LAGUNITA • ARTE
Ernesto León
Y LA GEOMETRÍA El artista plástico conocido por su extraordinario manejo del dibujo y sus obras antropológicas muestra ahora otra faceta creativa en la que la palabra clave es innovación Fotos Cortesía Ernesto León
C
uando Ernesto León habla de su proceso creativo, se nota que para llegar a donde está es mucho lo que ha reflexionado y experimentado. Desde hace años radicado en Houston, Texas, el artista plástico ha pasado de la fotografía cándida de calle, a los montajes multimedia hasta llegar a lo que muestra en la actualidad, una escultura de gran formato. León es conocido en el país y en las ciudades más importantes del mundo por su trabajo espléndido con el dibujo, sus obras con reminiscencias prehispánicas, su técnica de chapilla de oro y el uso del fuego. Ha ilustrado libros y ha colaborado con obras de teatro. Tiene obras en el Museo de Arte Moderno de Bogotá y el Museo Metropolitano de Nueva York, además de los más importantes sitios expositores de Venezuela. Pero León siempre está en constante búsqueda. “Cuando llegué a Estados Unidos me planteé romper con todo lo que yo venía realizando, que era la pintura, el dibujo, los dorados, los quemados. Siempre con una inquietud de buscar, investigar, probar nuevos materiales y nuevas imágenes, diferentes
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ideas. Esto es lo que ha marcado toda mi vida profesional, es difícil catalogarme, porque siempre estoy experimentando. Lo hice con la fotografía al llegar aquí, luego comencé a observar las formas y la geometría de cosas tan cotidianas como cajas y empaques”, cuenta. Motivado por sus representantes, Paola Creixell y Mariana Valdés, en 2019 comienza a trabajar con metales para las esculturas pero resulta un proceso muy pesado y es cuando vuelve su mirada a la cotidianidad. Los últimos 20 años de su carrera le han servido como preparación para entender la potencialidad de transformar una simple caja en una obra de arte a través de las líneas. Y allí es cuando surgen las esculturas, a partir de la transformación de materiales simples que pueden luego traducirse en estructuras metálicas de gran formato. A simple vista, parece monolitos, pero los cortes, el juego de luces y sombras que recorren la obra, la hacen cobrar vida. Actualmente, varias de estas esculturas se encuentran en los jardines de Paola Creixell. Pero todo comenzó con el trazo y el corte de una simple caja. Todo su proceso creativo está muy bien recogido en su página web www.ernestoleon.net y en su cuenta de Instagram @leonernestopintor.
