![](https://assets.isu.pub/document-structure/210713230313-dbeb64790a3e749197bdecf3801a17c4/v1/2dd0b7409377996ae9d9ee16ca3fddcf.jpeg?width=720&quality=85%2C50)
4 minute read
SALUD PARA TODOS Traumatismos y esguinces ¿cuáles son los tratamientos para hacer en el hogar?
JULIO 2021 • Pág 44 # 33 •
Traumatismos y esguinces: ¿cuáles son los tratamientos para hacer en el hogar?
Advertisement
Los traumatismos y los esguinces, conocidos más coloquialmente como golpes y torceduras, son lesiones agudas de las partes blandas muy frecuentes, siendo afectados más comúnmente los músculos, tendones y ligamentos. A menudo se producen durante prácticas deportivas, pero a veces las actividades simples de la vida cotidiana pueden causar lesiones que requieran bastante tiempo para su recuperación.
Los traumatismos se producen como consecuencia de golpes, caídas o cualquier impacto que no ocasiona heridas abiertas, pudiendo ser leves o provocar lesiones más importantes. Ocurren con más frecuencia en niños y adultos mayores, quienes además son más frágiles, por lo que se debe evaluar la severidad del golpe y la eventual necesidad de atención médica. En el caso de golpes leves, se recomienda la aplicación de frío local mediante hielo (nunca directamente, sino envuelto en un paño), gel en almohadillas o agua fría por períodos cortos y durante las primeras 24 horas, con el fin de evitar que aumente la inflamación y lograr así un efecto analgésico. La aplicación de calor en las primeras horas no es lo más adecuado, ya que si bien
![](https://assets.isu.pub/document-structure/210713230313-dbeb64790a3e749197bdecf3801a17c4/v1/edb689a8de4cd73230e6d2dc4a57532f.jpeg?width=720&quality=85%2C50)
![](https://assets.isu.pub/document-structure/210713230313-dbeb64790a3e749197bdecf3801a17c4/v1/626a13c79aea1939cc15490cb081ed12.jpeg?width=720&quality=85%2C50)
JULIO 2021 • Pág 46 # 33 • puede calmar momentáneamente el dolor, produce una dilatación de los vasos sanguíneos que hará que aumente la inflamación y más tarde el dolor. Luego de 24 a 48 horas, sí se recomienda el uso de calor que aumentará la circulación sanguínea favoreciendo una recuperación más rápida. Como tratamiento del dolor, se sugiere la inmovilización del miembro afectado, el reposo y el uso de antiinflamatorios y analgésicos comunes de venta libre. Si el sector afectado es una extremidad, se deberá mantener en alto y en reposo, pues esto contribuye a disminuir la inflamación y calmar el dolor. En caso de que el dolor persista o se requieran analgésicos más potentes, consulte a su médico. Cuando el golpe es en la cabeza, y considerando este no produce ninguna consecuencia, solo es necesaria la observación. Si se produce pérdida de conocimiento, agitación o cambios de carácter, vómitos, dificultad para mover algún miembro, habla incoherente, sangrado por nariz, boca u oídos o convulsiones, se debe consultar inmediatamente. Del mismo modo, en caso de que la contusión sea a nivel del ojo, no alarmarse y aplicar las mismas medidas. En cambio, si el traumatismo fue directo en el globo ocular, se debe consultar a la brevedad. Otro tipo de lesiones muy frecuentes son los esguinces y las torceduras. El término esguince define la lesión de un ligamento, mientras que la torcedura hace referencia a la lesión de un músculo o tendón. Todas ellas se producen por estiramiento más allá del límite normal para cualquiera de las estructuras afectadas y pueden llegar a derivar en un desgarro parcial o total. Este tipo de lesiones están provocadas, en general, por una torsión brusca, sobreesfuerzo, posiciones repetitivas o mantenidas, o un golpe o caída que implican la pérdida de la posición normal de una articulación, con el resultado de un estiramiento excesivo o una rotura del ligamento que estabiliza dicha articulación. Los esguinces y las torceduras suelen afectar articulaciones como el tobillo, la rodilla y la muñeca, aunque pueden producirse en cualquier otra articulación del cuerpo. Se presentan con dolor, hinchazón, hematomas y pérdida de la función, cuya intensidad depende de la severidad de la lesión. El tratamiento sigue los lineamientos mencionados previamente para los golpes e incluye inmovilización, reposo, elevación del miembro afectado y aplicación de frío local. Como medidas analgésicas, se recomienda la compresión de la zona (que puede ser con vendas de compresión elástica destinadas para tal fin), el uso de antiinflamatorios y analgésicos, y a veces ejercicios de terapia física y rehabilitación con el objetivo de restablecer la movilidad. La recuperación puede demorar de días a meses, dependiendo del grado de afectación y pérdida de función que genere la lesión. En caso no se pueda soportar o levantar peso con el miembro afectado, la articulación se sienta inestable o entumecida, o su movimiento sea limitado, debe consultarse al médico a la brevedad, ya que puede significar que el ligamento esté completamente desgarrado. Es frecuente que posterior al traumatismo o lesión se produzcan hematomas que producen dolor y disminuyen el movimiento de la zona afectada. Los hematomas se reabsorben solos en casi la totalidad de los casos. Entre los tratamientos disponibles, se pueden utilizar cremas o geles con efecto anticoagulante y antiinflamatorio local, con el objetivo de favorecer la absorción del hematoma y calmar el dolor.
![](https://assets.isu.pub/document-structure/210713230313-dbeb64790a3e749197bdecf3801a17c4/v1/137ec0f924d4f0d070349e29b9fede4d.jpeg?width=720&quality=85%2C50)