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No. 03
Abril-Mayo 2010
LA CIUDAD DE CIRILA Dirección General
Marketing y Publicidad
Andrea Luengas Daniela Rangel Jorge De la Fuente
Andrea Luengas
Dirección Editorial y Fotografía
Coordinación de Moda Carolina Bellavista
Daniela Rangel José Rosales
Arte
Dirección de Arte y Diseño Editorial
Administración
Vicky Dehesa Jorge De la Fuente
Beatriz Perles
Marisol D’Estrabeau
Editores Mónica Isabel Pérez Alberto Noriega
Colaboradores Meagan Starr, Debora Ducci, Akbal Music, Alicia Rodriguez, Sikandar Ortega, Emmanuel Solis, Erika Arguello, Alejandrina Méndez, Jose Luis Rebolledo, Fiesta Brava.
TASTE ALTERNATIVE FLAVOR. Revista de contenido cultural y alternativo, editada bimestralmente por MMMCALM S.A. de C.V., con domicilio en Km. 7.5 Boulevard Luis Donaldo Colosio SM 310 M01 LT4-02 LOC.17 CP. 77500 Residencial Cumbres, Cancún Qroo. Con número de certificado de contenido en trámite. Reserva de Derechos al uso exclusivo número (04-2009-072314545000-102) expedido por la Dirección de Reservas del Instituto Nacional del Derecho de Autor (INDAUTOR), marca registrada bajo el número 1110233 expedido por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI). TASTE Alternative Flavor considera sus fuentes como confiables y verifica los datos que aparecen en la revista, en la manera de lo posible; sin embargo, puede haber errores en la exactitud de los datos, por lo que los lectores utilizan ésta información bajo su propio riesgo. Los artículos expresados por los autores reflejan su opinión, sin que ésta coincida con la de la editorial. Por lo que TASTE Alternative Flavor no se hace responsable de la veracidad, legalidad u originalidad de los contenidos de los artículos o los anuncios aquí publicados. TASTE Alternative Flavor está impresa por PIXEL PRESS S.A. de C.V. carretera Cancún-aeropuerto Km.15 SM 301 LT-7 Int. Edificio The Miami Herald, Pb. C.P. 77500 Cancun Qroo. Prohibida la reproducción total o parcial del contenido sin previa autorización por escrito de los editores. © TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS por Andrea Luengas y Daniela Gutiérrez año de creación 2009.
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EDITORIAL 06 Carta Editorial 08 Staff
RYTHMS 40 Go Bananas
RANDOM 64 Lauren Ward
GO GREEN 10 JoysKey
TASTY 48 Solarize It
LIFESTYLE 72 The Vintage Party 76 Must
BE HUMAN
ART
SURVIVAL GUIDE
18 3 Actos Circenses 22 La Ciudad de Cirila
58 El Elefante que atraves贸 el Cometa
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Andrea Luengas
Jorge De la Fuente
(Cancún, Q. Roo)
(Playa del Carmen, Q. Roo)
(México, D.F.)
andrea@taste-taste.com
jorge@taste-taste.com
moni@taste-taste.com
Daniela Rangel
Viicky Dehesa
Marisol D’Estrabeau
(Cancún, Q. Roo)
(Monterrey, N.L.)
(Cancún, Q. Roo)
dani@taste-taste.com
vicky@taste-taste.com
marysol@taste-taste.com
José Rosales
Carolina Bellavista
Beatriz Perles
(Cancún, Q. Roo)
(Cancún, Q. Roo)
(Cancún, Q. Roo)
jose@taste-taste.com
caro@taste-taste.com
administracion@taste-taste.com
Alberto Noriega (Barcelona, España) alberto@taste-taste.com
Mónica Isabel Pérez
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Hace quince años, cuando Dani era niña, tuvo la impresión de que un jardín en la mar navegaba con su imaginación. Puerto Aventuras –que así se llamaba– tenía un peculiar vecino. Su nombre: Richard Sowa. Después de una década y medio lustro, aquella antigua visión regresó. Durante días estuvo pensando en cómo encontrar aquel barco en el jardín o viceversa. Gran sorpresa sería el enterarse de que aquel vecino surrealista se había mudado sólo algunos kilómetros al norte.
El Barco en el Jardín texto José Rosales
El viento sopla aire frío. El ferry ultraamarillo por fin llega a la estación que conducirá a D. a Isla Mujeres, donde ha oído que se encuentra la nueva isla de Richie Sowa. Al descender a tierra, lo primero que hace es preguntar sobre un extraño islote creado con botes de PET (Tereftalato de Polietileno). Parece que su antiguo vecino ha cobrado popularidad en estos nuevos tiempos. Todo mundo sabe de él. Ella toma un taxi para apresurarse al pasado. Richard y su amiga Inga fueron muy amables al recibirla. Inga saludó, cordial, dirigiéndose hacia el bote para jalar de una cuerda amarrada al muelle donde permanecían. La isla se llama JoysKey. Tiene, entre sus comodidades, una vista de 360º desde un tercer piso hecho de triplay, un jardín con su perro, gato, tina, hortalizas y un moderno horno de espejos que funciona con rayos solares.
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D. le preguntó a Richard de dónde era. Fugazmente, él le dijo su nacionalidad. Le preguntó cómo se le había ocurrido hacer todo esto. Dijo: –Lo vi en Xochimilco, en la Ciudad de México. Las chinampas, ¿las has visto?
GO GREEN
Un dato impresionante es que el manglar ha aceptado a la isla artificial echando raíces dentro de ella (Richard cuenta que incluso el manglar crece más rápido en la isla). Durante dos años y medio ha trabajado en este lugar. Con imaginación y buena voluntad mantiene la esperanza de un mundo más ecológico para el futuro.
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Qué curioso que se pase de una postal mexicana clásica del mexican curious, como son las chinampas, a una isla que se llama JoysKey, donde casi 110 mil botellas de PET, costales y tarimas forman los cimientos. También triplay, pasto, arena; además de un bar, dos cuartos, cocina con refrigerador, estudio, teléfono de conchas… La mejor prueba de que es posible vivir en la basura si nos ponemos a reciclar. La primera isla de Richard duró seis años. Llegó el huracán y se la llevó. En los días posteriores al fenómeno meteorológico, Richie regresó para juntar los restos de su primera casa flotante y descubrió, con sorpresa, que después de casi seis años las botellas seguían intactas. Pero millones de botellas de PET no se reutilizan y contaminan nuestro mundo.
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Si no lo cuidamos y no logramos hacer un equilibrio real con la naturaleza, sin duda alguna, lo que hoy es un paraíso, mañana no permanecerá. JoysKey es una opción más para reciclar y, aunque aún es un proyecto joven, podemos esperar que en un futuro cercano la idea de crear hogares con basura y residuos sea una realidad y no un concepto surrealista.
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El barco de Calipso mitos de la mar A la deriva, tras naufragar, Calipso me arropó. Entre sus brazos, manjares, bebida y mar, me detuve durante cuatro largos años. Intenté olvidar mi vida anterior: Inmortalidad y juventud a cambio de ella. Pero pronto me cansé de sus excesos y sus mimos. Empecé a añorar a mi mujer…
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POR ESCRITO No sabemos qué fue. Acaso que somos una generación que sufre de nostalgia adelantada y nos llegó, de golpe, el recuerdo de una manzana cubierta de caramelo. O quizá no nos acordamos y un payaso callejero recién logró arrancarnos una carcajada o alguna puntada así. A estas alturas ya quién sabe, pero en TASTE estuvimos pensando en el circo. Tanto que nos pusimos a reflexionar sobre cuánto se parece éste a nuestra vida, a nuestras urbes… una carpa no es muy diferente a nuestro hábitat semi-natural.
He aquí un conjunto de textos que funcionan como actos. Los tres con su respectivo intermedio. En cada pista, una comparación con el circo. Una está contada desde la rutina, otra desde el exilio y una más desde el ansia infantil que, de seguro, fue la que nos motivó a escribir estas chorradas…
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WELCOME TO THE CIRCUS “Gran circo es esta ciudad”, decían los de La Maldita Vecindad en una de sus canciones allá por los noventa. Una década después, ya no importa si se inspiraron en el Distrito Federal porque lo cierto es que toda ciudad se convierte, tarde o temprano, en un espectáculo circense. Basta que miren a su alrededor para recordarlo: no vivimos la excepción. por Mónica Isabel Pérez
Like a three ring circus… Sobre la arena, cubiertos por nuestra inmensa carpa azul, salimos cada mañana. Maquillados, literaria y literalmente. Vamos por ahí con nuestras sonrisas pintadas para que todos puedan vernos sin sentir pena o culpa: le decimos “hola” al vecino, a los amigos, al barman que nos atiende cada noche y que está dejando su turno, al turista. Todos responden. Todos nos muestran sus dientes también, como si fuera —¿o es?— el más primitivo de los rituales. Qué lindo. Sería tan bueno que fuera cierto… Porque atrás de la nariz roja que descansa sobre nuestra sonrisa inmensa —no vamos a negarlo— sólo hay miedo: a la crisis, a los virus, a las inclemencias del clima, al futuro, al pasado que dejamos y que siempre puede alcanzarnos, al abandono… a que esta noche no haya espectadores que nos brinden, aunque sea, un mísero aplauso. Construimos, para no sentirnos solos, elefantes de concreto que, contraria a nuestra primera intención, terminan domesticándonos. Ocho horas diarias o de sol a sol. Entramos en ellos, en su juego, con sus reglas. Nos dan monedas a cambio para que podamos surtirnos de nuevo de ese, nuestro maquillaje diario.
Y vamos enojados, pero obedientes, a realizar el truco para el que nos han amaestrado. Y henos ahí, siendo domados, o siendo los infelices domadores de un grupo que, cualquier día, puede usar sus fauces en contra nuestra. Nuestro público llega, luego, a ver nuestra función. Disfrutan, ríen, bailan. Vienen dispuestos a la catarsis en el que es nuestro lugar de trabajo. Nos dan su dinero y en el peor de los casos nos enamoran. Y luego de recibir nuestras reverencias nos regalan un aplauso, nos lanzan un beso y se van (casi todos para siempre). Somos un circo. Nada más. Los niños con hambre malabarean un par de pelotas buscando conmovernos. Hay faquires y tragafuegos. Las luces no hacen más que poner en evidencia nuestras carencias.
Pero el espectáculo, señores, debe continuar. Y vamos por ahí, cargando un soundtrack decadente: “Tienes que sonreír, sonreír, payasito”, como cantaba Enrique Guzmán. Hay que tomarnos un tequila si es necesario, pero no podemos dejarnos caer.
The neverending show starts now No hay telón, habrá que recordar. El show no se termina nunca. Nos lavamos el rostro cada noche. Somos nosotros mismos un par de horas y luego el sueño nos tirará. La mañana siguiente será sólo repetir el día anterior porque no es fácil cambiar de rol: somos contorsionistas o acróbatas o bailarines para siempre. Aunque elijamos bien, el camino siempre nos aburrirá. Pero hay algo que nos hechiza y nos mantiene. Será una melodía oculta en el murmullo del mar. Algo nos embruja y detiene. La vida de circo nunca fue fácil.
Así que seguimos, damas y caballeros. ¡Y no se muevan!, la función ya va a empezar…
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Me parece que -en primera instancia- la idea de este número de TASTE es hacerles ver cómo, a veces, todos formamos parte de los escenarios: mil ojos nos juzgan, nos aplauden y nos encarcelan. Para poder hablar de eso, decidí hacer una investigación de campo y confieso que, cuando lo vi, Triztán el mandril lucía deprimido y hasta resignado a un suicidio lento. Muchos años antes, en la lejana África, jamás imaginó que iba a vivir en América y que terminaría siendo cualquier chango de circo… Sentí vergüenza de mi mismo al verlo en exhibición, tras las rejas como si fuera un muñeco sin estómago ni sentimientos. Como una herramienta para provocar la risa y sorpresa de los espectadores que se lo topan. No sé por qué los humanos somos así. Nuestro comportamiento –la mayor de las veces- rebasa los límites de la estupidez.
texto José Rosales fotos Daniela Rangel José Rosales
Fábulas postmodernas
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BE HUMAN
Una inesperada reflexión me llevó a preguntarme la cantidad de veces que, dueño de mi supuesta libertad, me he visto acorralado en la celda que es mi propia persona. Después de todo, cada uno de nosotros protagonizamos un papel en el transcurrir de esta vida. Unos se maquillan de esto, otros son lo otro, y están aquellos que, con su libertad estropeada, se convierten en el triste reflejo de un mandril detrás de la celda.
Buen día mi querido Triztán. La mañana ha despertado a tu delicada mente analítica. Los corales se fueron y los tiburones toro apenas y asoman sus aletas cubiertas de petróleo y arena sintética. Arcoiris nocturnos iluminan automóviles inquietos de taurina y cafeína. La señorita Mercedes y el joven Cadillac patentan una nueva carpa frente a la mesita de té.
Apuntes sobre el futuro....
(o el mandril que quería ser humano).
Vol. I: El mandril Triztán
FÁBULAS POSTMODERNAS
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BE HUMAN
Tardes y tardes de verano una y otra vez. Observas móviles histéricos anunciando la ruptura del eje del mundo. Un triste jaguar de jaula camina miles de kilómetros en un espacio de 2 m x 2 m adaptado en la parte posterior de una joven pick-up pintada con tonos
En la jaula de enfrente, el amarillo y el negro decoran el pelaje del bengala domesticado, Plutón. Si bien, años atrás había descubierto lo más novedoso de este mundo -la inteligencia hecha imaginación-, en los tiempos modernos había perdido toda musculatura.
circenses (imponentes bestias se han vuelto gatitos de aparador). Y es aquí donde la risa y el futuro comienzan a dibujar la ciudad que habitas.
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BE HUMAN
para mi cámara y traté de ser discreto para no interferir en la conducta holgada y salvaje de la “civilización” de la que Triztán sueña ser parte (¡ja! por fin tantas horas de ver leones y zebras apareándose en la TV me sirvieron para algo).
Medusas electrónicas, desiertos celestes, masas efervescentes, ray bans, Snoop Dogg, power adiction, rockstars, tornamesas, pistolas de agua, dólares, latas y un enano contratado hacen el escenario perfecto para la resaca de Triztán. No había otra cosa más para hacer que beber y relajarse. Después de todo la high school es una actividad desgastante. Cientos de ellos, cual mandriles con el cutis rosado (como solía ser el viejo T.) se encontraban aplastados. Otros más inquietos se desplazaban, corrían, jugaban y pelaban los dientes emitiendo sonidos sorprendentes. De alguna u otra forma se comunicaban (su lenguaje tenía sentido pero resultaba difícil comprenderlo). Después de algunas horas los comencé a entender y entonces sí, como si se tratara de un documental para el National Geographic, utilicé un gran lente
(o El sueño de Triztán: Return to the Jungle).
Vol. II: Zircus Fonema
FÁBULAS POSTMODERNAS
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La habitación de Cirila tiene vista a la multitud. De izquierda a derecha, una gran fila de anguilas de asfalto y concreto hacen del paisaje algo irrepetible. Un par de plásticos en forma de gorrines decoran las ventanas de los mares. Cirila cogió sus anteojos postmodernos del viejo mostrador plastificado. Junto a la playa y el sol de todos los días, un bikini color opio y el verde vivo de las palmeras la conducen a la primera paradoja de su existencia...
BE HUMAN
Hormonas vuelan por los aires. En lo que parece un templo postmoderno, ellas bailan con un estilo típico del África Septentrional, demostrando que su comida favorita es la banana mientras ellos, esclavos del estímulo, aplauden ante tal espectáculo Alguien que piensa que los animales carecen de vicios se encuentra muy cerca de vivir en una mentira.
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Nuestro querido amigo All Inclusive, sordo de nacimiento, trabajó arduamente para este momento. El objetivo: brindar a sus clientes una cena rica en calorías , refresco de cola y una siesta dentro del mismo sueño para reponerse del ajetreado día. Triztán era, de pronto, el mandril más feliz del universo.
+BLASFEMÓ UNO DE TANTOS PAYASOS.
+EL ÚLTIMO COLOR ANTES DE CONOCER LOS CIELOS ES EL ROJO.
+EL ATARDECER INCENDIA LA CIUDAD.
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Esferas de luz emulan al gran DADA. El antitiempo gasta sus segundos en la barra. Horas, días, transcurren en una sola madrugada. La oscuridad lleva de la mano la oportunidad del anonimato. La fiesta, deliciosamente interminable, continúa brindando momentos de ensueño que sólo los billetes verdes pueden pagar. Su majestad Sappo te da la bienvenida a la casa de la risa. Uno de todos los que están, porta un convencional micrófono negro, gafas oscuras y dientes blancos. Entre sarcasmo y filosofía dirige la gran Circofonía y pregunta a sus invitados sobre la llave del mundo. Todos, ebrios de gracia, dicen tenerla.
Vol. III: Una Mimosa para el señor Sappo.
FÁBULAS POSTMODERNAS
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ANEXO I: Sobre el perfil psicológico de los mandriles.
Triztán envejeció y murió solo, totalmente olvidado en un espacio de 2 m x 2 m. No hubo nadie que le ayudara a encontrar la llave.
Los sueños surrealistas de los mandriles van, por lo general, acompañados de patologías, es decir, de traumas que se presentaron durante la infancia. En su mayoría, dichas perturbaciones aparecen en la parte final de los sueños, coincidiendo con la pubertad. Se podría decir, con exactitud, que es recurrente que dichas perturbaciones estén relacionadas con la cacería y el desenfreno, términos con los cuales Su Majestad Sappo juega cotidianamente, basando en ello su forma de vender la llave del mundo… y es que cualquiera que ha permanecido encerrado un largo lapso de tiempo, daría lo que fuera por su libertad.
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Fábulas y cuentos infantiles para mandriles de última generación. Editorial Banana, año del Tigre.
BIBLIOGRAFÍA:
BE HUMAN
A la niña Bellavista, quien con su genialidad y alegría de vivir nos abrió las puertas del zoológico, ¡gracias!
AGRADECIMIENTO:
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(con el ‘gypsy affaire’) por Emanuel Solis
Ahora que la locura es un estándar tolerado de conducta, lo que oímos comparte esa carga exótica de la realidad contemporánea. Fuera de parecer apocalíptico y decadente, este fenómeno da nuevos bríos a nuestra manera de atestiguar los cambios antropológicos drásticos e insólitos que han acontecido desde el ocaso del siglo XX... Cambios que tal vez no hemos notado porque somos muy jóvenes o estamos ocupados con el fin del mundo, Facebook y la carrera por ser millonarios.
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La cultura de la región de la Península Balcánica, es un clarísimo ejemplo de cómo la música puede referir al desmadre en que se ha convertido una sociedad. Cuando entran en juego aspectos como religión y diversificación de etnias, en medio de una guerra animal por territorio y absolutismo, los resultados se dejan ver en manifestaciones artísticas tipo las que ofrecen personajes como los ex yugoslavos Goran Bregovi y Emir Kusturica. Esta oleada de los Balcanes ha llegado a nosotros vía un combo global, que incluye un par de Palmas de Oro en Cannes, principalmente con el hit fílmico de Kusturica: Underground (1995), más el toque particular agregado por Bregovi , compositor de la música de ésta y otras varias películas de Kusturica, como la notable Tiempo de gitanos (1988). Este sonido particular insertado en buen cine, ha preparado el campo para el auge que tiene hoy este género, que incluso ha motivado la explotación del “nuevo primitivismo” en otras latitudes, como el caso de los gipsy-punketos Gogol Bordello, desde la mismísima NYC.
En realidad Kusturica es un artista integral que ha sabido explotar las puertas abiertas de sus logros. De colado entró a la No Smoking Orchestra y para vivir el estilo gypsy rock star, incluso hizo un documental sobre las giras de la banda (Super 8 Stories, 2001), que da idea de la extravagancia musical, tanto en el plano performer como el cotidiano de la sociedad balcánica. Un cóctel compuesto por la inclusión de todo tipo de instrumentos populares (metales, acordeón, cuerdas) con base rock, punk y hasta ska, aunados a la lengua, el carácter tragicómico de la entonación, y el discurso político y cocky, dan un resultado pegajoso de ambientes gitanos, que nos acerca a la columna vertebral de la fantástica Europa del Este. Hay montones de discos sobre el género, y evidentemente los nombres mencionados aquí son los más quemados. Sin embargo, para un primer acercamiento funcionan muy bien, sobre todo si se acompañan con una sesión de cine gitano. Black Cat, White Cat de Emir Kusturica and The No Smoking Orchestra es un buen disco para iniciarse, si hay empatía se puede elegir prácticamente cualquier cosa del trabajo de Bregovi , con garantía de una sobresaliente producción. Lejos de sonar Putumayish, la onda balcánica nos trae a luz una raza humana fuerte y magnética. Combatiendo con la evolución y creando un tipo de punk salvaje y masculino. Caos y realidad, todo es embriaguez y diversión.
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por Alberto Noriega
EL CIRCO SE EXILIA CONTIGO La itinerante vida circense puede compararse a la vida de un emigrante, un nómada que hace la maleta y lleva maroma y teatro a donde sea. Llega, ofrece su espectáculo y huye en la búsqueda de nuevos públicos para conquistar. Damas y caballeros, niños y niñas, ¡bienvenidos al circo del expatriado nacional!
Fantasear en clave circense sobre una palabrota como exilio, una idea grande, contundente. Sin embargo, si mi cabeza es una carpa, mi largo viaje un exilio… Ergo, semejanzas veo. Alguna vez decidí llevar mi show a otro lado. ¿Qué me llevaría para ir al exilio? Silencio… Cuando uno abandona la patria se encuentra en actuación constante y la función no deja de devenir. Considérese mi caso una suerte de exilio con “estrella”. Aquí la palabra exilio es menos grave, con respeto para los exiliados ideológicos, políticos y culturales; perseguidos, refugiados o aquellos obligados por la pobreza a huir hacia delante.
Me va a cargar el payaso Recuerdo cuando era niño y escuché la frase “te va a cargar el payaso”, referida con no sé qué amenaza condicional. Desde ese día la utilizo como un cambio injustificado a nivel semántico, pero efectivo, para evitar la soez “te va a cargar la chingada”. Y es que para este cambio sólo valía la ayuda de un término así. Queda claro que es tan terrible que te cargue un payaso como que manden a chingar a tu madre. Pero en el circo y en el exilio lo peor no son los payasos, sino la sensación de encontrarse cual animal enjaulado que soporta sus pensamientos
maquinalmente circulares. Hasta circo, del griego kirkos, significa círculo. El circo moderno nació en el siglo XIX, y fue cuando los payasos empezaron a cobrar importancia. Hoy están en la escena central del mundo, en la política y los medios...
Habla con el dueño, no con los animales El circo del exilio es una función que por repetición, adecuación y otras cosas, produce ciertas habilidades. Un buen día ya no sabes dónde empieza o acaba. Anónimo, famoso pensador, dijo: “Cuando dejas de ser niño entiendes que hay que platicar con el dueño del circo y no con los animales”. Añado que cuando dejas de ser un adulto más, entiendes que hay que platicar con los animales y no con los dueños… Hoy todo es circo. No da más de sí la Société du spectacle, referencia al ensayo homónimo (1973) del situacionista francés Guy Debord, donde dice que “cada sentimiento particular no es más que la vida parcial”. Así, el espectáculo es un lugar parcial donde se basa toda la irrealidad necesaria para la vida real. Lo particular en un exiliado es una irrealidad parcial, pero muy real. Perdonen este intento de encontrar nuevos sentidos en significados opuestos, pero aquí pasa que te piden un contrato para darte papeles y papeles para darte un contrato, ¡Encuentra tú el significado! ¿Lo más crudo de todo? No hay espectáculo menos frecuentado que el de un artista extranjero exiliado.
Al exilio se debe ir preparado, igual que al circo. Si la oportunidad no llega, tienes que prepararte: actuar como mimo, para entender —en silencio— la nueva realidad; como payaso, para reír aunque sea por obligación; acróbata y malabarista, para ligar; capataz y domador contra ti mismo. Hasta el intermedio, más o menos, puedes ver que todo es falso y se basa en el consumo de tonterías que no necesitamos para reírnos. La función a veces se interrumpe y el “show must go on”. Aunque un espectador o un compañero se vaya, aprendes que el tiempo y el circo son también la misma cosa, siempre haciendo sus maletas y moviéndose más lejos.
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Alimentación alternativa Difícil no encontrar una razón para no intentarlo. Escuchamos diariamente miles de motivos que nos invitan a hacerlo: desde no contaminar más al planeta con pesticidas hasta la oportunidad de hacer algo positivo por nuestro cuerpo. Es, en realidad, buena alternativa para mejorar nuestra salud con productos que ahora hacen click en todos lados y con los que podemos preparar desde platillos tradicionales hasta delicias gourmet.
Pero la idea también puede antojarse como una opción para estar fit, inclusive para olvidar el miedito que da probar todos esos productos de origen químico que ofrecen para la quema de grasa y para estar marcaditos de una forma tan rápida que da desconfianza. Los productos orgánicos no hacen promesas falsas. Son seguros y saludables. Además son buena opción para las personas que son poco o nada tolerantes al gluten ó a conservadores.
Ser natural no es hábito; es un estilo de vida.
Y por la variedad no hay que preocuparse:
Greenery abre sus puertas en su nueva ubicación en:
de verdad hay mucho de donde escoger.
Plaza Península
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Solarizeit FOTO Daniela Rangel COORDINACIÓN DE MODA Carolina Bellavista y Mónica Isabel Pérez MAQUILLAJE Juan Carlos Frank para L'Oreal Paris. PEINADO Michelle para Sebastian Professional ASISTENTE DE FOTO Víctor Zazueta ROPA, ZAPATOS Y ACCESORIOS Ana Locking
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Agradecemos al hotel Le Blanc y a Canc煤n Modaa Nextel por las facilidades otorgadas para realizar esta producci贸n.
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EL ELEFANTE QUE EL COMETA
por José Rosales
Cotidianamente los sueños esconden sus colores, formas e interpretaciones más adentro de esa eterna madrugada, mundo aparte aquel en el que sólo los sonámbulos pueden mantenerse y seguir en pie, y es que únicamente algunos entre millones son portadores de la facultad de volverse viajeros astrales entre sueños y realidad. Este es el caso de Marisol D’Estrabeau.
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Su pintura posee ese metalenguaje que sólo seres cercanos a estrellas pueden ver. Lo intuimos en sus trazos y líneas, en sus cuentos y extraordinarios escritos, en obras con todos los colores de la fantasía.
Libélulas con una docena de extremidades recorren mundos inalcanzables, elefantes que atraviesan cometas. Con la obra de Marisol conceptos tan formales y aburridos como tiempo y espacio, indispensables para la vida real, pierden toda proporción y devienen inasibles.
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Marisol D’Estrabeau radica en la ciudad de Cancún, Quintana Roo y continua con su incansable labor de enseñarnos la magia de vivir soñando.
www.marisoldestrabeau.com
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Brecha del Mar Ni el propio Charles Baudelaire al contemplar la brecha hubiera pensado que es un paraíso artificial. Brecha volátil erosionada por el oleaje y los vientos que soplen, como ese mundo onírico y colorista de Baudelaire. Seguro algo así de bello se le aparecía en alguna de sus opiáceas cavilaciones, una brecha entre arena y mar, para mí: ¡otro paraíso artificial!
LAUREN WARD
www.laurenward.net
por Alicia Rodríguez
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EL CIRCO SOY YO Salimos –satisfechos– de la función. Dejamos atrás las luces, las carpas, el aroma dulce del algodón de azúcar y preguntamos “¿mami, y el circo cuándo volverá?”. He aquí un ejercicio comparativo para entretenerse durante la espera. por Sikandar Ortega
El circo es un lugar mágico. Llega para llenar de alegría a chicos y grandes con su encantador misterio. Nunca sabemos a bien cuándo llegará y qué sorpresas traerá. Sin embargo, hace unos años, descubrí una manera de no añorarlo: espectáculos similares a los del circo, se pueden descubrir en la vida diaria. El contorsionista siempre me ha asombrado, acomodando su cuerpo de maneras imposibles. Hay muchos por ahí que hacen lo mismo: el jefe que hace recortes y, para justificarlos, contorsiona la verdad, o el político que da un discurso coherente en apariencia, pero imposible de entender. Seguido, vemos al ilusionista que nos hace ver lo que no está ahí: la adolescente enamorada que vive una historia de romance que nunca ha existido o, también, a la mujer engañada que finge no ver lo obvio. Veo en la calle a gente haciendo malabares… Y veo a la mujer que es mamá y papá, quien es cortejada, pero que aceptará cumplidos sólo en cierto horario (en el trabajo debe darse a respetar). Mantener cada ámbito de su vida es un acto de malabarismo. No puede permitir que los caminos se crucen o todo se puede venir abajo.
¿O qué tal el hombre fuerte y valiente, látigo en mano, dispuesto a domar bestias? Para muchos el reto no es domar felinos, sino al enojo, la tristeza, los celos… Un descuido y nos convertimos en presa de estas garras. Y no podemos olvidar el acto de circo más popular: los payasos. Encontrarlos a diario es tarea fácil, sólo hace falta ver los ojos de la gente. El payaso se pone su disfraz y lo único que busca es felicidad en forma de diversión, igual que nosotros. Todos sabemos que detrás del maquillaje y del colorido vestuario hay otra persona, una muy diferente a la que se muestra. Pero el payaso jamás considerará quitarse el disfraz para exponerse… y, la verdad, nosotros jamás le pediríamos que lo hiciera. La despedida viene de la mano del maestro de ceremonias quien, en esta ocasión, somos tú y yo. Cada uno decide qué acto termina y cuál comienza, qué espectáculos son aclamados, cuáles necesitan renovación y cuáles son obsoletos. Una vez decidido esto, ¡que comience el show!
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FIESTA BRAVA. Canibal Royal
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the vintage party
TASTE@ME
Alrededor de 200 personas se dieron cita el 13 de marzo en el Rose Bar del hotel ME para celebrar con nosotros la presentación oficial de TASTE. Literalmente nos quedamos sin palabras. La pasamos muy bien y, según vemos en las fotos, nuestros invitados no pueden quejarse. Hubo de todo: risas, chupe, ligue, romances al descubierto, chisme y muy buenos outfits, por cierto. Todo al ritmo de los beats de nuestros amigos DJ’s de Akbal Music.
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Agradecemos a nuestros patrocinadores: Mini Cooper Gerber Group H Models Red Bull Three Olives Corona Rose Bar Hotel Me by Meliá.
Les seguiríamos contando cómo se puso, pero –como reza el viejo dicho- las imágenes dicen más que las palabras. Estén pendientes de nuestras próximas fiestas porque apenas comienzan…
TASTE THE PARTY!
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Peskayitos
John Gray’s Downtown
¿Buscas pretexto para darte una escapada a Puerto Morelos? Las empanadas de cazón que preparan en Peskayitos es uno muy bueno. Pero también está su chilpachole de jaiba o cuanto cebiche, coctel y taquito aparezca en su carta. Es cocina rápida, sencilla e idónea para combinar con unas micheladas bien frías. Que sea un sitio pequeño es aún mejor, porque tiene una ondita que te asegura que podrás comer rico y pasar un buen rato pagando precios súper justos. Un lugarcito único del que dan ganas de ser cliente frecuente.
Amor automático: Downtown es el más reciente acierto de John Gray, sin duda, el Chef consentido de Quintana Roo. Es el lugar ideal para pasar una tardecita romántica o una noche de martinis y dejarte llevar por la brisa que llega a la fabulosa terraza que el Chef Ejecutivo Karl Mayrhofler diseñó y construyó el mismo. Siéntate a disfrutar al aire libre con unas copitas de El corazón, una mezcla de zinfandel, shiraz y grenache creada por el mismísimo Gray, que da como resultado un excelente tinto, te sorprenderás. Y si acaso se te antoja un cigarrito, ni te preocupes, ¡en la terraza libras la ley anti-tabaco! Av Xpuhil 24, Cancún. Tel. 889 9800 johngrayrestaurantgroup.com
Av. Javier Rojo Gomez 5, Puerto Morelos.
KumKum | Kasta
Chaktunche
Joyas creadas con metales preciosos como el oro y la plata, piedras preciosas y semipreciosas, así como algunos elementos decorativos naturales. Son realmente increíbles, son piezas únicas, y totalmente inspiradas en la música, los viajes, la naturaleza y sobre todo en la diversidad de las culturas y en la moda actual. De esta manera crea su propio lenguaje al fundir múltiples expresiones formales, que dan como resultado piezas de joyería realmente emocionales. Vale la pena darte una vuelta a la tienda y por que no también tomarte un buen mezcal en el Mezcal Room, Chequen su pagina hay tiendas en México, Puebla, Querétaro, Monterrey y por supuesto en Playa del Carmen.
Se te ocurrió hacer la ruta de los cenotes. Una idea increíble de por sí. Vas con los amigos y, de pronto, el hambre y la sed atacan. No hay nada alrededor, o eso parece hasta el km 9.2 donde, cual oasis, aparece el letrero más inesperado: “Chaktunche Café-Bar”. Es el lugar perfecto para hacer una parada técnica antes o después del chapuzón y disfrutar de la tranquilidad de la selva mientras compartes una comida rica, un café o unas chelas. Su onda relajante se contagia y eso lo convierte en un sitio súper recomendable para quienes buscan escapar del caos de la ciudad. Sin duda, una escala obligada para los paseantes. Km. 9.2, Ruta de los Cenotes.
5ta Avenida esquina con calle 28. Playa del Carmen www.kumkumjoyas.com
(Está al pie del camino, a la izquierda, ¡no hay pierde!)
SURVIVAL GUIDE
80
Quintana Roo México
81
Cancún
Playa del Carmen
884.12.02
Bomberos
01 (984) 873.18.84
Migración
884.16.16
Cruz Roja Mexicana
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Taxis Aéreos
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Taxis
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Seguridad Pública
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Tránsito del Estado
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Ambulancia
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Bomberos
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Capitanía del Puerto
01 (984) 873.12.33
Cruz Roja
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Incendios Forestales Estado de Quintana Roo
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Cruz Roja (Emergencias)
01 (800) 903.92.00
Seguridad para el Turísta
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Policía
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Incendios Forestales Servicio las 24 horas (Llame sin costo)
873.01.10
Policía Turística
01 (984) 873.01.63
Ministerio Público
01 (800) 101.23.45
Ambulancia Aérea Life Care
01 (984) 873.02.91
Seguridad Pública
873 .00.67
Ferry
82
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