¡Jóvenes! un Presente Vivo Eva María Hernández Pontones
Comisario de Juventud de la Real e Ilustre Cofradía de N. P. Jesús Nazareno (Marrajos)
Estamos en tiempo de Cuaresma, tiempo de reflexión, recogimiento y preparación interior, tiempo de encuentro personal con Cristo. Con este pensamiento me gustaría dirigirme hacia los más jóvenes de la Cofradía. Es en este momento cuando debe verse reflejado el sentir nuestro. La Semana Santa para la gran mayoría de nosotros es fe, tradición, pasión y modo de vida, es una forma de expresar públicamente nuestra fe en Cristo. Y aquí los jóvenes tenemos una gran responsabilidad, así es como yo la vivo y he vivido desde niña, esa manera inculcada de poder transmitir de unas generaciones a otras, un mejor conocimiento de nuestra fe en el Señor, y en todo lo que él representa para los cristianos. Una gran parte de la juventud cofrade lo es, por vínculos familiares, desde su nacimiento en el seno de familias procesionistas, que heredan la tradición de sus progenitores, como es mi caso, padres y abuelo. Pero también es cierto, que otros muchos jóvenes se acercan a ésta en el transcurso de su vida, atraídos por la fe y devoción. Ambos casos, tienen un mismo fin, un mismo camino, y es dar testimonio de ello evangelizando por nuestras calles cuando llega la Semana Santa. Este año será diferente, un año más sin procesiones, sin ver nuestros desfiles pasionales por las calles de nuestra ciudad, pero tenemos que vivirla con la misma intensidad, desde el interior y ahora en este tiempo de Covid que mejor forma que seguir haciéndolo a través de la caridad. Hoy en día los jóvenes, sois una garantía de permanencia en el tiempo, en ese futuro del que hablamos siempre. Pero ahora, para todos vosotros, jóvenes, no tenéis que olvidar que este es vuestro presente, ¡es nuestro tiempo y momento! Los más jóvenes sois esa continuidad, estáis llamados a tomar ese relevo generacional del que tanto hablamos y nuestras Cofradías se han dado cuenta de la importancia que tienen en el seno de todas ellas. Es por eso, que los jóvenes ya se encuentran presentes y perfectamente integrados dentro del engranaje de las distintas cofradías que componen nuestra Semana Santa. Los jóvenes no solo tenemos un área en concreto y nuestro trabajo no solo se centra en Cuaresma y Semana Santa, como pueden pensar algunos, sino que trabajamos, participamos, colaboramos y nos involucramos todos los días del año, somos como se dice cofrades los 365 días del año. Estamos en todos los sitios donde nos abren las puertas y nos dejan estar; sitios que hasta este momento eran impensables para nosotros, pero con esfuerzo, trabajo, dedicación e ilusión vamos salvando los obstáculos que aparecen en nuestro camino. Pero, como jóvenes que somos, buscamos algo más… Nuestros valores son la esencia principal del perfil “Joven Cofrade”, un joven que reivindica su lugar siempre desde una actitud de respeto, humildad, compromiso y servicio a todos. Somos una juventud inquieta y con valores cristianos, que trabajan continuamente por formarse desde la fe y a su vez engrandecer el legado que se nos transmite generación tras generación, y de la que yo me siento muy orgullosa de ella.
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