UNIVERSIDAD PONTIFICIA DE MÉXICO
DIPLOMADO EL SER Y QUEHACER DEL TANATÓLOGO
La pérdida del status económico incide en la estabilidad emocional del individuo
Alumno: María G. Muro Asesor: Lic. Enna María Treviño Villarreal
Mayo 2016
INTRODUCCIÓN La inestabilidad emocional, en un sentido amplio se refiere a toda alteración o trastorno psíquico, cuya base es meramente emocional, y esta se refiere a los cambios frecuentes y bruscos cotidianos del estado de ánimo. Las deformaciones cognitivas más comunes consisten en la interpretación negativa de la experiencia que se vive, es decir ante cualquier cambio de fortuna como es la pérdida de un status, el individuo suele hacer una valoración negativa del mundo e impera en el sujeto un pesimismo sobre el futuro, ya que se observa el futuro bajo una inseguridad avasallante. Se trataría entonces de llevar al paciente a un estado psíquico de connotación más saludable, con el fin de que encuentre una nueva opción de vida, aún en esta pérdida de status, la cual le permita recuperar su estabilidad emocional. Beck (1993) sostiene que al mejorar la capacidad para controlar las emociones así como cambiar las creencias y los supuestos inadaptados, es entonces que se puede manejar las reacciones de inconformidad del sujeto. Por lo tanto con el fin de recuperar la estabilidad emocional sería necesario específicamente de proporcionar técnicas que ayuden al paciente a incrementar su capacidad de auto observación, hacerle pensar en su propio pensamiento y dejar de guiarse por las sentencias tradicionales, por los introyectos forjados tal vez desde la primera infancia.
OBJETIVO GENERAL: Determinar de qué manera la pérdida del status económico causa una inestabilidad emocional OBJETIVOS ESPECÍFICOS Ø Identificar factores asociados a la inseguridad emocional Ø Investigar como afecta al individuo cuando se invade su espacio vital Ø Investigar qué actitud conviene adoptar ante tal circunstancia crítica familiar
2
MARCO TEÓRICO Pérdida del status económico En la familia, suele darse crisis que constituyen una amenaza y que son un riesgo para que este sistema, núcleo básico de la sociedad, se deteriore y se desorganice ocasionando más de las veces una ruptura de los cónyuges. En cuanto a la pérdida del empleo del padre (en su función ancestral de proveedor), fundamentalmente afecta en la función económica, en la obtención y administración de recursos, las cuales son necesidades básicas del sistema familiar (Valladares, 2008). Merayo (2015) sostiene que el desempleo se vivencia de acuerdo a cada individuo, así como de acuerdo a los recursos con los que este cuenta. También depende de múltiples variables como el sexo, edad, duración del desempleo y sobre todo es de acuerdo a los rasgos de personalidad de cada individuo. De este modo el paro laboral de uno de los cónyuges, específicamente del que sustenta el rol del proveedor, tiene efectos tanto físicos como psicológicos, siendo la autoestima lo primero que se deteriora, los sentimientos de fracaso hace que esta autoestima se vaya minando pues sin una economía familiar esencial, sin la obtención y administración de recursos, se fractura inevitablemente la rutina del cada día en el sistema familiar. En principio los miembros de una familia se hallan relacionados entre sí y comparten no solo un espacio común, sino una serie de actividades definidas a través de los roles. Es allí donde debe encontrarse el amor la comprensión, cuando sucede un contratiempo como el desempleo, es entonces que se debiera dar el apoyo ya que es la casa el lugar donde se recupera el aliento y se saca nuevas energías para enfrentarnos mejor al mundo exterior. Es en el hoy por hoy que la, mujer, los hijos, la sociedad y el mismo hombre en su rol de proveedor requieren una nueva imagen, específicamente la del varón, como un padre renovado, se espera hoy en día que éste se involucre con su familia en las tareas
3
rutinarias, en las labores domésticas (González, 2014), sobre todo cuando existe un evento tal como el desempleo. La indefensión aprendida La indefensión aprendida se define como el estado psicológico que puede producirse cuando un individuo no puede controlar ni predecir los acontecimientos que configuran su vida y como consecuencia se originan una serie de perturbaciones motivacionales, cognitivas y emocionales. La indefensión provoca una disminución de la motivación para actuar, se bloquea la capacidad cognitiva para percibir sucesos e incrementar la emotividad, así como impedir que se responda de forma adaptativa a una situación para ejercer control sobre los acontecimientos y provocar una distorsión cognitiva, produce además una deficiencia emocional, esto es ansiedad, frustración, miedo, insatisfacción (Bernaola, 2007). González (2015) establece que la indefensión aprendida puede presentarse en aspectos específicos de la vida de una persona. De tal modo que cuando las personas se encuentran frente a condiciones de su vida que son percibidas como aversivas e incontrolables, aprenden que sus conductas no resuelven las problemáticas de la situación y por lo tanto se encuentran indefensos, inseguros. De hecho los individuos que presentan indefensión no perciben claramente la relación entre su comportamiento y las consecuencias que éste produce, lo que los lleva a manifestar conductas de pasividad, y a la creencia de que nada de lo que hagan puede mejorar su situación, la indefensión puede ser producida en la relación de pareja por situaciones tales como la falta de control en el contexto de la vida marital. Así, la indefensión produce miedo durante el tiempo que el sujeto no está seguro de la controlabilidad de los hechos. Suele producirse en los cónyuges una deficiencia cognitiva, ya que distorsionan y sobredimensionan la percepción de los
4
hechos, es decir, la incontrolabilidad de la situación económica por la que atraviesa
una
familia
suele
producir:
frustración,
miedo,
insatisfacción,
experimentándose a la vez una inquietante sensación de vulnerabilidad, de desamparo. Actitud Asertiva Desde el punto de vista humanista, la asertividad se aborda como una técnica para el desarrollo de la realización del ser humano, se sostiene que la conducta asertiva o no asertiva se aprende a través de la observación de modelos significativos (Diaz-Loving, 2004). Significa que habrá que reducir los obstáculos cognoscitivos para actuar de manera asertiva y reducir así ideas irracionales, ansiedades, culpas y a su vez desarrollar destrezas asertivas a través de una práctica activa. Es una habilidad que el sujeto adquiere para comunicarse y relacionarse estableciendo la libertad de decidir y responder eficientemente ante cualquier evento que la vida presente. Por otro lado, la asertividad significa: afirmación de la propia personalidad, confianza en sí mismo, aplomo, satisfacción, comunicación segura, eficiente y adecuada (Sopena, 1980). Así para lograr un cambio sustancial en una actitud o conducta disruptiva es necesario inculcar en el paciente una actitud asertiva estable. De acuerdo a Aguilar (1987), el sujeto es asertivo cuando existe el respeto consigo mismo y hacia los otros, además de aspirar a ser honesto, adecuado, optimista, estar equilibrado emocionalmente, tener una buena comunicación, aunado todo esto a la capacidad de escuchar distintas posturas y opiniones. Por su parte la definición de asertividad que hace Lazarus (1981), tiene que ver con un concepto y este sería el reconocimiento y expresión adecuada a todos y cada uno de los estados afectivos y emocionales que experimenta el individuo en el transcurso de su existencia.
5
REFERENCIAS: Bernaola, L. (2007) Estudio correlacional entre estilos de crianza e indefensión aprendida. Tesis de Licenciatura. Universidad Nacional mayor de San Marcos. Beck, A. (1993) Con el amor no basta. Barcelona: Paidós. Diccionario Enciclopédico Ilustrado Sopena. (1980) Barcelona: Ramón Sopena. Flores G., Díaz-Loving (2002). Asertividad: una alternativa para el óptimo manejo de las relaciones interpersonales. Universidad Autónoma de Yucatán: Porrúa. González Colín, B. (2014). Estrategias de conservación de la pareja: un análisis por sexo. Revista Electrónica de Psicología Iztacala, 17 (1). González Rivera, Ilse; Díaz-Loving, Rolando. (2015). Desarrollo y análisis psicométrico del Inventario de Indefensión Aprendida en la Pareja. Psicología Iberoamericana, EneroJunio, 58-65. Lazarus Arnold A. (1981). Terapia conductual. New York: Mc Graw-Hill Merayo, M. (2015). Guía cómo abordar el desempleo en la Familia. Madrid: Ceapa. Recuperado http://catarina.udlap.mx/u_dl_a/tales/documentos/lps/carrillo_m_l/capitulo1.pdf el 20 de abril de 2016 Valladares González, Anaya Marta; (2008). La familia. Una mirada desde la Psicología. MediSur, Sin mes, 4-13.
6
REPORTE DE SESIONES Consejera: C Paciente: P
En la primera sesión se realizó una breve entrevista con el fin de indagar el motivo de consulta de la paciente, la cual consistió en determinar que es lo que se trabajaría en sí, esto a partir de la pérdida de un status económico. Se comenzó a idear cómo se abordaría la problemática. Se le pidió a la P que brevemente hiciera una exposición de cómo le está afectando a ella que su marido haya perdido el trabajo, hecho que la ha mantenido en cierta tensión e inestabilidad emocional. Mi hipótesis (de C) en esta primera instancia se fundamentó en el hecho de que al perder el status económico había detonado en una incipiente crisis familiar, saliéndose ya de control la situación y afectando fundamentalmente la calidad de vida de la familia nuclear de la P. v En la segunda sesión, ante la negación del evento difícil por el que atraviesa la familia, se practicó en la paciente la técnica del diálogo socrático haciéndole ver lo que si puede hacer respecto a ese conflicto, utilizando frases y preguntas tales como: Así que tus hijas mayores una ya se graduó y la otra está por salir de la universidad, ¿qué te dice eso? ¿Qué actitud te conviene tener hacia esto que estás pasando? ¿Cómo puedes mejorar la calidad de vida de esta tu familia?
7
En cuanto al cierre se le preguntó qué podría aplicar durante la semana, de lo que hablamos, decidió que intentaría aceptar el cambio de status, así como tener una actitud más asertiva sobre todo en cuanto a la comunicación con su marido. La P se dio cuenta que no tiene por ahora una actitud asertiva, lo cual está haciendo que su conducta permee a su entorno familiar y eso hace que la intercomunicación no se esté dando funcionalmente. Afirmó que desde ese momento trataría de recuperar la calidad de vida de su entorno familiar. v La sesión decisiva para notar un cambio significativo fue la tercera sesión utilizando la valiosa herramienta de la carta terapéutica ya que ésta dio pie a que la sesión fluyera con más soltura, se puntualizó la importancia que tiene el hacer una despedida a la estabilidad económica que tuvo en el pasado (La P suele hablar nostálgicamente de su condición económica anterior), se le hizo ver que era significativo que pudiera ver la circunstancia difícil que vive la familia de una nueva forma, que al aceptar los cambios que tiene la vida en si misma, ayuda a crecer, a plantearse nuevos horizontes. Se le preguntó que le hacía falta en estos momentos y contestó segura de si misma que “nada” ya que tiene una familia hermosa, una profesión que ama y que eso le basta. Se percibió que a partir de las tareas asignadas como la de trabajar el miedo irracional que tenía hacia el futuro, se pudo resolver, al expresar: “mi esposo y yo somos personas muy trabajadoras y saldremos adelante… Confío en Dios y desde hoy doy toda mi confianza a mi esposo”.
8
La P al realizar su carta de despedida de esa “estabilidad económica” del pasado, pudo darse cuenta que a pesar de esta difícil experiencia por la que atraviesa la familia es capaz de aprender “un cúmulo de cosas” un aprendizaje que prometió apreciará en el día a día. v
Durante la cuarta sesión se trabajó el manejo del enojo, se le preguntó como enfrenta cotidianamente su enojo y sostuvo que los planes que tenía se vinieron abajo, más que enojo confiesa siente dolor y tristeza. Se auxilia hablándolo, visitando al Santísimo cada jueves. Para controlar su enojo camina, trotando 5 kilómetros mínimo tres veces a la semana, eso la hace sentir mejor. Se hace énfasis de lo importante que es manejar el enojo de esa forma asertiva. Sabe que tiene fuerza de voluntad y eso la hace salir adelante. Va superando el enojo que tiene por la pérdida injustificada del empleo de su marido. Se concluyó que el enojo es un sentimiento que puede manejar, ya que lo habla, incluso algunas veces despotrica, pero con esta actitud alivia sus resentimientos, reforzándose así una actitud asertiva. Se contiene a ella misma y esto la ayuda a solventar el enojo. La P está resolviendo paulatinamente su situación. Cada día encuentra que se siente más aliviada en cuanto al enojo se refiere, está aceptando su circunstancia, está decidida al cambio.
9
v Sesión de cierre La técnica que se utilizó durante la quinta sesión fue: una fantasía guiada, la cual fue dirigida hacia el agradecimiento, hacia un reconocimiento de sus fortalezas. La P eligió que se le llevará a un jardín, así, la metáfora del jardín fue para hacerla ver que ese jardín es ella misma, ya que tiene todo ese caudal dentro de sí. Se le orientó a resignificar ese potencial que lleva consigo y así poder guardar de aquí en adelante un equilibrio en sus emociones. Para el cierre en sí se le preguntó como se queda al final de este proceso de consejería a lo que respondió: “Me quedo con mucha paz, felicidad, con esperanza” Se le inquirió, preguntándole: C: ¿Qué estrategia tienes para afrontar, si hubiera resabios de esa inestabilidad emocional? A lo que respondió: P: No olvidar la conciencia que adquirí en este proceso, recordaré lo que aprendí. Eso me dará la suficiente energía para estar de nuevo en mi equilibrio. Así y con más palabras afectuosas terminamos este Proceso de Consejería que consistió en cinco sesiones.
10
CONCLUSIONES Mediante el proceso de consejería se dio contención a una inestabilidad emocional que padecía la paciente, a una tendencia a catastrofizar, a tener una valoración negativa de una circunstancia crítica familiar como es la pérdida de un status económico. Se le ayudó a observar que estas cogniciones están implicadas en sus problemas emocionales. Se hizo énfasis en sus fortalezas y aprendizajes del pasado, con el fin de que ella misma pueda auxiliarse en el futuro próximo inmediato. Se le hizo ver que de continuar en estos altibajos de inestabilidad pudiera caer en una aprehensión ansiosa, es decir en un estado de ánimo en el cual el individuo se dispone a una sensación de incontrolabilidad y un foco de atención dirigido solo a estímulos amenazantes. Concluyendo: se percibió un avance significativo en el proceso de consejería llevado a cabo. Especialmente al realizar la carta terapéutica. La paciente pudo valorar su crecimiento a partir de esta experiencia difícil por la que atraviesa la familia. Está consciente que inicia una nueva etapa en la que aprenderá “un cúmulo de cosas”. En lo que concierne al manejo del enojo se observó que mantiene enérgicamente una dinámica que la hace relajarse, como es el trotar 5 kms. mínimo tres veces por semana. Es preciso observar que el resultado del proceso de consejería se considera óptimo, ya que hubo una manifiesta empatía entre paciente y consejera. De este modo fue posible llevar a la paciente de una negación, enojo, tristeza a una aceptación de una nueva forma de vida, haciéndola constatar ese caudal de experiencia y conocimiento que posee en sí misma y que es la fuente primordial para no volver al frágil extravío de sus emociones.
11