Orientaciones al profesor
Apreciado profesor,
Este material no puede ser uno más para utilizar en los grupos pequeños, debe ser lo que permeará las actitudes de sus adolescentes mientras lo estudian y comparten sus experiencias. Está basado en el principio del discipulado. ¿Usted comprende qué es discipulado? Jesús les ordenó a sus discípulos que hicieran otros discípulos y esa orden está relatada en Mateo 28:19 y 20: “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. Esa misma tarea Jesús la dirige a nosotros por ser sus discípulos modernos. Sabemos que “discípulo” es quien sigue los pasos de otro, pero Jesús amplió ese concepto, haciéndolo sinónimo de “amigo”; podemos encontrar la afirmación de ese concepto descripto en Juan 15:15: “Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer”. Si Jesús nos desafía a hacer nuevos discípulos, al mismo tiempo podemos alegar que también nos está pidiendo que hagamos nuevos amigos para él. ¿Cuáles son las implicaciones que ese concepto le trae a usted que es líder de un grupo pequeño? 1. Que el grupo pequeño necesita ser un ambiente formado por amistades sinceras. 2. Que se debe conquistar y amar primero, antes de querer que alguien sea conquistado para Cristo. 3. Que el discipulado solo impactará la vida de otro si el que discipula es un verdadero amigo de Dios, amigo de los miembros y de su comunidad y está personalmente involucrado en la salvación de un amigo. Siendo así, consideramos que el líder del GP es un discipulador. La relación entre él y sus alumnos está basada en el modelo de Cristo y sus discípulos, en la cual el maestro reproduce muy bien en el alumno la plenitud de la vida que tiene en Cristo, de manera que el alumno llegue a ser capaz de enseñar a otros” (Keith Phillips). Por eso, es más práctico y todos son mejor atendidos cuando usted divide su grupo pequeño en parejas. Componentes esenciales del discipulado: 1. Renuncia al yo. El proceso de discipulado presupone la muerte del yo. Tiene un precio que debe pagarse: tiempo de dedicación hacia la persona que está siendo discipulada; y tiempo es lo que menos tenemos hoy, ¿es así? Muchas veces es necesario renunciar a algún tiempo que dedicaría a usted, para su trabajo o familia para poder dedicárselo al amigo. Lo que no quiere decir que usted dejará siempre a su familia en segundo lugar. Jesús dejó bien claro ese componente al afirmar “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame. Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, éste la salvará” (Lucas 9:23, 24). 2. Multiplicación o reproducción. A medida que el discípulo entiende lo que es ese proceso y siente lo que es ser cuidado por alguien, tendrá condiciones de discipular a otra persona. Y así el que es cuidado, adopta a otro y comienza a armarse una red de discipuladores. El cuidado en el discipulado comprende: • Interés y apoyo en todos los aspectos de la vida de la persona que está siendo cuidada. • Compartir experiencias, pedidos de oración, reflexiones a partir de la lectura de la Biblia y decisiones tomadas. • Feedback o rendición de cuentas. A medida que la amistad se profundiza, se establece un ambiente propicio para que cada adolescente desafíe al otro a encontrar en qué áreas necesita madurar y crecer espiritualmente y también hay libertad para proponerse desafíos a alcanzar que serán verificados en
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