Medio siglo
En 1960, la moda se empezó a relacionar con los movimientos feministas, la música, la cultura y el arte de vanguardia. Nació la minifalda, y con ella una explosión de colores. Había casi una necesidad de exaltar el valor de la juventud. Los modistas del momento fueron: André Courrèges, Yves Saint Laurent y Pierre Cardin. La ropa era más creativa y original. Se introdujeron las telas sintéticas y piezas metálicas. Se
creó el look psicodélico y el uso de los estampados predominaba. Paralelamente, surgió un estilo más clásico promovido por Hollywood, para siluetas más estilizadas, que más tarde vinieron a contrastar con la moda hippy, mucho más apegada a lo natural y artesanal, con largas faldas floreadas y chalecos de cuero. Los ojos eran el centro del maquillaje de esa década. Se usaban pestañas postizas, rímel y delineador de ojos grueso, al estilo de Twiggy, la modelo del momento. Los colores más populares de sombras eran los tonos azules, verdes, grises y blancos.
1970
Llegamos a los 70 y la popular moda disco, influenciada por los hippies, rockeros punk y la música de las discotecas. Los pantalones también salieron esta vez con las botas acampanadas, zapatos de plataforma, vestidos ajustados, jeans, estampados atrevidos y, sobre todo, con muchas lentejuelas, brillo y color. La tendencia era hacia la elegancia y el atrevimiento. Los colores preferidos eran fucsia y plateado.
1980 1990 Las hombreras, las lentejuelas y el cuero, le dan un cambio a la vestimenta. El jeans bordado se convierte en una pieza infaltable. El cabello se llevaba rizado con permanente, con mucho volumen. Las camisetas extragrandes, bisutería de gran tamaño, cinturones anchos con remaches, faldas y botas de cuero negro, eran imprescindibles. Se impusieron los tonos brillantes y neón en las telas de algodón, seda, satén y poliéster. Los pantalones de corte alto. Los zapatos de punta y tacón de aguja. El maquillaje era predominante. Las cejas gruesas, los ojos delineados y los pómulos bien marcados, reflejaban la fuerza de esta época.
Aunque este período no tuvo un estilo definido, ya que casi todo lo que se te venía a la mente era usable, predominó la comodidad y la simplicidad, quizás por la tendencia a lo deportivo. Las franelas y los zapatos de goma, como los Converse, lograron imponerse. Los jeans eran más anchos y desgastados. La extravagancia de los 80 fue sustituida por lo natural. La modelo Naomi Campbell fue todo un ícono, y con ella nació un nuevo concepto de belleza femenina, donde la indiferencia por el color de la piel pasó a ser uno de los logros más importantes. Los colores se usaban para corregir las imperfecciones del rostro, con tonos monocromáticos para los ojos, las cejas delgadas y brillo en los labios.
@variedadesvzla 57