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Una muerte cada doce días: La asfixia por sumersión en Puerto Rico, un problema de salud pública
Una muerte en las playas cada 12 días:
La asfixia por sumersión en Puerto Rico, un problema de salud pública
Foto: Oliver Bencosme Palmer
Cientos de personas se acercan a la orilla del mar para ver de cerca a los surfistas en el Rip Curl Pro Search, en Isabela. Esto es ejemplo del interés de los puertorriqueños por las actividades recreativas marinas.
Por: Berliz Morales Muñoz
Puerto Rico goza de un clima agradable durante todo el año, apto para el desarrollo de actividades al aire libre. Siendo un archipiélago, nuestras playas se convierten en el destino predilecto, tanto para turistas internacionales como para residentes. De las 621 millas de costas que tiene Puerto Rico, unas 129 (21%) son de playas. Nuestras costas son idóneas para múltiples usos, tales como: la recreación marina, el transporte y la pesca recreativa y comercial, entre otros.
Anualmente, el litoral puertorriqueño recibe miles de personas decididas a llevar a cabo actividades recreativas en las playas. Es en este mismo espacio donde, desafortunadamente, culmina la vida de, aproximadamente, 30 personas al año. Niños, mujeres y hombres de todas las edades son víctimas de incidentes de asfixia por sumersión—comúnmente llamados ahogamientos—, lo que constituye una problemática desde el punto de vista de salud pública. ¿Qué podemos denominar como asfixia por sumersión? De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), asfixia por sumersión se define como el proceso de sufrir dificultades respiratorias por sumersión/inmersión en un líquido. Cada año, se calcula que, en el mundo, mueren por asfixia por sumersión en los distintos cuerpos de agua, un total de 388,000 personas. En el caso particular de Puerto Rico, de acuerdo con las estadísticas provistas por el Instituto de Ciencias Forenses, un total de 363 personas han fallecido bajo la categoría de asfixia por sumersión en playas de Puerto Rico, desde 1999 hasta 2010. Esta cifra podría estar subestimada, dado que no están incluidas aquellas víctimas trasladadas a hospitales por complicaciones respiratorias producto de un casi ahogamiento y que, finalmente, perecieron en hospitales o facilidades de atención médica.
Independientemente de la cantidad de víctimas que fallecen anualmente, la realidad es que este tipo
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El ROC Rescates ~ Oceánicos ~ Costeros salva vidas
EL ROC SALVA VIDAS
Desde 1999 hasta 2010, se han ahogado 363 personas en las playas de Puerto Rico. tuvieron la diligencia necesaria para darse cuenta de que su niño se alejaba cada vez más de la orilla en su flotador; decidieron recrearse en una playa de alta energía destinada, particularmente, a deportes como el surfing; o fueron arrastrados por corrientes marinas o aquellas generadas por el oleaje y no supieron cómo salir de ellas. Un 85% de las personas que mueren por asfixia por sumersión en Puerto Rico, anualmente, son hombres. En ambos casos, tanto hombres como mujeres, más del 75% se encontraba entre las edades de 16 años y 65 años, edad apta para formar parte de la fuerza laboral. Ello sugiere que su fallecimiento repercute en una merma en productividad laboral. Menos del 5% de las víctimas de ahogamientos son turistas internacionales, lo cual indica que los involucrados son, en su mayoría, puertorriqueños.
Ante un panorama un tanto sombrío, las buenas noticias anuncian que todos estos factores se pueden evitar. Diseñar e implementar medidas que apacigüen esta problemática social y reduzan el número de muertes de asfixia por sumersión en la Isla ha sido el norte hacia el cual el Proyecto de Seguridad Acuática para Puerto Rico, del Programa Sea Grant de la Universidad de Puerto Rico (PSGUPR), ha dirigido sus esfuerzos.
El Proyecto de Seguridad Acuática para Puerto Rico surge como respuesta a la necesidad de reconocer
de muerte accidental puede ser prevenida. Según los doctores cubanos, Mario Callejo Hernández y Héctor Martínez López, la muerte de asfixia por sumersión es aquella que ocurre en las primeras 24 horas después del incidente. Si la persona sobrevive más de ese tiempo, se denomina casi ahogamiento, independientemente, que al final muera o no. Otro tipo de consecuencias que produce un casi ahogamiento es que, dependiendo de la duración de la inmersión, pueden afectarse todos los tejidos del organismo, desatando un deterioro en funciones neurológicas, renales, metabólicas y pulmonares. Ciertamente, las consecuencias de un casi ahogamiento son nefastas. Dentro de los factores que podemos resaltar, tanto de las autopsias como de las querellas policíacas, es que, en la mayoría de los casos, estos incidentes obedecen a que: los usuarios habían estado bajo estado de embriaguez; no
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las muertes por asfixia por sumersión, en nuestras playas, como una problemática social, la cual, si bien es ignorada por unos, para otros representa una huella muy profunda. El mismo comenzó a partir de septiembre de 2010 tras una preocupación manifestada por parte del director del PSGUPR, el señor Ruperto Chaparro Serrano. No fue hasta noviembre de 2010 que el proyecto adquiere su nombre oficial. Este logra concretarse luego de múltiples acciones realizadas, desde 1999, por parte del señor Chaparro, quien desde hace poco más de dos décadas ya sentía el deseo de diseñar estrategias accesibles y de gran envergadura que promovieran la seguridad acuática en nuestras playas. Sumado al señor Chaparro, Berliz Morales, estudiante graduada de la Universidad de Costa Rica, y Cristina Hernández, estudiante subgraduada, así como salvavidas de Puerto Rico, contribuyeron a aportar ideas en torno al diseño de materiales instruccionales, la coordinación de talleres y la promoción del mensaje de seguridad a través de diversos medios.
La primera reunión de salvavidas de mar abierto de Puerto Rico, convocada por el proyecto, se celebró el sábado, 2 de octubre de 2010 con salvavidas de Luquillo, Aguada, Aguadilla e Isabela. En la reunión, se abordaron temas como: certificaciones de salvavidas, la Ley del Buen Samaritano, falta de presencia de salvavidas en las playas, necesidad de entrenamiento y de instrucción de salvavidas y la responsabilidad de las autoridades gubernamentales en estos asuntos, incluyendo: el Departamento de Salud, el Departamento de Recreación y Deportes, la Policía de Puerto Rico, la Compañía de Turismo, la Junta Interagencial de Playas de Puerto Rico y el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales. El Proyecto de Seguridad Acuática para Puerto Rico realiza esfuerzos para la implementación, en varios municipios costeros de nuestra Isla, del proyecto piloto Rescates Oceánicos Costeros (ROC), dirigido a establecer los criterios de lo que debe ser una playa segura desde el punto de vista de planificación ambiental. Se pretende que, a partir del proyecto ROC, la seguridad acuática se convierta en un componente importante dentro de la agenda administrativa de los municipios costeros de Puerto Rico en coordinación con el gobierno central.
No podemos perder de perspectiva que la vida, siendo un derecho inalienable, debe ser cuidada, respetada y valorada. Garantizar la seguridad de la vida humana y promover el disfrute sano y responsable de nuestros recursos y atracciones costeras es el norte que persigue el Proyecto de Seguridad Acuática para Puerto Rico.
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Del año 2010*, se utilizaron los datos de seis meses. Cada símbolo representa una persona muerta. 24 / 4 29 / 2 21 / 3 25 / 3 20 / 1
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Figura: Berliz Morales Muñoz Adaptación: Oliver Bencosme Palmer