NO ES DEL TODO NECESARIO QUE LOS MUSEOS O GALERÍAS CONTINÚEN CON SUS RESPETABLES LABORES | Elisa Montesinos El artista, curador y gestor cultural Jorge “Coco” González ofreció un taller de curaduría doméstica en espacios no tradicionales. Crítico y reflexivo, dió a conocer algunas de sus visiones más polémicas respecto a los conceptos desarrollados en el programa Microcuradurías. Marginalidad En lo personal he ido teniendo cada vez más distancia con los términos que nos llevan a empequeñecernos u opacarnos. No estoy del todo de acuerdo con los conceptos de curadurías desde la marginalidad, pues ya el término está demasiado cargado con visiones del centro y la periferia, concepto que fue ampliamente tomado en el mundo del arte en la década de los 80. Lo mismo me pasa cuando veo, pienso y viajo por Latinoamérica. Definitivamente, nuestro continente no es deudor de la validación de otro supuesto mundo superior en nuestra historia. Nosotros tenemos otro universo que obviamente podemos compartir y difundir, pero ya no bajo el alero de un sesgo paternalista sobre nuestros intereses. Desde hace un buen rato autores como Enrique Dussel, Silvia Rivera-Cusicanqui, Ticio Escobar, Gabriel Salazar, Ronald Kay y muchos otros, vienen nombrando las cosas y los seres desde el espacio de acá. Latinoamérica tiene un saber y una fuerza que muchos extranjeros miran nuevamente con ojos de conquistador y por fortuna para todos nosotros, el despertar visual es un tema potente y real en la actualidad, no solo de los creadores sino de las personas en general. Toda esta energía me da la completa seguridad respecto a que tenemos mucho que aportar en la visualidad que viene, ya no llorando por lo que no tenemos, sino compartiendo la potencia y la cosmogonía propias. Arte y crisis Me parece que uno de los valores supremos del arte (si es que los tiene), es que siempre está en una profunda crisis. No me da certezas, no viene a asegurar nada; y como tal, siempre será un ente crítico. El arte es un organismo vivo. Durante mucho tiempo ha representado a la perfección el sistema cortesano y por fin la visualidad de la vida lo ha superado. Por ello, ha tenido que ir armando nuevos sistemas de interpelación de la realidad, tema no menor en Latinoamérica. El mestizaje de nuestro continente puede ser de gran ayuda a la hora de vivir esta nueva relación entre la virtualidad y la supuesta 140