La María
CULTIVO
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La marihuana más verde II
Mejoradores de estructura y fertilizantes Hay todo tipo de materiales que se pueden añadir para mejorar la estructura del suelo y fertilizarlo. A continuación se listan algunos de los que se utilizan en el cultivo de marihuana ecológica. Monseñor Jose María
Abono verde: mejor que dejar la tierra improductiva es cultivar algo en ella, los abonos verdes y cultivos de cobertura se siembran para cortarlos y enterrarlos, lo que mejora la estructura y aporta biomasa al suelo; además de proteger las capas superficiales y evitar la erosión y el lavado de nutrientes . Tras la siega se deja compostar sobre la superficie unos días y se entierra apoca profundidad. Sino hay heladas pueden cultivarse leguminosas como los guisantes o las habas que fijan el nitrógeno del aire en el terreno, aparte de mejorarlo penetrándolo con sus largas raíces. Asimismo son útiles el trébol verde, la veza, los altramuces y las algarrobas. Las raíces de las gramíneas como el centeno o la avena mejoran la tierra en superficie. Las crucíferas como rábano forrajero, nabo forrajero o mostaza dan masa vegetal en poco tiempo
Estiercol: excrementos fermentados de animales, es ideal el de granjas donde se esparce abundante paja por el suelo y se lo madura correctamente. Cuidado con el de granjas de estabulación intensiva, donde alimenten a los animales de piensos compuestos y les den antibióticos. El estiércol vacuno no es muy abundante en nutrientes pero es un excelente acondicionador de la tierra y retentor de humedad. El de caballo es de los más nutricios y en los cultivos de invierno ayuda a mantener la temperatura. Los de oveja y cerdo son mas fríos pero ricos en nutrientes. Su composición varia en función de muchos factores como la
alimentación de animal o el tipo de cama donde reposa. Compost: materia en descomposición aeróbica. Además de nutrir el suelo mejora su estructura. Para elaborarlo vale todo tipo de material biodegradable: siegas de césped, restos de cosecha , podas de setos trituradas, restos de comida sin incluir pieles de cítricos, pequeñas cantidades de hojas, cenizas, paja o estiércol. Hay que mantener el equilibrio entre los restos ricos en carbono y los ricos en nitrogeno. Para formarlo se hace una base de ramas y se alternan las capas de material, que se intentará mezclar homogéneamente,
Cannabicultura orgánica, una puerta abierta a marihuanas exquisitas
añadir algunas paladas de tierra fértil entre las capas. Hay que formar un montón de más o menos 1,5 metros. Es bueno voltearlo de vez en cuando para que se oxigene. La humedad adecuada para el proceso es del 40% al 60%, si está muy seco conviene regarlo, si está en una zona muy lluviosa hay que cubrirlo e impedir se anegue. Cuando el proceso es correcto alcanza una temperatura de 60 Cº, para luego enfriarse y madurar. Un compost bien maduro tiene buena consistencia y color oscuro. El compostaje directo consiste en esparcir el material en una delgada capa por el suelo y dejar que se descomponga. Humus de lombriz: un material oscuro, pesado, con olor a mantillo de bosque. Son los excrementos de la lombriz roja californiana o Eisenia foétida. Además de ser una fuente de nitrógeno, contiene fósforo y potasio, así como ácidos húmicos y fúlvicos y diversas hormonas como las auxinas o las gibelerinas. Mejora la estructura del suelo, lo fertiliza, promueve el desarrollo de las raíces y reduce el estrés durante el transplante. Muy estable, se almacena con facilidad. Al contrario que con el estiércol y el compost, hay pocas posibilidades de que contenga huevos de plagas, ni semillas de malas yerbas. Es excelente tanto para el exterior como para el interior. Turbas: restos vegetales en descomposición lenta no finalizada. Viene de zonas frías donde la humedad alta y la falta de oxigeno no permiten que se descompongan totalmente. Normalmente tiene un ph muy ácido (3,5 – 4,5) que se compensa con cal, muchas están prefertilizadas. La turba de esfagno se forma por la acción de musgos del género Sphagnum que crecen en capas, los vivos sobre los muertos. La mayoría de las turberas se formaron hace miles de años.
Con polvo de hueso y algas también se pueden hacer selvas de cogollos
Guano de murciélago: excrementos de
murciélagos. El adecuado para la floración tiene un buen contenido en fósforo y se ha extraído de montones viejos. El guano reciente tiene mas nitrógeno y se puede usar en crecimiento. Algas: pueden encontrase distintas harinas y extractos líquidos de algas. Es excelente aunque difícil de encontrar la Lithothamnium calcareum conocida como Litothamne. Su harina es muy rica en calcio , además de magnesio y oligoelementos; adecuada en la enmienda de suelos ácidos. Harina de sangre: sangre de matadero seca y triturada, alto contenido en nitrógeno de asimilación rápida, usar con precaución. Polvo de hueso: con un alto contenido en fósforo, muy apropiado para floración, también esta empezando a ser difícil de encontrar tras la crisis de las vacas locas. Cenizas de madera: ricas en potasio vienen bien en la floración Perlita: Airea y drena la mezcla, además de colaborar en retener agua y nutrientes. Vermiculita: Retiene mas humedad y drena menos que la perlita. Arena: mejora el drenaje y aireación, suele usarse conjuntamente a otros acondicionadores Coco: La fibra que recubre la cáscara de los cocos. Ayuda a mantener la estructura y retiene bien la humedad. Se puede encontrar en forma de turba de coco o en ladrillos que hay que poner a remojo unos 15 minutos y luego desmenuzar, expandiéndose su volumen Bolas de arcilla expandida o arlita: una capa en el fondo de la maceta mejora el drenaje, también se puede usar en el sustrato como drenante, oxigenador y retentor de nutrientes.
