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EDITORIAL
Mi pequeño negocio.
En algunas ocasiones pensamos que nuestro negocio es pequeño, ya que si lo comparamos con los volúmenes de ventas grandes consorcios, seguramente los nuestros no representan el 1 o 2%.
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Por otro lado, si observamos el ACUERDO por el que se establece la estratificación de las micro, pequeñas y medianas empresas, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 30 de junio de 2009, tenemos lo siguiente:
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En este sentido, podríamos establecer si nuestro negocio puede considerarse como una Micro, Pequeña o Mediana Empresa, y por tanto, cuando no rebasemos tales parámetros no podemos ser considerados como grandes empresas.
Ahora bien, si consideramos que nuestro negocio se encuentra dentro de los estándares señalados, no requerimos de mecanismos de control interno, o el establecimiento de políticas de operación, ni mucho menos de asesorías de expertos en materia financiera, fiscal, corporativa, laboral o industrial, es decir, pensamos que tales puntos son solo para empresas grandes o aquellos consorcios establecidos, o bien ya nos preocuparemos cuando nuestra empresa sea un poco más grande.
Sin embargo, te invito a reflexionar lo siguiente, ¿por qué en lugar de comparar tu negocio o empresa con las demás o con los estándares apuntados, realizas la comparación con tu propio patrimonio? Es decir, en lugar de observar la dimensión de tu negocio frente a los demás, lo observas frente al total de tu patrimonio que tienes invertido en él, y probablemente determines con sorpresa que tu negocio no es tan pequeño como tú lo pensabas, ya que tienes invertido o destinado gran parte de tu patrimonio en él, y por tanto no es necesario esperar a un crecimiento exponencial para protegerlo.
Ese es uno de los objetivos de tu revista Audacia Corporativa Fiscal, brindarte las herramientas, como controles, políticas o consejos de expertos que te ayuden a proteger e incrementar tu patrimonio como empresario, emprendedor o inversionista, independientemente de la dimensión de tu negocio.
Así que, sin mayor dilación, te invito a analizar el contenido de tu revista número 28.