Retrato hablado de los responsables de la violencia En un recorrido imaginario por la ciudad de El Progreso desde nuestras casas hacia afuera, pasando por las calles, los barrios y las zonas que se consideran los más peligrosos, hasta llegar a las postas de la policía, a los juzgados, a la alcaldía municipal, hemos identificado a los sujetos e instituciones que-desde nuestra precepción- violan con más frecuencia nuestros derechos.
La violencia en los espacios más íntimos Él decía que me encontraría sola y en varios lugares me lo encontré, yo dejé de visitar lugares. A mí me da mucho pánico ver a ese hombre. Cuando lo miré la última vez sentía que me iba a matar, que me iba a montar al carro, porque él me miraba con odio. Es difícil vivir con ese miedo. ...Yo le pregunté a ella; “¿quiere estudiar?”, “claro que sí”, me dijo, “pero tengo cinco hijos y ya esa etapa mía pasó”. “No”, le dije, “no ha pasado, usted puede seguir estudiando” y ella: “¿de veras?”. Y se fue emocionada a la casa y le dijo a su esposo: “yo quiero estudiar y tengo la oportunidad, me van a dar la beca”, y le dice él: “¿vos, con cinco hijos, así de fea, así de vieja, con esas canas? Regresó y me dijo: “creo que no voy a estudiar”. Hace diez días viví una situación de violencia en mi casa, ahí hubo de todo, golpes, palabras, hasta golpearon a una tía, es algo muy duro. La verdad eso me provoca dolor de cabeza, fue la primera vez que ocurría, pero nunca lo voy a olvidar. Para este diagnóstico enumeramos en primer lugar lo que está ocurriendo en nuestros propios hogares, pero en realidad es lo último sobre lo que nos sentimos cómodas de hablar. Varias de las que participamos en los talleres para esta investigación hemos sido víctimas de maltratos en casa o hemos escuchado los relatos de otras mujeres que son agredidas.
38