En busca de un balance La vida social
la vida académica Por Laura Sofía Ramírez Quintero Estudiante grado 11° Colegio Alemán de Cali
Los seres humanos pasamos por diversas etapas que van moldeando nuestras vidas en muchos sentidos. Por eso, en esta ocasión, quiero referirme a la etapa de la educación escolar, la que estoy asumiendo como estudiante de grado 11°, como parte de un gran desafío, etapa en la que como jóvenes nos comenzamos a preguntar por el equilibrio entre nuestra vida académica y la social. Es obvio que no queremos perder ninguna salida con nuestros amigos, la familia u otros planes, para divertirnos y romper nuestra cotidianidad sin descuidar los estudios. El balance entre la vida social y la académica es crucial para el bienestar emocional de un estudiante frente a su diario vivir. Por un lado, está el enfoque a dedicarse únicamente a los estudios, el cual puede llevar al cansancio, el estrés y el aislamiento social, que finalmente podría producir afectaciones de relacionamiento y hasta de salud mental. Por otro lado, una dinámica enfocada a la socialización activa, que puede resultar en la falta de concentración, bajo rendimiento académico y pérdida de oportunidades, lo cual puede conducir a la frustración. Para mí como estudiante del programa Diploma IB del Colegio Alemán de Cali, hacer parte de diversos grupos y ser una persona sociable que le gusta compartir con las amistades y la familia, es un verdadero desafío. El punto está en encontrar el equilibrio para disfrutar el tiempo libre y rendir en los estudios.
Pero, ¿cómo podemos encontrarlo? Una buena pregunta. Así que motivada por esta inquietud, me puse en la tarea de llevar a cabo un sondeo entre cincuenta estudiantes del Colegio, con el propósito de conocer sus pensamientos respecto a este equilibrio, así como sus hábitos de estudio, la cantidad de tiempo que dedican al estudio y las dificultades que se les puede presentar en la vida escolar y cómo lo manejan. Me sorprendí con sus respuestas, pues pude evidenciar que las perspectivas en cuanto al balance dentro de sus vidas están divididas. La mitad de los encuestados manifestó tener un buen equilibrio entre su vida escolar y social, mientras la otra mitad admitió su desinterés por este aspecto y por la necesidad de mejorarlo. Sin embargo, de la misma forma pude comprobar que son muy pocos los que en realidad saben qué hacer con respecto a la cuestión de cómo lograr balancear su vida. Así que, la experiencia me permite recomendarles tres tácticas que a mí me han funcionado de maravilla.
