TENDENCIAS FUNDSTAGE por Paloma Aparicio
CUSTOD
ALTERNAT
UN DESCONO VITAL IMPORT A
pesar del desconocimiento de esta figura por gran parte de la sociedad, la labor del custodio alternativo es fundamental para la salvaguarda de los activos de todos los ahorradores, ya que es la entidad que se hace cargo de la custodia de todos los activos de clientes a los que una firma presta el servicio de custodia y administración de instrumentos financieros en el caso de que dicha compañía atraviese dificultades financieras. Tal es su importancia que es una figura regulada en el apartado 4 del artículo 42 del Real Decreto 217/2008, de 15 de febrero, sobre el régimen jurídico de las empresas de servicios de 82 FUNDSPEOPLE I SEPTIEMBRE
inversión y de las demás entidades que prestan servicios de inversión, y en la redacción dada a tal precepto por la disposición final 4.27 del Real Decreto 1464/2018, de 21 de diciembre, donde se establece la obligación de las entidades que prestan servicios de inversión de llegar a acuerdos con terceras entidades para que, en caso de que atraviesen dificultades financieras, puedan acordar el traspaso de los instrumentos financieros custodiados, ampliándose al efectivo en el caso de empresas de servicios de inversión. En tiempos de crisis, como la atravesada en la anterior década o incluso en la que estamos ahora debido a la crisis sanitaria, el uso de esta figura parece
claro y determinante. Sin embargo, la importancia del custodio alternativo, o subcustodio de contingencia como también se le conoce, va más allá de estos momentos puntuales. La viabilidad de una entidad financiera viene determinada por múltiples factores, que pueden verse afectados en cualquier momento, sea este un colapso del mercado o no, de ahí su regulación como figura legal. Todo esto se suma a la importancia que a nivel comercial tiene contar con un custodio alternativo de peso que dé a los clientes la tranquilidad de que sus activos están protegidos en caso de que haya problemas. Su funcionamiento es muy similar al del custodio: una vez la entidad