La procesión
Quince Cofradías, quince presidentes. En este segundo número de la revista “La Procesión” hemos intentado conocer el punto de vista de los presidentes de nuestras cofradías y cuáles son sus experiencias y vivencias durante la Semana Santa y el resto del año. Ángel Pedro Galiano Ródenas. Presidente de la Venerable Cofradía del Santísimo Cristo del Amparo y María Santísima de los Dolores Un recuerdo de su infancia de la Semana Santa El día de Viernes de Dolores. Era y es un día muy especial, desde muy temprano recuerdo a mi padre sonriente e ilusionado por el día que íbamos a vivir. A las 8.30 de la mañana salíamos de casa vestidos de nazarenos para salir en la convocatoria y mucha gente nos preguntaba “¿Es que hay procesión hoy?, ¿De dónde sale?” La mañana la pasábamos anunciando por Murcia al ritmo de pasodobles que los azules salimos por la noche. Al finalizar la convocatoria, íbamos a la Iglesia para comprobar como iban los arreglos y preparativos de los tronos, luego a casa a comer rápidamente y otra vez a San Nicolás donde colocábamos la lista de estantes en el trono del Stmo. Cristo del Amparo. Finalmente, con todo recogido y ya en casa nos daban las 3 y las 4 de la mañana sentados en la cocina a mi padre, a mi madre, a mi hermana y a mí hablando y comentando las anécdotas del día y como había resultado la procesión. ¿Qué supone para usted presidir la Cofradía del Amparo? Presidir la Cofradía del Amparo es un orgullo y una gran responsabilidad. Para mí la Cofradía es un sentimiento que vive conmigo desde hace 32 años y que me ayuda a recordar el pasado para disfrutar el presente y preparar el futuro. ¿De qué manera mantienen el espíritu cofrade durante el resto del año? Para nosotros la Cofradía del Amparo es 365 días al año durante los que preparamos, organizamos y participamos numerosas actividades. No sólo es el día de la
procesión, sino el traslado de Jesús del Gran Poder, el descendimiento del Cristo del Amparo, el besamanos a la Virgen de los Dolores, las reuniones de las hermandades y tronos, la cena de hermandad, las charlas, la realización del belén, el pregón de la Inmaculada, la procesión de San Nicolás, el concierto benéfico, el concurso de dibujo, el taller de manualidades infantil, la misa de gozo, la postulación para la ayuda contra el cáncer, o el altar de los mayos. Todos estos actos en conjunto hacen que el espíritu cofrade de la familia azul se mantenga vivo durante todo el año.
Juan de Dios Rogel Paya Presidente de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Fe ¿Cuál cree que es el impacto de los desfiles procesionales en la fe de quienes los contemplan? Cuando se plantea esta cuestión se sobreentiende que nos referimos a personas que ya tienen fe, que creen en la muerte y resurrección de Cristo y que se mueven por un sentimiento íntimo de ver y participar en la exaltación popular de esa misma fe. El impacto que se produce en la gente que ve el desfile procesional, va desde la emoción de ver salir a la calle todo lo que representa el “ser cristiano”, muerte y resurrección de Cristo; hasta la admiración de la representación en imágenes, de lo que es la Semana Santa; el valor artístico de las tallas, la admiración a los artistas imagineros y orfebres que realzan con su trabajo las procesiones y la propia formación y desarrollo de los desfiles procesionales. ¿Cuáles son los objetivos de su Cofradía a largo plazo? Los objetivos de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Fe son afianzar la presencia de la Cofradía en la Semana Santa murciana y en el Cabildo Superior de Cofradías de Murcia.
La procesión Semana Santa Murcia 2018
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Hacer crecer tanto en número de cofrades, como en actividades de interés a la propia Cofradía. Y que todos los ciudadanos de Murcia conozcan y entiendan la presencia de nuestra Cofradía y su paso en procesión por las calles de la ciudad. ¿Cree que la Procesión del Ángel es una buena cantera de futuros nazarenos? Entiendo la Procesión del Ángel como el primer contacto de los niños con un desfile procesional, que tanto por participar en él, como verlo, puede provocar el interés y la intención por conocer y participar en una Cofradía. Se positivamente que el futuro de cualquier cofradía está en la capacidad que ahora tenemos de implicar a los más pequeños en la vida cotidiana de la misma, no tanto en asistir a las reuniones y cabildos, como en la implicación en tareas para preparar la procesión o en las convivencias que se mantienen a lo largo del año. Al igual que transmitimos la fe, que transmitimos las oraciones y que enseñamos a los niños una vida cristiana y correcta, debemos enseñarles y transmitirles, no solo la tradición cofrade, sino el sentido mismo de ese ser cofrade, que para nosotros no es otro que hacer popular y cercano el comportamiento religioso. Sin la presencia de los niños ahora, es muy difícil que una cofradía tenga futuro. Y para ello la Procesión del Ángel es una muy buena iniciativa por ser, como he dicho antes, la puerta de entrada. Aun así, se me plantean dudas por el hecho de que es una procesión no organizada por cofradías y puede desviar la atención hacia los centros escolares como cantera de cofrades, algo con lo que estoy de acuerdo. Son las cofradías las entidades encargadas de este proceso.
