EDITORIAL
LO IMPREDECIBLE La montaña en general, y el trail en particular, basan su fuerza en la necesidad de superar dificultades que se presentan, a menudo, de forma más o menos imprevista. Todos sabemos (o deberíamos) que una vez estamos en el monte, y aunque la mayoría de las veces no suceda nada, estamos expuestos a muchas situaciones potencialmente problemáticas. La intemperie y el aislamiento hacen que situaciones aparentemente inocuas puedan complicarse mucho. Al fin y al cabo es un reflejo de la vida real. Por mucho que el sistema y nuestra cultura se empeñe en proporcionarnos una falsa sensación de seguridad o de posibilidad de prevenir lo que vendrá. Todo el planeta se ha visto envuelto en una pandemia que parece un mal guión de una película de esas de serie “B”, de bajo presupuesto. Imaginaros ahora que a esa mala película de amenazas víricas, le añadimos una erupción volcánica. Sería el desencadenante decisivo para cambiar de canal y olvidarse de ese desastre de historia. Pues, como todos sabemos, eso es ni más ni menos lo que les está sucediendo a los amigos de Transvulcania y, con ellos, a todos sus convecinos de La Palma. Imaginar que somos organizadores, que en 2020 aplazamos la carrera a causa de la pandemia, para, finalmente acabar cancelando esa edición y pasándola a otoño de 2021 esperando que las cosas estén mejor. Y lo están. Y entonces, explota la isla. Pero la madre naturaleza no descansa, y no sabe, ni tiene porqué, valorar el nivel de presión a que somete a sus seres vivos. Ejecuta y ya está. Y así las cosas, ha castigado a los amigos palmeros, otra vez, con algo que nunca nadie hubiera imaginado hace tan solo unos meses. Pensad en vuestra reacción si, hace un año y medio os hubieran dicho que el mundo se pararía a causa de un virus. Imaginaros además que sois palmeros y que a la noticia os añaden que, cuando todo empiece a pintar mejor, vuestra isla, literalmente, abrirá sus entrañas. Eso es lo que están viviendo en La Palma. Una pesadilla de la que, a buen seguro, se recuperarán. Porque en eso consiste la vida y esa es la esencia del trail y la actividad en montaña: cuando no hay más remedio, afrontar lo que viene y buscar soluciones y alternativas. Siempre contando con la solidaridad y el apoyo de la comunidad. La nuestra, la tendrán. ¡Ánimos!
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