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A VODKA ODYSSEY, por Jesús Palazón Balsalobre

¡Agente 43, pase por la oficina!

Otra vez esta mierda…

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1.º Bachillerato

Ahí está nuestro protagonista, el agente 43, un extraterrestre proveniente del planeta Namek, de complexión delgada, cabeza grande y ojos saltones. Está destinado en la nave B-57, que se ocupa del espionaje a la raza humana. 43 tiene problemas con el alcohol y siempre está borracho.

Ya estoy aquí, jefe. ¿Qué pasa? dice 43

Necesito que vayas al Área 51 y espíes a los altos mandos militares dice el jefe extraterrestre.

¡Está bien, jefe! exclama 43.

Así que 43 se embarca en una misión secreta y aterriza en el desierto de Nevada, donde se encuentra el Área 51. Activa su traje futurista y se vuelve invisible para llegar a la frontera y acabar con los guardias de la entrada. 43 roba un traje de uno de los guardias para hacerse pasar por uno de ellos; además, cambia su cara por una igual a la del tipo del traje.

Con esto servirá para poder entrar sin que me descubran.

Así que 43 se hace pasar por el guardia. Durante unos días, él simplemente sigue su rutina, hasta que uno de esos días ve a uno de los capitanes militares, por lo que decide quitarse el traje y volverse invisible para seguirle. Este entra a una sala donde están los demás altos cargos del Área 51.

¡Bingo! exclama 43.

Pero lo que parecía ser una reunión importante, resulta ser una fiesta encubierta, con mucho alcohol para el disfrute de los humanos.

43 sigue ahí, en una esquina, con sudor cayéndole por la frente al ver tal cantidad de alcohol y no poder probar ni una sola gota, pero, al final, cuando todos los militares están bailando y no se dan cuenta, 43 aprovecha para robar la botella de vodka y beberse más de la mitad de su capacidad de un trago. El alcohol le sube, y sin querer desactiva la invisibilidad, por lo que es descubierto por los militares.

¿¡Qué es eso!? ¡A por él! gritan los militares Sumpongo que es hora de corer dice, más borracho que una cuba, 43.

43 echa a correr por toda la base, dando tumbos por todos lados. Al final consigue salir y vuelve a la nave B-57, donde cuenta la situación a su jefe y, como castigo, este le obliga a limpiar los baños de la nave durante todo un año.

Moraleja: No bebas alcohol si eres un extraterrestre en una misión secreta.

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