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Leonardo Da Vinci:El genio que no publicó sus descubrimientos médicos
Germán Valenzuela
Médico Internista y Cardiólogo
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La época del renacimiento, entre los siglos XIV y XVI, se caracterizó por la reingeniería del conocimiento y del aprendizaje, con énfasis en el análisis racional de las situaciones y el estudio organizado de la naturaleza.
Leonardo Da Vinci (1452 - 1518), considerado como uno de los más grandes genios de la historia, a diferencia de otros creadores del renacimiento estuvo siempre interesado en encontrar la verdad y en describir al mundo y sus componentes. También se atrevió a replicar sus observaciones en bocetos de ingeniería con elementos innovadores que relacionaban la estructura y la función.
Da Vinci fue el hijo ilegítimo de un respetado notario y una mujer pobre. En su acta de nacimiento aparece como Leonardo di ser Piero da Vinci, lo cual significa Leonardo, el hijo del Señor Piero, natural de Da Vinci.
Desde los cinco años de edad dejó de vivir con su madre, quien volvió a casarse, y pasó a ser cuidado y educado por su padre. Al ser un hijo ilegítimo no pudo gozar de una educación formal o de una educación a cargo de profesionales conocidos, por lo cual recibió clases de tutores privados recién a partir de los 14 años, como Andrea Del Verrochio, quien lo formó en pintura, escultura y decoración. A los 20 años, y por recomendación de su profesor, fue propuesto y admitido por la Corporación de San Lucas, entidad compuesta por artistas florentinos y por físicos y boticarios del Hospital Santa María Nuova. Fue a partir de ese momento donde tuvo autorización para observar, y probablemente realizar, disecciones humanas.
La situación política incierta que se vivía en aquel entonces condicionó que se mudara a Milán para trabajar en ingeniería militar. En esas circunstancias diseñó fortalezas para el ejército, modernas máquinas de guerra y proyectos de monumentos y planos para la ciudad.
En 1489 comenzó a desarrollar un estudio profundo de las proporciones del cuerpo humano con especial cuidado en sus características anatómicas y una aproximación a sus funciones. Posteriormente, dividió su tiempo entre Florencia, Milán y Roma (fue miembro de la corte papal de Leo X entre 1513 y 1517). Sin embargo, al proseguir con sus estudios de disección, en las noches y con la sola iluminación de algunas velas, fue acusado de nigromántico, por lo cual buscó otros espacios geográficos para su desarrollo profesional, terminando sus días como asesor personal y dibujante del Rey Francisco I de Francia.
Por sus estudios y trabajos en la disección de cadáveres, Da Vinci fue acusado de nigromántico.
Da Vinci, destacó en una serie de disciplinas, como las ciencias naturales (anatomía, botánica, patología, hemodinámica y fisiología), dibujo, música, escultura, arquitectura, química, dinámica de fluidos, geología, astronomía, cartografía, matemática, incluyendo también algunas participaciones en las áreas de filosofía e historia.
Algunos de sus bocetos representaron diseños futuristas de máquinas que ahora conocemos como el paracaídas, el helicóptero, el submarino y la bicicleta. A pesar de ello, sus contribuciones más conocidas en el arte son las pinturas “La Mona Lisa” y “La Ultima Cena”, y su famoso dibujo de las proporciones anatómicas “El Hombre de Vitruvio”.
De manera particular, Da Vinci consideró al corazón “como un instrumento admirable inventado por el Ser Supremo”, e inició las descripciones de este maravilloso órgano en el año 1490, a partir de lo cual generó una serie de ilustraciones que conjugaban los hallazgos de investigaciones en animales con la disección de hasta treinta cadáveres humanos.
En la especialidad de Cardiología, algunos de sus aportes más importantes fueron:
• El estudio del ciclo cardíaco y la contracción asincrónica de las aurículas y ventrículos, reconociendo por primera vez la importancia funcional de las aurículas.
• El reconocimiento del corazón como un músculo, cambiando las concepciones previas en donde se le consideraba “la fuente del espíritu vital”. Ello se sostuvo en la observación de que sus fibras musculares se dirigían en diferentes direcciones, contrayéndose y relajándose.
• La descripción del mecanismo del funcionamiento valvular con aproximaciones hemodinámicas, de acuerdo a su estructura y a las fuerzas que generaban su cierre, considerando las fases del ciclo cardíaco.
• La primera representación de las arterias coronarias, elemento anatómico olvidado hasta antes de sus descripciones.
• El análisis detallado de los vasos sanguíneos del árbol arterial y venoso, y sus ramificaciones rias (sobre todo su capa interna) se alteran con el paso de los años. Probablemente realizó la primera descripción de la enfermedad arterial coronaria al disecar el cadáver de un individuo de 100 años, comparándolo con los hallazgos obtenidos en un niño de 2 años.
Lamentablemente, Da Vinci no publicó los resultados de sus investigaciones. Probablemente porque no tuvo tiempo para hacerlo, o quizás por el temor a la Santa Inquisición, la cual luchaba intensamente para limitar los nuevos pensamientos y el desarrollo consecutivo de nuevas corrientes científicas. Otra posibilidad es que tuvo temor a compartir sus descubrimientos, pues lamentablemente fue admirado en vida por sus colegas de las artes, aunque duramente criticado por las élites científicas que no lo consideraban un par. En este sentido, durante un debate público de la corte de Milán, los científicos presentes se burlaron de él acusándolo de “refutar el conocimiento de Aristóteles”. Muchos años después, William Hunter (1718 - 1783), observó los bocetos anatómicos y anotaciones de Leonardo con gran asombro, sin poder tampoco publicar estos hallazgos.
Las contribuciones de Leonardo Da Vinci son grandiosas. El mundo no pudo conocerlas a tiempo, pero poco a poco se sabe más de ellas, sobre todo en el área de la hemodinámica y de la biomecánica cardíaca.