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Honda E
from Automovil 1-4-2020
by rikyphoto
Honda E Revolución
digital Hacía mucho tiempo que no teníamos un coche interesante de Honda. El E cien por ciento eléctrico es ya una realidad. Su interior está plagado de pantallas digitales y de tecnología, pero es mucho más que eso. Lo ponemos a prueba.
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Por Adrián Lois, dEsdE EsPAñA / Fotos: ArcHivo
El Honda E ha nacido para revolucionar la marca y el mercado. Gestado desde cero, su tamaño reducido (3.89 metros de largo) y su aspecto original contagian. “Es el coche más emocional de Honda en su gama actual. Un vehículo donde no importan tanto los datos como las emociones”, así lo definen los responsables de su desarrollo. Sin duda, lo más llamativo de este pequeño eléctrico está en su interior, en ese tablero plagado, en línea recta, de cinco pantallas digitales, seis si sumamos la del espejo retrovisor central. Pueden abrumar, y realmente lo hacen al principio, pero luego no resultan para nada molestas ni intrusivas en la conducción. Para las pantallas digitales de los espejos retrovisores tardas un poco en cambiar el chip, pero al final les sacas más provecho al no tener que desviar tanto la mirada. No me gustó tanto, en cambio, el espejo central interior en su posición digital (al empujarlo lo colocas en modo normal): demasiados reflejos molestos que obligan a enfocar mucho la vista sobre el espejo. En cuanto a las dos pantallas táctiles del centro, gemelas, una para el conductor y otra para el acompañante, son las que albergan el completísimo sistema multimedia. Entre ambos pueden incluso intercambiar lo que visualizan, excepto los ajustes de seguridad que solo aparecen en la pantalla del conductor.
Tren motor Motor eléctrico trasero Tipo Síncrono de imanes permanentes
Potencia máxima 134 hp (100 kW) Par máximo 315 Nm (232 lb-pie) Relación peso/potencia 11.29 kg/hp Batería
Tipo iones de litio, 35.5 kWh
Más Datos transMisión
Caja Automática, 1 velocidad Tracción Propulsión trasera Embrague N.A.
BastiDor
Susp. del. Independiente tipo MacPherson Susp. tras. Independiente tipo MacPherson Elem. elástico Resortes helicoidales Estabilizadora del / tras. Sí/Sí Frenos del. Discos vent., 381 mm Frenos tras. Discos sólidos, 381 mm Dirección Eléctrica, variable
CarroCErÍa
Largo/ancho/alto (mm) 3,895/1,750/1,512 mm
BatErÍa
Tipo Ion-litio de 35.5 kWh Celdas N.D. Recarga 100 % @ 7.4kW, 4.1 h 100 % @ 2.3kW, 18.8 h 80 % @ 100kW, 30 min 80 % @ 50kW, 31 min Peso bat. N.D.
rEnDiMiEntos
Vel. máx. Acel. 0-100 km/h Autonomía Emisiones de CO 2
145 km/h 9 s 222 km/l 0 gr/km
PrECio
El equivalente a 700,000 pesos aprox.
CUADRO DE INSTRUMENTOS.
De 8.8 pulgadas y a todo color, muestra las indicaciones básicas de conducción de forma simple y legible, incluidos los cruces de la ruta del navegador.
La resolución es buenísima, y es fácil y rápido adaptarse a ellas; sin embargo, da la sensación de que se podían haber aprovechado mejor los espacios e incorporar más funciones que eviten tener tanto botón extra en el habitáculo.
Aquí podemos disfrutar además de un asistente personal con Inteligencia Artificial que responde al comando “Ok Honda”, conectividad Bluetooth, USB y HDMI (se puede sincronizar funciones vía Chromecast) y de un sinfín de asistentes de conducción bajo el nombre “Honda Sensing”, con funciones exclusivas como la que te avisa que el carro de adelante ha salido o la que mitiga el uso del acelerador para evitar golpes inesperados.
La revolución con el Honda E va más allá de su interior tecnológico. El vehículo en sí es ya todo un hito: estrena una plataforma de propulsión trasera completamente nueva, con suspensión independiente MacPherson en las cuatro ruedas, con un ajuste blando para que los viajes y la conducción sean cómodos, y con un reparto de pesos equilibrado gracias a la posición baja y centrada de las baterías (35.5 kWh de capacidad), y de la unidad de potencia, un poco más atrás. El motor eléctrico, el mismo que el del CR-V Hybrid, puede desarrollar 100 kW (136 HP) o 113 kW (154 HP) en función de la versión, pero siempre con unos instantáneos 315 Nm de par motor que le hacen volar al salir de los semáforos y afrontar con seguridad cualquier intento de adelantamiento. Si a esto le sumas un radio de giro espectacular (4.3 metros, eso sí, con 3.1 vueltas de volante entre sus topes), el Honda E se convierte en un auténtico “ratoncito” por las calles. Para que te hagas una idea: estando estacionado en un cajón, podrías girar el volante al máximo y colocarte dos lugares a un lado de donde estabas. La batería, de iones de litio, garantiza 222 km de autonomía (210 km en la versión Advance con rin de 17 pulgadas). Una cifra que se antoja baja, sí, pero que es intencionada en Honda para centrar sus esfuerzos en otros aspectos y tecnologías. “No todo es la autonomía”, nos dicen. Los tiempos de recarga van desde los 31 minutos (hasta el 80 por ciento) en una toma de recarga rápida de 50 kW (CCS2 DC), pasando por las 4.1 horas en un cargador de uso público o doméstico de corriente continua de tipo 2 (7.4 kW), hasta las 18 horas en un enchufe de casa. Para cargarla en movimiento, el Honda E dispone de siete niveles de retención: se controlan directamente desde las levas tras el volante, con la posibilidad de activar el botón del Single Pedal Control System, con niveles de desaceleración como para detener el auto sin necesidad de usar el pedal del freno. Nuestra ruta mixta de ciudad y carretera nos
SELECTORES. Entre los asientos están los selectores del cambio “by Wire" , el “Single pedal” y el botón para el modo Sport. Justo enfrente, las tomas USB, HDMI, enchufe de 230V y del encendedor.
dejó consumos de unos 19 kWh de media a los 100 kilómetros. En ciudad se mueve con soltura gracias a su pequeño tamaño y excelente radio de giro; en carretera, donde muestra buena pisada, aplomo y un tacto en el freno para nada extraño (como suele ser en este tipo de vehículos, gracias sobre todo al freno by wire), los consumos suben. La visibilidad es muy buena, los asientos son cómodos y la sensación en el interior es de estar en un salón. Los acabados son correctos, las telas de las puertas y los asientos están bien logrados y resultan agradables al tacto.
El Honda E originalmente ha sido concebido para su mercado nativo, otros también asíaticos y el europeo, por lo que las esperanzas para que cruce el Atlántico están puestas única y exclusivamente en los aventureros que se atrevan a importarlo de manera independiente. ¿Por qué entonces hicimos el contacto? Simple y sencillamente porque es un coche interesante y que demuestra que en Honda cuando quieren hacer autos que estén al día y que sean divertidos, pueden hacerlos.
CLIMATIZADOR.
A pesar de las numerosas pantallas, llama la atención la generosa presencia de botones. Los controles del climatizador van integrados bajo el tablero.
DOBLE PANTALLA. Táctiles y de 12.3 pulgadas cada una. Desde aquí se tiene acceso a todas las funciones y apps del coche. La imagen panorámica de fondo es personalizable con tus propias imágenes.
CONTROLES. Tres botones superiores para intercambiar la visualización entre ambas pantallas, visualizar apps recientes e “ir atrás”. Abajo, seis accesos directos personalizables al gusto del usuario.