NATACHA VOLIAKOVSKY
Cuerpo mutante: féminas en acción Por Camila Stehling
La acción performática como una forma posible de reflexionar sobre la mutabilidad del cuerpo y la violencia de género. Pensar hoy en día en las corporalidades, nos lleva a retomar los discursos sobre género surgidos a lo largo de estos últimos años, gracias a los movimientos feministas y a la teoría queer. En principal aquellos que cuestionaron al esencialismo, combatiendo al supuesto carácter natural de los cuerpos. Así, como un frente de resistencia a los mecanismos de la normatividad, Judith Butler planteó su modelo performativo-teatral, Donna Haraway articuló su concepto sobre los tecno-cuerpos y Paul B. Preciado describió su teoría sobre lo que llamaría biodrag. De una u otra manera, estxs teóricxs hablaron sobre los cuerpos y los géneros como una construcción socio-histórica, evidenciando cómo el sistema heterocispatriarcal los regula y clasifica. Pero sin dejar de mencionar el potencial de mutabilidad que tienen las identidades, demostrando que sí eran susceptibles al devenir. Esta historia que atraviesa a las nuevas generaciones reacias a ser acalladas, a los cuerpos militantes y a lxs activistas, se instaló no solo en las calles que han cobrado vida en cada marcha encabezada por el 8M, Ni una menos y el Orgullo gay, sino también en
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otros campos y movimientos específicos que se han constituido problematizando su contexto, como sería el caso del arte. En este sentido, surge el nombre de una de las performers contemporáneas nacionales, que ha hecho alusión a estas causas. La artista en cuestión es Natacha Voliakovsky, quien hizo uso de la meta-discursividad del cuerpo en gran parte de sus performances. Esta performer, que se expuso a operaciones quirúrgicas y entornos hostiles, al principio arremetió contra la tendencia a la naturalización de los cánones establecidos en la sociedad. Lo cual se observó en su estadía en la Residencia Antártica Sur Polar 2014, curada por Andrea Juan, en donde concurrió junto a Magdalena Petroni como la asociación de artistas Petroni-Voliakovsky. Este dúo formado en el 2013 propuso el proyecto Éter, bajo la premisa de realizar un cruce entre performance, instalación y video, que explorara la vivencia de habitar lo inhabitable, en términos de aislamiento y condiciones climáticas extremas. “Este acercamiento particular con el site-specific, me llevó a reflexionar sobre la cultura en relación a la socialización, la constitución moral y al esquema social sobre nuestra corporalidad”, manifestó Natacha.