Viaja por Islandia con Iceland Travel Descubre el interior El interior de Islandia contrasta profundamente con las regiones más hospitalarias de la costa. Es un desierto formidable con vistas fuera de serie, dónde los raros desiertos de arena y ceniza son, de vez en cuando, salpicados por grandes campos de florecillas, ríos temblorosos, casquetes de hielo brillantes y escarpadas montañas. Debido al impredecible clima extremo y a la escasa vegetación, muy pocas personas fueron lo suficientemente valientes como para habitar el corazón desolado de Islandia. La mayoría de los forajidos, que fueron enviados allí como castigo para cumplir sus penas, murieron rápidamente. Incluso ahora, el interior de Islandia queda despoblado y cerrado casi todo el año para el turismo. Kjalvegur (o Kjölur) y Sprengisandur las dos rutas principales del interior, fueron, originalmente, forjadas por el paso de los vikingos cuando cabalgaban de camino a las reuniones anuales en Þingvellir. Por su atractivo salvaje y desafiante, muchas personas se sienten atraídas por este último verdadero desierto de Europa. Solo se visita durante la corta temporada que va entre junio y agosto, dependiendo del clima, pero incluso en este período, los viajeros deben extremar sus precauciones y estar preparados para cambios repentinos en las condiciones climáticas, pudiendo incluso haber tormentas de nieve.
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LOS FANTASMAS DE KJÖLUR Hay muchas historias de forajidos y otros “fuera de la ley” que han acabado en las tumbas de nieve de las montañas; una historia cuenta que en el otoño de 1780, dos hermanos llamados Bjarni y Einar Halldórsson, junto con sus compañeros de viaje, atravesaron la sierra hacia el sur, para comprar algunas ovejas y caballos. A su regreso fueron sorprendidos por una tormenta de nieve al noreste de Kjalfell y perecieron trágicamente, junto con su ganado; sus huesos se encontraron 65 años más tarde en un lugar denominado posteriormente “Cerro de los huesos” (Beinahóll). Los visitantes que acampan en la zona observan muchas veces sombras misteriosas, y a menudo encuentran huesos de animales.
La Ruta de Kjalvegur o Kjölur Para viajar desde cualquiera de los extremos de Kjalvegur (Carretera 35), un tramo de 165 kilómetros, se recomienda conducir un 4X4 con buena suspensión. Desde el extremo norte, se accede a Kjalvegur por un desvío a medio camino entre Varmahlíð y Blönduós (Carretera 731) y sales en la región suroeste de Gullfoss.
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