
5 minute read
Cohesión social en la comunidad a partir del trabajo con las familias
from Impacto Mayama
by Mayama AC
124 Capacidades para la toma de decisiones...
Ahí hay muchísimos niños especiales (refiriéndose al dif de San Pedro Tlaquepaque), todos son niños especiales y gente especial; hay personas adultas, que tienen alguna discapacidad, ya sea de... personal, así como... no sé... unos no hablan bien, otros no caminan bien, otros andan en sillas de ruedas, otros son sordomudos; hay muchos de diferentes capacidades. Y yo llegué, miré, no pues ahí ¡hay muchísima actividad! ¡Todos los días hay muchísima actividad! Si yo pudiera ir todos los días. Todos los días hay. Y lo que más me gusta a mí, maestro, que ahí es un trato muy especial… Es diferente a los tratos que encuentra uno fuera porque ahí...
Advertisement
Si bien las familias profundizan poco respecto al derecho a una vida libre de violencia para sus hijos, es evidente que al menos existe en ellas una mayor conciencia referente al tema y un deseo por cambiar las condiciones de desarrollo para niñas y niños.
Cohesión social en la comunidad a partir del trabajo con las familias
Un tema constante a lo largo de las entrevistas con las familias Mayama ha sido cómo los miembros de éstas han adquirido habilidades sociales que mejoran las relaciones en su entorno inmediato, sin embargo esto también permite el acercamiento a otras familias, dentro y fuera del ámbito de Mayama, en sus comunidades. Este hecho permite reflexionar cómo la amplitud de capacidades desde los individuos y las familias, puede ser el camino para integrar de nuevo a las comunidades, la construcción de cohesión social a través del reconocimiento de los vecinos, la apertura de espacios de convivencia y recreación de forma intencionada, entre otras iniciativas.
Para Adela González, madre, hay un antes y un después de Mayama. Narra la importancia de las redes de apoyo, dentro y fuera de la organización, para la gestión de asuntos cotidianos con su familia:
La convivencia y la amistad con la demás gente... Sí. Con quien sea, de Mayama o no de Mayama... Éramos muy apartados con la gente, como quiera y ahora (inaudible) me visitan, visitamos, convivir... Para mí sí, porque a veces está uno estresado y si no le habla uno a nadie, pues, hay se sigue igual y si, sin embargo ya se sale, y ay voy con fulano de tal, voy...
Incluso para Julio González, padre, explica como la ausencia de una red de apoyo cercana fue uno de los factores para detener la intención de su familia por migrar a Tecate, Baja California. Una preocupación latente en los González González, como padres, es el futuro de sus hijas una vez que ellos no estén, en particular el de Paula, debido a su discapacidad:
Precisamente, cuando nos íbamos a ir de aquí, que íbamos a irnos para Tecate, le dije a mi señora: “Mira, aquí ya toda la colonia conoce a la niña, más no (inaudible) cualquier persona le tiende la mano a la niña”. ¿Por qué? Porque la conocen desde
Resultados de la evaluación mixta al modelo de Mayama 125
chiquita y si vamos a otra parte, va a empezar de nuevo, y es lo que preocupa mucho, pues, su porvenir. ¿Qué puede pasar con ella?
Julio finaliza señalando la importancia de conocer a sus vecinos como un elemento fundamental en la construcción de un sentido de pertenencia a la comunidad para el apoyo y seguridad entre sus miembros.
En el caso de Erika Ríos, madre, ella explica los cambios que observa respecto a la forma de relacionarse con otras personas. Ella refiere al proyecto productivo en común que estuvo trabajando con otras mujeres, proyecto que se conformó a partir de una serie de talleres productivos que organizó Mayama junto con otras organizaciones (Compartamos Banco, Earthbox), en donde participaron algunas mamás de Mayama y otras mujeres vecinas de la comunidad. Incluso describe cómo este vínculo se ha fortalecido al grado de encontrar apoyo en este grupo de amigas:
Sí, pero, cómo le diré, no se acercan; sí me buscan, pero cuando me ven allá en la calle y me dicen: “oye, queremos ir a tu casa...” y les digo, “ah, no, sí cuando gustes allí estoy”. Cosas que no pasaban antes. Sí, para platicar o que quieren saber qué es lo que estamos haciendo: cómo vamos con el repelente o cómo vamos con el huerto, y ya les digo, pos cuando gusten allí estoy en mi casa… ¡grandes amigas! Y ya con más amigas, ya como que somos, como si fuéramos hermanas, porque ya preocupa algo viene, yo voy, y así, y cuando tarda un rato que no nos vemos, nos encontramos y “¡hay que reunirnos!” y así.
Gerardo Fernández, padre, también explica cómo algunas de las acciones emprendidas desde Mayama con otras familias han contribuido en la participación de las personas, en la convivencia de ellos con otras familias y cómo después esa convivencia se ha trasladado a la comunidad, con sus vecinos y otras familias más allá del programa:
Mayama nos ayuda mucho a nosotros y la verdad es que yo me siento bien, bien, porque como la vez que vino la participadora de pintar (se refiere a una actividad en donde Mayama organizó a padres varones para que ayudaran a pintar el centro de día), pues, a mí me ayuda mucho porque sí se ve la unión de la gente y, no, pues todos los maestros, todos los papás de los niños compartimos y convivimos y pues salieron más rápido las cosas... A muchos no, pero la mayoría sí conocemos, la mayoría son de aquí, pero a otros no y, pues, a mí sí me gustó mucho eso, porque trabajar en conjunto se hacen más rápido las cosas y todo más rápido y todo más bien y comparte uno con todos... Nosotros aquí, con las personas que nosotros convivimos bien, este, siempre tenemos esa mente de invitarlos a comer, a cenar con alguna de ellas los invitamos y aquí a estar conviviendo con la gente.