Dr. Jorge Curbelo
# 00 • MES 2021 • Pág 58
Donar sangre salva vidas El director del Hemocentro de Maldonado, quien impulsó su fundación cuando en Uruguay no existía un centro de similar alcance y calidad, recuerda los inicios de este proyecto que vino a cambiar la conducta de donación de sangre a nivel país. También, repasa la importancia de su rol durante la pandemia, cuando se implementó una terapia innovadora con plasma covid para tratar con mayor éxito a los pacientes que acaban de contraer la enfermedad. ¿Cómo nace la idea de fundar el Hemocentro? El Hemocentro fue un proyecto que inicié yo mismo en 1994, luego de comenzar el posgrado de médico hemoterapeuta. Tuve la oportunidad de ir a un congreso en Tampa, en Estados Unidos, donde conocí uno de los hemocentros que hay allí,
dirigido por el Dr. Germán Lepark, un médico argentino, y vi cómo de alguna manera ellos optimizaban y racionalizaban todo lo que era el área de producción. La medicina transfusional se divide en dos grandes áreas: producción, que implica todo lo relacionado al donante de sangre; y asistencial, que es todo lo
que se hace con eso que se produce del donante. Mientras observaba lo que pasaba allí, me retrotraía a Maldonado, donde teníamos en menos de 15 kilómetros cinco bancos de sangre, distribuidos entre el Hospital de Maldonado, el Sanatorio Cantegril, el Sanatorio Mautone, el Hospital y el Sanatorio de San Car-