Foto: Miguel Canals Silander
Por: Cristina D. Olán Martínez, MA
Como nadadora, la joven Patricia Chardón Maldonado estuvo en contacto con el agua desde los tres años y como jugadora de polo acuático, desde los trece. Perteneció al equipo natación de Ponce y a la Selección Nacional de Polo Acuático de Puerto Rico. Al entrar a la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez (UPRM), se integró al equipo de natación de dicha institución mientras estudiaba su bachillerato en Ingeniería Civil. Patricia plasmó su vínculo con el agua en sus estudios. Continuó su maestría en Ingeniería Civil en la UPRM y enfocó su tema de tesis en el estudio de la morfología (parte de la geología que estudia el origen y la evolución de la superficie terrestre) de las playas de Rincón, específicamente en la Playa Córcega. Para ello, contó con la dirección del doctor Miguel Canals Silander, profesor del Departamento de Ingeniería y especialista en ingeniería de costas. Su tesis de maestría, titulada Observaciones de campo y simulaciones numéricas de cambios morfológicos inducidos por tormentas en las zonas de oleaje de Rincón, Puerto Rico, estudia los cambios en la costa de Rincón provocados por la erosión. Según lo expuesto por Patricia, el objetivo de este proyecto se concentra en dos aspectos. El primero era desarrollar un sistema capaz de hacer mediciones batimétricas (del fondo marino) en el área de mayor oleaje para comenzar a entender, con mayor precisión, los procesos costeros. Para realizar estos estudios, se preparó una motora acuática (jetski) a la cual se le instaló equipo y computadoras para tomar los datos batimétricos. La computadora está protegida por una caja
RAZONES CIENTÍFICAS
Patricia Chardón: Entre números, olas y arena
resistente al agua. A este instrumento—el jetski con todo el sistema de computadoras—lo bautizaron Tarzán, el nombre que también lleva la mascota del Recinto Universitario de Mayagüez. El Tarzán facilita la recopilación de datos de profundidad en el mar y su posición geográfica. Los datos son procesados en una computadora localizada en el manubrio del jetski. Con el Tarzán se calcula la profundidad del mar antes y después de una tormenta en unas localizaciones identificadas con el Sistema de Posicionamiento Global (GPS, por sus siglas en inglés). Posteriormente, cuando se tienen los datos de antes y después de la tormenta, se restan los números obtenidos en las diferentes localizaciones seleccionadas para el estudio. Estos resultados permiten visualizar y cuantificar las regiones de erosión y sedimentación; es decir, dónde se perdió arena y dónde se ganó arena. Con este sistema se logró, por primera vez en Puerto Rico, medir la erosión y la sedimentación, inducidas por una tormenta, en la zona de oleaje de Rincón. En el caso del estudio aquí reseñado, se midieron estos parámetros antes y después de dos tormentas ocurridas en el año 2012: la Tormenta Tropical Isaac y el Huracán Sandy. Ambos sistemas atmosféricos causaron grandes episodios de erosión en las costas de la conocida Capital del Surfing, a pesar de que éstos transitaron lejos del terreno boricua. La Tormenta Isaac, por ejemplo, 25