Alzheimer El Envejecimiento Normal El envejecimiento no es una enfermedad. Los cambios que se producen son pérdidas de funciones naturales, disminuye la masa muscular, la piel se arruga, hay desmineralización ósea, la menopausia, etc. Los procesos involutivos normales del cerebro se inician alrededor de los 60 años pero no se manifiestan de forma clara hasta los 70-75 años. En la mayoría de los casos los cambios son muy discretos y se compensan con la riqueza de las experiencias acumuladas. Los trastornos cognitivos más frecuentes asociados a la edad son: • Disminución de la rapidez del aprendizaje • Dificultad en la resolución de problemas • Acortamiento de la capacidad para retener información nueva • Disminución de la capacidad visoespacial y de fluidez verbal • Cambios en el carácter, en el ritmo del sueño y remisión a menudo de los reflejos posturales.
¿Existe alguna forma de retardar el envejecimiento cerebral? Se acepta que la principal estrategia para enfrentar el envejecimiento cerebral es el tratamiento correcto de aquellas condiciones que se consideran como factores de riesgo. Las posibilidades terapéuticas en las enfermedades neurodegenerativas dependen estrechamente del diagnóstico precoz, es decir, de poder intervenir antes que se establezca la pérdida del capital neuronal y que se agoten las reservas funcionales. En este sentido, las posibilidades diagnósticas han aumentado gracias al avance de otras disciplinas como la física, la electrónica, la informática, la química, la bioquímica y la genética. Estas tendencias se profundizarán en el futuro en forma exponencial. Finalmente, cabe mencionar el adelanto en las posibilidades fármacoterapéuticas dirigidas a prevenir la muerte neuronal.
La demencia: Una enfermedad ligada al envejecimiento Durante las últimas décadas se observó un cambio en el mundo desarrollado hacia niveles de vida más exigentes y elevados, con mayores cuidados de la salud, y tasas de natalidad más bajas. Más individuos llegan a mayor edad y más individuos tienen enfermedades degenerativas asociadas al envejecimiento como la demencia. El principal factor de riesgo para padecer una demencia luego de los 60 años es la edad, pero “es imposible prevenirse de seguir cumpliendo años” La epidemiología ha descubierto una nueva realidad: los individuos corren un riesgo significativo de
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