Experto: Pies ¡Cuánto os quiero

PIES ¡CUÁNTO OS qUIERO!

¡No! ¡No somos Frida Kahlo y nos hacen ¡No! ¡No somos Frida Kahlo y nos hacen falta los pies hasta para echar a volar a tu destino vacacional favorito! Y mucho más ahora, que querrás recorrerte el mundo después de un año raro, raro... Mima tus pies ahora que has cambiado de calzado para prevenir posibles rozaduras, grietas, ampollas y hongos. Estos son los principales problemas que sufren nuestros pies. Existen muchos microorganismos a los que les encanta vivir entre tu piel, uñas y deditos. El verano es la época en la que más humedad sufren y eso favorece el crecimiento excesivo de patógenos que podrían provocarnos picores (hongos), verrugas (virus) y manchas/ nevus (exceso de exposición solar). Como sabes, prevenir siempre es mejor que curar y por ello quiero darte algunos consejos imprescindibles para que , en tu verano, todos los pasos sean hacia delante y sin problemas. Antes de comenzar decirte que, aunque sea verano y tus pies se te cuezan, es recomendable que evites usar durante todo el día chanclas o la fascia de tu pie amenazará con pincharte como si llevases cristalitos. Además, tus gemelos se sobrecargarán innecesariamente. Y seguro que no quieres pegarte tus vacaciones cojeando. ¿Has sentido como un mínimo roce en un pie puede fastidiarte todos tus planes? ¿Te has acordado de los insufribles zapatos después de una boda? La hidratación interior ( de la que hablamos en el anterior número de nuestra revista favorita) es esencial, pero además es necesario prestar atención a la delicada piel de nuestros pies, a los que tan poco caso hacemos.

Tu PIel Te PrOTege cada dÍa de Tu VIda, PrOTégela TÚ ahOra

1. ¡Renueva la piel! EXFOLIACIÓN. Ahora que seguro que te dejas caer por alguna playa paradisíaca, aprovecha su fi na arena para exfoliarte talones, durezas y la piel de tus piernas en general. Si todavía no has podido escaparte, no hay nada como usar sal para masajearte y exfoliarte mientras te duchas. La piel se renueva cada siete días y es conveniente ayudarla a ser eliminada. 2. Después de la exfoliación, es un buen momento para HIDRATAR la piel. Si en el anterior número de esta revista hablábamos de la importancia de mantener nuestro organismo con un óptimo nivel de hidratación, no menos esencial es la aportación tópica de hidratantes, a poder ser naturales, a nuestra piel ( aceite de coco, aceite de oliva, manteca de karité), y en este caso especialmente a los pies. Además, así tendrás la excusa perfecta para disfrutar de un buen masaje, hecho por ti mism@ o persuadiendo a alguien de tu familia a hacerlo, jeje. Será un placer acabar el día relajándose. 3. PROTECCIÓN SOLAR. Sí, sí, insiste en los pies y mucho. Si es imprescindible protegernos de los rayos del sol a diario, es muy importante reforzar la aplicación tanto en esta zona como en la cara, ya que el grosor de su piel es mucho menor al resto del cuerpo y son muy sensibles a quemaduras (no olvides tampoco reforzar la aplicación de protectores en labios, manchas, hombros y orejas). Una ampolla producida por una quemadura en un pie puede derivar en una grave infección que mandará al traste todos tus planes en cuestión de horas. 4. Corta tus uñas de forma regular y en línea recta. No te dediques a manipularlas con tus manos o a cortar con utensilios inapropiados. 5. Es muy importante que si perteneces a colectivos vulnerables a afecciones podológicas ( diabetes, cardiopatías y problemas vasculares, problemas de visión…) pongas mucha atención en esta época del año, ya que sufrimos infl amaciones constantes debidas a las elevadas temperatu-

ras y esto podría provocar daños de los que no serás consciente hasta que ya te duela demasiado. Un truquito que alivia mucho y es muy agradable, es hacer baños de sal y agua bien fría por las noches para favorecer tu circulación. Prueba y verás qué gustito. 6. ¡Quédate con este nombre: betacarotenos! Aunque te parezca algo inconexo lo que comes también infl uye en la salud de tus pies, así que ponte las pilas y aliméntate de productos ricos en esta sustancia como los tomates, la zanahoria, las raíces, tubérculos y jugos verdes. Además de cuidar tu salud interior estarás avanzando con paso fi rme y pies sanos.

Ah!! Y si es importante qué comer, más aún lo es tener en cuenta no atiborrarse a gambas o tendrás todas las papeletas de sufrir un ataque de gota por exceso de ácido úrico en el hueso del juanete. Beber y comer siempre con moderación serán la clave de tu verano más saludable. Y por último y no menos importante, si tienes callos y tienes el hábito de fumar, sería recomendable que empezases a pensar en dejarlo, la nicotina y otras sustancias contenidas en el tabaco están directamente relacionadas con la acumulación anómala de la piel en talones y plantas de los pies. Y recuerda, si de tu verano quieres disfrutar, tus pies has de cuidar ¡Cuídate, hazlo Xtusalud!

Cristina Burriel Mallen

Fisioterapeuta y podóloga col. 144 de “xtusalud, Clínicas para tu bienestar” y del centro de retiro espiritual “Ojalá, refugio de Paz”. Apasionada de la lectura, las terapias naturales, el autoconocimiento y el crecimiento personal. www.xtusalud.net

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