La tortuga invitada a la boda [TRADICIÓN OTOMÍ]
Un día le preguntaron a la tortuga si iba a ir a la boda. Algunos dicen que era la boda de unos gatitos. –Pues claro que voy –dijo la tortuga–, pero para llegar a tiempo tengo que salir ya. Así pues, la tortuga se puso en marcha un mes antes de la boda. Llevaba ropa limpia para cambiarse al final de la travesía; quería ir muy arreglada a la fiesta. Por suerte, cuando faltaban ocho días para la boda la tortuga llegó a la casa donde iba a celebrarse.
50