condé Nast, se ha hablado de un grupo de diseñadores que, procedentes de Europa, cambiaron el curso de las publicaciones al llevar a los Estados Unidos las ideas del movimiento moderno y de las vanguardias y aplicarlas en el mundo editorial, revolucionando el concepto que de este se tenía hasta ese momento. Quizá el más influyente de todos fue Alexei Brodovich que desde las páginas de Harper’s Bazaar, redefinió lo que debía de ser una revista de moda (y por tanto una revista en general) desde entonces y para siempre. Brodovich fue director artístico de la publicación desde 1934 hasta 1958, contratado por Carmel Snow y con la mítica Diana Vreeland como editora de moda, equipo que junto a fotógrafos como Richard Avedon, llevaron la modernidad a las publicaciones de moda. En palabras de Philip Meggs: Aficionado al espacio en blanco y a la tipografía nítida en páginas despejadas y abiertas, replanteó el enfoque del diseño editorial. Buscaba “musicalidad” en el fluir del texto y las imágenes. El entrono rítmico del espacio abierto para equilibrar el texto se activaba mediante las ilustraciones y las fotografías que encargaba a grandes artistas europeos, como Henri CartierBresson, Cassandre, Dalí y Man Ray. Además, Brodovich, enseñó a los diseñadores a usar la fotografía. Su recorte, ampliación y yuxtaposición de imágenes y su exquisita selección de los contactos se lograba mediante un criterio intuitivo extraordinario. Para él, el contraste era un elemento preponderante en el diseño editorial y prestaba mucha atención al movimiento gráfico a través de las páginas editoriales de cada número En 1950 Brodovich diseña la efímera revista de artes visuales Portfolio, una publicación centrada en el diseño y el arte sin

› Título: Portfolio

› Edición: George Rosenthal y Frank Zachary.

› Dirección de arte/diseño: Alexei Brodovich

› Localización: Nueva York, Estados Unidos

› Tema: artes visuales (diseño, arte, arquitectura…)

› Años de publicación: 1950-1951

› Idioma: inglés

› Web de consulta: www.iconofgraphics.com/Alexey-Brodovitch/

precedentes hasta el momento, concebida como un objeto de lujo con una materialidad excepcional a base de técnicas de impresión punteras y papeles de las mejores calidades, sin escatimar en medios ni presupuesto. Paradójicamente,

esa fue la razón por la que sólo se publicaron tres números, la publicación era insostenible económicamente. El diseñador dotó a la revista de una elegancia y una fluidez visual pocas veces igualadas, mediante el ritmo, el recorte de imágenes y el uso del color y la textura. Las imágenes grandes, el espacio dinámico y las inserciones de papeles de colores y con texturas rugosas contrastaban con el papel liso estucado blanco. En su primer número, sólo había tipografía en la portada y en la contraportada, algo inusual para las publicaciones de la época. En el interior, Brodovich ofreció una visión de lo que habían sido sus influencias artísticas y de diseño, las obras que habían conformado su visión creativa. El segundo número cuenta con una portada de Charles y Ray Eames y el tercero ofrecía al lector unas gafas especiales para visualizar ilustraciones en 3D. A lo largo de los tres números de la publicación,el concepto cinematográfico estaba presente en sus páginas, entendido éste como un ritmo cambiante y dinámico, nunca monótono, que confería a la revista un movimiento interior que se apoyaba en las imágenes de grandes fotógrafos, en experimentos fotográficos con una gran carga conceptual y en collages e ilustraciones.

Brodóvich

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Brodóvich

“Picuetos”, patidifusos y agitando nuestras naricillas a lo Embrujada nos ha dejado el segundo número de Sabat, una revista sobre brujas. Derrochan sensualidad (a juzgar por las imágenes), viven entre nosotros y algunas de ellas se han juntado en plan aquelarre para convocar una revista que, a buen seguro, comentarían en la “pelu” la bruja de Blair y Maléfica: “si es que Salem ya no es lo que era”.

¿Entonces, existe una revista sobre brujas hoy en día?

Nosotros pasamos de hacernos exactamente esa pregunta a sorprendernos muy gratamente. No es por presumir, pero hemos visto muchas revistas (de muchas) y, que una en particular llegue a atraparte y enamorarte, es decir mucho. Máxime teniendo en cuenta que la temática, de entrada, no resulta convencional en absoluto (aunque algo tengamos en Rayitas azules de brujos y brujas).

¿La razón? Sabat escapa con solvencia de los convencionalismos que cabría esperar de un producto de estas características. Carece de impronta pulp, no se acerca a la estética del cómic, ni tira de recursos de carteles de pelis de terror ochenteras. En pocas palabras, se aleja de tópicos en los que hubiera resultado muy fácil caer.

¿Un ejemplo? Los artículos de estilismo fashion están cuidadísimos y su ambientación es impecable, lo cual no es de extrañar teniendo en cuenta que su editora, Elisabeth Krohn, viene del mundo de la moda. De hecho, el proyecto encuentra sus raíces en Instagram (¿habrá una red social en la que la estética tenga más protagonismo?), donde podemos encontrar ejemplos como #witchesofinstagram (que os recomendamos “bichear” un poco).

Bruja y mujer, y a mucha honra

Por otro lado, la brujería se trata desde el prisma de ser mujer y de explorar caminos poco transitados en la feminidad, como pueda ser aceptar su lado más oscuro. Dicho así podría sonar a que estamos ante un recetario de pociones y conjuros (en plan revista gastronómica, pero con croquetas de vudú como entrantes), pero para nada. Sabat es una suerte de experimento antropológico y recopila cómo se manifiesta la brujería en distintos ámbitos geográficos y culturales.

Y es que no es lo mismo una meiga en mitad de un bosque gallego a lo Blair Witch Project, que una noruega nórdica “jeviata” modelo armario empotrao. Bromas aparte, Sabat desprende cuidado y detalles ocultos por doquier. Para empezar, un precioso encarte que anticipa el juego lleno de magia y encanto que está por venir, disfrazado de revista.

Este segundo número, dedicado a la figura de la madre (The Mother issue), constituye la segunda etapa de un trío basado en la tradición pagana de la “triple diosa”. La primera fue la Doncella (The Maiden issue) y finalizará con la Arpía (The Crone issue), previsiblemente en marzo del próximo año. Esta forma de organizar los distintos ejemplares, muy del gusto indie, potencia aún más la simbología omnipresente en Sabat.

Tocada por la varita de la magia editorial

Sabat no sólo emplea unos acabados de impresión excelentes (y sorprendentes), sino que los ejecuta con la sabiduría de la bruja de Blancanieves, y el savoir faire de la carismática Úrsula. Todo en aras de incentivar lo oculto y esconder mil detalles a lo largo de todo el ejemplar. De esta forma, sus responsables llevan el ocultismo al terreno de lo explícito en lo que a imaginería gráfica se refiere.

Y como una imagen vale más que mil invocaciones, os presentamos algunos detalles al más puro estilo editorial: fotos (fruto de una aterradora sesión en Estudio Mierteran) y sus correspondientes pies.

Maquetación y composición

En lo que a composición con imágenes se refiere, Sabat alterna imágenes a sangre y enmarcadas. Además del recurso de las páginas transparentes al que hemos hecho alusión arriba (gif mediante), son muy frecuentes los juegos compositivos con distintas dimensiones, planos y, como no, metáforas visuales.

Por su parte, la maqueta en sí contribuye a generar interés y utiliza una aparente maqueta de 3 columnas, que se multiplica acorde con las necesidades del artículo. Los márgenes exteriores son muy escasos y esto, unido al empleo de columnas pegadas al borde externo y al espacio en blanco en los márgenes interiores, aporta un rollete muy dinámico que contrasta con la sobriedad del blanco y negro. Sutilidad reticular muy de nuestro gusto.

Sabat trata la brujería desde la perspectiva de la magia blanca y las diversas manifestaciones culturales y estéticas que ésta genera a lo largo y ancho del mundo.

Además, en lo que a recursos editoriales respecta, se ve que nos han dado algún brebaje porque nos hemos enamorado mucho del neoclasicismo de los destacados. Sobre ellos recae una doble lectura en muchos de los artículos (vamos, que puedes seguir el reportaje a través de los destacados y obviando el resto del texto, si vas con prisas). También muy acertada la fórmula de preguntas sangradas en las respuestas en las entrevistas. Aportan una aura de puro diseño de libros.

Y no nos olvidamos de la tipografía, of course. Sabat, al igual que la anterior protagonista de esta sección, American Chordata, es parca en el uso de tipos y prácticamente emplea sólo dos: la Larish Alte (de Radim Pesko) y la Albertus (de Berhold Wolpe). Esto contribuye a generar personalidad y aporta una aproximación más clásica y sobria, acorde a su vez con la temática y la impronta general de la revista.

Por cierto, un detalle que nos ha encantado es que los nombres de las tipografías, así como sus creadores, vengan enumerados en los créditos. Y no sólo eso, también el papel empleado. Otra muestra más del buen gusto de Cleber Rafael de Campos, su director de arte.

¡Enhorabuena! Si no le damos bola a las tipos los diseñadores, entonces ¿quién?

Y es que, como ha quedado patente a lo largo de todo este post, Sabat eleva el cuidado de todos los detalles a la enésima potencia. Tanto es así, que incluso el teaser que desarrollaron para el lanzamiento de este número, se aleja de los típicos estándares. Entre la musiquilla siniestra de fondo, y la cámara en mano a lo Lars Von Trier, se agradece que alguna de las chicas se ría de vez en cuando, que si no vaya canguelete.

Sabat demuestra, por encima de cualquier consideración, que cualquier temática, por poco común que pueda resultar a priori, puede plantearse de forma atractiva y dar lugar a todo un señor “revistón”.

› Título: Sabat

› Eslogan: no tiene

› Edita: Elisabeth Krohn

› Nacionalidad: Inglaterra

› Tema: fusión de brujería y feminismo, arquetipos antiguos y arte instantáneo.

› Periodicidad: bianual

› Año de publicación: 2018

› Formato: 20,2 x 28,5 cm

› Web: www.sabatmagazine.com

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texto e imágenes: Rayitas azules

No teníamos ninguna presión de las editoriales o agencias de publicidad que hacen de la revistas algo más comercial o que encaje en esa estética.

Sabat es oscuridad llena de luz. Es la voz de muchas mujeres que, bajo la impresionante envoltura de esta revista, claman su papel en el mundo como brujas. Es una exploración constante de este camino poco transitado por la sociedad. Es feminismo, crecimiento, comunidad y, por supuesto, un canto a la estética tan particular que destilan las amantes de la wicca en todas sus manifestaciones.

Hemos querido ahondar en ciertos aspectos de Sabat, que cuenta con tres números a cada cual más elaborado, a través de las propias palabras de su creadora, Elisabeth Krohn. La oportunidad de hablar con ella nos ha dado mucha perspectiva sobre la gestación, desarrollo y nacimiento de este proyecto.

¿Por qué una revista sobre brujas?

La brujería tiene una gran historia visual. Actualmente, una nueva generación de fotógrafas, artistas y escritoras están explorando este legado desde un punto de vista fresco y contemporáneo, además de comunicar su trabajo vía online. Trabajando con el concepto de lo antiguo y lo actual, tratamos de crear una especie de microcosmos alrededor de una comunidad colaborativa, además de una publicación que es una fuerte experiencia sensorial. Estamos muy interesados en las revistas desde el punto de vista del diseño, y Sabat es un gran ejemplo de ello. ¿Cómo decidiste la impronta general de Sabat? ¿Fue algo muy meditado o surgió más natural?

Ha sido un proceso muy natural. En 2015 realicé un zine (llamado Sabat) sobre brujas adolescentes -“pop vs real”- cuando estaba haciendo mi primer proyecto para mis estudios universitarios de Periodismo. Desarrollando el proyecto, mientras seguía con el curso, descubrí en Behance el trabajo de Cleber de Campos, diseñador de Sabat, y entonces pensé que encajaría genial: me encantó su portfolio y, cuando le escribí contándole sobre mi proyecto de brujería, pilló el concepto de inmediato. Recopilamos inspiración, probamos ideas y diseñamos el número Maiden como mi proyecto final. El diseño ha ido evolucionando a lo largo de los tres números, pero queríamos conservar el concepto global. Siempre existe esa sensación de “tendría que haber hecho esto o lo otro” después de acabar un número. Tratamos de incluir estas ideas en cada número siguiente. El feedback de amigos/as diseñadores/as y lectores/as también nos llevó a poner atención a detalles que habíamos olvidado o que podrían funcionar de otra manera.

krohn

¿Cómo planeáis el diseño de un artículo en concreto (shooting, ilustración, etc.)? ¿Es algo muy cerrado desde el principio u os dejáis llevar?

Para el primer número, sabía que encontrar colaboradores y convencerlos iba a ser un reto. Cleber y yo estábamos haciendo la revista por primera vez, y era obvio que no se trataba del concepto de revista de estilo al uso y, en cierta manera, la estábamos haciendo según avanzábamos. Recolectar contenido ha ido volviéndose más fácil con cada número (como el público y el interés ha ido creciendo, no teníamos que persistir de la misma manera y obtuvimos muchas colaboraciones buenas). Esto, además, nos mantiene creativos. La mayoría de las veces, una pieza de ocho páginas está basada en una colaboración o en contenido relacionado que nos inspira. ¿Ha sido muy distinto diseñar Sabat respecto a otros proyectos editoriales?

Cuando diseñas una revista independiente, no hay excusas para hacer un mal proyecto. No teníamos ninguna presión de las editoriales o agencias de publicidad que hacen de la revistas algo más comercial o que encaje en esa estética. Si hubiésemos hecho algo poco atractivo, habría sido completamente nuestra culpa. Dicho esto, tuvimos la suerte de encontrar una vía colaborativa de trabajo en la que el feedback ha sido siempre una forma de mejorar nuestro producto. Con Sabat, sentíamos que nuestra meta final era la evolución de nuestros conceptos iniciales. Como si fuese un ritual, abrazamos el proyecto y conseguimos algo que ni nosotros mismos esperábamos. Somos un producto para un nicho, en el que nosotras y nuestras colaboradoras también formamos parte de ello, lo que ayuda mucho a la hora de decidir el proceso de creación. ¿Cuáles son los artículos de los que estás más orgullosa desde el punto de vista del diseño? Me encanta el póster desplegable del número Mother, ilustrado por María Torres, y la sección #letitgo de Crone, nuestro número más reciente.

Bajo tu punto de vista, ¿qué necesidades o motivaciones crees que puede llevar a una mujer a abrazar esta forma de vida? ¿Qué consideras que puede otorgar la wicca a la vida de las brujas en el contexto actual?

Para las chicas que están creciendo a día de hoy, este mundo heteropatriarcal de insaciable consumismo tiene un cierto aire de incertidumbre, tragedia, incluso distopía. Parece que tenemos todo un océano de opciones, pero al mismo tiempo, ¿estamos cambiando algo? ¿Realmente podemos hacer y estar donde queramos? ¿Tenemos poder? Haciendo eco de los sentimientos de muchas mujeres, la

elisabeth krohn

brujería moderna sabe de las estructuras que mantienen a la mujer en su lugar. Esta mujer anhela un mundo menos patriarcal y cínico, y usa nuevas herramientas para burlar al sistema. Pero también nos ofrece otro camino, uno que es místico y está orientado a la naturaleza, en la que nos adentramos en nuestro propio poder femenino como mujeres y brujas. Por antigua que sea, la brujería, resuena con muchos valores en la sociedad actual: individualismo, igualdad de género, empoderamiento personal y ecologismo, y se convierte en un pasadizo sorprendentemente progresivo hacia la iluminación espiritual.

Dado que la práctica de la brujería parece llevarse a cabo en un ambiente más en solitario y a escondidas, según la creencia general, ¿hasta qué punto crees que Sabat puede ayudar a romper tabúes en la sociedad y, a su vez, formar comunidad entre las brujas? Asimismo, las redes sociales como Instagram han provocado que muchas brujas muestren al mundo parte de su día a día y de su forma de ver la vida. ¿Crees que esta exposición al mundo les ha beneficiado? ¿Esto ha ayudado a que algunas mujeres se sientan más seguras de saber que forman parte de un todo?

Creo que internet y las redes sociales son una gran herramienta para difundir muchos aspectos (quizá no todos) sobre la brujería. En su dimensión online ofrece inspiración e información al instante, así como un sentimiento de comunidad. Existe un mundo muy vibrante y variado para la bruja que está naciendo, de ahí a que se haya convertido en mucho más fácil entrar en ello en la última década.

Hablando de redes sociales, ¿qué perfiles recomendarías a los usuarios para comprender mejor el feminismo y su estrecha relación con ese “lado oscuro” de toda mujer?

The Hoodwitch @thehoodwitch de Bri Luna, bruja estadounidense, es un buen punto de partida para aprender lo básico sobre astrología, tarot y cristales. Me gustaría recomendar a una de nuestras colaboradoras, @nyxturna, por su estética y sus ideas.

krohn

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¿Crees que la creencia de la Triple Diosa como «doncella», «madre» y «anciana» que, por cierto, da nombre a los tres actuales números de Sabat, es un reflejo del empoderamiento de la mujer en todas y cada una de las fases de su vida?

Quise explorar la feminidad a través de estas tres perspectivas haciendo eco a la Triple Diosa, deidad neopagana, y a las fases de la luna, ya que pensé que sería una manera interesante de abordar las perspectivas cambiantes y los nuevos desafíos que enfrentamos en las diversas etapas de la existencia femenina. Aunque también podría ser una analogía para todos los microciclos vida-muerte-renacimiento de nuestra vida cotidiana.

Vuestra visión sobre la brujería tiene un mayor peso sobre la luz y el aspecto positivo de la misma. ¿De alguna forma esto ayuda a abrazar la liberación y el poder que hay en cada mujer, pese a no sentirse una bruja en cualquier de sus manifestaciones? Sí, la brujería es un poderoso símbolo de resistencia, individualismo y libertad para todas las mujeres, no sólo las que se identifican ellas mismas como brujas.

A aquellas y aquellos que nos hemos convertido en amantes del universo Sabat, nos gustaría pensar que este camino no acaba aquí, y que podremos alimentarnos todavía más de lo que hemos aprendido en estos tres números. ¿Cuál es vuestro siguiente proyecto ahora que el ciclo de estos tres ha terminado?

Estamos trabajando en una reencarnación de Sabat que explorará temas similares, aunque en un formato ligeramente distinto. ¡Pronto habra más noticias!

krohn

› Título: Candy

› Eslogan: The first transversal magazine

› Edita: Luis Venegas

› Nacionalidad: España

› Tema: arte y moda desde lo transversal del género

› Periodicidad: cambiante

› Año de publicación: 2015

› Formato: 24,5 x 34 cm

› Web: byluisvenegas.myshopify.com/collections/candy

ahora

El reducido número de personas que suelen trabajar en la elaboración de cada número de una revista independiente (y que las diferencia de las generalistas, usualmente con una gran plantilla detrás), se convierte en algo paradójico en Candy, una publicación pensada y creada por Luis Venegas, editor y director de arte. Es evidente que cuenta, para la elaboración de la publicación, con colaboradores como fotógrafos, escritores y diseñadores, pero cada número de Candy es una obra personalísima del editor, mediante la que se expresa artísticamente, dejando ver sus ideas acerca del mundo de lo transversal (entendido desde el género), lo transexual, desde una amplia perspectiva que acerca este mundo a un concepto elevado y aspiracional, tratándose de una manera inusual y novedosa, alejado de la

tradicional lucha política, pero cargado de reivindicación y de ruptura también política; como no puede ser de otra manera. Todo esto se manifiestan en contenidos de moda, arte, temas sociales; todo desde la perspectiva de alguien con una cultura extremadamente profunda de la historia de las revistas. Cada número de Candy es una declaración de amor al papel impreso. Resulta sorprendente como Venegas ha conseguido que colaboren con él y su publicación algunos de los más importantes fotógrafos asociados a revistas como Vogue, así como intelectuales y artistas de fama mundial. Candy se ha convertido, con sus ediciones limitadas de 1500 ejemplares por número, en un referente de las publicaciones independientes que se conciben como un objeto de lujo, deseado y difícil de conseguir.

Ana

ahora

La moda llegó a su vida a través del dibujo. Cuando era niño, a Luis Venegas (Vitoria-Gasteiz, 1979) le gustaba pintar superhéroes. Concretamente, superheroínas. Adoraba inventar trajes para ellas. Años después, con 11 o 12 años, su tío “favorito” le regaló un álbum de Ana Belén: Géminis. En él, aparecían los populares singles de “Sólo le pido a Dios” y “La Paloma”. Lo que más impresionó al actual director creativo y editor independiente no fueron las melodías del CD sino la fotografía de su portada. Quién había capturado la imagen, quién había firmado el elegante vestido que lucía la cantante y quién la había maquillado. Venegas no tardó en descubrir que detrás de este trabajo estaba el artista Juan Gatti y la magnífica diseñadora Sybilla y iguió tirando del hilo y se dejó embelesar por el mundo de la moda.

Estudió en la Escuela de Artes y Técnica de la Moda de Barcelona. Viajó a París para hacer prácticas en el estudio de Thierry Mugler. Y cerró el círculo trabajando con Sybilla, la mujer que despertó su interés por la moda de forma indirecta.

De vuelta en Madrid, el de País Vasco se siente atraído por el mundo editorial. Crea varias revistas independientes –Fanzine 137, EY! Magateen,

The Intim Mates News Paper y The Printed Dog– y en 2009 nace la reina de la corona, la revista Candy. Esta publicación defiende el concepto transversal, inventado por él mismo, con el ánimo de celebrar el travestismo, la transexualidad, las personas no binarias y la androginia. Por sus páginas han desfilado personajes como Lady Gaga, James Franco o Miley Cyrus, fotografiados por artistas tan ilustres como Terry Richardson, Steven Klein o Inez and Vinoodh.

Con motivo de su décimo aniversario, Venegas ha lanzado ‘The C☆ndy Book of Tranversal Creativity’, un libro que reúne los mejores contenidos de los primeros 12 números de la revista. Una publicación que continúa siendo la única en su estilo a nivel internacional. A su vez, este año con motivo del Día del Orgullo, la firma Levi’s ha invitado al creativo a customizar su icónica Trucker Jacket y a compartir en su web una exposición virtual que nos lleva por el mundo de Candy.

Hablamos con él sobre el nacimiento de la revista, cómo ha cambiado con los años, de su colaboración con Levi’s y de la leyendas que han pasado por Candy.

¿Cómo te llega la idea de hacer la revista Candy?

Tenía la espinita de hacer una revista de moda; el germen que me había introducido en el mundo de las publicaciones. En 2008 empecé a darle vueltas a la idea y pensé: “No quiero que sea una más”. Me di cuenta de que había un grupo de personas, lo que llamo el mundo transversal que engloba a manifestaciones muy distintas que yo metí bajo el mismo paragüas. Incluía a drag queens, a transexuales, gente de género no binario... Estas personas a nivel de estilo y de imagen siempre habían sido muy inspiradoras para el mundo de la moda. Sin embargo, **nunca se les había reconocido esa contribución. ** Candy nace en plena crisis, ¿cómo afrontas esta situación?

Como editor independiente mi trabajo siempre está en crisis. No tengo un grupo editorial detrás que me apoye, que me pague todos los meses y que, en cierto modo, me permita relajarme. Estoy solo y tengo que luchar porque las cosas salgan adelante. Y con el tema de la recesión pasó un poco igual. Ahorré para sacar el primer número sin anunciantes. Igual soy un inconsciente y cuando he querido hacer algo, sencillamente lo he hecho. Tenía la sensación de que era una buena idea. Además, mi amigo Jimmy Paul, uno de los peluqueros del mundo de la moda más relevantes, me terminó de animar: “Luis, tienes que hacerlo ya porque es una idea que si está en el aire, cualquier persona podría quitártela”. Y no me lo pensé.

¿Por qué elegiste la palabra Candy? La palabra Candy es una palabra que se queda fácil en la memoria. Además no tiene género. Significa ‘caramelo’ en inglés. Es suave, dulce y pegajosa. Tiene un punto de inocencia pero también es sexy. Es algo universal. Tiene una cualidad fonética que funciona muy bien. Y a la vez, representaba a un icono tan potente como Candy Darling. Ella siempre me ha gustado mucho. Transmite la idea de glamour clásico de Hollywood. A lo largo del tiempo se me han ocurrido otros nombres que podrían haber funcionado. Por ejemplo, Divine. Sirve igual para hombre como para mujer y habría tenido relación con la drag queen de John Waters.

¿Crees que ha cumplido su objetivo a lo largo de estos últimos diez años? En cuanto a visbilidad e inclusividad, sin duda. Cuando Candy publicó su primer número era casi impensable que una persona transgénero formara parte de una revista. Y mucho menos que fuera portada. Principalmente en una revista de moda. Ahora es al revés. Es extraño que una publicación mainstream no incluya a alguien transversal. Y ya era hora. Estoy muy contento de que Candy haya contribuido a ese cambio. Creo que queda muchísimo por hacer, a nivel de derechos y respeto a muchos colectivos que se muestran en Candy. No digo que Candy haya sido el precursor de este progreso. Creo que ese éxito viene de los activistas que han luchado por conseguir ese respeto que todo el mundo como ser humano se merece.

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¿Cómo un editor independiente consigue ese arsenal de profesionales y artistas? Tenía cierto bagaje por mis publicaciones anteriores y contaba con la credibilidad de algunas personas con las que había trabajado. No he crecido como Anna Wintour, la hija de un periodista famoso que tenía fácil acceso a una red de contactos. Mi madre es ama de casa y mi padre trabajaba en la construcción. Nadie en mi familia se ha dedicado a esto nunca. Creo que todos los logros de la revista se los debo al trabajo duro. Tengo mucha voluntad y cuando algo me gusta trabajo mucho en ello y no me importa dedicarle todo mi tiempo. Una vez, viendo un documental sobre la vida de Tom Ford, me marcó una de las frases que decía: “Si estoy despierto, estoy trabajando”. Si estoy despierto, mi cabeza está registrando información que a lo mejor luego puede servir para alguna campaña o para mis revistas. Creo que los engranajes de la creatividad en mi mente no paran. Aunque también pienso que es algo que le pasa a mucha gente.

¿Y quién te gustaría que protagonizase la próxima portada de Candy? Ya sea vivo o muerto.

Candy Darling, por ejemplo. Aunque hay tantísimos... Quizás peque de supersticioso pero prefiero no decirlo en voz alta y que luego se me gafe o se me adelanten. O que el mensaje que le estás mandado al universo se gaste. Aunque sí te confesaré que me encantan todas las actrices que protagonizan la serie ‘Veneno’.

Hablando de ‘Veneno’, la serie creada por Javier Calvo y Javier Ambrossi sobre la vida de Cristina ‘La Veneno’, ella llegó a colaborar con la revista Candy. De hecho, fue el último reportaje que protagonizó. ¿Cómo fue esta sesión?

Fue una sesión increíble. Todo se lo debo a Valeria Vargas, escritora de la biografía de la Veneno, ‘Ni puta, ni santa’. Ella lo gestionó todo para que sucediera. Yo conocía a Cristina de verla en televisión pero en persona fue mucho mejor todavía. En las 3 o 4 horas que estuve en la sesión, me pareció una persona increíble que no paraba de contar historias graciosísimas.

Se lo pasó muy bien durante las fotos. Fue súper profesional. Se probó todo lo que le llevó la estilista, Alicia Padrón. Recuerdo que durante la sesión le dije: “Cristina, estoy muy contento de haberte conocido porque eres una reina”. Y ella me contestó: “Valeria sabe que soy muy bruta pero cuando voy a según qué sitios y me tratan con respeto, me comporto como una señora”. Y le dije: “No Cristina, como una señora no, como una reina”. Y ella contestó: “Bueno, pues como una reina”.

La idea era que fuera portada del número pero a los pocos meses falleció en circunstancias muy dramáticas. Me dio pudor al estar todo tan reciente. Seguramente a ella le habría gustado pero me parecía que podía resultar oportunista. El tema se terminó publicando pero dentro de la revista de una forma más “discreta”.

175 luis venegas

‘The Candy Book of Tranversal Creativity’ es un libro muy esperado por todos los fans de Candy y del mundo de la moda. Diez años han dado para muchas publicaciones, ¿cómo ha sido el proceso de selección?

Quería que fueran contenidos potentes. Pensé en un cantante que publica su disco de grandes éxitos pero justo lo contrario. Quería detenerme en las otras cosas que habían pasado más desapercibidas. Los grandes éxitos son fáciles de buscar en Google. Por ejemplo, la portada con James Franco o de Lady Gaga. Pensé que sería genial recopilar las otras cosas, los éxitos más pequeños y atemporales Junto al lanzamiento de este libro, has anunciado la colaboración con Levi’s por el Orgullo 2020. Un rediseño de la clásica Trucker Jacket con la imaginería de Candy. ¿Cómo ha sido esta colaboración? Desde el año pasado habíamos hablado de que estaría bien hacer algo para el Orgullo pero nos sobrevino una pandemia. **Dejamos pasar el tiempo y retomamos la iniciativa creando una cazadora especial.** Levi’s es una marca que me gusta y que siempre que han hecho colaboraciones con firmas queer y han sacado colecciones en apoyo al LGTBI+ han donado todos los beneficios a causas relacionadas con ello. Es una marca con la que me identifico y que tiene un comportamiento bastante ético. Me da pena que se haya quedado en una edición limitada de 20 cazadoras. Habría sido genial hacer 200. Mucha gente me ha preguntado dónde podía comprarla.

“El mundo editorial es un lugar mejor

a

never enough mags!

diseño

never enough mags!

texto: Daniel López imágenes: Typeone

never enough mags!

› Título: Type 01

› Eslogan/Claim: no tiene

› Edita: Typeone (Amber Weaver)

› Dirección de arte/diseño: Studio ground floor

› Localización: Londres, Reino Unido.

› Tema: tipografía

› Periodicidad: Bianual

› Año de publicación: 2019

› Formato: 22 x 29,7 cm

› Idioma: inglés

› Web: type-01.com/typeonemagazine/

Que las publicaciones impresas independientes no dejen de surgir desde ámbitos del diseño absolutamente experimentales y novedosos, es algo muy remarcable, ya que representa un modo de entender el diseño que busca otros medios en lo clásico, otras velocidades y otras formas de comunicar. Es el caso de Type01, una revista impresa sobre tipografía y su relación con el diseño gráfico, entendido este de una mane ra muy amplia. La publicación se desarrolla dentro de TYPE01 Ltd, un espacio de creación y reflexión acerca de la tipografía y de cómo esta se relaciona con la creatividad y los constantes cambios que acontecen en el mundo del diseño. Además de la revista, la plataforma cuenta con una web, una serie de tutoriales sobre tipografía, Femmetype, una plataforma para dar a conocer y poner en valor el diseño tipográfico hecho por mujeres, además de una plataforma de distribución de tipografías Type Department.

Toda esta creatividad, exploración, experimentación e investigación en tipografía convierten a este proyecto en algo muy celebrado en el mundo del diseño, ya que la tipografía es uno de los pilares esenciales de este campo; pero además, siempre son bienvenidas las aproximaciones desde una perspectiva nueva y rompedora, con especial énfasis en el trabajo hecho por mujeres, algo muy necesario también en este campo de la creatividad.

De esta manera, Type01, con sus cinco números editados hasta ahora, se ha convertido en una publicación de la que ha blan y a la que se refieren muchos de los estudios y editoriales más punteras del universo del diseño. Su enfoque experimental y de investigación en la tipografía, que incluye una potente idea de ampliar la experiencia de lectura analógica y estática hacia lo dinámico y el movimiento, mediante tecnología de códigos QR, hacen que la revista se entienda como un puente entre el mundo digital y el de la impresión, como un campo de pruebas sobre qué es la tipografía, cuáles son sus límites y qué ocurre en los intersticios de éstos. El movimiento en diseño, lo cinético, se ha convertido en una realidad imperante que comunica de manera directa con el usuario, por lo que la publicación busca la relación, aparentemente imposible, entre lo estático y lo cinético a través del papel y las tecnología de lectura ampliadas.

En palabras de Chloe Gordon de Print: TYPE01 Magazine es una publicación que evoluciona con los tiempos. Han ideado una forma de fusionar lo analógico con lo digital que permite a los lectores ver imágenes en movimiento a través de las páginas aparentemente estáticas, con la ayuda del diseñador multidis ciplinar con sede en Hamburgo Giang Nguyen, también conocido como Gydient. La tecnología de código QR ayuda a transformar el diseño estático en cinético, siendo pioneros en una experiencia inmersiva en impresión. Encontraremos diseños impactantes, tipografía de gran tamaño y soluciones gráficas tan interesantes que quedaremos cautivados a lo largo de las publicación.

I definitely think that having role models influences things, which is why

amber weaver

diseño

Celebrating the work of womxn who are part of the type industry, Femme Type is the inclusive platform championing representation and change – both on and offline. Founded by Amber Weaver as a rebuttal to the male dominated industry she found herelf in, Femme Type offers support and valuable opportunities to type designers identifying as women in the industry. Whether that be in the form of a feature or commision, Weaver’s platform is here to reset the industry - one womxn at a time.

“The graphic design industry is massive, there’s many subsections of it. One of them is being type design/ typography which we noted a few years ago was quite male-dominated in comparison to womxn in those career roles,” commented Weaver. “Why do I think this is so? Type Design in particular was a male dominated craft many years ago in the age of hot metal press. Social roles dictated that womxn would stay at home and raise the family etc but naturally this has changed over the years so I think it’s just in a state of recovery I guess. I definitely think that having role models influences things, which is why we spotlight the people that we do. We hope to inspire and resonate with someone so that they pursue a career in type.”

But how can we as an industry help in this fight for equality? Weaver has a simple answer: think about who is behind the work. “Some would argue that it’s about the work and not the person, but I think that’s wrong. It is very much about the person, they are the author of the work. So why should they need to be disconnected from their creation? It just doesn’t make sense to me,” she added. “Let’s say you’re creating an exhibition about Graphic design, what kind of message does it send out to the masses if all the artists chosen are men? Perhaps years ago there weren’t as many womxn designers, but now there is, so there’s no excuse. By adding this tiny and effortless step into a design process, where appropriate, it can make a huge difference and help make the industry a better place.”

We caught up with the ex-University of Arts London Chelsea student on Femme Type’s main goals, what she’s most proud of, and how to get involved with the industrychanging platform.

never enough mags!

When did you launch Femme Type?

I launched Femme Type in April 2019 so it’s been just over a year since it was created, but it had been in the pipeline about a year before that. Femme Type is owned by media company Type 01 ltd.

What are Femme Type’s main goals?

Over the 13/14 months this initiative has been active, I’ve tried to consistently reflect on what it stood for. When Femme Type turned a year old, I was able to have another reflectivity session with myself and came to the following conclusion; Femme Type stands for three main things: recognition, collaboration and application. Promoting the recognition of the talented designers that we spotlight has been embedded in Femme Type’s mission since the beginning and I think it will always remain. Secondly is collaboration, not all opportunities come from external sources. We love creating our own. So throughout the year and moving forward, Femme Type aims to collaborate with creatives from its network to create meaningful and exciting projects, events, and products.

Finally, application. This one was the last to come about but is something I feel perhaps the most strongly about. It’s all well and good to feature an artist’s work on an INSTAGRAM page such as our own. Yes it improves exposure and may get great engagement and lead onto other things, but pushing the application of the designers’ work into a commercial environment is another thing entirely. It enables the designer to capitalise on the hard work they’ve done, and acts as a beacon of inspiration to those who are studying or perhaps are already established designers. It shows that their skills were chosen for their value and improves the balance of men/ womxn in the type industry, sending a message to younger creatives of our generation that it’s possible for them to do just the same. Anything we do, always relates to these missions in some way. I’m sure they may change as we grow or perhaps they’ll be more, who knows.

How do womxn get involved with Femme Type?

Whether it be about an article feature or a commission, we tend to do a lot of the scouting/ reaching out ourselves. However, we have a trusty ’submit’ button right at the top of our homepage that will allow you to send us an email directly to our main mailbox, where we review every submission that comes through. Or you can simply give us a friendly DM on Instagram, we reply to all messages where we can.

Why is the graphic design industry still so ‘male’ dominated?

The graphic design industry is massive, there’s many subsections of it. One of them is being type design/typography, which we noted a few years ago was quite male-dominated in comparison to womxn in those career roles. Why do I think this is so? Type Design in particular was a male dominated craft many years ago in the age of hot metal press. Social roles dictated that womxn would stay at home and raise the family etc. but naturally this has changed over the years so I think it’s just in a state of recovery I guess. I definitely think that having role models influences things, which is why we spotlight the people that we do. We hope to inspire and resonate with someone so that they pursue a career in type.

How can the creative industry help combat this issue?

Whether it be curating an exhibition or event or article, implementing a step where you review who you are featuring is very important. Is it inclusive? Is it representative enough? Some

never enough mags!

would argue that it’s about the work and not the person, but I think that’s wrong. It is very much about the person, they are the author of the work. So why should they need to be disconnected from their creation? It just doesn’t make sense to me. Let’s say you’re creating an exhibition about Graphic design, what kind of message does it send out to the masses if all the artists chosen are men? Perhaps years ago there weren’t as many womxn designers, but now there is, so there’s no excuse. By adding this tiny and effortless step into a design process, where appropriate, it can make a huge difference and help make the industry a better place.

What advice do you have for young womxn type designers hoping to succeed in the industry?

Work hard and work smart. Find a mentor and learn from them. Being in the industry will teach 10x more than you did at university. Find something you’re truly passionate about. We have millions of resources online to better your skills, utilise them.

What are you most proud of?

I’m most proud of everyone who has engaged so wonderfully with our platform and helped it grow over this past year. Every share, re-post, submission and open-mindedness to engage with the projects we do has been invaluable. Plus, our editorial volunteers who have so kindly donated their time throughout the COVID-19 lockdown to help keep us going.

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Camila Cardeñosa is one of our DesignbyWomen collaborators who has curated and written a series of inspirational features showca sing Spanish speaking female designers based in Latin America and Europe. Her first article is based on a conversation with her friends – past fellow students from Central Saint Martins in London – the influential and groundbreaking Yarza Twins.

I met Eva and Marta Yarza more than seven years ago whilst we were all studying for an MA in Visual Communication at Central Saint Martins in London. Eva was in my class, and we connected quickly, as there were only a few of us who spoke Spanish. Marta started the course a year later. I remember seeing them walk through the uni versity together and was always amazed by the way in which they approached their projects and found a unique, irreverent graphic language.

One of my strongest memories from our that time was a feedback session with one of our tutors, Christian Küster, who recommended that we should always think outside the box. Eva and Marta followed his advice in all ways. Since then, their work has always stood out as different, experimental, and one step ahead of current trends, ma king them a reference point in the design world. Their work is widely known and has become an inspiration for many people.

Today they both still live in London. When we talked, Eva told me that living in the city has encouraged them to be brave and prag matic. The beginning was not easy, but over time they have learned to be bold, knock on doors, showcase their work, and value them selves. In our conversation, Eva said something that has really stuck with me: “You are the one that sets your own limitations”.

Undoubtedly, this approach combined with a great deal of talent, creativity and determination has allowed them to work with a wide array of clients around the world, including Adidas and Smirnoff. To day they have clients in Sweden, the United States, the Netherlands, and Spain (their home country). In 2016 they were included in Print Magazine’s list of the 15 most exciting designers under 30.

Catching up with the Yarza Twins has been fantastic. In addition to remembering our time as students, it was another opportunity to learn from them. We chatted about their studio, their inspirations, and the path that has led them to establish themselves as an upco ming force in the design field.

I hope you enjoy reading this interview, as much as I enjoyed cat ching up with them!

When did you realize that you were interested in design and that you wanted careers as designers?

Eva: I didn’t know what design was until I started studying at university in Madrid. I studied Fine Arts and wanted to specialize in restoration., But the classes were so boring that in an act of desperation I enrolled in another class that still had an opening called “Introduction to Design.” That’s when I discovered what design is.

Marta: I realized it when I was working as a technical architect in Madrid. The moment I graduated, the financial crisis began, and I couldn’t find a job in the architecture field with a salary that covered my rent. That is why I considered a change and decided on the design pathway. I discovered it through Eva and soon it became one of my passions.

Tell me about your careers so far. What were the steps to get where they are?

When we finished the MA degree at Central Saint Martins, neither of us found it easy to get fellowships or jobs so we decided to start personal projects. For a year we worked in restaurants and stores until Eva got the opportunity of a fellowship at the Sagmeister & Walsh studio in New York.

In addition to letting us see up close how an exceptional studio works, this opened many doors for us. After working in other studios in London, we both felt that it was time to open our own studio and that’s how we started three years ago.

We divide the work every day and love discovering that we have different points of view of each project. We have very different approaches to de sign work and that adds a ri chness to our collaboration.

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One of you studied fine art and the other architecture. How do you combine these two fields in graphic design?

We have both always had an aptitude for the arts. Let’s say that architecture has helped us to define our spatial design, organization and 3D work, while Fine Art has helped us with colour selection, ideas generation and technique.

What is it like working together? Do you divide the work, or is it a constant collaboration?

As we are a small studio we always need to collaborate, otherwise one of us would have nothing to do while the other would be working all the time. We divide the work every day and love discovering that we have different points of view of each project. We have very different approaches to design work and that adds a richness to our collaboration.

What do you enjoy most about being designers?

We like the freedom to create trends and to choose which emotions our work will evoke among the audience. We also like to see our clients happy when they launch products with an image that we are proud of.

You both took the MA course at Central Saint Martins. Why did you decide to do it in different years and not together?

Eva finished her degree in Fine Arts first and then started her Masters immediately after that. Marta finished her Technical Architecture degree a year later and then went on to study at Saint Martins.

Being a woman, has it impacted on your careers?

Yes, both positively and negatively. During the first year of her Fine Arts course, Eva heard her teacher say to a

classmate, “women are very hardworking, but the real artists are men.” This sentence highlights one of the many prejudices that women encounter in the field. We have had to prove ourselves twice as much as men to be considered their equal.

However, we have observed a very big change since the ‘Me Too’ movement. In the past, only one female designer would have been promoted out of a mixed field as compared to several male designers. Nowadays, there are many platforms that share the work of other creative women that, in our opinion, deserve to be showcased. Being a woman is complicated, especially if you work in design studios. In London you sometimes see that the senior creative jobs are mostly taken by men, while accounting or project managing jobs are primarily women.

We believe that little by little this will change, but it is important to heighten awareness of these inequalities and obstacles and to support and listen to young female designers.

In your experience, do you think there is equity and diversity of men and women in the world of design? Today we believe there is more equality. But this change has only occurred when we, as women, have consciously protested against the lack of it. It is true that in the 90s no one could refer to more than one female designer or female artist. But thanks to so many people who are working to give visibility to women, this is changing. On a personal level when we give lectures, we have noticed that there has recently been a conscious effort to book as many women as male speakers.

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If you could go back and start over, what advice would you give to your young self?

We would tell ourselves that we should be braver and louder. Also, to trust ourselves and that practice makes perfect. We would also say something to ourselves about having patience and dedicating time to ourselves. – Life can’t be just about work.

Many people in the creative industry suffer from imposter syndrome and doubt about their abilities. Have you experienced this? And, if so, how do you handle it?

We believe that everyone at some point in their life suffers from impostor syndrome. Sometimes it is difficult for us to promote our work or speak confidently about our worth.

I think it’s important to realise that we all experience the same anxieties and to look back at your path and see that everything you have worked for is what has led you to where you are today.

How do you get inspired? What are the first steps to start a new project?

When we receive a new brief, we usually think about two or three ideas that we will present to the client. In general, we can be inspired by anything: nature, art, etc.

When we present the first ideas to our clients, we don’t usually focus on design work because we want to leave the door open to a thousand possibilities instead of closing possible routes for the project at the start. We have talks with the client in a very close way.

Personal projects are very important to you. Tell me about one in particular that you remember? What is the favourite?

We love the American Apparel project because it opened up so many doors for us. We really enjoyed the process of doing it.

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Have you had a female role model, or a woman who has accompanied you on this path and helped you grow in your career?

Yes, without a doubt our mom and our older sister. They have never put limits on us in terms of being what we want to be.

As artists, we have always admired Frida Kahlo. She was such a strong, confident woman but also so vulnerable too. Also, Jane Goodall who as a young woman went alone into the jungle to study gorillas. In the design world Paula Scher has of course been a light on the way.

Today’s girls have it slightly easier. Not only do they have great examples from their generation like Malala and Greta, but also the characters in books and TV series have begun to show women and girls as more complex and stronger personalities, rather than the weak and secondary characters we grew up with.

What advice would you give to women who are currently thinking about starting a creative career?

We would tell them that they will experience many rejections but that they must have confidence in themselves. Also, we would mention a quote from Picasso that had a big influence on us; it was something along the lines of that every time he had a new idea or an inspiration, it had to find him when he was working.

For both of us it means that if you want to improve and give your best you must be determined to work hard.

Nobody is going to give you anything unless you are the child of a millionaire. Many people put off that great project for years and years while making excuses. When we started, we worked more than 11 hours a day without days off (or weekends) and that is how we found time to do our personal projects.

Where do you see yourself in 5 years?

We hope to be happy and above all without masks. We hope to live in a cleaner world with a very impressive design industry.

What designer, artist, photographer, creative inspires you?

Paula Scher, Jessica Walsh, Annie Leibovitz, Marina Abramovic, Yayoi Kusama, and so many more…

Can you recommend any creative women currently working in design whose work you find inspiring.

Marta Cerdá, Eva Cremers, Verònica Fuerte (HEY Studio), Mireia Ruiz (Cocolia).

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When we present the first ideas to our clients, we don’t usually focus on design work because we want to leave the door open to a thousand possibilities instead of closing possible routes for the project at thestart. We have talks with the client in a very close way.