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Juan M. Byron. El dispensario antituberculoso y Anibal Corvetto

osWaldo Hercelles (1874- ¿?)

este médico limeño fue uno de los más importantes estudiosos de la verruga peruana. en 1900 sustentó se tesis de bachillerato, titulada Historia patológica de la verruga peruana, publicada luego en la colección anales universitarios, Hercelles fue, además, fundador de uno de los primeros laboratorios clínicos en el perú. aquí lo vemos en una fotografía publicada en 1903 en la revista actualidades.

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Quien cultivó por primera vez en el mundo en el año 1927 la Bartonella bacilliformis fue Oswaldo Hercelles.

Una comisión norteamericana presidida por Strong afirmó que la fiebre de La Oroya (o verruga maligna) y la verruga eruptiva eran entidades nosológicas distintas, a pesar de su igual ubicación geográfica. Esta tesis de la Universidad de Harvard halló plena aceptación en las publicaciones extranjeras. Correspondió a los investigadores peruanos Telémaco Battisini (nacido en 1895), Daniel Mackehenie y Pedro Weiss (nacido en 1893) entre otros, probar experimentalmente la unidad de la verruga. En el Congreso Médico de La Habana en 1928, Edmundo Escomel sustentó la teoría peruana y ella fue unánimemente aprobada por la asamblea.

En abril de 1930 la Facultad de Medicina de Lima confirió el grado de doctor honorario a Daniel Mackehenie, médico desde 1902. Fue leído entonces su trabajo “Mesénquina y enfermedad de Carrión”.

Enrique León García recordó en esta oportunidad que varios años atrás, había él expresado que la historia del periodo científico en el estudio de la verruga peruana debía dividirse en cuatro etapas. La primera correspondía a la época de Daniel A. Carrión. La segunda estaba dominada por la aparición de la obra de Ernesto Odriozola con el cuadro clínico de la enfermedad. La tercera debía ser la del descubrimiento del germen de la infección verrucosa que llevó a cabo Alberto Barton. La cuarta correspondía a quienes hicieron la patogenia de ella, llave para su curación. Daniel Mackehenie y Pedro Weiss (expresó en seguida León García) han atacado valiente y esclarecidamente en la solución de este problema colocándose en puntos de vista netamente fundamentales, embriológicos, anatómicos y fisiopatológicos que venían a ser los asientos para las soluciones definitivas.

Daniel Mackehenie fue una personalidad original. Huraño y modesto, no apreciado debidamente, de indudable honradez científica, laborioso y constante, se caracterizaba, además, por su bondad y por su sencillez. Su cultura era extraordinaria y abarcaba inclusive la literatura clásica y moderna. Con una inquietud mental ilimitada, llegó a aprender a solas varios idiomas, incluyendo el alemán, el ruso y, en parte, el japonés. A través de su vida desempeñó cargos en la Oficina de Sanidad del Callao, la Compañía de Seguros Sud América y el Hospital Arzobispo Loayza. En este establecimiento fue jefe de los laboratorios.

La reciente incorporación (1980) de Pedro Weiss como miembro honorario de los institutos Nacionales de Salud fue un merecido homenaje a quien en algunos han considerado “Padre de la Patología en el Perú”.

Juan M. byron. el dIspensarIo antItuberculoso y aníbal corVetto.- El 8

de mayo de 1895 falleció en Nueva York el bacteriólogo Juan M. Byron. Había nacido en aguas peruanas el 29 de febrero de 1860, siendo bautizado en el Callao. Poeta y autor teatral (como que fue autor de tres obras, Vamos a Antofagasta, La de a mil, Soledad y La mesa parlante) ingresó a la Facultad Medicina como estudiante en 1877. Durante la guerra con Chile actuó n el servicio de sanidad e hizo las campañas del sur y del centro. Fundó con Leonidas Avedaño La Crónica Médica en 1884, año en que obtuvo su título profesional. Viajó a Italia en 1885. Trasladó luego su residencia a Nueva York y desdeñó la fortuna en el ejercicio de su profesión para especializarse en trabajos de laboratorio en el campo de la bacteriología al lado del famoso especialista Loomis. Llegó a cultivar el bacilo de la lepra y murió accidentalmente al hacer experimentos con el bacilo de la tuberculosis. Fue considerado un mártir de la ciencia. En marzo de 1916 la Beneficencia de Lima inauguró el dispensario antituberculoso que llevó su nombre. El primer director de este establecimiento fue Aníbal Corvetto nacido en 1876, con título profesional en 1903, primer cultivador de la Tisiología en el Perú, hombre de amplia cultura general y gran finura de trato.

el Mal de la VerruGa. daniel alcides carrión (1875-1885) estudió la sintomatología y la naturaleza del mal de la verruga a finales del siglo XIX. tras su muerte, el doctor ricardo l. flórez retomó dichos estudios y comprobó la reacción del cuerpo humano frente a esta enfermedad. en esta fotografía de 1858 se aprecia a aniceto de la cruz, el primer paciente afectado por la verruga estudiado en el perú.

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