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EDITA colectivográficoCMYK Depósito legal: S-633-2008 DIRECTOR CREATIVO Fernando Luis Gómez: fernandoluis81@gmail.com DIRECTOR COMERCIAL Fernando Luis Gómez: revistawe@gmail.com CORRECCIÓN DE ESTILO Lucía Jiménez Iglesias: luziawe@gmail.com COLABORAN EN WE número 3 Editorial: Emilio Luis Álvarez Sozyone: Lucía Jiménez Iglesias Skate Salamanca: diseño pagína, Angel Benegas El mercadillo: Víctor García Martín, Javier Laso, Laura Amago Cienfuegos, Idoya Noain Ruiz Ilustrarte: María José Amador, Daniel Blázquez y Natalia Morales García Santo, El Enmascarado de Plata: Emilio Luis y Federico Luis ¿Sabías que…?: Paloma Álvarez Maidero Desnudarte: Beatriz García Albuerne Welcome to...: Paula Pérez Sobrino We no piensa hacerse responsable de las opiniones de sus colaboradores. Que a nadie se le ocurra reproducir material que aparezca en We. Está muy mal visto, si queréis algo, pedidlo a: revistawe@gmail.com 2
Mira qué bien; me lees. Ya que estamos en ello, aprovecho la oportunidad para saludarte, si es que ya nos conocíamos. Si es tu primera vez, sigue sin miedo -todos hemos pasado por ello- y, sobre todo, recibe nuestra bienvenida. Tener We en las manos es una experiencia diferente -según nos han dicho nuestros amigos-. Bien es cierto que ellos lo dicen porque nos quieren, pero tampoco exageremos de modestos. Somos una experiencia llena de frescura que en pleno otoño pretende, ante tus ojos atentos, darte un poco más de lo que esperas. Porque así somos: unos frescos. Así que, puestos en ello, hemos decidido convertirnos en tu compañera ideal, en ese amigo fiel que nunca pregunta ni es inoportuno, en esa colega que espera paciente a que la mires sin demandas extremas. Así hemos colocado los textos, las ilustraciones y todo elemento gráfico que finalmente, al paso por la imprenta, ha quedado plasmado en el papel. Ah, y mira qué papel... Bonito, ¿eh? Para cuando quieras mirarnos. We, además es portátil, como lo es casi todo hoy en día: el móvil, el ordenador, el iPod... Estamos a la moda, y por si fuera poco, somos totalmente reciclables, no se nos acaba la pila, ni requerimos recarga: lo último en tecnología inalámbrica… ¿Qué tal? Pues eso, ya vamos cogiendo confianza. Como suele suceder, a medida que repites aquello de la primera vez te vas encariñando con ello y terminas por cogerle gusto. Y lo más importante, te lo guardas para toda la vida, ¿a que sí? Pues juntos hasta siempre, y nuevamente: bienvenido a We. Por cierto, el fallo de imprenta no es tal, está hecho aposta para llamar tu atención, que es lo que se nos da bien.
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MIRAR… Mirar nos brinda una estupenda manera de descubrir el mundo: mirando. Mirando, además, te encuentras con otras miradas, miradas que te miran y que, como la tuya, tienen detrás una historia. Pero algunas la esconden tan bien, que ni siquiera reparas en ellas. Y, sin embargo, hay miradas que te llegan muy dentro. Eso fue lo que me ocurrió con aquel hombre. Era un tipo gris, muy alto, ligeramente encorvado y con pinta de vivir con un cigarro pegado a la boca. Sí, olía a tabaco, a un tabaco especial… Un sombrero cubría su cabeza y también su inseguridad, hasta el punto de haberse convertido en parte de su cuerpo. Quizás lo utilizaba para esconder elegantemente sus rasgos rudos, su cara grande de facciones serias y de ángulos marcados. O quizás trataba de no parecer tan aparentemente agresivo porque en realidad no lo era. Pude intuir en él cierta ternura, la que tímidamente 6
transmitían sus ojos. Y así, tras mucho observarle, llegué a la conclusión de que detrás de su mirada se escondía el final de una historia, pero sobre todo, la congoja de tener que volver a empezar.
Su estilo es muy peculiar, sobre todo porque consigue de una manera increíble transmitir historias a través de sus dibujos. Sin duda, algo tiene de especial Sozyone cuando muchas de sus obras se han mostrado en galerías de arte, y cuando la famosa marca Carhartt le contrató la pasada primavera para que ilustrara la campaña de publicidad de su nueva colección.
El hombre del que hablo es una ilustración, o mejor, una ilustración que fue capaz de transmitirme emociones, demostrando haber nacido de las manos de un gran artista. Pertenece a Sozyone Million González, un graffitero belga de origen español. El verdadero nombre de Sozyone es Pablo González y cuando era pequeño –como muchos de nosotros- leía cómics de Zipi y Zape. Con los años, comenzó a interesarse por la obra de otros grandes dibujantes de la talla de Frank Miller o Stan Lee, y también a hacerse un hueco en la cultura del graffiti.
A pesar de todo, Pablo afirma que no le gustaría hacerse famoso, pero yo os recomiendo fervientemente que contempléis sus obras. Merece la pena detenerse un momento ante sus dibujos y… Que hablen. www.sozyone.com
Texto: Lucía Jiménez Iglesias
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SKATE PARK EN SALAMANCA El Club Deportivo Skate Salamanca (C.D.S.S.) es una asociación creada con el objetivo de reivindicar la construcción de un Skate Park en nuestra ciudad. Si te gusta el skate y compartes nuestro propósito, únete al C.D.S.S.
Firstlove C/ La Fuente, 1 Tlfno: 923 615 622 Salamanca
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Fotos: Hori. Riders: Víctor Rico, Luis Pastor, Javi Varillas y Mani
INSCRIPCIÓN GRATUITA: sólo necesitamos tu D.N.I., teléfono y correo electrónico.
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FESTIVAL INTERNACIONAL DE FOTOGRAFÍA DE CASTILLA Y LEÓN. ROCK MY RELIGION Cruce de caminos entre las artes visuales y el rock DA2 OCTUBRE–DICIEMBRE 2008 SALAMANCA Desde los años cincuenta, las artes visuales y el rock han experimentado una serie de relaciones e intercambios recíprocos que han renovado de modo efectivo el mundo de la imagen, siendo especialmente a través de la fotografía, el vídeo y el cine donde esta hibridación ha dado frutos más significativos que hoy se hallan instalados en el imaginario colectivo. Que artistas tan influyentes como Andy Warhol, Robert Rauschenberg, Richard Hamilton, Dan Graham, Robert Longo, Christian Marclay, Tony Oursler o Joseph Beuys, y movimientos artísticos como el Pop Art, la Performance, el arte conceptual o el situacionismo, entre muchos otros, se hayan aproximado en algún momento de su carrera a los modos e iconografías del rock no hace otra cosa que confirmar el potencial creativo y significativo de este género musical. Desde su nacimiento allá por los años 50, el rock se ha movido en un espacio lleno de paradojas. Por una parte, hay en él una voluntad transgresora que en diferentes momentos del siglo XX ha servido para modificar las costumbres y los hábitos de consumo cultural; pensemos en el impacto que causa en las familias americanas los libidinosos movimientos de Elvis en la televisión a mediados de los 50, la revolución Hippie en San Francisco en los 60, la agresividad punk que vivía Londres en 1977 o la relación del Soul y el Hip Hop en los años 60 y 90 con las reivindicaciones de la comunidad afroamericana, por citar algunos de los ejemplos más reconocidos. El rock, mucho antes que el arte, sirvió para dinamitar las barreras entre la alta y la baja cultura, entre el arte y el espectáculo, entre el escenario y la vida cotidiana, y tal vez por ello el rock ha sido el primer movimiento contracultural de la historia que, desde sus inicios, fue susceptible de ser asimilado e integrado dentro del sistema económico para dar luz a una de las industrias más florecientes del capitalismo cultural.
El proyecto Crossroads, desarrollado en el marco del Festival Internacional de Fotografía de Castilla y León Explorafoto, no elude estas contradicciones inherentes al género, sino que se zambulle en ellas a través de los soportes que mejor han reflejado las grandezas y miserias del rock, la fotografía y la imagen en movimiento. Más de treinta exposiciones individuales y colectivas, de artistas nacionales e internacionales ocuparan los espacios expositivos más significativos de la ciudad de Salamanca, convirtiéndola por varias semanas en una de las capitales internacionales de la imagen.
La habitación perdida No todas las series tienen que tener necesariamente decenas de temporadas y cientos de capítulos, hay algunas que con unas píldoras resuelven tramas consistentes. Este es el caso de “La habitación perdida”, una historia de ciencia ficción y fantasía de tan sólo 6 capítulos. En ellos se cuenta cómo el detective Joe Miller encuentra una misteriosa llave que abre cualquier puerta y lleva siempre a la habitación 10 de un hotel abandonado. Todos los objetos de esa habitación tienen propiedades mágicas y varias organizaciones luchan por hacerse con ellos. En un descuido, la hija del detective, interpretado por Peter Krause (“A dos metros bajo tierra”), entra en el cuarto y desaparece sin dejar rastro. El protagonista no tendrá más remedio que investigar en profundidad la historia de la habitación y de los objetos para poder recuperar a su pequeña. Esta serie, de relaciones sencillas y alguna que otra trampa de guión, es un aperitivo gustoso para picar mientras descansamos de las grandes producciones televisivas. No se enfaden, al final se quedan subtramas abiertas para una posible segunda parte.
Dos hombres y un destino En los últimos años sesenta y primeros setenta, Hollywood vivió una edad dorada fascinante. Las películas realizadas durante esta época en la meca del cine tienen un toque y un estilo característicos. A ello contribuyeron sin duda actores como Paul Newman y Robert Redford. Su magia en pantalla y su talento les encumbran como dos de los mejores de todos los tiempos. Por separado, protagonizaron cintas memorables pero, cuando coincidían en pantalla, el resultado entraba directamente en el olimpo del celuloide. Así ocurrió con “El Golpe” y con la película que recomendamos en este número. “Dos hombres y un destino” es un western atípico, ingenioso y cargado de subtexto, de información latente, como en el trío amoroso (aparentemente en sentido platónico) que mantienen los dos protagonistas con la maestra Etta Place, interpretada por Katharine Ross. Newman y Redford interpretan a Butch Cassidy y Sundance Kid, dos simpáticos y carismáticos forajidos que tienen que emprender una huida desesperada perseguidos por unos comisarios a sueldo de la compañía ferroviaria Union Pacific, harta de que la banda que capitanean ambos asalte sistemáticamente sus trenes. Durante su escapada, que les llevará a un destino exótico cuanto menos, el espectador no podrá evitar identificarse con sus andanzas. Ésa es la magia del cine. Consigue que simpaticemos con personajes que se ganan la vida al margen de la ley. Es lo que tiene el glamour, oye.
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Ü_ma Escuché decir que la música lo cambia todo. Aquellos que han logrado hacerse hueco gracias al mundo myspace afirman que no existe mayor verdad, y sino que se lo pregunten a grupos como Arctic Monkeys. Este verano festivalero ha contribuido a esta gran afirmación poniendo en lo alto a otros como The Right Ons, Russian Red o El Gincho. Pero ahora que la época estival cierra por vacaciones, los melómanos se quedan con las ganas de seguir escuchando las mejores interpretaciones, por eso he decidido aportar algo diferente. Son los catalanes María Coma y Pau Vallve, y juntos forman Ü_ma. Además de crear música se dedican a envolverte en un mundo idílico. Melodías cíclicas, infantiles, ancladas al recuerdo y como ellos dicen, a la nostalgia. Son una mezcla de dulcura y suavidad, unidas en la voz y en instrumentos que ponen forma a ideas y sensaciones. Así que, podría decir que se encargan de exteriorizar los ritmos internos de máquinas y mecanismos, engranajes que funcionan al ritmo de armonías propias de este planeta. Su estilo personal comparte esencia con Tenniscoats incluso con sus paisanos Lágrima, y por eso en la estantería de mi habitación su único disco (en Septiembre publicarán el próximo, “L’Estanislau”) se encuentra compartiendo espacio entre Cocorosie y First aid Kid. http://www.umabcn.com http://www.myspace.com/umabcn
Mis Circunstancias Entregada con varios días de retraso dadas mis actuales circunstancias de trabajadora en prácticas (léase becaria para ser más exacta aunque menos exquisita) esta reseña será insulsa y prescindible pero será, por mi firme propósito que será. Me adelanto a los acontecimientos como casi siempre: pensando en lo que vendrá, previendo sus consecuencias, y cavilando la magnitud del desastre antes de que el desastre tenga lugar. Pero no piensen que corro a evitarlo, si acaso me devano los sesos en busca de una solución y con total seguridad me lamento hondamente por lo desgraciado de mi situación, aunque siempre previamente a que tal situación se dé. Soy previsora de pensamiento y palabra, nunca de obra y por descontado de omisión. Mis circunstancias sólo son una ilusión de mi mente y vivo agobiada con pasado mañana mientras hoy sucede sin que me dé cuenta y ayer sólo pervive en forma de reproche. En vista de lo relatado, no es que el desastre sea inminente, es que es hecho a posta y además me viene al pelo. Pero lo peor no es eso, es que una vez enterrada en el lodo ya puedo lamentarme a gusto. No soporto cuando me comporto así, es terrible. ¿Nunca se han odiado? Lo suponía, más de una y de dos. También Trondheim lo hace, y para más inri el tío va y lo publica. Este artista del cómic nacido en Francia en 1964 guioniza, dibuja y entinta (en este caso no colorea porque el tebeo es en blanco y negro) todas sus obras. En España, Astiberri, una jovencísima editorial que trabaja básicamente con autores patrios y europeos, publica su álbum Mis Circunstancias en una edición muy fiel a la obra original que incluso imita la rotulación utilizada por Trondheim en el recopilatorio Aproximativement, el
equivalente francés al cómic que nos ocupa. Mis circunstancias (Premio del Público a la Mejor Obra Extranjera 2003, en el 21º Salón Internacional del Cómic de Barcelona) es un relato autobiográfico en el que su autor nos narra las desavenencias existenciales que sufre entre finales de 1992 y principios de 1994. La historia alterna fragmentos introspectivos, en los que Trondheim relata obsesiones y frustraciones varias en viñetas cargadas de surrealismo y mala baba, con pasajes en los que dibuja su vida, entre anécdotas del día a día, traspiés y éxitos profesionales. Así, cargado de autocrítica e ironía, Lewis Trondheim nos introduce en su mundo y sus circunstancias –que terminan por parecerse sospechosamente a las nuestras- y de paso nos presenta a sus amigos y compañeros de curro en L’Association, casa editorial creada por un grupo de autores franceses que querían producir sus obras más personales al margen de la industria (gente como Dupuy y Berberian, autores de Diario de un Álbum, en la misma línea autobiográfica que el tebeo de Trondheim). Todos los personajes aparecen caricaturizados con rasgos animales, marca característica del autor que emplea también en otras de sus obras más conocidas, como Lapinot y La Mazmorra. El dibujo del artista francés me pareció a primera vista tosco y sin atractivo, pero a medida que pasaba las páginas descubría interesantes guiños… Como salir del metro con la gorra puesta tras haber tenido un mal día y verlo todo negro, salvo los pies de la gente que te empuja al pasar. Termino con retraso mi jornada de becaria pero entrego por fin la reseña que tanto me atormentaba. Dejo atrás las sacudidas de un terremoto pero no puedo evitar preguntarme cuántas réplicas vendrán después… Así que no olvidaré el paraguas en la redacción, definitivamente la tarde amenaza tormenta.
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Por fin está aquí el nuevo juego del creador de “Los Sims”, Will Wright. En esta ocasión, se trata de “Spore”, un nuevo concepto de estrategia en el que el jugador controlará el nacimiento y la evolución de seres vivos. Con una mecánica similar a la de otros títulos del género como “Civilization”, el juego ofrece la posibilidad de crear y dirigir un universo personal con las características que deseemos. Así, daremos vida a nuestras propias criaturas, exploraremos la galaxia y evolucionaremos para superar distintos retos. Por ejemplo, podremos elegir si nuestros seres tienen uno o cien ojos, o si queremos que tengan patas o pinzas. De nuestras decisiones dependerán la adaptación al medio de nuestra especie y su supervivencia. La idea está pensada para que grandes y pequeños potencien su imaginación jugando a ser Dios. Esta apuesta de la gente de EA Games pretende ser un éxito de ventas ya que, unido al enorme interés generado por los millones de fans de “Los Sims”, ofrecerá la posibilidad de conectarse on-line para compartir nuestras especies o luchar por nuevos planetas. Larga vida a las nuevas ideas. Plataforma: Móviles, PC, MAC, NDS, Wii.
Series, videojuegos: Víctor García Martín. Cómic: Laura Amago Cienfuegos. Música: Idoya Noain Ruiz. Cine: Javier Laso.
incorporarme a la vía, recuperé la visibilidad. La avenida parecía un desierto, los coches descansaban, las aceras estaban… ¡Vacías! ¡No había nadie! Qué curioso. No había atascos, ni semáforos en rojo, ni peaje. Paré en una gasolinera y metí 30 euros de gasoil. Intenté pagar, pero nadie me cobró. Volví y llené el depósito. ¡Qué subidón! Paré en el centro comercial. Todas las tiendas estaban abiertas… Y sin gente. Todo vacío, todo menos mi maletero, que se llenó de comida, cervezas, ropa, discos, películas y todo lo que pude acaparar con el carro de la compra. 2 de agosto, 7:00 A. M. Algunas personas se despiertan por sus fueros, despejadas, sin sueño, con ganas de afrontar el día que nace y disfrutarlo. Pero yo no. Dependo de esa maldita alarma y me levanto agotada, arrastrando mi organismo hacia la ducha, sin voluntad, incapaz de girar el cuello ni abrir los ojos hasta haber pasado cinco minutos bajo el chorro de agua.
Cambié de rumbo. Ir a trabajar… ¿Para qué? Sólo tenía que pararme en cualquier sitio y coger todo lo que me apeteciera. La boca del estómago me enviaba señales confusas, un poco de miedo y mucha, mucha adrenalina. Todo era mío: las tiendas, los restaurantes, los coches, los bancos, los hoteles, los palacios. Dejé mi coche con la compra abandonado en cualquier sitio, ¿para qué lo quería? Iría a buscar una berlina Rolls Royce, o mejor, un deportivo Ferrari, o un Lamborghini. ¡Ah! Y ropa. Necesitaba mucha, mucha ropa. En principio algo cómodo de Jesús de Pozo, para ir al spa. Pensé que me vendría bien hacer un circuito en una piscina termal para relajarme con sus chorros cuello de cisne, contracorrientes, jacuzzi, cama de burbujas… Luego sí, vestiría algo de Amaya Arzuaga y me serviría un buen vino, por ejemplo, un Contador 2204 Rivera de Duero. Para celebrarlo.
Cuando desperté aquella mañana no sonaba ruido alguno, ni el corta césped, ni los pitidos de la grúa, ni la cisterna del vecino, ni los coches… Nada. Se diría que todo el mundo estaba de vacaciones. Todos… Menos yo. ¡Qué esclava de mierda, de esta mierda de trabajo, que apenas me permite una mierda de zulo para mal vivir! Bajé por el ascensor y no tuve que esperar… Raro, estaba libre, Ciertamente, todo el mundo se había ido de vacaciones. El conserje tampoco estaba en el portal. Bajé al garaje. Todo era silencio, los coches solitarios, alineados, ninguno había salido. ¿Sería fiesta? Miré el calendario en el salpicadero: 2 de agosto, un miércoles cualquiera. Salí a la calle, el día era luminoso, muy luminoso. Me cegó el contraluz de la mañana al ascender por la rampa. Al
¡Ah! Al pasar por el Prado me llevé algunos cuadritos para adornar las habitaciones del hotel, “que son muy impersonales”. Las tres gracias de Rubens, por ejemplo, quedaron muy bien en el baño. También pillé para el hall El caballero de la mano 14
Ilustración: Daniel Blázquez… Y su boli bic.
Es tan evocador el número dos que soy incapaz de concentrarme en una de sus formas. Voy y vengo sobre un mar de ideas sin avanzar en ninguna dirección. Nada se concibe sin su bipolaridad; no hay derecha sin izquierda, bien sin mal, belleza sin fealdad, luz sin sombra. La naturaleza lo dispuso todo meticulosamente para que nadie existiera sin sus dos partes y utilizó todas sus artimañas de Celestina para aparearnos y fabricar su numeroso y fluctuante ejército de perdedores. Hombres y bichos obligados a nacer para perderlo todo por el camino, hasta la vida. ¿Qué le vamos a hacer? Ella es así, caprichosa, obstinada, y no ceja en su empeño de perpetuarse, sabe Dios con qué absurdo objetivo. Pero… Es verano, no tengo ganas de seguir elucubrando sobre cuestiones que, como siempre, se me escapan del entendimiento, para lo cual -dicho sea- tampoco hace falta nadar muy profundo. En fin… Tengo otros planes. Voy a bañar de sol dos partes de mi anatomía, que a pesar de vivir juntas no se conocen: mi vientre y mi espalda, y mientras el sol y la brisita del mar se pasean por ellas, voy a cerrar los ojos para a contaros una historia:
Dos años más tarde, por la mañana. No sé qué hora será. Ya no tengo alarma, ni relojes, no los necesito, estoy harta de dormir. Salgo de las mismas sábanas de ayer y de hace una semana, y un mes. Tengo el pelo encrespado, 24 cm. más largo y montañas de ropa sucia de Roberto Verino por la habitación. La gorda Artemisa luce mejor aspecto que yo, pero eso me agrada, al menos así me comparo con ella y encuentro algún absurdo sentido a esta nadería. Tengo sed. No me queda agua en la habitación, bajaré a buscar una botella. Pero no me voy a duchar ni vestir, ¿para qué? Nadie me verá… Si al menos hubiese uno más… Qué bueno sería que pudiera mirarme y opinar sobre mí. Ver lo fea que estoy. Seguro que me encontraría repugnante, con mal olor, sin gracia, pesimista y desagradable. ¡Como me gustaría escuchar su opinión! Si estuviera esa persona. Si fuésemos, al menos, DOS…
en el pecho, de El Greco, (el de los dedos juntos) y encima del sofá colgué a la gorda Artemisa de Rembrandt. Me llenó muy bien el hueco. Acabé agotada, pero feliz. Estaba muy favorecida con mi precioso vestido. Lamenté que nadie pudiera verme y admirarme. Eso fastidiaba. Me hubiese gustado la presencia de alguien, hubiera estado muy bien haber sido, al menos, dos.
El trabajo mbra de la siesta. nu pe la jo ba a os los silenci navegar sobre Car a zó Claudia lo miraba pe em ro pe , aliento en su cuerpo emente, dejando su había hecho mella lc du ra ta en m or at boca lo ra dibujar el permitiendo que su s manos pincel pa su a ab rn to él s ra nt laudia ie licadas caricias. C en cada cicatriz, m de s su a do en di erpo respon ocándole contorno de su cu jo su ombligo prov ba ra fe ós m at a ía el cálid entaba, Carlos perd m había creado una au r lo ca el e qu arena a medida que la tormenta de mareas de placer y, sta ha , co po a co e erpo po y dulce rastro sobr ve le control sobre su cu un o nd ja de desapareció que habitaba en él Claudia. 15
es García Texto: Natalia Moral
Texto: María José Amador
Pasaron los días. Las tres gracias no me hacían ni una mierda de ídem. Ellas autistas, ajenas, mirándose entre sí, ignorándome. Siempre el mismo reflejo en el espejo, muchas camisas diferentes, gafas, sombreros, maquillajes, pero el mismo careto, el mismo gesto de fastidio, de aburrimiento, de hastío… Yo, sólo yo. Si al menos hubiese otra persona, habría tenido alguien con quien compartir, alguien diferente al que mirar. ¡Si hubiésemos sido dos!
re el ring. tres comportamiento sob llaves de áaaan a doooos de har una de las más célebres luc de , r lico nto púb inve el ble fue Él ¡¡¡Respeta que era , llo” ba ca o “la de a poooo!!! rendición conocida com caídas sin límite de tiem espalda la en e tars sen en soportar y consistía de le osib imp le de s ndo má tirá ulo derribado, a el inicio del espectác sario una vez que había sido ver ad l de pedir a Era el grito que anunciab iera se hic liga ob que le ta que el dolor . La letra de la canción la barbilla hacia atrás, has a: esperado de la semana tinú con era tan San uesta Sonora popular la famosísima orq a de la clemencia. e en bote, la gente loc bot de a ab “La arena est de diez de la los ído hador, participó en más an los cuatro rudos En cincuenta años de luc s de emoción, en el ring luchab llera g” be Do ca l do Bul el tan y n cor scarando y nario, Blue Demo mil combates, desenma átero afición: El Santo, El Caver dril cua el en vo ntu ma dientes y se que decenas de conten al miocardio ta”, es el nombre con el pla plir sesenta años. Un infarto de cum do de ara és asc spu enm de el aún “Santo, de s edad y a su are de pul s po año as morir tenía 67 s grandes leyend fue su último adversario. Al se conoce a una de las má bre nom ro de . da nas ver rso el pe diez mil án Huerta era funeral asistieron más de México, y Rodolfo Guzm e. éro del superh za. leyenda apenas comien pulares de México y Su po s má rtes po de los de La lucha libre es uno dió hasta hombre cuya fama trascen de este deporte surgió el vertido con l planeta. El Santo se ha los más lejanos rincones de del tos, uer ent de o del desfacedor en un icono representativ las sde de o did cen tras que ha superman del subdesarrollo no Y d. lida círculos de la intelectua clases populares hasta los tura cul la ra pa a eno que represent únicamente por el fenóm o o la transmite más allá del mit que rza fue de masas por la , porque existió. leyenda, sino precisamente oe local; l mundo poseen un hér Casi todos los países de otros, de r, rito esc ún alg de ía la fantas muchos son producto de n parte aro los menos, forman o form las leyendas populares, y aridad pul po su nte debe mayorme del mundo real. El Santo en el ró ont enc en qui z Cru José G. al dibujante de historietas ras ntu ave al para entretener con sus luchador al personaje ide lón mil un de s má ando a imprimir a millones de lectores, lleg hador, con las aventuras del luc ic cóm l de de ejemplares finales a El Santo lo llevó al cine por semana. La fama de tra el con nto “Sa s películas fueron de los años 50; sus primera que , les” rna infe s bre Contra los hom Cerebro del Mal” y “Santo más lizó rea a rrer ca su e ant Cuba. Dur por cierto, se filmaron en las más los que se enfrentaba con en es film nta cue cin de entes, vivi s mia mo r racterizadas po diversas fuerzas del mal ca uos nstr mo les ími ros inve s , y los má s sensuales mujeres vampiro rme eno n anidad y que dejaro que acechaban a la hum ad arid pul po la n tores y acrecentaro ganancias a sus produc do. del enmascara do sin olfo Guzmán había intenta Antes de ser El Santo, Rod zmán, Gu y Rud o com oso; se inició éxito ser un luchador fam y El gro Ne nio mo De El do, ascara El Hombre Rojo, El Enm que 2 194 de hasta el 26 de julio Murciélago II, pero no fue él nunca lo proyectó a niveles que que bre debutó con el nom hubiese imaginado. limitan los dos bandos en que se de El Santo perteneció a los definen se s ero técnicos. Los prim luchadores: los rudos y los ncia erie exp la a sión (alu retorcido ra por su colmillo largo y pa s pa uso de artimañas y tram n16 como mañosos en el bue el y las reg cuidadosos de las vencer) y los segundos son
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orígene orrón” tiene sus “g ra b la a p la …
r dinero propio. irlo para no gasta um ns co o lo ar us o, ferido a algo ajen Gorronear: 1. Re especie de a. en aj sta e gorronea, una co qu a na ir viv rso o pe er la m es 2. Co radura… acecho de todo c.) para estar al ado, chupón, ca et ch s, ve te ro ue ap , nq re ba ng sa rias, fiestas, llamado chupa ontecimiento (fe El gorrón, también da clase de ac to r po o elt su da parásito que an rsos y al estar eda arrebañar. , carecían de recu rra pu go se y e ”. a qu gr llo ne ue pa aq “comer de gorra iforme de ca uí vino la expresión III, que vestían un aq XV De al I is. XV at gr los er sig ra com gorras. lmantinos de los amente con sus y fiestas ajenas pa Los estudiantes sa n saludar gracios n en banquetes lía ba so la os co ell se e s, qu ilia r lo s lejos de sus fam indumentaria, po o con las persona fácilmente por su nes, pero cuidad rro go os un Se les reconocía os os seam diantes salmantin día todos los estu en y ho e qu cir Esto no quiere de n... que se os acerca arez Maidero
Texto: Paloma Álv
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estampas interpretaba el gusto de la época, satirizaba a la sociedad y caricaturizaba todo tipo de personajes.
¿José Guadalupe Posada? En el Panteón de los Dolores nadie reclamaba aquellos restos enterrados en una sepultura de sexta clase. En siete años trasladarían al muerto a un lugar más espacioso: una fosa común. Lo poco que quedaba de él, habría de compartir la eternidad con otros tantos huesos pobres, huesos trabajadores, huesos desheredados, huesos que nada tuvieron en vida… Me atrevería a decir que Posada está rodeado de aquellos con los que de verdad quería estar.
de periódico. Azuzaba con colores brillantes y llamativos la conciencia política de su pueblo, adornándolo con lujosos vestidos y flores pero calándolo… Hasta los huesos.
que luego hizo propia. Sus dibujos servían para ilustrar noticias, cuentos, oraciones y todo escrito que relatase los acontecimientos y sucesos más importantes del momento. José Guadalupe trabajó incansablemente en la prensa dirigida a los trabajadores y en sus
Posada comenzó a trabajar en una modesta imprenta
El grabador mexicano José Guadalupe Posada nacía en 1852 en Aguascalientes, México, para convertirse en un continuador del grabado popular mexicano y en un importante cronista de la época. Trabajaba en madera, cinc, cobre… Y estampaba las vergüenzas, las desigualdades y la realidad que vivía en papel
Sus famosas calaveras han llegado a convertirse en símbolo del pueblo mexicano. A través de ellas, se reía Posada de la vida, de las clases sociales y de uno mismo. Aunque este maestro hace mucho que no se encuentra entre nosotros, sus huesos y su(s) calavera(s) siguen moviéndose, denunciando, riendo… Y así para siempre porque, a pesar del paso del tiempo, existen cosas intemporales que no cambian fácilmente (véanse las desigualdades sociales). Entender sus impactantes y expresivos grabados es sencillo, ¿por qué calaveras? Él mismo lo explicaba: “la muerte es democrática ya que a fin de cuentas, güera, morena, rica o pobre, toda la gente acaba siendo calavera”.
19 Texto: Beatriz García Albuerne
Guía de lugares con encanto (y encantados) que te encantarán
Los 2 cielos de Salamanca. Y sí, es la única ciudad que puede presumir de dos atardeceres diferentes pero igual de encantadores. Para el de toda la vida, lo ideal es subir a Ieronimus o La Torre Mocha (trasera de la Catedral Vieja) y contemplar desde arriba el casco antiguo de la ciudad, desde la Plaza hasta el río (y de paso, echar un ojo a la Catedral Vieja, una joya que siempre está cerrada al público). Para ver el otro Cielo de Salamanca, coge tu guía, busca la fachada de la Rana y métete en el Patio de Escuelas Menores. Se trata una antigua biblioteca del s. XIII cuya bóveda está decorada al fresco con las diferentes constelaciones (símbolo de Salamanca Ciudad de Cultura) y acondicionada hoy en día para entrar y detener el tiempo cinco minutos. EL huerto de Calixto y Melibea. No en vano, es aquí donde se acuñó la expresión “llevarse a alguien al huerto”, porque no hay rincón más romántico que este jardincito (trasera de Anaya - Patio Chico de la Catedral) con vistas al atardecer sobre el Tormes. También apto para solitarios nostálgicos. Ya de paso, detente cinco minutos en el Patio Chico y mira para arriba, porque el espectáculo de millones de pájaros yendo y viniendo justo en el momento en que se empieza a poner el sol es irrepetible. La Cueva de Salamanca. Probablemente, el lugar más encantado de esta ciudad, y sobre el que más cuentos, fábulas y leyendas oirás. Pues bien, todas son ciertas. Empápate bien antes de ir de toda la historia de esta cripta de la antigua iglesia de San Cebrián, de los oscuros ritos que el diablo enseñaba allí, y de las andanzas del más célebre alumno, el Marqués de Villena. Al margen de todo eso, es un lugar muy especial que merece sus cinco minutos –visítala de noche, porque si no, pierde toda la gracia-. Está en la Plaza del Carvajal, bajando por la cuesta de San Pablo. El bosque de Colores. También conocido como “El bosque encantado”, una experiencia que, guiados por al artista vasco Ibarrola, llevaron a cabo alumnos de Bellas Artes en 1995. Así es como dieron “otra vida” a los olmos de la ciudad: tallándolos y pintándolos de vivos colores los salvaron de la “grafiosis”, enfermedad que los estaba secando en las diferentes avenidas y parques. Se encuentra al otro lado del río; accede por el Puente Romano, no tiene pérdida. La Casa Lis y los masones. Tampoco te queremos hacer andar demasiado: aprovechando que estás en el Puente Romano, sin duda te habrás fijado en este maravilloso palacete de estilo Art Decó. Que no te echen para atrás los 2 euros de la entrada (precio estudiantes), porque alberga la mejor de las escasas colecciones de Art Decó y Noveau que hay en España. Y ya que te encuentras en la ya mítica Calle del Expolio, entra en el Archivo y pregunta por la Sala de la Masonería, una reconstrucción de las salas de este tipo que existían en la ciudad y que se clausuraron en la época de la Guerra Civil que, además, explica su simbología. No es espectacular pero merece la pena por lo original y peculiar que es. La terraza del Quijote. En nuestro año nuevo “septembril” aún no hace excesivo frío, por lo que te recomendamos terminar el día sentadito con una cervecita fresca, algo que nos encanta a los residentes. No queremos hacer propaganda gratuita, pero es que realmente merece la pena “entrar” en esta terraza. Qué paradoja, ¿una terraza no es exterior por definición? A lo mejor es por eso por lo que nos quedamos con esta terraza de las múltiples que te encontrarás por Salamanca: se trata de un jardincito interior con cuatro mesas, sin excesivo ruido, sin excesiva gente. El bar El Quijote se encuentra en la Calle Serranos (pregunta por la Pontificia o por la Facultad de Historia), entra y atraviesa el bar. 20
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No sé a quién se le ocurrió celebrar Año Nuevo en enero, cuando, para todo estudiante (y derivados) que se precie, siempre comienza el año en septiembre. Nuevo curso, nueva etapa, nueva gente, nuevos propósitos. Vaya, lo que se viene conociendo como borrón y cuenta nueva. Desde WE queremos ayudarte a poner en marcha este Nuevo Año ofreciéndote una lista de rincones que, si ya has venido a buscar piso, seguro has pasado por alto –más que nada porque las guías y planos los pasan por alto-. Y ello tiene delito, porque Salamanca va más allá de las tardes en la Plaza y las noches por San Justo. Feliz Año Nuevo.
Esperemos que te guste Salamanca tanto como a nosotros, que un día vinimos como tú (con dos maletas), y de pasar una temporada pasamos a pasar por salmantinos de pro, afincándonos incondicionalmente. Esperemos que Salamanca deje de ser, algún día, sólo una ciudad de paso para miles de estudiantes. Esperemos.
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Texto: Paula Pérez Sobrino, salmantina por adopción y curiosa
Paniagua. Tan necesario como comer y beber, es perderse en los entresijos de la noche salmantina. Aunque la oferta no puede ser más amplia (a la par que sugerente, tanto por la variedad de locales como de personajes), desde WE te recomendamos empezar con el bar Paniagua, por varias razones: está al principio de Varillas, la calle en donde se cuece todo, las libaciones son bastante asequibles y, en un ambiente familiar, te codearás (literalmente, porque suele estar hasta arriba en fin de semana) con locales, estudiantes, erasmus y más de un despistado. Y siempre te encuentras a alguien dispuesto a continuar la noche y romper Salamanca (ya que con tanta piedra, esto no se puede quemar).
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