3 minute read

Un día en

Next Article
Recetas

Recetas

COMUNIDAD EN TORNO AL GANCHILLO

Personas usuarias de Orkoien disfrutan de tejer con mujeres del club de jubilados de esta localidad en una actividad de ganchillo

Advertisement

Los martes por la mañana, el club de jubilados de Orkoien está algo más bullicioso que de costumbre. Un grupo de seis personas del Programa Ocupacional de Envejecimiento y del Centro Ocupacional de TASUBINSA Orkoien, acuden a hacer ganchillo junto con tres mujeres que, voluntariamente, les enseñan a realizar labores. Durante hora y media a la semana se unen para hablar de punto, ganchillo, lana, trapillo o bordado.

Mari Carmen, Gloria e Isabel participan desde el año pasado en esta actividad, acompañando a personas con discapacidad. “Nos da mucha satisfacción verles cómo van haciendo sus labores”, explican. Ellas les apoyan como profesoras y compañeras, enseñando a quien no sabe o dando ideas y consejos a quien lo pide. Ayudan a terminar las piezas o a arreglar algún pequeño error mientras reconocen el esfuerzo que dedica cada persona. Se encargan de facilitar el material y de pensar qué labores van a hacer o cómo pueden adaptarlas a las capacidades de cada una de ellas. Este año tres participantes continúan con el ganchillo, mientras que otras cuatro han empezado a bordar con lana gruesa sobre tela de saco, un trabajo más sencillo. Laura es una ellas. Trata de enhebrar la aguja con la lana del color que ha elegido para bordar un corazón alrededor de la inicial de su nombre. “Me gusta mucho coser”, explica. Frente a ella, Lourdes elige la lana azul mientras repite lo bien que se le da este trabajo. “Se me da bien, ¿verdad? No lo hago en casa, solo aquí. Me gusta hacerlo aquí”, asegura. Se sientan en torno a una mesa grande, sobre la que se van pasando las tijeras y los ovillos de lana y de trapillo de diferentes colores. Alrededor de ella van girando, de pie, las tres voluntarias. “Es una actividad que nos gusta mucho. Yo estoy deseando que llegue el martes para venir”, relata Mari Carmen, mientras corta los hilos por detrás del bastidor y prepara la tela para que una persona usuaria siga bordando. Dani quiere hacerse una bufanda rojilla, para ir a animar a Osasuna, pero aconsejado por Gloria, acaba convirtiendo la pieza cuadrada de trapillo que acaba de tejer en una funda para su móvil. “Tendremos que traer lana gruesa y roja para la

bufanda, el trapillo es demasiado duro para hacerlo”, explica esta voluntaria, mientras piensa en qué agujas podrían conseguir para que Dani pueda tejer la bufanda. Dani teje muy bien y acude a Anfas a clases de costura. “Hasta que no empecé aquí no sabía hacer ganchillo”, relata, y asegura que está “muy contento” con las tres mujeres del club de jubilados, porque le enseñan “muy bien”. Frente a él, Ana maneja la aguja del ganchillo con tanta soltura que termina rápidamente un bolso pequeño azul que acaba siendo un neceser. “No sabes cómo me relaja”, afirma sonriendo, mientras muestra a sus compañeros y compañeras fotos en el móvil de ropa que ha cosido y de accesorios que ha customizado. Esta iniciativa se llevó a cabo durante tres jornadas en mayo y gustó tanto que se ha incluido en el programa de actividades sociales del Programa Ocupacional de Envejecimiento de Orkoien. El objetivo es que las personas con discapacidad compartan una actividad recreativa con vecinos y vecinas de Orkoien. A través de las técnicas de tejer se trabajan también otros objetivos específicos, como la psicomotricidad fina y la coordinación, además de la concentración y la paciencia, mientras que se favorece la relajación y el sentido de pertenencia de la comunidad. El club de jubilados se encarga de los materiales que necesitan, mediante una subvención que ellas gestionan.

IMPRESORAS MULTIFUNCIÓN

www.maquelsa.com DISTRIBUIDOR OFICIAL

This article is from: