Hacia una Ley General de Juventudes: Desafíos futuros Martha Mercado 28 Entrevista con: Gisela Rubach

Hacia una Ley General de Juventudes: Desafíos futuros Martha Mercado*

El pasado 12 de agosto del presente año, se celebró el Día de la Juventud en México. De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, se estima que en el país hay 30.6 millones de jóvenes de entre 15 y 29 años, los cuales representan el 25.7% de la población en México.

La población joven en México juega un papel muy importante como parte de la sociedad mexicana, pues representa la herencia intelectual y cultural de una profunda transformación de la sociedad mexicana.

El Congreso Federal aprobó recientemente una propuesta de reforma constitucional a los artículos 4° y 73° de la Constitución Federal. De ser aprobada, a su vez, por las legislaturas de las Entidades Federativas, se convertirá en una reforma constitucional que representará la llave que permitirá la creación de una legislación nacional en torno a las y los jóvenes. Esto significa la apertura de la puerta hacia una legislación dirigida exclusivamente a la población joven en el país. Toda gran oportunidad presenta, a la vez, grandes retos que cumplir.

¿Podrá el esfuerzo legislativo estar a la altura de las circunstancias? Debe proveerse un marco que garantice nuevas oportunidades a una amplia población joven, que reduzca las desigualdades e incremente las posibilidades de formación educativa de calidad y que, en suma, permita un futuro laboral sólido.

El párrafo, que (de aprobarse por las legislaturas) se adicionaría al artículo 4°; establece que las personas jóvenes tienen derecho a un desarrollo integral, el que se garantizará mediante la protección de los derechos humanos y las garantías reconocidas en la Constitución y los tratados internacionales de los que México sea parte. Aunado a ello, la minuta refiere que, para cumplir con este objetivo, la ley establecerá los instrumentos necesarios y la concurrencia de la Federación, entidades federativas, municipios y demarcaciones territoriales.

Para cumplir con el objetivo de esta encomienda, la propia minuta dispone la modificación del artículo 73 de la Constitución. Este precepto de distribución competencial, potencialmente, vería incorporada una fracción que consagra la potestad de expedir leyes que garanticen el desarrollo integral de las personas jóvenes, y que establezcan la concurrencia de la Federación, entidades federativas, municipios y en su caso, las demarcaciones territoriales de la Ciudad de México, en el ámbito de sus respectivas competencias, en materia de juventud.

Esta futura reforma abre la amplia oportunidad de tener un instrumento legal que salvaguarde los derechos de las personas de entre 15 y 24 años, que la propia Organización de las Naciones Unidas considera como definitorio de la juventud.

La reforma al artículo 73 de la Constitución Federal, cuya aprobación corresponde ahora a las legislaturas locales, parte de un debate sostenido en diversas legislaturas sobre las competencias implícitas del Congreso. ¿Tenía o no competencia implícita el Congreso para expedir tal ley previamente con fundamento en la fracción XXXI del propio artículo 73? El debate sobre los posibles marcos legislativos generales será zanjado si esta potencial reforma constitucional resulta aprobada, pues expresamente centralizará tal facultad.

La próxima creación de una normativa general, pretende ampliar el espectro de derechos y garantías de la juventud, creando un marco

*Martha Mercado es Magistrada Electoral del Tribunal Electoral de la Ciudad de México. Licenciada en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México, con el grado de Especialidad en Derecho Electoral por la misma casa de estudios, con mención honorifica en ambos casos. Se desempeñó como Secretaria de Estudio y Cuenta en la Sala Regional Especializada, así como en la Sala Regional Ciudad de México. Fungió como asesora en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y fue Directora del Instituto de Formación y Capacitación del Tribunal Electoral de la Ciudad de México.

@MarthaMercadoRm

homogéneo; un marco destinado a cerrar brechas de desigualdad y promover la inclusión social y económica en la juventud mexicana. El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación estima que, en México, casi la mitad de la población vive en situación de pobreza, pues cerca de 19.7 millones de jóvenes tienen ingresos menores a la línea de bienestar.

De igual manera, las estadísticas del INEGI calculan que en materia educativa al menos el 66% de los jóvenes de 15 a 29 años no asiste a la escuela. De igual forma, 8 de cada 10 jóvenes en el mismo rango de edad tienen un nivel económico bajo y, si bien algunos pertenecen al sector laboral informal, no gozan de beneficios o prestaciones laborales ni economía fiscal.

La dimensión sobre la gran problemática del futuro de la juventud mexicana radica en gran manera en el rezago académico y la exclusión de jóvenes en los escalones sociales. No solo es difícil el acceso a la educación, sino que inclusive con este, la movilidad económica se encuentra restringida. La dificultad de insertarse al mercado de trabajo pese a su formación académica es muestra de la fractura de la vieja idea de que la educación es la vía automática para la movilidad de aspiraciones.

La pobreza, desigualdad, falta de acceso a sistemas integrales de salud, exclusión social y las carencias en materia de prevención del delito y seguridad ciudadana, son factores graves y directos que inciden especialmente en la juventud. Es un momento histórico para entender que deben atenderse estas condiciones de desigualdad estructural.

La Ley de Juventudes deberá contener un alto grado de consciencia social, así como estrategias y mecanismos que establezcan las directrices de la persona como una esperanza del futuro en la vida del país., Debe tener como base la creación de programas eficientes acorde a una educación integral e inclusiva, con miras a una reforma educativa. La promoción de la continuidad escolar como pilar de cualquier sociedad es reconocer que las manos del país en gran medida están en la juventud.

El alcance de estas futuras reformas resulta significativo en momentos como este. México pasa por complejos contextos económicos y sociales agravados por la pandemia COVID-19. Los momentos difíciles son también aquéllos que nos permiten replantear estrategias. Es tiempo no sólo de reflexionar en el futuro de las personas jóvenes, sino también en concebir sus oportunidades como oportunidades para el país mismo. Es momento de visualizar a la juventud no como el futuro heredero, sino como el titular presente del destino nacional.

En la actualidad, la minuta que hemos mencionado cuenta con 4 votos aprobatorios por parte de las legislaturas locales.1 El alto consenso de esta reforma podría vaticinar una aprobación final no muy distante y el texto pasará de ser promesa de cambio, a demandante realidad llena de desafíos.

El reto legislativo no será minúsculo. Es una coyuntura única que conjuga necesidades diversas de una población homogénea quizá únicamente por su propia vulnerabilidad.

Es una deuda histórica frente a la sociedad mexicana y para sus sectores más segregados históricamente. Para el legislador, será momento de recordar.

REFERENCIAS

1.El conteo oficial puede verse en: http://www.diputados.gob.mx/ LeyesBiblio/votosle.htm (última consulta 3/11/2020).