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ANEXO IV: PRINCIPALES CLASES DE POLÍTICA ECONÓMICA (Glosario
Anexo IV
PRINCIPALES CLASES DE POLÍTICA ECONÓMICA (Glosario)
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Política Cambiaria: se refiere a las líneas de acción frente al tipo de cambio (o relación entre monedas: la moneda nacional versus las restantes). Al alterar potencialmente los activos y pasivos del banco central, forma parte de la política monetaria. Cuenta con dos grandes variantes: la política de tipo de cambio fijo y la política de cambio flexible o libre (aunque hay variantes y combinaciones, v.gr. tipos de cambio desdoblados, es decir, que rigen distintas clases según sea el sector: por ejemplo, que en el sector comercial rija un tipo de cambio fijo y en el sector financiero exista un cambio flexible).
Política Comercial: son aquellas tendientes a alterar los flujos de exportaciones e importaciones. En el caso particular de las importaciones son parte de las políticas de desviación del gasto pues apuntan, vía de cambios de precios relativos, a reducir el gasto aplicado a bienes extranjeros hacia bienes nacionales. Los instrumentos son, entre otros, aranceles, retenciones, subsidios, cuotas de importación, etc.
Política de Estabilización: Son aquellas que adoptan los gobiernos para reducir las fluctuaciones en el nivel de actividad y en el nivel de empleo. Su meta es aplanar los ciclos del ingreso, estimulando la economía cuando se acerca a un “bache” y frenándola cuando se aproxima a un “pico”. Esta forma de intervención se la suele conocer como política de “stop-and-go” (literalmente “freno y arranque”, o para mejor decir “estímulo y frenada”). Sus instrumentos más habituales son la política fiscal y la política monetaria. Sus limitaciones se conectan a las imperfecciones en los datos e informaciones disponibles y a las dificultades en la implementación por: (a) los retrasos en la acción (demora en percibir el problema y adoptar la decisión de actuar); (b) o de la propia acción (demora en los impactos de las medidas adoptadas sobre la realidad, por ejemplo, el tiempo que tarda en afectar al nivel de precio una expansión monetaria). Estos retrasos son los famosos “rezagos” mencionados en la literatura.
Política Fiscal: es la política basada en el manejo de las cuentas fiscales: ingresos y gastos estatales, y su resultado neto (déficit fiscal o superávit fiscal). Pretende controlar el nivel de Demanda Agregada. Como la política monetaria puede ser expansiva (aumento del gasto público y/o reducción de gravámenes) o contractiva (reducción de gasto público y/o expansión de tributos).
Política de Ingresos o de Rentas: Suele denominarse a menudo como “acuerdo de precios e ingresos”. Su propósito fundamental es intentar controlar los procesos inflacionarios, buscando la estabilidad de precios. También se suele aplicar con el anhelo de “redistribuir ingresos”. Su implementación se basa en grandes acuerdos entre grupos de empresarios y grupos sindicales (en Argentina, un ejemplo histórico fue la política del ministro José Ber Gelbard, en 1973; pero ha habido otros muchos). Su efectividad suele ser escasa en la enorme mayoría de los casos, y tiene su mayor impacto en el corto plazo.
Política Monetaria: se encuentra en manos del Banco Central, a diferencia de la política fiscal que es resorte de la Secretaría de Hacienda. Se basa en el manejo de una serie de instrumentos que manejan la Base Monetaria (la emisión) y su derivada, la Oferta Monetaria.
Política de Precios: como política estatal, la política de precios apunta a fijar controles
sobre los mismos, por lo común inoperantes y con efectos contraproducentes en el largo plazo. Suele tener por propósito verdadero “calmar las expectativas” inflacionarias en marcos de gran inestabilidad. Una de sus subcategorías es la fijación de tarifas para las empresas de servicios públicos (v.gr. gas o electricidad).
Política Regional: habitualmente apunta a disminuir las grandes diferencias territoriales en el nivel de vida, el nivel de empleo, el nivel de actividad, etc. Abarca instrumentos diversos, según sea la meta, mencionemos: leyes laborales especiales según el territorio, promociones impositivas, transferencias de fondos entre jurisdicciones, obras de infraestructura, etc.