Nostalgias de amor Y Corporeidades intensas Sebastiano Monada
Índice: Prefacio
3
Nostalgias de amor Nostalgias de Miraflores
4
Primer amor
6
Búsqueda desiderativa
11
En el umbral de todo
13
Muchacha de tez morena
20
Inscripción en la piel de mi memoria
26
Una tarde ardiente
30
Momento
33
Corporeidades intensas El cuerpo
40
Lenguaje entre cuerpos
42
Sofía
51
La guerrera
54
Flor solar
56
Mujer adolescente, impetuosa
62
Sacrificio amoroso
66
Prefacio
Los poemas presentados, en la primera parte, forman parte del poemario Nostalgias de amor. El poemario también contiene parte del poemario Corporeidades intensas. El poemario Nostalgias de amor congrega poemas escritos hace unos años, recordando a amores perdidos. Empero, recuperados por la memoria, mediante la labor maravillosa de actualizar el denominado pasado. En principio, formaron parte del Poemario del retorno; ahora son presentados aparte, en su propio espacio. Como ocurrió con Alboradas crepusculares, se trata de la segunda versión de los poemas. Incorporando, además de la influencia de Cesar Vallejo, la musicalidad gitana de Federico García Lorca y las metáforas abismales de Vicente Huidobro. Lo que corresponde a Corporeidades intensas, nombre también de un poemario publicado con anterioridad, también van a ser seleccionados un grupo de poemas, afines al tema de los cuerpos y, de la misma manera, se optará por una segunda versión.
Entonces estamos ante un poemario que titula Nostalgias de amor y Corporeidades intensas. La reunión de ambos poemarios se debe a la continuidad temática del amor, con su consecuente asidero en la potencia del cuerpo. La revisión y la segunda versión de los poemas seleccionados de Corporeidades intensas, fue más difícil, pues se trataba de poemas que se inscriben con expresiones cortas; buscando, en la primera versión, más que el ritmo, como acontece con las segundas versiones, la imagen rápida, corta, que integre la expresión poética, que se quiere transmitir, de una manera ágil. En principio se quiso dejar los poemas tal como estaban, pues su estructura respondía a otra forma de escritura de la poesía. Sin embargo, hubiera faltado en el poemario la continuidad del ritmo.
Nostalgias de amor
Nostalgias de Miraflores
¿Dónde estarás? Alguna vez tus ojos aguijonearon mi apertura Avispas incandescentes, fuegos de San Juan Ternura escolar, piel fértil Origen de las preguntas ¿Te amé o solo era mi afirmación de macho? Me gustaría estar contigo nuevamente Amar el tiempo en tus sensaciones experimentadas Desconocer el caprichoso invento masculino Ser sólo una inscripción en las líneas de tus manos
Primer amor
Todos los tiempos en el ahora Mezclados como matorral, floresta tejida Abigarramiento portentoso de resonancias Como eco de tambores tensados
Recuerdo tus ojos celestes, incandescentes órbitas Iluminando socavones insondables de mi cuerpo Prendidas de semblante mancebo Cabellos claros envueltos en una cola Dejando frente descubierta, lucidez rozagante Como apacible paisaje visto desde la montaña Finos cartílagos, semblante venerable Como claro de luna en piano Cautivador cuadro, candor y mocedad escolar
Me mostraste tu mano para leer tu hado En surcos trazados desde tus ancestros No supe decirte, tus caminos se encontraban conmigo En el descubrimiento continental de nuestros cuerpos Preferí callar Tímido adolescente ante posibilidad de incandescencia Crepitante de tu ensayo inicial y el mío
Viniste una mañana con mandil blanco de paloma Cuando retorné a la tierra, oikos maternal, cobijo nuestro Tampoco pude responderte jamás
Creyendo en importancia de compromisos legendarios Errando en la apreciación insostenible No hay nada más importante sino componenda voluptuosa De tu piel y la mía develando el secreto Del caos y del cosmos entrelazados En abrazos cómplices en compulsiva Y plañidera retribución inmensa
El goce de la entrega y de la desaparición en el otro Renuncia de uno mismo en diseminación vaporosa Reivindicación de alteridad transgresora Asombrosa donación pasional complementada Pedestal franco de otras entregas venideras
Raíces de pareja, causas colecticas Pertenecemos a memorias de poblados amores Por exploraciones sigilosas y aventureras Amor a vulnerable condición humana Amor a la tierra vista al nacer por tiernos ojos Iniciando su vuelo de pichón temeroso Y piel desnuda sin huellas ni inscripciones Territorio denso en climas embriagantes Como senos absolutos sabiendo a miel del paraíso Amamantando nuestra hambre cosmopolita
Te amo en mis recuerdos reanudados
Persiguiéndote perseverante en mi memoria devota Recuerdos cíclicos curvados de nostalgias Dibujando tus ojos inmaculados Como cielo limpio y despejado Rostro inocente y hechicero Magia de expresión simétrica Comunicando por gramática facial inefable Manos suaves surcadas por trayectos hilvanados Recorridos genealógicos habituales Señalando un encuentro no acontecido
Te amo en esa noche entregándome en tus manos El tesoro guardado por ceremonias familiares Te amo en tu guardapolvo blanco Como luz de luna divagando en agua arqueada Blandiendo como bandera tu virtud preservada Una mañana de mis retornos cíclicos
Ahora vuelvo en recuperación del tiempo perdido A encontrarme contigo descifrando la geografía De distancias trazadas por rutas caprichosas Itinerario paradisiaco de tus manos delicadas Concediéndote mi cuerpo curtido por los años Donde tus destrezas puedan posarse Como mariposas primaverales en troncos de arboles Yaciendo candorosamente en mi piel soñadora
Dibujando cartografía voluptuosa del desvanecimiento
No sé dónde estás ni cómo Quiero sepas no te he olvidado nunca No he renunciado a ti siempre Amaré tus años inscritos en tu sereno cuerpo Tu edad madurada en experiencias aposentadas La huella de tus arrugas maravillosas y sabias Algunas canas visibles como rayos de sol Atravesando nubes de mármol Encontrando en el tiempo acumulado En reflexiones calcinas de huesos de marfil La escolar de aquellos días inocentes
BĂşsqueda desiderativa
Lo que más me impresiona de ti ¿Tu boca carnosa donde se guarecen miles de besos húmedos? ¿Tu rostro juvenil, resplandeciente como el cielo de invierno Sin nubes? ¿El perfil peninsular repitiendo el candor de tu madre? ¿Tu cabellera brillante cayendo como cascada de luz Sobre tus hombros delgados? ¿Tus grandes ojos locuaces, haciendo de ti una mirada Repentina y pronunciada? ¿Tu perfil de hembra total, conjugando la gramática De las curvas Con la apacible figura selenita Pintando en las aguas El recorrido soñado de tu premura femenina? ¿El suspenso agravado, la dilatada espera La imposibilidad misma de entregarnos?
Apenas la fantasía de otro mundo Donde podamos dedicarnos A cultivar canciones itinerantes En la superficie fértil de nuestros cuerpos
En el umbral de todo
Cuando veo tus ojos pardos mirarme Desde profundidades caladas en huesos Avizorar de águila disipado penumbras Mirar viajero cruzando umbrales
Cuando te abandonas dejándote suelta Como hoja perdida en la tormenta Nostálgica novela otoñal de Lin Yutang Llevada por tercos vientos invisibles A lejanos e ignotos territorios olvidados
Cuando estas frente a mi garbosa mozuela Alegre y risueña como niña traviesa Labios pulposos insinuando éxtasis inesperados Y exuberantes agonías celestiales
Cabellos luminosos brillando solarmente Cuerpo sensual como bosque tropical Después de profusa lluvia colosal Canción cantada por trovadores desvelados En noches de serenatas románticas
Pienso calosamente en la vida En tejidos de awayos indescifrables Hilados por antiguas manos virtuosas De pitonisas mujeres clarividentes
Oráculos melancólicos del destino
Vieron cómo se desvanecían uno a uno Los itinerantes horizontes nómadas Atravesados por fuerzas desatadas Por el lóbrego mamífero que se peina A decir del humano Cesar Vallejo Entrañable poeta serrano
Somos solamente eso Cuerpos consagrados a abolir umbrales Diseminar curvados horizontes fugitivos Vigores recorridos por fluidos pródigos Deseos como corrientes de peces Convertidos en flotantes arcoíris Aro de colores hecho por mariposas O manadas veloces de jamelgos míticos Queriendo conquistar en un instante la eternidad Ansiada como regalo de la divinidad Consagrada a deidades apasionadas Voluptuosa conflagración somática de dioses olvidados Compulsión de pasiones sin narrativa antelada
No hay respuestas a preguntas filosóficas Toda respuesta es posible como cualquier otra Con tal de seguir estela irradiada por premisas
Elaboradas pacientemente por alfareras De serviciales panzudas vasijas de barro Ninguna respuesta logra atrapar el devenir
Importante es aprender asombrados Peregrinas e intrépidas exploraciones Dedicadas maestras de experiencias ignotas Donaciones sin parsimonia ordenada Soplos de requerimientos sensuales Pasión inscrita en genoma humano
Importante es entender por intuición espontánea No se trata de verdades sino de vivencias Certezas proliferantes como enjambres De mariposas quiméricas de Macondo No se trata de ciencias sino de poiesis Creación y recreación constante de vida
No se trata de consumo sino de plenitud No se trata de ostentación sino de felicidad No se trata de satisfacción sino de alegría No se trata de logros sino de realizaciones No se trata de economía sino de armonía No se trata de poder sino de potencia No se trata de realismo sino de creación No se trata de conocer sino de amar
Hay un saber profundo nacido del amor
Ahora aposentada en dintel de puerta tallada Hablándome como delicada ave mensajera Anunciando apocalíptica crepúsculo de caudillos Y de enmohecidas ideologías amargadas Amo tu bifurcación en umbral arqueado
Deseo como apetitos circulantes de la carne Llegues a mí como ángel seducido Conquistado por fugaces clamores Imperceptibles en raptos veloces De tu garboso ajayo suspirante Profundidades enigmáticas de tu piel Maná dulce como la miel Intensa finitud desafiante del infinito incierto Intrepidez fáctica de heroicos mortales Interpelando a dioses muertos No sepultados nunca
Refugiándote en lumbre inflamada De mi tensa piel enamorada Cobijándote tierna en apertura De mi complexión rebelde Fulgurante entrega una noche de insomnios
Cuando cruces el umbral de la puerta Todo volverá a ser como fue siempre Desde un principio como origen de la carne Devolveremos al cuerpo insondable Reconocimiento merecido por sensaciones Memorionas de transmutadas figuras análogas Imaginaciones como sueño de niñas despreocupadas Y razones como axiomas cartesianos irrefutables Percepción integrada a creaciones perdurables Intuición de mutantes universos soñados Única evidenciada certeza posible De congregación sensible En cuerpo hermenéutico
Existencia irrefutable como argumento matemático Dadora de sensaciones convertidas en huellas Huellas convertidas en inscripciones perenes Escritura anterior convertida en memoria
Cuando cruces la puerta y dejes el dintel Como deja la vajilla de porcelana el mantel Susurraré a tu delicado cartílago oyente Sortija encarnada para atrapar sonidos Caracol donde se esconden resonancias de mar Como oraciones marchitadas en el altar
Contándote traviesamente mis intensiones Embriagadas por espera tibia y estimulante Ciñendo amorosamente tu cuerpo fresco reticente Descubriendo en ti sabiduría somática heredada Tradición verbal de usanzas repetidas Hábitos amorosos y galopantes Estampida de unicornios cantados Albergada por mujeres como zafras copiosas De exuberante verano caluroso En pictóricos llanos extendidos Acariciados por brisas voladoras Y por ondas de luz vibrantes Guitarreras encomiables de aldeas lejanas Vibrando en atmósfera espumosa Como burbujeo cambiante
Seremos repetición verosímil Como cadencia de danza ágil De todas las entregas derrochadas En alcobas resguardadas por fantasmas De veteranos amantes legendarios
Muchacha de tez morena
Muchacha de tez morena Amasada cariñosamente en aceituna Y barnizada prolijamente en tulipán violeta Parafraseando a Federico García Lorca
Cabellos nocturnos inmensos como tejido ancestral De canciones hendidas en concavidad abismal Materia y energía oscura sideral Melena rizada descendiendo copiosa Sobre tus delicados hombros relucientes
Corriente de remansos dibujados magistralmente En tenor clamoroso de ríos rumoreantes Colmada propicia floresta azabache Sobre suave espalda manceba Dulce pensamiento de explanada cobriza Donde cabalgan gallardas pretensiones Ardientes como brasas encendidas De almacenados leños de fogata
Manada en tropel de yeguas celosas Y caballos alborotados por el viaje Veloces como geométricas ondas de luz Vibrando como pendulares oscilaciones en cruz
Tus ojos juguetones alardean audacias
Brillantes como concavidad fenomenal Abriéndose en sensual entrega crepuscular Firmamento rememorado en brillo ocular Como uvas dedicadas al vino tinto
Tus esféricos ojos oscuros Codiciados diamantes demandados Por mercadeo de deseos insatisfechos Sustituidos por banales deleites comerciales
Tus melodiosos ojos viajeros Ornamentos de sacrificios tribales Rito y ceremonia de nacimientos De incansables ciclos agrarios Miran navegando bordes del mar Y del cielo nocturno despejado como ámbar Tocándose las manos como enamorados
Tus alborozados ojos iluminados Se muestran osadamente sediciosos Naves intrépidas cazadoras de vientos Pescadoras de corrientes marinas
Tu cuerpo lozano como arbusto confiado Del sabio Altiplano silencioso y reflexivo Febril en alegórica iniciación ceremonial
Rito tenazmente repetido como vendaval Inscripciones mágicas grabadas en piel Dibujadas curvas ondeando delicadas Como convincente melodía ambiental Instintivas como enunciados de Buda Descifrando sencillamente acertijos cósmicos Gramática arqueada de formas Candorosas como confianza infantil
Comienzas a diseñar hermoso cuerpo extasiado Espesor sensible de deseos fugitivos Mujer voluptuosa como desnudez en tarde asoleada Brillando como planetas descubiertos recientemente
Piernas esbeltas como recias certezas sensuales Y radiantes como acontecimientos creativos Pronunciación primaveral en invierno Como combinación caprichosa de pinceles Y alquimistas colores mágicos De perfiles y premuras jóvenes
Compositoras caderas en devenir insinuante Metamorfosis erótica de complexión humana Pectoral grácil como gacela frágil Perdida en bosque incendiado Por ardiente emanación de fragancias hechiceras
Desprendidas como sudor benigno de membrana Narrativa corporal devenida de pluriverso soñado Epidermis sensual como melodías de acordeón Exhalando danzantes alegrías nostálgicas En atardecer denso por cavilaciones etéreas Y juvenil como medio día sin sombras
Fascinantemente inocente como pétalos de flores Ofreciendo colores a avispas laboriosas Pentagrama musical escrito en tu alma Emanado de emoción calcárea de tus huesos Metamorfosis pictórica como cuadros impresionistas Del solitario pintor Vincent van Gogh Resaltando ritual iniciación fecunda
Adoro tu rozagante rostro adolescente Deslumbrante como sol del alba Destacando en alborotada calle adoquinada Presencia estética ordenando composiciones De constante y periódica vida cotidiana
Tierna imagen de chiquilla inquieta Boceto de mujer en ciernes Esbozo femenino en papel fino Y trazos convocativos de emociones Rendidas ante tu gracia franca
Te mueves con elegante garbo natural Surgiendo de la nada con movimientos exquisitos Como ingeniosa sublime nota musical Ligera como soplada hoja otoñal Vaporosa como agua de cascadas
Tu risa párvula inquieta el clima De atormentados entornos enamorados Tus modales traviesos desmontan reglas Y normas ateridas en instituciones acostumbradas A repetir mecánicamente poses abatidas Desvanecen burocráticas fronteras inventadas Por estados enloquecidos por espontánea Acompasada corpórea desenvoltura creativa Ágil como movimientos acuáticos De corrientes de peces plateados Son tus rasgos pasos de gacela
Abolen enmohecidos umbrales melancólicos Provocando repentinos raptos de pasión Como asaltos nómadas a urbes sedentarias Hechizando mi enjundia aguerrida
Inscripciรณn en la piel de mi memoria
Silueta vaporosa trasladando intensidades diluidas En piel como pomada hecha de yerbas amazónicas Rostro combinando Asia y Occidente En mezcla artística de arte y cultura Europea y criolla americana Tus ojos asiáticos miran en lontananza E interpreta apasionado tu corazón mestizo
Mirada clara como albor del alba Luz intrépida como vuelo de águila Aleteo cazador escrutadoramente jovial En preguntas lucidas embriagadas de curiosidad Clamorosa como despertar de niña
Te he amado como se ama lo que no se puede perder Una tarde asoleada liberada frente a tu ventana Caricia dulce de narraciones no dichas ni escritas Insinuación de mundos desconocidos Esperando en bordes de tu habitación Cuerpo delgado como pincelada de acuarela De talentoso pintor de Montmartre ¿Por qué no tomé el sendero entre los matorrales?
Nacimiento turbulento del río Agrietando rocas esculpidas Con corrientes sanguíneas
Mientras caen cascadas como velos de novias ¿Por qué no me confundí contigo de una vez para siempre?
Fundidos por el fuego como ocurre con el metal Cuando la materia recuerda volcánicos orígenes Del azulado y acuático planeta terrenal Aleación voluptuosa de minerales atesorados En nuestros entrañables cuerpos enamorados
Hoy, te recuerdo, fragancia delicada del sol naciente Y del desembarco bárbaro conquistador de ciudades doradas Hoy, te vuelvo a amar como aquella tarde incendiada Fugacidad, olvido atrapado en fisuras del tiempo Hoy, quisiera quedarme, detenido en la premura Ansiedad blanda en costados de tu piel canela Explanada ritual donde se da batalla Entre corceles salvajes y domadores nativos
¿Dónde estarás ahora que viajas en mi memoria? Estas en mí como partículas de recuerdos Recorriendo flujos intensos de mi cuerpo También en otra parte, en algún lugar, cobijándote Como cobija la caricia del lecho el sueño de una virgen
Donde estés, aquí me tienes Entregado a la disolución del suceso
Golpeando puertas del crepúsculo Donde se hunde el espectador comprometido Para encontrarme contigo en socavones De una dilatada antigüedad obstinada Oscuridad sin recinto ni ocasión Imaginada melodía de añorada canción Negándose a desvanecerse como huella en el desierto Páramo inhabitado yermo y sin árboles Poblado de recueros murmurantes Removiendo con manos invisibles la arena Dominio quimérico de los sueños
Una tarde ardiente
Una tarde ardiente Estuviste enhebrando tus inquietudes Como costurera sigilosa ensartando el hilo En orificio de aguja usada por sastres Me acerque a ti para amorrar tu fonética Danzando fragante en el aire emocionado
Te abordé repentinamente en fiero asalto Como ataque sigiloso de búho nocturno O leopardo silencioso sorprendiendo a la presa Beso inesperado, felino, depredador Acto raptor hecho con sagacidad y amor
Sentí tu lengua huidiza, tu inocencia sorprendida Tu boca acuosa, nacimiento de ríos Manjar del paraíso poblado de vírgenes y muchachos Me deleite tenerte así entre mis manos Hospedarte cohabitada por mi aliento enardecido No atinabas a nada, asombrada ante el acontecimiento No te defendiste, tan solo dejaste deslizarse el lance
Te amé en tu pureza arrebatada En la humedad de tu boca En tu lengua manceba En tus senos castos En tu percepción fúlgida
Dilema de rechazo y de aceptación
Te amé cuando me volviste a besar Obligadme a quedarme contigo Fue una aglomeración de besos fogosos Suplicantes como demandas almacenadas En memorias del cuerpo apasionado
Me quedé residiendo en tu piel Como campamento nómada en el desierto Me enraicé en tu cuerpo escurridizo En tu adolescencia en alborada de todo Me quede con tus aprendizajes sensuales
Amé tu cuerpo suave, tu piel lisa Tus piernas delgadas aceitunadas Tu respiración agitada como las tempestades Ame tus entregas donantes Cuando podíamos ensayar renovada conquista
Amo tus encantos llanos Tu manera de amar sigilosamente Tu manera de ser mujer Fémina de nuestras comarcas rebeldes
Momento
El momento Huevo de tiempo fecundado Incubándose como serpiente alada En diáspora dispersa y fragmentada
Disponibilidad plena desafiante alteridad Profusa en repercusiones indescifrables Como desborde de explosión inicial Expandiéndose como estampida o vendaval De recios jamelgos asustados O vientos aturdidos por arrepentimientos Azorados como recién llegados a la fiesta
Energía desbordante Como explosión de estrellas colisionadas Colosales manifestaciones de energías y fuerzas De donación y derroche inconfundibles Cuando estamos expuestos a jugarnos Poniendo el pellejo delante de las balas
El momento exige de nosotros entrega Quiere ansiosamente todo el cuerpo liberado Ahora, entregado a normas institucionales Acto heroico desafiando a historia inventada Oponiéndole otros recorridos posibilitados Como elaborados tejidos de colores
Plasmados artesanalmente en awayos
Momento Inquietud contenida como capullo de rosa Quiere permanentes recorridos circulares Orbitando eternamente alrededor del sol Aprovechando fuego calentando frías manos Y efervescente cuerpo danzante de rocanrol
Caminos convergentes en tangentes de intensidad Como esplendor rozagante de mocedad Situación pronunciada en instante sin tiempo Como acontecimiento probable sin espejo Donde repetirse en perfil perfecto
Coyuntura articulando huesos engranados Dando movimientos flexibles a andanzas De sucesos desplegados en ansias Costurando vestimentas olvidadas
El instante es impetuoso Como desborde sensual de sueño de muchacha Iniciada en arte proliferante de seducciones Acostada en la hamaca chaqueña de la tarde Y de la adormilada siesta imperturbable
Certeza inmediata de pletórica existencia Exuberancia de órganos activados En desatada compulsión vital De frenético metabolismo astral
Consumaciones compulsivas conmoviendo mundos Esferas aparecidas en fiestas alucinantes y carnavalescas Efluvio efervescente de sensaciones inestables Espesores de climas corporales Como preguntas de escritores dramáticos
Instante Intuición de complexión absoluta Diseminación de toda estructura aterida De toda pretensión anclada en mar en calma Diseminación del caos y de la armonía Instante preciso en descripciones detalladas
Oportunidad suprema Disfrute de la vida en abundancia Sufrimiento de la vida en desventura Goce supremo de dolor y alegría conjugados
Instante eterno
Cuando comprendemos Esta fugacidad extinguida Es lo único tenido a mano Espesor de territorios entrelazados Antes, en desaparición incomprensible
Momento Burbuja especulativa de esperanzas Cuando pienso en ti Como refulgente canción de pueblos Dulce interpretación de conjunción sedentaria
Candorosa grafía manifestando sortilegio Cuando me sé hechizado Por tu enunciación anatómica Dispuesto estoy a batirme por ti Contra las contingencias, el azar y la necesidad
Instante Cuando te conviertes en comienzo Y telos de toda materialización inconmensurable Como prolífica invención de formas y contenidos De expresiones deambulantes
Instante Desbordante en densidades copiosas
Ningún concepto puede atrapar incidencia sensible Como del remanso cósmico sin ayer ni mañana Así recitaba el poeta gaucho Juan Carlos Dávalos Remanso claro como tarde de verano
No puede capturar Con redes abstractas de telarañas surrealistas Formadas de hilos tenues y resistentes Cartas escondidas de presentación En sociedades atrapadas por organización Fijada en hábitos y costumbres De ateridos comportamiento clientelares Filamentos invisibles encargados De vaciar espesores dinámicos Cuerpos, encontrando en ellos El núcleo imposible del ser y la nada
Momento para afirmarnos en congregación Y diseminación acontecida en sociedades sosegadas Pétreas instituciones consolidadas Del incomprensible espacio-tiempo
Momento Instante de vida creativa En apremiante plasmación insaciable Como cuadro pictórico inacabado
No hay tiempo para comprenderte No hay recursos para detenerte Sรณlo dejarte pasar atravesando La constelaciรณn emotiva De mi transiciรณn somรกtica
Corporeidades intensas
El cuerpo
La sabiduría está en los cuerpos Como agua en la Tierra No en los discursos Ellos saben expresar Pero no saben intuir Contienen Como contiene la copa el vino Cuando danzan Cuerpos versátiles del ballet En escenarios pintados por luces Recordando al cancán del cabaret Contienen Como la vid a las uvas Nadie sabe Lo que el cuerpo puede Memoria constituida Desde la explosión inicial Creación imaginativa infinitesimal Los cuerpos saben Por memorias sensibles Atesoradas en piel y órganos Hermenéuticas sin lenguaje Nosotros Que creemos conocer Pretensiosos sabios crepusculares No sabemos Al excluir inscripción de huellas Hemos olvidado
Extraviados y abandonados en burbujas Nosotros Sujetos Pretendidamente Separados de los cuerpos Nosotros Razรณn Consciencia Cosificaciรณn Nosotros Convocatoria diligente Palabra sonora Escrita en signos Seguimos abatidos Sin comprender Que la palabra no es nada Sin el cuerpo
Lenguaje entre cuerpos
Te hablo Otredad Cuerpo Hablo a tu alteridad A tu cuerpo pleno Espesores sinceros Como vitales espesores de océanos En quienes debemos confiar No hay estrategias, tampoco tácticas No hay simulaciones Son lugares no colonizados por la culpa Son territorios libres Como los bosques primordiales No tienen necesidad de ser redimidos Te hablo desde esa comarca Matriz de nuestros orígenes No es solo mía Ni de nadie solo Sino de todos Hablo a ese otro paraje Copioso en vidas Melodioso en ciclos vitales No es tampoco tuyo Es de todos Territorios y lugares autónomos No nos pertenecen No son propiedad de nadie Son Concavidad infinita de la noche
Melancólica brisa de la mañana Bañada de escarchas encaracoladas Soñando Eterno comienzo del fuego Rebelión imposible Derrotada de antemano Por paciente reflexión de quietud oscura Fuego adolescente Intempestivo lanzamiento afectivo Confiado a intrépida travesura Desgarradora de la nada Herida hecha con cuchillos De gitanos muertos Apenas Hace un rasguño Mientras el silencio eterno Cava en el olvido Hondonadas ensimismadas En estrepitosas caídas Meditación muda Sin conceptos Sin figuras Por eso te hablo Sincero Como habla la brisa A ramas del bosque Eterno comienzo De lo mismo Emoción inaugural
Dando nacimiento a universo Mutante en devenires Proliferantes Es allí al eterno regreso Donde Debemos retornar Escapando al bullicio De nuestras pretensiones Aunque no lo creas Solo nuestros cuerpos permanecerán Mientras nosotros abandonamos Rápidamente El mundo de las alegorías Nuestros cuerpos Que son, en parte Meditación muda Intrépido alzamiento intempestivo Nuca gobernamos nuestros cuerpos Creencia del ego Autoengaño individual Perdido En el magma incandescente colectivo Como verás Apenas somos Sensación momentánea Cuerpo Imaginación circunstancial Pensamiento provisional Eternidad meditada
Por poblado vacante Aglomeraciones quietas Veloces en sus caídas abismales Intimidad insondable Interioridad No encontrada Te hablo Debemos dejar de codiciar Riqueza de metal Y poder paranoico Debemos Abandonar todo orgullo Dejemos llevarnos Por meditación sideral Fuego rebelde Contraste inscrito Partícula virtual del universo Tú y yo Amamos A nuestros seres queridos Cuantos más sean mejor Nos acercamos A la inmensidad cóncava De meditación profunda Ese amor Como afecto heredado Por los cuerpos Desde el afecto original De explosión inaugural
Nave del viaje Que nos aleja acercándonos No anclemos Como barco en puerto Aposentando su armatoste agotado En presente inexistente Dejemos A las corrientes Llevarnos a lo desconocido Sepamos, en la distancia La clave del amor A nuestros seres venerados Recordemos sus ojos Y sus sueños Sus rostros propios Y sus anhelos Memorias sensibles También mitológicas Y olvidos selectivos Historias de nunca acabar Como oleajes contantes del mar Volviendo a nuestros seres queridos Dibujemos sus rasgos Pues son señales y signos De gramáticas corporales Mapa de recuerdos hendidos En piel cantora y danzante Démosle abrazos vallejeanos Emocionados Qué más da conmovidos
Cuando estemos con ellos Como volviendo de un largo viaje Desde donde los extrañamos Añorablemente Ahora sabemos Nadie es culpable de nada Tampoco víctimas Somos guerreros extraviados Historias no contadas Somos personajes dúctiles Narrativas convulsionadas Intrepidez de fábula Hablemos entonces Como dice el pueblo Con sinceridad Sin tapujos ni cuidados Sin mascaras blancas, piel negra Hablemos apasionadamente Convirtiendo nuestras sensaciones iniciales En palabras Evitemos la mediación De razón abstracta Estrategia atrevida Dominación imposible Violenta y sangrienta No hagamos daño Buscando imponernos Tratemos de apoyarnos Seguir adelante
Solo quedamos Tú y yo Tú Aparente otredad Yo Aparente mismidad Y recíprocamente Tú Multitudes no descubiertas No conquistadas Yo Multitudes descubiertas Sin embargo Desconocidas Solos quedamos ¿Matarnos? ¿Crees, es consecuencia necesaria? ¿No es mejor marchar juntos? Espacio-tiempos mezclados Meditaciones herméticas De monjes ignotos Corpúsculos imperceptibles No sé Dime tú
Sofía
Tu nombre, la sabiduría Buscada ansiosamente por los hombres ¿Cómo puede guardarse este conocimiento? En un cuerpo tan joven Dúctil Suave Cómo puede darse el saber Al toque irradiante del alba Sólo sé De tu alargada figura Dibujada Espesor del mundo Rastro dejado En el eterno retorno De preguntas Sin respuestas Sobre el sentido de la existencia Mientras tu cuerpo exhala las revelaciones Propagando tu angelical respiración Atmósfera incandescente De recuerdos Tus ojos mestizos recorren La concavidad alterativa Habitada por sensaciones sublevadas Concavidad abierta De mi cuerpo Memoria sensible de amantes Tu rostro latino Me mira Apacible curiosidad adolescente
Mientras Dejo Descifrar La cadencia de la piel Descubro tu belleza natural Como sol naciente En una noche fría Retrocediendo ante consonancia de años Descubro el secreto de tu aparición Cuando tu voz se entona Apacible Orquesta de violines Dejando deslizar la aguda composición De las primeras sinfonías Tus cabellos castaños Envueltos En una cola improvisada Dejan caer mechones no atrapados En la figura delgada Pinceladas de acuarelas Dejando en libertad Los pensamientos viajeros Como carabelas perdidas En un océano de posibilidades No exploradas Amo La constelación Solitaria De tu presencia
La guerrera
Cuerpo sensible Como toda singular biología Premonición inmediata Comienzo y fin Fértil Estallido inicial Creando de la nada todo Gesto primordial Autónomo Decidiendo Desenlaces intrépidos Desencadenando Pasiones Desafiando Supuestas leyes Y aterida realidad Promulgada Se opone a esta impostura Mirada intuitiva Veloz Luz perdida En su huida Nunca te convencieron Las súplicas masculinas Siempre Jugaste Travesura imprevista No podías renunciar A la potencia creativa
Flor solar
Manifestación colmada Combinación Candor Eufemismo Estas frente a mí Mirada cósmica Ardiente explosión Estrellas alborotadas Te miro Mi cuerpo se inquieta Quiere vibrante Perderse en inmensidad arenosa De tu piel dorada Vertiginosa, dulce Pintura impresionista De colores turbulentos Y dibujos curvos Lozanos Vitales Brisa de la mañana ¿Son impulsos? ¿Instintos? ¿Deseos? Eres tú Soy yo Enfrentados Cuerpo a cuerpo Pasión contra pasión
Deseo sumado a deseo Atrapados en la atmósfera Tupida Imaginación transgresora Violencia de fantasmas insomnes Cabalgando En llanuras de la noche Interminable Ansiedades Como latidos de corazón Romántico Clima creado Palpitaciones Como de tambores afros Coexistencias Como nudos ecológicos Entrelazando ciclos Y cuerpos abrazados Atraídos por la gravedad Fuerza compulsiva de lo posible Distanciando costumbres Inquietud abierta En el horizonte Dibujo vaporoso Entregas sin templanza Sentirte En cada resonancia afectiva De mi corteza Mientras
Mis labios resbalan Pronunciación acuática Por territorio paradisiaco Enraizado en tu cuerpo Quimeras vertidas Como tramas contadas Por generaciones sucesivas Emanaciones de tu piel Oriunda miel Guardada en colmenas Ocultas en lo recóndito De los bosques Almíbar derramado Interrogaciones acarameladas Amo tus melenas sueltas Caricia solar Irradiante Aposentándose Luminosa Sobre hombros afables Recorriendo Fogosas Topografía erótica De tu espalda Plácida Pronunciación fosforescente Como enjambre bochornoso De refulgentes luciérnagas Formas y colores del alba
Amo tus ojos sorprendidos Tu intrepidez intempestiva Tu boca pulposa Inconsciente Cómplice De desacatos epicúreos Amo tu cuerpo garboso Medio día eterno Presencia consistente del equilibrio De la simetría poética de los dobles Amo Tu desalojo urbano Tu perfil femenino Canción de climas fértiles Y tierras templadas Memoria de amazonas Intrépidas Rememorando El verdor de los bosques extinguidos Multitudes rizo-maticas Raíces sedientas Poblaciones arborescentes Demandantes Troncos voluminosos Fuertes Vigorosos Voluntad vital Desafiante Vida forjadora Captura vegetal
Pasiones solares Los tejidos de mi carne Se extienden Como tejidos artesanos Hilos invisibles Rumores de sangre Hacia ti Envolviéndote Con mantos de vicuña Soñadas caricias aladas De muchedumbres sedicentes Mariposas liberadas Escapando Desde las crisálidas quebradas Convertidas en poemas volantes Mariposas estrepitosas Como consagración de primavera Exuberante densidad De sensaciones desbocadas Posándose En la floresta fascinante Del jardín íntimo de tus secretos Últimas gotas de la tempestad
Mujer adolescente, impetuosa
Tus ojos brillantes Como luces de metrópolis Incandescentes En noches iluminadas Convertidas en días artificiales Tus cabellos inmensos Resbalando Como cascadas azabaches Sobre tus hombros relucientes Y los llanos extasiados De tu espalda deslumbrante Contextura erótica Como evocación de fiestas De iniciación profana Del cuerpo Cobijado Por ensoñación Y utopía perdida Mujer maravillosa Como toda manifestación Ecológica y planetaria Dúctil Como flexibilidad De cuerpo danzante Intensidad adolescente Eres La ofrenda De la tierra prometida
A la vez Paraíso perdido Imposible renunciar A tu figura intempestiva A tu tiempo de preguntas A tus senos primaverales A tu boca inocente A tu cuerpo sensual Curvándose en la gravitación De todo comienzo Imposible No entregarse A tus caprichos A tus sueños Imposible Resistir A tus encantos De mujer iniciada Amada Como se ama Develaciones de alboradas Y crepúsculos ensangrentados Descubriéndonos la belleza De umbrales combados Del día y de la noche Cabellos nocturnos Remolinos de preguntas
Piel sensible A las usurpaciones Imagen delirante Entregada A la explosiรณn afectiva Al goce profundo De la piel No me importa ya nada Sino entregarte Mi herencia De tiempos ignotos De sociedades atareadas En prohibiciones Entregadas A las transgresiones Solo quiero Hundirme En tus ojos verdosos Bosques turbulentos En tu cuerpo adolescente Febril Sรณlo quiero Entregarme A tu voluptuoso deseo De vivir eternamente El instante imposible
Sacrificio amoroso
Lluvia nocturna de rizos Ondulantes Como melodías Derrochando cascadas Clima virgen Como todo comienzo De la naturaleza fértil Como humus febril Luminosidad radiante Como ideas de la ilustración Sin embargo, tambien Olvido Mientras Tu boca húmeda Miel guardada Por cuidados familiares Es ocasión De entregas y derroches Prende Timbales del corazón Ardiente Las aves viajeras De tus ojos soñadores Trazan En su vuelo Plañidero La distancia inmensa La distancia que separa Tu deseo del mío
Recorrido intrépido Del cazador nómada Observando tu llegada Al espesor Del territorio de los sueños La sensualidad de tu piel No visitada Exhala Una canción ritual Antes Del sacrificio Flor primaveral Donde los pétalos de rosa Caerán como en otoño Las hojas Hundiéndome en naufragio Gozando en precipitación profunda Al fondo paradisiaco de tus encantos Donde nos confundimos Mezclados por el efluvio De las sensaciones