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¿Cómo influyó la pandemia en el campo?
Por: Ing. César S. Cantú Martínez * MAI, SRA, MRICS, R/WA
*cesarcantu@webtelmex.net.mx agropek@prodigy.net.mx
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Esta contaminación del virus COVID-19 agarró por sorpresa al mundo y se convirtió en pandemia, ojalá terminemos bien en unos dos meses como mínimo, mientras nos infectamos y desinfectamos de este virus, según los que saben del tema y se tengan las mínimas pérdidas humanas si hacemos caso a las indicaciones.
Pero ¿Cómo nos afecta a los productores del campo que no podemos poner en stand by, en receso o suspender la actividad de nuestras cosechas de granos, frutas, hortalizas, leche, quesos, pollos en engorda, producción de huevo, novillos y cerdos terminados para sacrificio o cabritos y borregos ya listos para enviar al mercado? Los compradores de estos productos nos dicen que cerraron las compras, que dejaron de adquirir mercancía y que no pueden recibir a ningún precio los productos por falta de almacén y de recursos económicos para tenerlos en inventario. Si hacemos historia, anteriormente todos los almacenes tenían sus bodegas y guardaban el inventario, pero ahora con el costo del dinero, la comunicación y la facilidad de mover los productos a nivel local, nacional e internacional entró el proceso de just on time o justo a tiempo, o sea que tengo en anaquel o inventario en bodega, solo lo que espero vender ese día o esa semana, algunos supermercados grandes a nivel nacional cuentan con sus centros de distribución, pero solo con inventario para unos cuantos días.
Las gentes de campo seguimos en las siembras de cereales, hortalizas, trabajando los frutales, cuidando las vacas, dando de comer a los cerdos, pollos, novillos, ordeñando vacas para que no falte alimento en la mesa de los mexicanos. Los frigoríficos y empacadoras siguen trabajando a menor nivel, pero funcionando, los gobiernos municipales, estatales y federal no han reaccionado
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en apoyar al sector, es más tenemos que seguir pagando los sueldos e impuestos de nuestros trabajadores aunque no podamos vender las cosechas del campo por falta de compradores o dinero en el bolsillo de la población. Los agricultores y ganaderos seguimos trabajando en beneficio de la población del país.
Resumiendo, el tema de los canales de comercialización no depende de los productores que no los hemos sabido desarrollar, dependen de los intermediarios que ganan mucho más que los productores por tener la mercancía dos o tres días y no el tiempo y la inversión que se requiere para producir y procesar, en varias ocasiones hemos tocado el tema, pero, desafortunadamente, como productores no queremos salir de la zona de confort, de estar en el rancho o centro de producción y esperar al comprador para venderle. Ojalá esta situación que estamos viviendo nos haga cambiar y entrar en una posición de asociación con productores similares en tamaño y abrir un mercado para nuestros productos al menos de manera regional, sé que muchos de ustedes lo han pensado, pero no lo han puesto en práctica por falta de tiempo, conocimiento, recursos económicos o de ganas, y en el último de los casos porque las autoridades estatales tienen preferencia por otros grupos y obstaculizan el nuestro (sucede).
En Estados Unidos, nuestro principal cliente y proveedor de insumos tienen unas políticas diferentes para apoyar a sus productores del campo, específicamente a los que producen alimento para los humanos, carne, leche, huevo, frutas, verduras, entre otros, cuando sucede una tragedia como esta, un huracán, ciclón o un terremoto el gobierno apoya con dinero en efectivo a los productores; en el caso de una seca o un caso de fuerza mayor apoyan con $100.00 dólares por vientre, si el caso no es de vital importancia nacional o emergencia, el apoyo se hace a través de las organizaciones de crédito, donde prestan a fondo perdido siempre y cuando conserves la planta laboral, o sea que no despidas trabajadores, en la actualidad para esta eventualidad se dispusieron para el campo 2 billones de dólares a través del Comodity Credit Corporation, donde también hay apoyos económicos a los productores que sobrepasan el promedio de producción en las cosechas, ¿cómo podemos nosotros competir o producir alimentos si no tenemos nada de apoyo?, el dinero en México se lo dan a los que no trabajan y no producen, espero que alguien que sepa, de los que tienen acceso al Presidente López Obrador, le explique, que con el proceso que vamos y con la poca a nula actividad de los organismos del sector productivo vamos a terminar sin campo
en el país y todo va a ser importado a un valor que nos va a sacar de control económico, por el tipo de cambio.
Sin embargo, tenemos fe en que todo va a pasar y vamos a salir bien librados, pero (las más importantes instituciones financieras y las calificadoras internacionales pronostican para México un crecimiento para este año del -2 al -6 %), con algunos golpes, moretones y posiblemente algunos huesos quebrados y algunos terminarán en una silla de ruedas, de los que no vamos a poder defendernos o evitarlos y ojalá el gobierno vea la difícil situación del país, del campo, de los productores y apoye para no tener perdidas de inventarios en los centros de producción y volvernos más dependientes de lo que actualmente somos de insumos alimenticios. En la actualidad el 50% de los alimentos que se consumen en el país son importados (la OCDE, Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, dice que un país debe de producir de menos el 75% de sus requerimientos alimenticios para estar en un nivel adecuado, pero estamos muy por debajo de eso) y con el tipo de cambio los productos van a incrementar de precio y los consumidores van a tener problemas de adquirirlos, yo la verdad no sé si los ejecutivos, directivos y empleados de buen nivel de la SADER lo saben o lo entienden y no lo quieren apoyar o no le dicen al presidente el problema, por miedo a que los despidan y pierdan su trabajo.
No debemos de desaprovechar esta situación y verla como una oportunidad para reinventarnos (cada uno en su trinchera) y crecer como productores y como personas, ya que sin la esperanza de un cambio de pensamiento del presidente, que el pasado domingo 5 de abril NO llegó, seguimos peor, en un camino a ciegas Seguramente lo que va a pasar es que muchos agricultores y ganaderos van a sacar y vender sus animales y rentar o abandonar sus tierras para terminar volviéndonos más dependientes en el sector alimenticio.