34
Biblia y misión
Por: P. Fernando MAL GATKUOTH, mccj Roma, Italia
E
n la historia de la salvación encontramos un gran número de mujeres llamadas por Dios para colaborar en su plan salvífico. Todas eran valientes, capaces, generosas, humildes y de fe; precisamente su fe dio sentido a sus vidas y les ayudó a comprender el llamado que Dios les hacía para cumplir una misión específica. Entre ellas destaca María, la madre de nuestro Salvador, por su rol central al concebir y dar a luz a Jesús, el Mesías, el Hijo de Dios. María era una adolescente comprometida en matrimonio con José cuando el ángel Gabriel le comunicó que Dios la eligió para ser la madre de Jesús. Junto con su pueblo, ella esperaba la llagada del Salvador. De seguro, se sorprendió profundamente al recibir el mensaje divino de que ella sería la Madre.
María, discípula misionera «María dijo: “Aquí está la esclava del Señor, que me suceda como tú dices”. Y el ángel la dejó» (Lc 1,38).