PRISCILA TAPIA, MANTENEDORA ELÉCTRICA DE EL TENIENTE: “ME GUSTA TANTO SER MINERA QUE NO ME VEO EN OTRO LADO” Egresó como técnica electrónica, pero encontró un nicho en el área eléctrica, donde revisa con mucho expertise equipos LHD 517, 621 y los martillos. Dice que no le ha costado desempeñarse en este mundo masculino y alaba el ingreso de más mujeres a la operación. Priscila Tapia, mantenedora eléctrica en la mina Diablo Regimiento, llegó hace 16 años a la División El Teniente y ya cumplió 13 como trabajadora de Codelco. Con la misma pasión que revisa equipos LHD 517, 621 y los martillos, resume su vida laboral en el interior de la mina: “me encanta ser minera, me gusta tanto que no me veo en otro lado”. “En estos años, la forma de operar se ha tecnologizado. También ha habido cambios para nosotras: hay más instalaciones para las mujeres, más elementos de protección personal (EPP), existe un enfoque más diverso, una situación muy distinta a cuando llegué. En esa época no había nada”. ¿Qué siente al ver que se han ido incorporando más mujeres? Es una oportunidad para todas quienes quieran trabajar. Hacerlo en la minería no es fácil y para una mujer es más rudo, pero con disposición, siempre se podrá desarrollar una carrera exitosa. Para una que ya tiene experiencia
en este rubro es satisfactorio que la empresa incorpore más talento femenino. ¿Cómo ha sido su inclusión en el equipo de trabajo? Nunca he tenido problemas en trabajar con hombres, porque estudié con ellos, así que no ha sido tema. ¿Está orgullosa de su trayectoria? Para mí es gratificante ser una mantenedora eléctrica. Me gusta el ambiente laboral. He aprendido diferentes cosas y me motiva hacer bien la pega. Estar en distintos lugares como el taller eléctrico, martillo, ventilación, distribución de baja tensión y chancado, me ha servido mucho para crecer en conocimientos y experiencias. Mantención, análisis de falla y reposición de energía han sido algunas de mis tareas. Priscila agrega que la minería le ha dado las herramientas para desempeñarse profesionalmente y apoyar a su familia. “Soy técnica electrónica de la Universidad Federico Santa María y ahora me dedico alas