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SALUD
SEXUALIDAD EN LAS PERSONAS MAYORES La OMS la define como: “sexualidad es un aspecto central del ser humano presente a lo largo de su vida. Abarca el sexo, las identidades y los papeles de género la orientación sexual, el erotismo, el placer, la intimidad y la reproducción. La sexualidad se vivencia y se expresa a través de pensamientos, fantasías, deseos y creencias, actitudes, valores, conductas prácticas, papeles y relaciones interpersonales”.
En tercer lugar que la sexualidad abarca el sexo, el erotismo, el placer, por tanto se reconoce el ejercicio de la sexualidad humana como medio de disfrute, goce, amor y afecto.
Si lo analizamos un poco, yo destacaría algunos aspectos:
Evidentemente con los años hay cambios físicos, biológicos, nuevas circunstancias personales y familiares, surgen enfermedades, desaparecen unas personas, aparecen otras… circunstancias que nos obligan a modificar la expresión de nuestra sexualidad, pero en ningún caso la anulan. Para cada problema o para cada enfermedad, hay solución: pueden ser las famosas “pastillas azules”, el consejo del sexólogo… cómo digo siempre no dejen de consultar con su médico.
Primero que la sexualidad es una parte integral de la personalidad de todo ser humano. Su desarrollo se encamina hacia la satisfacción de necesidades humanas básicas como el deseo de contacto, intimidad, expresión emocional, placer, ternura y amor. Cada una de ellas se van expresando, de una u otra forma, a lo largo de las distintas etapas: infancia, adolescencia, juventud y madurez. Podemos afirmar que la sexualidad humana abarca las siguientes dimensiones: Biológica: Tendríamos que hablar de la procreación, el deseo humano y la respuesta sexual. Anatomía Sexual. Sistema Genético (XX>XY) Fecundación, embarazo y parto. Social y cultural: Aquí podríamos incluir el papel fundamental de la familia, amigos, educación recibida. Los modelos de entender y vivir la sexualidad que cada sociedad posee. Psicológica: La forma de percibir la belleza. Las ideas sobre lo que está bien o mal en cuanto al sexo. La propia personalidad, y forma de ser. El temperamento, La identidad y orientación sexual. Ética Legal: Que incluiría Los códigos de ética, lo legal y lo no legal, el aprendizaje de valores, lo que es bueno y lo que es malo. Religioso /espiritual: Con los códigos morales y las convicciones más profundas de cada uno, aceptando que la sexualidad es una realidad positiva creada por Dios como expresión de amor y unión. En segundo lugar, que la sexualidad comprende tanto el impulso sexual, dirigido al goce inmediato y a la reproducción, como los diferentes aspectos de la relación psicológica con el propio cuerpo (sentirse hombre, mujer o ambos a la vez) y de las expectativas de rol social.
Como dice el filósofo José Ortega y Gasset “yo soy yo y mi circunstancia”. Que un amigo mío traducía como “ca uno es ca uno y sus caunadas”
En cuarto lugar la sexualidad se vivencia y expresa a través de pensamientos, fantasías, deseos etc. ¡esto está al alcance de todos!. Es más no olvidemos que más del 60 % del sexo reside en la cabeza y no en los genitales. Pienso que en nuestra sociedad actual el sexo está sobrevalorado; No sé si habéis oído el comentario sobre un estudio realizado por un médico brasileño, el Dr. Varela que tras la evaluación de las estadísticas más serias en todo el mundo, pudo comprobar que se destina 5 veces menos dinero a la cura de la enfermedad de Alzheimer, que a los estímulos para la sexualidad masculina y a la silicona para la belleza femenina. O sea que de aquí a unos años tendremos viejas con hermosas tetas y viejos con penes duros, pero ninguno conseguirá recordar para que sirven. Sin llegar a estos extremos cada uno, según sus circunstancias y tenga la edad que tenga, tendrá que buscar la forma de expresar su sexualidad, siempre según su forma de ser, de acuerdo con su personalidad, con sus propias convicciones, y por supuesto con el mayor respecto a la libertad propia y ajena. Por último recordar que la definición dice expresamente que la sexualidad está “presente a lo largo de toda la vida del ser humano” DR. Nicanor Sabín
