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LECCIÓN CINCO

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Bibliografía

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¡Reto!

• Si tienes que trabajar un texto del siglo de oro español tan complejo, escribe en un apartado el mismo texto, pero dicho desde tus propias palabras.

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• Trata de diagramar las pausas de este texto. Es un ejercicio que también clarificará tus ideas.

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LECCIÓN CINCO

Saca un listado de palabras que no conoces en todos los textos que trabajes y estúdialas, lo mismo puedes hacer con las palabras que te gusta como suenan.

Aplicación de las técnicas vocales en el papel.

La voz cambia por la edad, en cada acontecimiento, en cada ensayo, en cada función que tendrás, no debes intentar imitar lo encontrado, sino permear tu voz de emociones. La palabra no sabe mentir y es la forma más fácil de desenmascarar a alguien a la hora de encarnar. El actor no debe colorear (artificialmente desde afuera), pues las palabras dichas por el corazón son mucho más complicadas y difíciles que la maña del falso énfasis que te da la voz engolada o demostrativa saturada por una sobre dimensión de las palabras.

El escenario debe ser respetado y visto como un santuario, apreciaras cada instante que estés en las tablas, cada respiro, cada significado que estas creando y los que escondes. Y si es un lugar tan sagrado ¿por qué entran en el escenario lleno de errores, lleno de carencias?

Te enumeraré una serie de errores comunes a la hora de hablar en las tablas:

1. Olvidar el texto (pues, aunque te parezca básico es más común de lo que crees)

2. No practicar lo suficiente.

Bien, los dos primeros puntos los tomaremos como uno solo, porque si bien son dos errores grandes casi imperdonables, ambos tienen la misma solución. Para iniciar no debes memorizarte los textos, sino los recitarás mecánicamente, debes de entender todas las implicaciones del texto, la situación, los sucesos y acontecimientos, las circunstancias dadas, la supertarea, etc. Interiorizar el texto con las acciones físicas, y sobre todo darle peso a cada palabra a través de las visualizaciones.

Ejercicio:

Visualizar la palabra

Es mirar detrás de la palabra del autor, si tienes que persuadir a tu interlocutor en escena, debes de imaginar lo que hablas. Este es un ejercicio que deberías mantener en toda tu carrera, es un entrenamiento de la imaginación. Que constantemente trabajas en actuación, en corporal y en nuestra clase que es el estudio de la palabra, con mayor

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énfasis lo haremos. A cada palabra de tu texto debes darle una imagen mental, incluso las conjunciones. Si bien a la hora de estar en las tablas no mantendrás todas las imágenes, es lógico, pero sí mantendrás las más importantes y veras que tales palabras tienen un tono diferente, un significado especial para el personaje.

Entrenamiento y texto

Mientras realizas tu tabla de calentamiento físico, di el texto, previamente aprendido, lo lanzas como si fuera una pelota sin dejar de hacer tu acción, también puedes caminar por el espacio o hacer cualquier actividad física que te permita disociar la palabra del movimiento.

3. No tener entendimiento de lo que se dice.

Es lamentable la falta de entendimiento de un texto, aunque sea una palabra la que no entiendas debes investigarla directamente en el diccionario y si puedes encontrar su etimología mejor. No dominarás nada sino sabes el significado de tus palabras y eso se nota con facilidad ante el público. Al hablar debes de tener en cuenta estos cuatro parámetros externos, sobre el entendimiento del texto:

• Razonamiento lógico del texto (lo que quiere decir de forma literal). • Razonamiento lógico del estilo, del autor y la época. • Sub texto de la emoción y sentimientos vívidos en la escena. • El estilo artístico que quieren tener, que distribuyen los matices, los colores, que encierra tu texto.

4. No proyectar lo suficiente para ser escuchado.

No proyectar tiene muchas causas desde: • No tener una correcta respiración. • No apoyarte en tus resonadores. • No tener un objetivo claro al cual proyectar tu voz. • Tensiones innecesarias musculares en la boca, en la legua, en los dientes. reteniendo así a las palabras, etc.

Normalmente esto es causado por no poder controlar las emociones, si relajas

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tus órganos de articulación, usas tus resonadores de forma consciente, visualizando un punto concreto al cual enviar tu voz atravesando con tu volumen las paredes, esa imagen debes tener y podrás proyectar.

Listado de palabras

Ahora con un texto asignado por el docente o elegido por ti, harás un listado de las palabras que más te gusten, una vez ya tienes el listado, las pronunciarás o expresarás escuchando su sonoridad. Cada palabra te brindara un universo sonoro, lanza la voz. ¡no tengas miedo a probar!

5. Correr las palabras a la hora de hablar.

Correr a la hora de hablar es un problema que se puede resolver respetando los signos de puntuación, dando valor a la pausa como una herramienta de comunicación. Para darte consciencia de lo importante que puede ser cada palabra aplicaremos un ejercicio.

Armar un cuadro con palabras.

• Hacer un círculo con todos los integrantes del grupo.

• Proponer un tema general sobre el cual se desarrollará el ejercicio.

• Ahora cada quien dirá una palabra asociada con el tema.

• Pero también dirás las palabras que precedieron.

Ejemplo:

Tema: la naturaleza.

Julio dirá: verde, Karla: verde, flores, Abigail: verde, flores, hoja. Así vamos aumentado palabras. El reto será que tu memoria puede retener cada palabra, hasta que no puedan más y al final contemplaremos el cuadro que hemos armado con nuestras palabras.

6. La voz y el cuerpo no son coherentes con la caracterización.

No tener una relación con el cuerpo y la voz no te hace ser coherente ni entendible; a menos que sea a propósito, encontrarás un sentido a esta contradicción, pero si no lo es, se vuelve realmente molesto ver a un actor que pierde las composturas corporales.

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Veras en muchos espectáculos como, poco a poco, van dejando la caracterización en medio de la escena, perdiendo y retomando el personaje, confundiendo así al público, derribando una base crucial para potencia tu voz, dando como resultado un destino funesto en tu interpretación. La caracterización corporal y vocal debe de mantenerse de inicio a fin.

7. Ser reiterativo, con el énfasis de tu voz.

Una verdadera tragedia pasa cuando soló quieres ser didáctico insultando la inteligencia del público, cuando das un acento o énfasis artificial, menospreciando al público como si fueran incapaces de entenderte y por ende deben ser guiados. Los énfasis solo deben de provenir de un entendimiento del texto y seleccionados por el actor en conjunto con el director artístico y por las premisas del autor. Generalmente este descuido es más frecuente de lo que

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pensamos, es un vicio de actuación en la actualidad. En el teatro para niños es simplemente un gravísimo error. Hablar con poca energía.

De todos los errores este el más común, te pasará en más de una ocasión si te confías, si no calientas tu voz y el cuerpo antes de ir al escenario, si eres incapaz de encontrar en tus objetivos algún sentido para la creación, sí dejas de entrenarte perderás tu chispa.

8. Tener una boca floja genera una mala dicción.

La boca floja, en términos escénicos, es un mal hábito consistente en tener un tono muscular débil en nuestros órganos de articulación. Generalmente dado este hábito por nuestra peculiar manera de hablar. Esta es una enorme dificultad, porque no sólo significa que tienes malos hábitos en el habla si no que no eres escuchado a plenitud.

Esta será una práctica usual: tener un lápiz de madera entre tus dientes. cuando lo tengas debes decir tu texto y tratar de que se entienda lo mejor posible tu mensaje. Reforzaremos el trabajo de tu lengua, aunque tengas el lápiz entre dientes, tu mensaje debe ser claro. Hacer esto mejorará notablemente tu dicción así que procura hacerlo siempre, incluso antes de ir al escenario.

9. Bajar el volumen en los finales de tus frases.

Esta característica es nuestra herencia en el habla, es algo habitual en nuestra región bajar los finales a la hora de hablar. En el escenario esto se vuelve una mala práctica, a menos que sea a propósito. Sola el texto y las circunstancias dadas definen la inflexión del habla y no tus hábitos. A veces para arriesgarnos necesitamos entender que no somos los primeros con dificultades. A continuación, atesoremos la historia de un celebre orador griego llamado Demóstenes. Nos sorprenderá su historia y todo lo que tuvo que hacer para vencer su defecto en su habla hasta llegar a ser una de los más importantes oradores griegos.

Tenía una salud que era muy frágil y constantemente estaba enfermo. Pero lo más grave era su tartamudez. Esto, por supuesto, era un obstáculo para convertirse en una figura pública, como él lo deseaba. Cuentan que durante su primer discurso fue abucheado por el público. Las palabras se atropellaban en sus labios y no lograba hacerse entender. Se dice

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