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Qué nos mueve?

La educación para el desarrollo de la competencia global y ciudadana puede ser una palanca de transformación de la escuela y, a la vez, contribuir a que la escuela sea un agente de transformación de la sociedad, para avanzar hacia un mundo más inclusivo, justo y sostenible:

“Las escuelas para la ciudadanía global vinculan el desarrollo emocional al desarrollo ético o moral con el objetivo de salvaguardar la propia dignidad y la dignidad del otro. Ayudan a construir una sensibilidad hacia los colectivos empobrecidos y excluidos, y en general, hacia los procesos que generan desigualdad y exclusión.” (De Paz, 2013)

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5.3. DIMENSIÓN EMOCIONAL (¿QUÉ NOS MUEVE?)

Esta dimensión se plantea preguntas como estas: ¿Somos en primer lugar seres que pensamos o seres que sentimos? ¿Las emociones influyen en el aprendizaje de los alumnos? ¿Qué son las emociones y los sentimientos y cómo influyen en nuestra vida? ¿Se puede educar la dimensión emocional desde pequeños? ¿Qué hay detrás de una conducta inadecuada de un alumno, una mala gestión emocional o un problema cognitivo?

El ser emocional no es lo opuesto al ser racional, sino algo complementario y significativo. Además, emociones y pensamientos, sentir y pensar, emoción y cognición son funciones que se mezclan e interactúan, y pocas veces se expresan de forma completamente independiente. De hecho, el cerebro emocional y el cerebro cognitivo, aunque con funciones diferentes, se relacionan continuamente, se mandan informaciones entre ellos aunque, unas veces uno y otras veces otro, tomen las riendas de nuestra vida.

Humberto Maturana, biólogo y filósofo chileno, plantea que lo humano se constituye en el entrelazamiento de lo emocional con lo racional, y que todas nuestras acciones tienen un fundamento en lo emocional. Por eso la dimensión emocional ofrece respuestas al modo de funcionar de las personas ante actuaciones o decisiones no explicables con los parámetros racionales (Maturana, 1989).

Es evidente que la evolución tecnológica de nuestra sociedad ha sido espectacular en los últimos años, y que el proceso se acelera vertiginosamente. No era fácil predecir que en una época tan tecnológica

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