OBSERVATORIO ECLESIAL AÑO 7 * 16 - 22 MAY 2020 * NUM. 351
Reúne diferentes tradiciones cristianas de todo el mundo, abriéndonos los ojos, fortaleciendo nuestra fe y reforzando la convicción de nuestras raíces cristianas comunes en un mundo dividido.
atendemos a las necesidades de los más vulnerables entre nosotros”.
Orar juntos es algo para lo que no es necesario que las personas se reúnan físicamente en un mismo lugar, como han señalado repetidamente en las últimas semanas los grupos cristianos, incluidos los organizadores mundiales de la Semana de oración por la unidad de los cristianos: el Consejo Mundial de Iglesias (CMI) y la Iglesia Católica Romana.
73. El CMI y la Conferencia de Iglesias de Toda África instan a estrechar los lazos entre las iglesias y los proveedores de servicios de salud
El Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos y el CMI organizan conjuntamente la Semana de oración por la unidad de los cristianos desde 1968. El tema de este año, “Nos trataron con una solicitud poco común”, está tomado de Hechos 28:2, y se basa en la historia de cuando Pablo halló refugio en la isla de Malta después de un naufragio. Los recursos para la semana han sido preparados por miembros de diferentes iglesias de Malta. El secretario general interino del CMI, Rev. Prof. Dr. Ioan Sauca, afirmó que, al tiempo que personas de todo el mundo oran al unísono y recuerdan la hospitalidad recibida por San Pablo y aquellos que naufragaron junto con él, reflexionarán sobre el significado de la amabilidad y la hospitalidad con los extranjeros en este momento preciso. “Oramos por la unidad de los cristianos en nuestros diversos lugares y tradiciones, pero también creamos espacio para las preocupaciones de nuestros hermanos y hermanas de otros contextos y los dones que nos aportan”, añadió. “Mantener la distancia física en estos momentos puede convertirse también en una expresión de bondad si así
(oikoumene.org) 20/05/2020
El Consejo Mundial de Iglesias y la Conferencia de Iglesias de Toda África instaron, en una declaración conjunta, a estrechar la colaboración entre las iglesias y las asociaciones y establecimientos sanitarios de las iglesias. “La pandemia de la COVID-19 ha generado desafíos sin precedentes en el mundo”, dice el mensaje. “En África, las estructuras socioeconómicas y los medios de vida se han visto alterados”. También existe la correspondiente pandemia de las noticias falsas y la desinformación, continúa el mensaje. “Nos alientan las relaciones dinámicas en algunos países entre las iglesias y los establecimientos sanitarios de las iglesias en las que los profesionales sanitarios cristianos apoyan a las iglesias al proporcionar educación para la salud, disipar los rumores y la desinformación, y acompañar a los dirigentes de las iglesias cuando toman decisiones pertinentes”, recoge el mensaje. “En otros lugares, sin embargo, las iglesias y los establecimientos sanitarios de las iglesias están trabajando de manera aislada y los establecimientos sanitarios no forman parte de la vida y del testimonio de las iglesias, o solo se coopera en el marco de la misma denominación”. (oikoumene.org) 20/05/2020
DOCUMENTOS 74. Hacia una mística de ojos abiertos, corazón solidario y amor políticamente eficaz (1): Juan José Tamayo* Nuestras maestras y maestros Estamos celebrando este año el décimo aniversario del fallecimiento de Raimon Panikkar, místico itinerante, que supo aunar en su vida y su pensamiento ambas dimensiones –mística e itinerancia- con una extraordinaria coherencia y fue capaz de conciliar en su persona experiencias místicas de diferentes religiones: judía, cristiana, hinduista, budista, y la mística secular. 2020 es también un año de para recordar a teólogas y teólogos nonagenarios que brillan con luz propia y viven –o vi-
vieron- la mística no como evasión y huida del mundo, sino en el corazón de la realidad con todas sus contradicciones, al ritmo de la historia, en el horizonte de la liberación, en busca de nuevos valores humanistas y ecológicos y desde el compromiso por la transformación personal, comunitaria y estructural. Me refiero a Gustavo Gutiérrez, para quien el método de la teología de la liberación es la espiritualidad; a Johan Baptist Metz, fallecido el año pasado, que propone una “mística de ojos abiertos”, que lleva a con-sufrir, a sufrir con el dolor de los demás; a Pedro Casaldàliga, que vive la mística en el bien decir estético de su poesía, en el compromiso con los pobres de la tierra y en defensa de los derechos de las comunidades indígenas y afrodescendientes; a Hans Küng, ejemplo de mística interreligiosa que conduce al diálogo simétrico de reli-
70