La geografía como ciencia del espacio terrestre tiene su historia, en lenguaje común, o, mejor dicho, tiene su arqueología del saber de esta ciencia. De la que vamos hablar, por lo menos como boceto, más abajo. Empero, lo que importa señalar, desde un principio, es que en las condiciones de ruptura epistemológica, empleando el leguaje de Thomas Kuhn o de Gaston Bachelard, que desata el sisma de la física, cuando se cruza el umbral de la episteme moderna, ingresando a la episteme compleja, la geografía, con toda su acumulación y desplazamientos epistemológicos, sus corrientes inherentes, afronta el desafío de cruzar también el umbral. Pues, a pesar de sus mutaciones, desplazamientos y transformaciones, tanto como geografía cuantitativa, así como geografía humana, también como geografía libertaria, todavía se encuentra dentro de los horizontes de la episteme moderna.