Estim u l aci ó n T e m p r ana
Nuestros niños, nuestro futuro E n este mes de agosto, este artículo quiero dirigirlo a lo mejor de nuestra sociedad, nuestros niños. Sabemos que todo niño, desde su gestación y nacimiento, tiene un inmenso potencial de desarrollo y crecimiento, y que su llegada, como nuevo integrante a la familia, es motivo frecuente de altas expectativas de como será, a quien se parecerá, de lo que va a ser en su vida (tal vez un gran deportis12 · SALUD PARA TODOS · Septiembre 2019
ta, o médico, ingeniero, o un gran artista), y así, esperamos que sea el espejo de nuestros deseos o de lo que tal vez, nosotros hubiéramos querido ser. Y que pasa cuando este niño nace con algo diferente, con algún trastorno, o lo va desarrollando en su primer año de vida, catapultando nuestro sueño, creándonos miedos, incertidumbre, y con seguridad, un cambio de 360 grados en nuestras vidas de
padres, de pareja, de familia? Lo primero, es crucial que estos padres, sean contenidos y orientados en qué hacer y como hacer para ayudar a ese pequeño ser (tal vez prematuro, o que tuvo un déficit de oxigeno al nacer, signos de un trastorno genético, u otra situación) con necesidades especiales de atención y seguimiento. Esta orientación de inicio, debe ser dada por el médico pediatra y según el caso, por especialistas como el médico fisiátra, neurólogo, oftalmólogo, ortopedista, nutricionista, etc (la necesidad está dada por la situación individual de cada niño) que creará la hoja de ruta a seguir tanto en manejos domiciliarios, evaluaciones o consultas médicas necesarias, e inicio de un plan terapéutico de tratamiento. Desde el área de la REHABILITACIÓN, que va desde la prevención de discapacidades (niño de alto riesgo) al del niño con una patología establecida, los tratamientos de rehabilitación van siendo organizados en módulos terapéuticos, que a su vez, son revaluados periódicamente por el médico fisiatra, para determinación de re-programaciones terapéuticas según evolución y respuesta del bebé al tratamiento instituido. En ocasiones, el primer módulo terapéutico implica entrenamiento de los padres o encargados en técnicas de posicionamiento del niño, estímulos generales y alimentación durante primer mes o meses de vida, o la introducción de terapias como Fonoaudiología para manejos oro faciales y deglución, Fisioterapia motora y/o respiratoria y Estimulación Temprana. Tanto en este período como a lo largo del crecimiento del niño, son valoradas también las ayudas técnicas necesarias que se requieran para poder facilitar el tratamiento y adquisición de aprendizajes sensorio motores. En la medida que el niño crece, pueden ser requeridas otras intervenciones terapéuticas, dejando de lado las anteriores o complementándolas. Por ejemplo, la inclusión de terapias como Terapia Ocupacional, Psicología Clínica, Neuropsicología, Fonoaudiología para terapia del lenguaje, Programas de Integración Sensorial, etc, van siendo determinadas bajo un programa de tratamiento individualizado y exclusivo para ese niño. En CERENIF, que inició su atención a familias desde el año de 1973, desarrollamos
