Después de 60 Años, Jet A Cambia a Bajo Contenido en Azufre por Barry Martin Tennessee Aircraft Company
Contaminação microbiana
El año pasado, escribí en conjunto un artículo en AgAir Update (abril 2019) sobre los cambios que llegarían a Jet A, donde solo estaría disponible el combustible Jet A ultra bajo en azufre (15 ppm máx.) para julio de 2021. Desde entonces, fuimos informados en la última NBAA (Asociación Nacional de Aviación de Negocios) que un uno por ciento del combustible sostenible en aviación (SAF o biocombustible) ahora se mezcla con el combustible entregado, con el plan de aumentarlo en un 10%. Ahora sabemos que este cambio a Jet A ultra bajo en azufre sucederá, por lo tanto, hay un par de cosas que un operador responsable necesita saber. Una de ellas es la lubricidad del combustible que mencionamos en el primer artículo. Por ese motivo se agrega el biocombustible, para aumentar la lubricidad. Anticipamos que el valor objetivo de la lubricidad del combustible que los proveedores deberían suministrar estará en un rango de 0.85 mm. Pero un valor aceptable, con respecto a un “ball-on cylinder lubricity evaluator”, en el diámetro medio de la marca en algunos motores más antiguos, debería estar en un rango de 0.20 a 0.65 mm (definido en el informe ASTM D500190a). Por lo tanto, se debe consultar con el fabricante del motor sobre el nivel de lubricidad que este necesita. En Tennessee Aircraft, observamos problemas con las gotas de agua suspendidas y la contaminación microbiana, cuestiones que son inherentes al combustible del avión. De hecho, el mes pasado, tuvimos un juego de picos donde los orificios primarios y secundarios tenían un flujo restringido o ningún flujo. Si el agua permanece en el combustible, cultivará microorganismos o bacterias que se alimentan de los hidrocarburos del combustible y, así, 20 | agairupdate.com | español
deterioran la calidad del combustible. Estos organismos son el próximo tema de la contaminación, el crecimiento microbiano. Los microbios usan el combustible como alimento, pueden propagarse rápidamente (se duplican cada 20 minutos) y producen un subproducto de la sustancia en forma de lodo. Una forma de controlar el crecimiento microbiano es la eliminación del agua del sistema de combustible. La FAA emitió la Circular de Asesoramiento número 20-125, hace más de 30 años, para alertar a la comunidad aeronáutica sobre los riesgos del agua en los tanques de combustible. La circular es tan relevante hoy como lo fue al momento de su publicación. El agua se encuentra en el combustible de dos formas: disuelta y libre. Con el fuerte proceso hidráulico utilizado para la desulfuración y la adición de biocombustibles, crece la humedad en el combustible Jet A ultra bajo en azufre. Sin embargo, las concentraciones de agua en el combustible suministrado no deberían exceder las 30 ppm de agua disuelta. El agua disuelta en el combustible es similar a la humedad del aire. Los sistemas de filtrado no remueven el agua disuelta. Dicho esto, disminuir la temperatura del combustible causará que el agua disuelta salga de la solución como agua libre. La formación de agua libre ocurre a una tasa de, aproximadamente, una parte por millón por grado Fahrenheit. El agua puede detectarse de muchas formas. El agua libre que se deposita en el fondo de los tanques de almacenamiento subterráneos o los tanques sin sumideros se puede encontrar mediante el uso de una pasta indicadora de agua extendida a lo largo del extremo inferior de una varilla de medición. Cuando la varilla se