tiusos para dinamizar el Casco Histórico. Todo esto, y mucho más, en una sola legislatura. Y todavía nos quedan más proyectos, así que mi sensación es positiva.
Podría aventurar un porcentaje de cumplimiento de su programa electoral. Antes de entrar en el Ayuntamiento de Haro, muchas veces, no te das cuenta de la realidad del día a día. Una vez tomamos posesión y accedimos al gobierno, nos dimos cuenta de que eran necesarias determinadas inversiones, o trabajos de mantenimiento que, por una razón u otra, no se habían realizado anteriormente.
Laura Rivado Alcaldesa de Haro
“Cualquier persona que se queja, manifiesta, o nos critica de forma constructiva, es muy tenida en cuenta por este gobierno” “Me gustaría tener una varita mágica para hacer de la administración un ente más ágil y rápido” A falta de un año para acabar la legislatura ¿cuál es su sensación? ¿Ha cumplido sus expectativas? Para ser sincera, aún no pienso en las elecciones. Tenemos muchos proyectos por delante, para desarrollar en todo este periodo que queda hasta la convocatoria electoral. En la actualidad acometemos acciones muy importantes que repercutirán directamente en el bienestar de los jarreros y visitantes, y en mejorar la imagen que tenemos de ciudad. Mis sensaciones son muy buenas, y las expectativas altas.
Cuando accedimos al gobierno, las tres formaciones que componemos el ejecutivo local, nos marcamos unos objetivos que, poco a poco, vamos cumpliendo. Pese a las trabas, o críticas, el Vivero de Empresas es una realidad, hemos mejorado las infraestructuras educativas en colaboración con otras administraciones, los cerros de La Atalaya ya no tienen desprendimientos, la Calle Navarra y la Plaza de la Paz han cambiado, y con ellas la imagen del centro de la ciudad, y ahora vamos a convertir el Mercado Municipal en un Centro Cívico Mul-
Las prioridades cambian en función de las necesidades. El cumplimiento de nuestros objetivos, y la resolución de algunos problemas existentes en Haro son nuestro sello a la hora de tomar decisiones. Nos gusta escuchar a la gente, las críticas, las manifestaciones. Cualquier persona que se queja, manifiesta, o nos critica de forma constructiva, es muy tenida en cuenta por este gobierno. Y es que son ellos los que nos ayudan a mejorar, y a darnos cuenta de nuestras equivocaciones. Tanto a mí, como a los concejales de mi gobierno, no nos molesta rectificar o dar marcha atrás si nos equivocamos. Y es que lo importante es gobernar para la gente.
¿Qué no le gustaría dejar pendiente antes de las próximas elecciones? Muchísimas cosas. En primer lugar, me gustaría tener una varita mágica para hacer de la administración un ente más ágil y rápido. Yo misma, como presidenta de esta corporación me doy cuenta que la burocracia es lenta. Pese a que intentas que se aceleren determinadas cuestiones, los técnicos municipales, que hacen muy bien su trabajo, son los que te indican que la gestión de “lo público” requiere de una serie de garantías, plazos y trámites que es necesario respetar. Me gustaría precisamente agilizar la administración, en la medida de 21