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EL "RECORRIDO DEL DRAGÓN", UNA TRADICIÓN QUE UNE A LA POBLACIÓN

Narran los habitantes del Barrio de San Miguel que cada 20 de diciembre del atrio del templo de San Miguel Arcángel sale un gran dragón que representa al mal y que recorre las calles de Celaya.

El dragón de más de 20 metros de largo se mueve con fuerza entre un mar de gente, da ‘coletazos’ y algunas personas entre risas y asombro van a dar al piso mientras pasa cerca, pero al final termina vencido, destrozado.

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Se trata de “El Recorrido del Dragón” una tradición que nació en el Barrio de San Miguel y que forma parte de su posada navideña que organizan cada 20 de diciembre.

Ese día, en el templo se realiza la posada, una misa, y al final viene el recorrido del dragón que une a miles de personas, familias que toman las calles de Celaya.

En el Instituto de Cultura informaron que este recorrido se ha convertido en una tradición porque data de hace 50 años. Juan de la Cruz González Beltrán, Presidente del Comité Pro Festejos, dijo que él tiene memoria que esta actividad se realiza desde hace más de 35 años.

“De la historia que tengo del Dragón en mente son como 35 años, el dragón lo hizo un señor que se llamaba Pablo Galván y su hermano Pedro, era un dragón chiquito no enorme como el que ahora se hace, medía unos 5 metros, ahora ya se agrandó y mide unos 20 metros”.

Para hacer este imponente dragón semanas antes el Comité Pro Festejos de la parroquia organiza loterías, rifas, y una serie de eventos para obtener el dinero con el que lo elaborarán.

Este dragón es elaborado al menos por 9 personas que forman la comitiva de los festejos, con el apoyo de la comunidad que hace pequeñas donaciones.

“Para hacer un dragón así se lleva alrededor de 15 a 17 mil pesos, la mayoría del dinero sale de rifas, loterías, eventos como kermeses para sacar fondos. Un mes antes de la posada lo empezamos a hacer”.

“Está hecho (con un esqueleto) de alambrón, varilla y alambre, lleva papel de ese con que se envuelven las tortillas y engrudo, (conocido como papel de estraza)”.

El dragón simboliza el mal, a los habitantes de este barrio desde la iglesia les narraron que hubo una ocasión en que San Miguel Arcángel peleó contra el mal en forma de dragón, y al final salió victorioso

“El Padre nos ha explicado que San Miguel venció al demonio luego de pelear con él, eso simboliza el dragón” , explicó el Señor Juan de la Cruz.

Los vecinos del barrio coinciden: “Es una forma de expresar que el mal no tiene la última palabra, que Dios vence y gana el bien”.

Este año el dragón fue en color negro en homenaje a seres queridos de los habitantes del barrio que han fallecido, sus nombres fueron escritos en su estructura.

El dragón es movido por alrededor de 80 personas, la mayoría jóvenes, Juan de la Cruz explicó que pesa alrededor de 300 kilos.

Desde las 6 de la tarde la gente se congrega en el atrio, a las 8 concluye la misa y comienza el recorrido que se prolonga por alrededor de 2 horas.

Este año el “Recorrido del Dragón” fue acompañado por más de 10 mil personas de acuerdo a Protección Civil y 17 mil según relatan los organizadores.

“Vienen camiones de Cortazar, Villagrán, Apaseo el Grande, de muchas colonias como Monte Blanco, Lagos, no nada más son de aquí, vienen de muchas colonias, aquí la gente es bien recibida, el dragón es tradición y es para toda la gente”, expresó el Presidente del Comité Pro Festejos.

El recorrido del Dragón comienza en el atrio del templo y avanza hacia el bulevar Adolfo López Mateos, llega a la calle de Allende para ingresar hacia el Jardín Principal, después se dirige a la calle de El Carmen hasta Benito Juárez por la que avanzan hasta topar con el templo de San Juan de Dios en la calle Pípila, a unos metros está la Estación de Bomberos que forma parte también de esta tradición, porque de forma simbólica apagan al dragón al rociarlo con grandes chorros de agua, lo que representa finalmente la derrota.

“Los bomberos ya nos tomaron la tradición de mojar a toda la gente que va cargando al dragón”, expresó Juan de la Cruz.

A unas cuadras está nuevamente el atrio del templo y ahí concluye su recorrido totalmente abatido.

“Llegando al atrio se le entregan sus aguinaldos a los niños, son como alrededor de 2 mil 500 aguinaldos que son aportados por los comerciantes de la plazoleta y algunas familias, en mi familia por ejemplo cooperamos con 200 a 250 cada año, la mayoría nos los dan los comerciantes”.

Agregó que esta tradición que representa destruir al mal, fomenta en los participantes seguir por el camino del bien.

“A los muchachos se les explica por el Padre lo que significa, y ellos deben entenderlo”.

“El recorrido del dragón”, expresó Juan de la Cruz, es una herencia que se va quedando en el barrio y que transmiten a las próximas generaciones.

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