LA INTERVENCIÓN DIDÁCTICA, PARTE FUNDAMENTAL DE LA LABOR DOCENTE

Lic. Azucena Evangelista Campos

Directora de la USAER Pihuamo

Uno de los grandes retos y desafíos como docente de educación especial es llevar a cabo prácticas que desarrollen al máximo las potencialidades de los alumnos a través de una planeación acorde a las necesidades que presentan. Esto implica conocer las características, condición, nivel cognitivo de cada uno, identificar qué son capaces de hacer y a qué aprendizajes pueden acceder, este es el punto de partida para realizar una planeación que brinde una respuesta educativa pertinente.

El principal elemento para desarrollar una planeación es conocer a los alumnos, se debe partir de conocer su contexto (familiar, escolar y áulico), para en base a ello crear prácticas que sean contextualizadas, esto es tomar en cuenta sus intereses, motivaciones, su forma de aprender, capacidades y habilidades.

La planeación didáctica es la herramienta fundamental de todo docente, nuestro punto de partida y de llegada para evidenciar avances, es inherente a nuestra práctica pues es a través de ella que trazamos el camino para llegar al objetivo planteado.

Consta de 3 elementos esenciales que son los siguientes: -Propósitos: delimitar qué es lo que deben aprender los alumnos. -Actividades: se refiere a las estrategias a implementar y cómo hacer para alcanzar esos propósitos. -Evaluación: la forma de reunir las evidencias de lo aprendido así como identificar si los propósitos han sido alcanzados.

La planeación estructura el trabajo del docente en el aula con la flexibilidad de adecuar algunas actividades, ya que por factores ajenos en ocasiones se altera la

dinámica al momento de aplicarla, pues sabemos de antemano que es solo una guía que orientará nuestro trabajo y en el transcurso de la misma surgirán aspectos donde debemos echar mano para implementar estrategias que no están dentro de la planeación.

De acuerdo a la RIEB, la concibe como: plantear acciones, para la intervención del docente hacia el desarrollo de las competencias, aprendizajes esperados y estándares.

Además marca los componentes esenciales en el registro de la planificación: competencias para la vida, rasgos del perfil de egreso, competencia de las asignaturas, ámbitos o ejes, estándares curriculares, aprendizajes esperados y contenidos, los cuales debemos de conocer pues constituyen el eje rector de una planeación adecuada, pues el propósito principal es orientar la intencionalidad de los enfoques de la enseñanza que apoyan a la práctica docente.

La planeación no debe ser estandarizada, esta debe responder a las necesidades y procesos de los alumnos. De acuerdo con la temática abordada y con base a mi experiencia me enfocaré solo a mencionar la forma de trabajar en mi área, la cual es planeación a través de proyectos didácticos, debido a que se abordan varias situaciones didácticas en un periodo más largo de tiempo dando pauta a trabajar un aprendizaje esperado en varias sesiones.

Es necesario como docente tener una visión hacia la planeación, verificar a través de la evaluación el logro de los aprendizajes, además que nos servirá para replantear actividades o estrategias para obtener un aprendizaje significativo.

Nos da una perspectiva de cómo evaluar, donde señala que es importante clasificar los aprendizajes esperados de acuerdo a metas de aprendizaje (conocimientos, razonamiento, habilidades de desempeño, habilidades para creación de productos), además de implementar diferentes métodos de evaluación (selección de respuesta, respuesta extendida, desempeño, y de comunicación personal) para de esta forma dar cuenta de los avances de los alumnos.

Cabe mencionar que para la evaluación, en el caso de los alumnos con discapacidad, se deben implementar los instrumentos y técnicas definidos en el plan de intervención (observación: diario de trabajo; desempeño de los alumnos: cuadernos de los alumnos; análisis del desempeño: portafolio, rúbrica, lista de cotejo), además de tomar en cuenta los procesos de los niños, su condición y características, es por ello que resulta imprescindible que los maestros de grupo tomen en cuenta estos parámetros.

Sin embargo considero que es necesario implementar otro enfoque de la evaluación determinando las metas de aprendizaje y los métodos de evaluación con los alumnos con discapacidad.

Como maestra de educación especial tengo un gran desafío, el cual es transformar mi práctica educativa, además de aplicar los conocimientos que fortalecerán mi desempeño docente.

Referencias bibliográficas

Tapia.M.E. (2012). La planificación didáctica II. SEP