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Opinión
IGNACIO ELOLA. CONSEJERO DELEGADO DEL GRUPO LACTALIS IBERIA, DIRECTOR GENERAL DE LACTALIS FORLASA Y FOODSERVICE
Especial número 500 Capaces de innovar, pensar y ejecutar más rápido
CUANDO TERMINÓ 2020, TODOS PENSAMOS QUE FINALIZABA EL AÑO MÁS DIFÍCIL QUE PODRÍAMOS VIVIR EN NUESTRA ÉPOCA, CON UNA PANDEMIA MUNDIAL QUE VINO A RECORDARNOS QUE LA SUPUESTA SEGURIDAD QUE ATESORÁBAMOS, LA CERTIDUMBRE Y EL CONFORT, BASADOS EN LA TECNOLOGÍA Y EN EL DESARROLLO ECONÓMICO, NO ERAN TALES FRENTE A UNA AMENAZA QUE CREÍAMOS SUPERADA: UN VIRUS.
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ero la realidad resultó ser bien distinta, ya que 2021 volvió a ser un año extremadamente complejo, incierto en lo económico y marcado aún por la recuperación sanitaria tras la grave crisis en la que derivó la pandemia mundial generada por la Covid-19. La subida de los costes de materias primas, energía y materiales, además, junto al hecho de que el consumo de productos lácteos no experimentó finalmente el ritmo de recuperación que esperábamos afectaron de lleno al sector.
INDUSTRIAS LÁCTEAS ESPAÑOLAS Nº500
Y, cuando estábamos arrancando un 2022 con energía renovada y deseos de superar los retrocesos, se cernió sobre Europa una guerra, la invasión de Ucrania por Rusia, un verdadero drama humanitario, en primer lugar, y un acicate más para la inestabilidad que queríamos ver como pasajera pero que parece haberse instalado entre nosotros, obligándonos a repensarlo todo. En el caso concreto de Grupo Lactalis, en los dos últimos años hemos demostrado resiliencia y hemos aprendido a ser más flexibles, mejorando nuestra capacidad de adaptación. A pesar de las dificultades, hemos sido capaces de innovar, pensar y ejecutar más rápido. Y me siento muy orgulloso de ello, así como también del compromiso demostrado por todos nuestros colaboradores, sin los cuales esto no hubiese sido posible. Todos ellos han hecho, y hacen a diario, muy tangibles los tres valores de nuestra cultura corporativa: compromiso, sencillez y ambición. Mirando hacia adelante, reconozco que nos enfrentamos al 2022 con cautela, pues todavía seguirá habiendo más preguntas que respuestas sobre lo que va a pasar, no solo en el sector lácteo, sino a nivel general. Tendremos que ver día a día cómo se comporta la crisis energética en la que estamos sumidos y la evolución de la economía mundial, europea y española. Eso me inquieta, no cabe duda, pero reconozco que miro al futuro con optimismo y con la esperanza de que finalmente recuperaremos la senda del crecimiento rentable y sostenible que nos ha guiado siempre. En este sentido, además de los retos empresariales que nos son propios, este año queremos impulsar especial-
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